0vii. real life

( chapter 7 )

IN      A       BLACK     DRESS
SHE'S SUCH AN ACTRESS.

El hombre había llegado esta vez primero al restaurante. Se encontraba sentado en una mesa dentro del establecimiento para que Gwendolyn no pudiera fumar como había hecho la última vez. No le encantaba la idea de verla firmar.

    La noche anterior, él mismo se había encargado de redactar el documento que tenía en su mano y estaba satisfecho con él, sin embargo, tomando en cuenta la mala relación que llevaba con la mujer, lo más probable es que ella lo leería y encontraría un montón de cosas que tendría que cambiar para que accediera a firmarlo.

    Al cabo de unos minutos, la silueta de la mujer se hizo presente. A Chris no le pasó desapercibido el vestido negro que llevaba puesto, acompañado de gafas de sol negras y aquellas zapatillas que hacían lucir a sus piernas estilizadas. El ojiazul desvió la mirada y optó por no hablar en lo absoluto de su vestimenta y concentrarse en lo que hablarían.

    —Estás tarde—dijo mirándolo su reloj.

    —No, no es así—contestó y tomó asiento retirando sus gafas dejándolas a un lado del plato que tenía frente a ella—. Nunca dijiste una hora específica, pude haber venido incluso en la noche—el contrario bufó negando con la cabeza.

—Eso hubiese sido desconsiderado de tu parte. Incluso más de lo que esperaría de ti.

—¿De verdad? Yo no lo creo, al final habría venido como quedamos—sonrió con ligera diversión, sabiendo que ella tenía razón pero al ver la expresión del hombre, respiro profundo teniendo un humor más serio—. Supongo que hiciste el contrato—dijo mirándolo el folder a un lado del plato del hombre.

El hombre no habló, simplemente lanzó el folder con los papeles dentro, al centro de la mesa que estaba despejada. La mujer lo tomó y abrió mirando un par de hojas dentro.

—Puedes leerlo y decirme si quieres cambiar algo.

—Ya que viste las películas, creo que todo está bajo control, conozco las palabras de seguridad—dijo nuevamente con humor, realmente no podía tomar la situación en serio.

—¿Esto realmente es un chiste para ti?

—¿Qué no lo es para ti también? Quiero decir... míranos. No nos agradamos, en lo absoluto y estoy aquí para firmar un contrato sexual.

—No es un contrato sexual, Gwendolyn. Revísalo. Tengo tiempo. Si quieres un cambio podemos hacerlo.

La mujer tomó los papeles y comenzó a leer algunos fragmentos en voz alta.

—"Evans dará a Dupain el dinero necesario para producir la película que pronto estará en producción sobre la vida de Brenda Spencer; el dinero se entregará directamente a Dupain por parte de Evans y serán trámites «secretos», hasta el día del estreno, en el corte final durante los créditos aparecerá el nombre del productor Evans", eso lo dijimos en durante la conversación de ayer—dijo y continuó leyendo en silencio—. "Durante este mismo tiempo de la producción de la película, hasta el final de la rueda de prensa de la misma, ambos mantendrán una relación falsa que deben hacer creer a la media que es funcional", sigo sin tener idea que quieres demostrar o lograr con esto de la relación falsa. ¿Quieres escuchar que me llegaste a parecer atractivo? Ahí está, me llegaste a parecerme atractivo. En el pasado, claro.

    —¿Estás actuando?

    —Creí que pensabas que mi actuación era tan mala que podrías saber si estoy actuando—suspiró—. No, no estoy actuando, me parecías un actor atractivo hasta que empezaste a insultarme sin razón alguna en tus entrevistas. Quiero decir, nunca habíamos intercambiado palabra para que dijeras todo eso sobre mi, el adquirir ese papel fue un trabajo honesto.

    —Por Dios, te tuviste que quitar la ropa para que te lo dieran.

