Capítulo 3: Una brujita solitaria
Los estudiantes de la escuela Yokai estaban reunidos y mirando el tablero de anuncios para ver los resultados de sus exámenes de medio término. Entre ellos, Wataru estaba ahí buscando su nombre con nerviosismo con Kivat en su hombro.
El chico se encontraba nervioso pensando que no le fue bien mientras que el murciélago le daba palabras de alivio para tranquilizarlo.
Kivat: ¡Mira Wataru! ¡Ahí estas!- Exclamo señalando hacia una parte de la pizarra y el castaño vio ahí su nombre en el puesto N°17.- Felicitaciones.
Wataru: Gracias, Kivat. Pero creo que solamente tuve suerte. Debo esforzarme más.- Dijo algo nervioso.
Kivat: Tonterías, quedaste en el puesto número 17 y entre los 20 mejores de tu año. Eso ya es un gran logro.- Dijo tratando de animar al chico con poca confianza.- Al menos no te fue como ellos.
El castaño se giro y vio a un grupo de chicos que olvidaron ocultar su apariencia, por lo que tenían sus pieles de colores.
-¡Hey, estoy clasificado en el puesto 200!- Dijo uno de piel rosada.
-¡Yo estoy clasificado en el 222, eso es malo!- Dijo otro de piel azul.
-¡Los envidio, estoy en el puesto 245!- Dijo un tercero con piel verde y la lengua afuera.
El chico no sabía cómo racionar ante la escena excepto abrir la boca con ojos en blanco, pero Kivat se dio una palmada en la cara con una de sus alas.
Kivat: Esos idiotas. Se supone que deben permanecer en forma humana. Ningún humano tiene un piel de color rosa, azul o verde.- Se quejo en murmullo para solo ser oído por su compañero, quien asintió.
A pesar de eso, a nadie le molestaba verlos ya que todos son monstruos. Por lo tanto, Kivat podía estar afuera y ser visto sin el temor de revelar la identidad de Wataru. Después de todo, ¿que clase de chico tendría un murciélago dorado consigo y que además habla? Fue gracias a que están en una escuela para monstruos que Kivat no tenia la necesidad de esconderse a cada minuto como lo había hecho en la escuela anterior de Wataru.
En ese momento, los estudiantes vieron a Moka caminando hacia la pizarra, lo cual llamo la atención de todos.
-Wow, Moka-san de seguro que es increíble.- Comento un estudiante varón.
-Si, no solo eres la chica más bonita de la escuela, si no también la más inteligente.- Decía otro.
-¡Inteligencia y belleza es la mejor descripción para ella!- Dijo un tercero sonrojado, siendo que su estado era compartido por todos quienes miraban a la chica.
Kivat: (Estos chicos necesitan seriamente un filtro.)- Pensó con una gota de sudor al ver la escena. Si ellos actúan así a cada rato, las posibilidades que se conviertan en magos aumentan. (NT: Se dice que, si a los 30 sigues siendo virgen, entonces te conviertes en mago.)
La chica siguió caminando, pero en el momento en que vio a Wataru, su rostro se ilumino con una sonrisa.
Moka: ¡Wataru-kun!- Exclamo alegre mientras trotaba hacia el chico, haciendo que las sonrisas de sus fans desvaneciera. Por otra parte, al castaño le empezó a sonrojar la cara.- Buenos días.
Wataru: B-Buenos días... y felicitaciones.- Dijo tratando de controlarse.
Moka: Gracias, pero solo fue suerte.- Dijo con un ligero sonrojo y una sonrisa.
Kivat: Eso no es verdad. Se nota que eres muy capas.- Dijo alentando a la chica mientras miraba las similitudes de estos dos. Ambos eran demasiado modestos.
Moka: Gracias, Kivat-san.
Kivat: Ya te lo dije. Solo llámame Kivat. Estamos en confianza ¿Recuerdas?
Moka: Es verdad, jejejeje.- Dijo sonriendo un poco avergonzada mientras que el murciélago sonreía.
Kivat: (Ella definitivamente es la chica para Wataru.)- Pensó anotando mentalmente toda la información para dársela a alguien en otro momento.- Por otra parte, ¿Por qué no estudian los dos juntos para los próximos exámenes? De esa forma les iría mejor.
Moka: Esa es una buena idea, Kivat.- Dijo dando un aplauso y fijo su mirada al castaño.- ¿Qué dices, Wataru-kun?
Wataru: Y-Y-Yo...- Tartamudeo sonrojado, pero un ligero golpe de ala de Kivat lo saco de su Shock.- Estaría encantado...
Moka: ¡Hurra!- Exclamo con gran alegría.
Por otra parte, el castaño y el murciélago se fijaron en los chicos, quienes ardían en las llamas de los celos.
-¡Tiene una cita de estudio con Moka-chan!
-¡Tienes que estar bromeando! ¿¡Como puede ser tan afortunado!?
-¡Debo encontrar su secreto!
-¡Como lo envidio!
Esos fueron algunos de los comentarios de los chicos a su alrededor, los cuales dejaron con algo de miedo al castaño y una cara aburrida del murciélago mientras que la propia chica no es consciente de los pensamientos de sus fans.
Sin embargo, reconocido para los tres, había alguien observándolos desde lejos. Más específico, a la peli rosa.
¿?: Moka-san...- Dijo alguien.
La persona quien estaba espiando a Moka era una niña que estaba disfrazada como una bruja usando una capa y sombrero mientras usaba el uniforme de la escuela. Ella siguió viendo fijamente a la chica vampiro, pero regreso a la realidad al oír a alguien.
¿?: Felicitaciones, Sendou Yukari.- Dijo una voz masculina la cual hizo que la chica se volteara.
Yukari: Eres el delegado de mi clase...- Dijo al ver al sujeto junto a sus lacayos.
Delegado: Volviste a quedar en el primer lugar en las calificaciones ¿eh? Como era de esperarse de una chica genio. Supongo que no saltaste algunas clases para nada. Pero...- En eso su mirada se vuelve más fría.- Sufrirás si sigues rompiendo las reglas.
Yukari: ¿Rompiendo las reglas?
Lacayo 1: ¡Por ejemplo! ¡Tu atiendo luce como el de un cosplay!- Exclamo uno de los subordinados del sujeto que era casi calvo. Este la estaba señalando con ambos dedos.
Lacayo 2: No importa como lo veas, va en contra de las reglas escolares.- Dijo otro que era gordo mientras miraba de arriba abajo a la niña con interés.
Yukari: E-Esto es...
Delegado: En serio. Como representante de la clase, tu existencia es un dolor de cabeza para mi.- Dijo tratando de parecer como una especie de noble.
Yukari solo bajo un poco la mirada, pero ella sigilosamente saco una barita con la punta en forma de corazón y una estrella en el medio de esta. Ella la agito un poco y de repente, tres cubos metálicos cayeron sobre el representante y sus lacayos, uno por cabeza, que causo que cayeran al suelo.
Yukari: ¡Jajajajaja! Se lo merecían.- Dijo mientras se secaba las lágrimas que le salían por una escena tan graciosa.
Delegado: Tu...-Murmuro con furia mientras se levantaba.- ¿¡Que es lo que acabas de hacer!? ¡Pequeña mocosa altanera!
El sujeto fue a atacar a Yukari con todas las intenciones de dañarla. La chica cerro los ojos con miedo.
Moka: ¡No lo hagas!- Grito mientras se ponía enfrente de Yukari para protegerla.
El sujeto se sorprendió un poco al ver a la persona, pero no le importo mucho y continuo. Sin embargo... alguien lo detuvo.
¿?: Alto.- Dijo una voz masculina con mucha seriedad en su voz mientras agarraba la mano del representante.
Delegado: Tu... Tu eres...- Dijo con algo de miedo al sentir la mirada del chico, que era muy fría y con instintos asesinos.
El que se interpuso en el ataque del representante de la clase de Yukari era nadie más y nada menos que Wataru, cuyas marcas de vidrio aparecieron en su rostro dejando en claro que era Kurenai quien estaba en el asiento del conductor.
Wataru: Dime... ¿Qué crees que estas tratando de hacerle a una niña?- Exigió con calma, pero con tal frialdad que la espalda del abusador y sus lacayos se estremecieron.
Delegado: ¡E-Eso no te interesa! ¡Ella esta rompiendo las reglas y mi deber como representante de la clase es castigar a quienes las rompen!