    —Y dime, Chris: "Not Another Teen Movie", ¿no te pidió lo mismo? Porque recuerdo crema batida en muchos lugares.

    —Era joven.

    —¿Y ahora? Podría contar esto como extorsión, ¿sabes? No tomar mi papel si no eres productor y si no salgo falsamente contigo. ¿Ahora ves como se escucha y ve esto? Mi proyecto es algo serio para mi.

    —Lo sé y también entiendo lo que significa para ti. Sin embargo, estás aquí.

    —¿Qué quieres decir con eso?

    —Estas intrigada e interesada. Por eso no me rechazaste por el teléfono y por eso estás aquí, a pesar de que respetas y quieres hacer lo mejor para tu película, estás intrigada por cada parte de ese contrato que tienes en tus manos—el hombre lo apunto con la cabeza.

    —Bien, te daré la razón. No mentiré, estoy extremadamente interesada por todo esto. Elaborar un contrato tú mismo, hacerme venir aquí, chantajearme... algo viene detrás, algo que no está escrito aquí—dijo tirando los papeles en el centro de la mesa de la misma manera que él había hecho antes—. Si quieres que firme eso, debes ser honesto—se cruzó de brazos—. ¿Por qué tanto interés?

    Aquella pregunta realmente tomó desprevenido al hombre, esperaba que la mujer se negara a firmarlo solo por molestarlo, sin embargo, no se imaginó que le preguntara qué había detrás de todo aquello.

    Hacia años que había querido disculparse con ella, después de que vio que la entrevistadora había subido aquel video donde parecía insultaba sin parar a la joven mujer, había querido contactar con algún trabajador de la chica para comunicarse con ella, pero al poco tiempo se enteró de la fotografía en Instagram y su interés en disculparse con ella se había desvanecido; causando que cada vez que la veía se maldijeran el uno al otro simultáneamente.

    Pero hoy, ¿por qué tenía tanto interés?... realmente no tenía idea, o al menos no quería admitir abiertamente, ni siquiera a él mismo lo que era evidente, así que nuevamente lo guardo para sí y dejó salir la primer excusa que cruzo su cabeza.

    —Sé que todas las cosas que te recomendaré como productor las vas a ignorar; te limitarás a dirigirme como actor de la película, pero si soy tú pareja frente a los ojos de todos, te hará el trabajo más difícil. Tener que ser amable conmigo cuando estés furiosa.

    —Dices entonces que tú incentivo de esto—señaló los papeles—, ¿es molestarme y a cambio me das dinero y actúas en mi película? Bueno, de un mal, el menor—dijo y sin terminar de leer los papeles, de su pequeño bolso, del cual Chris no se había percatado sacó una pluma y firmó cada espacio que pedía su firma.

    —No terminaste de leerlo—dijo con el ceño fruncido, había pensado muy bien todo lo que había escrito para que la mujer no se interesara en leerlo.

    —¿Había algo que me escondieras que requería que lo leyera?

    —No lo creo.

    —¿Mencionaste algo sobre sexo durante la relación falsa?

    —Si—, la mujer guardó silencio para que dijera lo que había puesto—. Bueno, solo puse lo normal; solo sucederá si ambas partes están dispuestas. No soy un animal o un aprovechado.

    —Bien, entonces ya terminamos aquí—dijo la mujer poniéndose de pie con sus cosas y se inclinó besando los labios del hombre, a quien tomó por sorpresa—. ¿Por qué tan sorprendido?—preguntó al separarse—. Ya firmé tus papeles. Tu pequeño juego mental comienza, sé que tu incentivo es falso, no es solo molestarme y tener un título absurdo al final de la película, algo quieres hacer y no me quieres decir. Pero Chris... recuerda que quien con fuego juega, termina quemado. Estamos en contacto y por favor, no olvides darme una copia de lo que acabo de firmar—dijo y sin más se despidió sacudiendo sus dedos, volviendo a colocar sus gafas de sol dejándolo solo en la mesa, saliendo del restaurante.

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