Wataru: ¿Y haces eso con violencia?- Pregunto con aun más frialdad, lo cual asusto a los tres.
Moka: Por favor, no use la violencia contra las chicas.- Dijo entrando en la conversación, pues ella tampoco toleraba que atacaran a una niña.
El abusador vio esto con enojo, pues se interpusieron en su camino. Pero si no fuera peor, el alboroto que hicieron fue llamando la atención de los demás estudiantes a su alrededor. Chasqueo la lengua al ver su situación y no tuvo más remedio que retirarse.
Delegado: Muy bien, nos retiraremos. Pero si ella rompe otra regla de la escuela, entonces la matare ¿Trato?
Wataru: No.- Dijo con frialdad mirando a los ojos del sujeto.- Si ella rompe otra regla de la escuela, entonces se le castigara como a cualquier otro estudiante por como se exigen en las normas. Detención, suspensión, expulsión o cualquier castigo que sea el adecuado considerando lo que hizo. "SIN" amenazas con matar a nadie. Si descubro que intentas dañarla como trataste de hacerlo antes...- En eso, aumenta el agarre y las marcas se hacen más notorias mientras muestra su poder demoniaco.- Entonces prepárate para ir al hospital por 3 meses.
Kivat: Les recomiendo que le hagan caso.- Dijo el murciélago poniéndose en el hombro del castaño.- Cuando el hace amenazas en ese estado... siempre las cumplirá.
Delegado: L-Lo que sea...- Murmuro antes de que él y sus lacayos se fueran, pero en el fondo, le creció un gran miedo al sentir la amenaza del castaño. Sin embargo, no iba a permitir mostrarlo.- En serio, estar en la misma clase con la raza fronteriza me hace querer vomitar.
Kivat: Muy bien, ya te puedes calmar Wataru. Ya se han ido.- Dijo al momento que los tres sujetos se fueron de la vista.
Kurenai dio un suspiro mientras las marcas desaparecían, dejándole el control a Wataru. Moka también suspiro de alivio al ver que su amigo volvió a ser el de antes y al ver que los sujetos se fueron. Por otra parte, Yukari se estaba aferrando a la espalda de la chica aun un poco perturbada al ver todo lo que había sucedido.
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-Cafetería-
Yukari: ¡Gracias por su ayuda-desu! Me han salvado-desu.- Dijo la chica con atuendo de brujita.- Soy Sendo Yukari-Imasu.
Moka: He oído hablar de ti. Que eres cuatro años menor y aun así vienes a nuestra escuela.
Wataru: Debes ser muy lista para lograr saltar grados.
Kivat: Muy cierto.- Asintió a las palabras de su compañero.
Actualmente Wataru, Kivat, Moka y Yukari se encontraban en la cafetería de la escuela para comer y conversar. Moka realmente estaba sorprendida por que una niña de 12 años asistiera a su escuela y estuviera en su mismo año, pero la niña negó con la cabeza.
Yukari: ¡En realidad no es nada! Moka es mucha más increíble, ya que no solo eres inteligente, ¡Sino que también eres muy hermosa! Aparte de eso, yo... yo...- Fue murmurando, hasta que...- ¡Te amo!- Se confeso a la chica mientras se tiraba a ella.
Wataru se giro para ver a su amiga y se sonrojo enormemente al ver que Yukari estaba sobre ella mientras manoseaba su pecho. Por otra parte, Kivat estaba con la mandíbula tocando el suelo de la mesa mientras miraba la escena.
Yukari: Cada vez que te veo pasar por mi clase, me gustas más y más. ¡Y cuando me salvaste, tome mi decisión final!
Moka: Eh, pero que es lo que has decidido.
Yukari: ¡Por favor sal conmigo!- Exclamo con una gran sonrisa y un sonrojo en su rostro.
Wataru: Eh... eh... eh...- Fue murmurando sin palabras. Esto lo dejo completamente en blanco.
Kivat: Guau, una verdadera escena Yuri. Jamás creí vivir el día para verlo en la vida real.- Comento con una enorme gota de sudor.
Moka: Yo... ano... e-etto...- Fue murmurando buscando las mejores palabras antes de mirar a la cosplayer.- Esta bien, si es solo como amigas...
Yukari: ¡Siiiiii! ¡Soy feliz-desu!- Exclamo mientras frotaba su cara en los pechos de la vampira.
Kivat: Sera mejor que no veas esto Wataru. No es bueno para tu salud mental.- Dijo en el hombro del castaño mientras usaba una de sus alas para taparle los ojos. Conocía demasiado bien a su compañero y sabia que la escena podría causar que se desmaye.
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-Cambio de escena-
Más tarde en ese día, Yukari todavía estaba frotando los pechos de Moka. La mayoría de los estudiantes se ruborizaron ante la vista mientras que algunos chicos tenían una cara embobada viendo la escena.
Moka caminaba tratando fuertemente de no prestar atención, pero el continuo manosea de la niña junto a las miradas concentradas en ella no ayudaban.
Moka: Ano... ¿Yukari-chan?- Llamo a la niña quien continuo su manoseo siendo arrestada por la peli rosa.
Yukari: Jeje. Moka-san, tus pechos son más grandes de lo que parecen.- Dijo dando valiosa información a algunos hombres interesados presentes en el lugar.
-Los pechos de Moka-san siendo apretados de esa manera...- Dijo un chico entre el publico con mucho interés... antes de que la envidia lo invadiera.- ¡Es imperdonable!
Yukari: ¡Los míos están planos como una tabla, esta sensación es como un sueño!- Dijo con alegría mientras que la victima se mordía los labios.
Moka: Esto es malo... siento que mis fuerzas me abandonan...- Murmuro con gran dificultad. Ella no sabia cuanto más iba a aguantar.
Mientras tanto, Wataru iba caminando con un cuaderno en mano. En ese cuaderno, el anotaba todos los objetos que había usado para hacer un barniz y les colocaba los colores al lado para saber que cosa sacaba que color. Pero también anotaba notas musicales, pues el también le gustaba componer nuevas melodías.
Actualmente tenía una canción escrita que tenia hace tiempo ideando. La tenia casi lista, pero quiera la opinión de un tercero. Fue en eso que vio a su amiga y pensó que ella la podría ayudar.
Wataru: Ano... Moka-san. ¿Podrías...?- Fue hablando mientras se acercaba a ella, pero fue interrumpido.
Yukari: Así que finalmente llegaste, Kurenai Wataru.- Dijo con un tono aburrido mientras seguía manoseando los pechos de Moka.- Tienes buenas calificaciones. Habilidades atléticas sobre el promedio. Se sabe que eres un tipo raro al venir aquí en tu primer día con la apariencia de un paciente de hospital con necesidades especiales y que también vas recogiendo todo tipo de cosas por ahí y luego de las llevas. Eres solo un bicho raro.
Esas ultimas palabras resonaron en la cabeza de Wataru y se clavaron en su corazón como estacas. Era cierto qué hacia ese tipo de cosas, pero tenía una razón para hacerlas, pero aun así no evita que fueran verdad. Una aura de depresión fue apareciendo en el chico. Por otra parte, Yukari solo continuo.
Yukari: No me gustaría que mi amada Moka-san se juntara con gente como tú. Se puede notar que el rumor de que venciste a Saizo fue una completa mentira.- Fue diciendo mientras continuaba manoseando los pechos de la chica, quien trataba con todas sus fuerzas de no soltar un gemido de placer.- Por eso... ¡Te reto!
Wataru: ¿Eh...?- Parpadeo ante la repentina declaración de guerra.
Yukari: ¡Toma esto!- Dijo mientras soltaba a Moka, sacaba su barita y la agitaba mientras decía unas raras palabras.
En eso, un armario de almacenamiento comenzó a crujir hasta que se abrió de repente. Ahí, salieron varios utensilios de aseo volando hacia Wataru comenzando a atacarlo.
Wataru: ¡WAAAAAAAAA!
Moka: ¡Wataru-kun!- Grito en shock al ver como su amigo es agredido tras ser liberada del manoseo de la chica.
Wataru: ¿¡Que pasa!? ¿¡Por qué los útiles de aseo se están moviendo por su cuenta!?- Grito mientras trataba de esquivar los objetos y/o cubrirse de ellos.
Yukari: ¡Muy fácil! ¡Es porque es magia!
Wataru/ Moka: ¿Magia?- Preguntaron ambos antes de que el castaño se cubriera una escoba voladora y la niña se girara a la chica.
Yukari: ¡Si, soy una bruja!- Revelo sorprendiendo a ambos.- Y desde ahora, quien trate de acercarse a Moka-san, ¡Sera castigado por mi magia!
Moka: (¿No esta contra las reglas revelar tu identidad?)- Pensó un tanto preocupada.
Ura Moka: (Técnicamente, ella no es un monstruo, por lo que la mayoría de las reglas no la afectan.)- Informo la otra Moka a la mente de su otra yo, quien se sorprendió de que ella pudiera hacer eso.
Wataru siguió siendo atacado, hasta que...
Wataru: ¡YA BASTA!- Este perdió la paciencia y grito liberando su poder.
Un pulso de energía demoniaca estallo en el alejando los útiles de aseo dejándolos sin la magia. Por lo que volvieron a ser objetos inanimados. Wataru estaba respirando pesadamente mientras miraba a la brujita con furia mostrando sus marcas de vidrio en su rostro.
Yukari se estremeció al ver y sentir el poder del chico. Ahora ya no estaba tan segura de que era una mentira que el derroto al ogro. El poder que estaba mostrando ahora era claramente elevado.
Wataru: Nunca... vuelvas... a hacer... eso, ¿Entendiste?- Amenazo con furia. A el no le gustaba ser atacado sin ninguna verdadera razón y menos por tratar de alejarlo de su primera amiga que hizo en la escuela. No importaba que era una niña, pero amenazar era lo más lejos que iba a llegar. Nunca se atrevería a golpearla.
Yukari: E-E-Esta bien... ¡Pero esto aun no ha terminado!- Grito para después darse la vuelta y huir.
Wataru lanzo un largo suspiro mientras las marcas desaparecían, mostrando que ya estaba más calmado. Moka corrió hacia su amigo para ver cómo se encontraba.
Moka: ¿Estas bien?
Wataru: Si. Esas cosas casi no me golearon, pero aun así me deje llevar demasiado por lo que me hizo Sendo-san.- Dijo con arrepentimiento y Moka entendió la razón.
Moka: Descuida, cualquiera se enojaría si fuera atacado de esa forma y tan repentinamente. Además, sé que cuando aparecen tus marcas... te puedes dejar llevar un poco.- Dijo con calma.
Moka ya llevaba el tiempo suficiente para saber que cuando Wataru las marcas aparecen en su rostro, este puede dejarse llevar demasiado por sus emociones... en especial cuando está enojado.
Cualquier persona que fuera atacado con esa brutalidad y sin probación estaría enojado. Aunque era irrazonable amenazar con tal mirada a una niña, tampoco era correcto agredir a alguien de esa forma sin una buena razón.
Moka decidido llevar a Wataru a la enfermería por si acaso. Prefería prevenir que lamentarse.
Por otra parte, su otra yo quedo sorprendida y admirada por el poder que demostró el castaño. No cualquiera tiene ese tipo de poder y a la vez la haya impresionado tanto en tan corto tiempo. Ahora ella quería saber más del castaño y su poder. Por ahora, vera como maneja las cosas su otra yo.
Sin embargo, lo que nadie noto fue que un grupo de 3 estaba viendo todo lo sucedido escondidos detrás de una esquina.
Lacayo 1: ¿Escuchaste eso?
Lacayo 2: Revelar tu identidad es una seria violación a las reglas escolares.
Delegado: Ahora te tenemos... Mocosa.- Dijo con una sonrisa mientras sus dientes se iban afilando.
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-Enfermería-
Wataru: Itetete.- Gimió de dolor mientras Kurumu lo atendía.- Eso si me había dolido.
Cuando Wataru y Moka llegaron a la enfermería, la chica se tuvo que retirar porque olvido algo. Fue en eso que Kurumu apareció y vio al herido castaño, por lo que decidido atender sus heridas.
Aunque Wataru fue capaz de esquivar y bloquear la mayor cantidad de los ataques, aun así fue golpeado con uno que otro momento. Y como los objetos fueron escobas y cubetas metálicas, estos dejaron heridas en el chico.
Kurumu finalmente termino de atender la mayor parte de sus heridas y tras eso corrió hacia adelante.
Kurumu: ¿Hey, que demonios esta pasando? ¿Acabo de debutar en el capitulo anterior y no pude aparecer antes?
Murcielago: ¿Con quién estás hablando-dechuuu?- Dijo un murciélago que había aparecido de repente antes de irse.
Kurumu fue y regreso rápidamente con Wataru, sentándose a su lado.
Kurumu: De cualquier forma... Debes de haberla pasado mal ¿Verdad, Wataru?
Wataru: S-Si. Sendo-san esta totalmente loco por Moka-san y tras ver como me ataco, dudo que se rinda con ella.- Dijo con cansancio para dar un largo suspiro.- Si esto sigue así, no podre acercarme a Moka-san sin meterme en una pelea con ella.
Kurumu abrió los ojos con sorpresa antes de poner una pose victoriosa.
Kurumu: (¡Yahoo! Gracias a ella, podre pasar más tiempo a solas con Wataru. ¡Buen trabajo, Sendo Yukari!)- Pensó con gran felicidad y se puso en pose de leopardo en dirección al castaño.- He oído rumores acerca de esa chica.
Wataru: De Sendo-sa...AAAAAAAH.- Grito en pánico al ver la pose y mirada de la chica mientras se sonrojaba.
Kurumu: Aunque dicen que ella es una genio, ella todavía sigue siendo egoísta y sus compañeros de clase dicen que siempre se burla de ellos o les juega malas bromas.- Fue diciendo mientras se acercaba al chico paso... a paso.
Wataru: Uh...A-Ano... Kurumu-san.- Fue murmurando con una sonrojo mientras retrocedía, pero para su desgracia, quedo contra la pared.
Kurumu: Probablemente ella se comporta así porque cree que es un genio.- Dijo con tono seductor y el chico esta contra las cuerdas sin saber qué hacer.
Sin embargo, sin que ellos lo notaran, Yukari estaba escondida al otro lado de la ventana espiando a ambos.
Yukari: Kurenai Wataru, como mi rival de amor, debo vencerte completamente.- Tras decir eso, ella busco entre sus ropas para sacar de allí un muñeco de paja con un papel en la cara siendo el rostro.- ¡Un objeto mágico, un muñeco Voodoo!
Este es un objeto mágico muy útil el cual permite a la persona controlar a otro, donde al hacer que el muñeco se mueva de una cierta forma, el cuerpo de la persona objetivo lo imitara aun encontrar de la voluntad de este.
Yukari: Ahora todo lo que tengo que hacer es añadir un cabello de Kurenai y...- Fue diciendo mientras metía un cabello del castaño dentro del muñeco y al hacerlo, tomo su brazo y lo hizo golpearse en la cara.- ¡Hey!
Al mismo tiempo, el brazo izquierdo de Wataru se levanto de repente para confusión de este antes de que formara un puño y lo golpeara fuertemente en el rostro haciendo que callera acostado en la cama.
Kurumu: ¡Espe...! ¿¡Wataru!?- Hablo en shock al ver como el chico se golpeo repentinamente en la cara.
Mientras tanto, Yukari siguió usando el muñeco haciendo que se golpeara en la cara provocando que el castaño se siguiera lastimando a sí mismo.
Yukari: Jeje. Es demasiado pronto para que juegues con los pechos de Moka-san.- Tras decir eso, dio una pequeña risita divertida antes de manipular al muñeco haciendo que tomara y manoseara algo en el aire.- Mientras tanto, puedes jugar con los grandes pechos de esa chica pechugona.
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-Cambio de escena-
Moka estaba caminado por los pasillos en dirección a la enfermería. Ella por fin es libre del manoseo de la pequeña bruja y eso le daba alivio. No le gustaba que tentaran su pecho sin importar que fuera otra chica.
Tras resolver un pequeño asunto que tenía, fue a ver a su amigo para ver como se encontraba. Ella estaba muy preocupada por el y esos cambios de humor que podría llegar a tener.
Moka: Wataru-kun, ¿Cómo te...?- Sus palabras murieron al ver y oír lo que pasaba.
En la cama de la enfermería, se encontraba Wataru manoseando los pechos de Kurumu estando el encima de ella mientras que la chica solo tenia una sonrisa de placer y sonrojo en su cara. Por otra parte, el propio chico tenia un enorme sonrojo con una cara estupefacta.
Moka miro esto con un aura negra y mirada vacía. Jamás imagino llegar a ver esto del chico.
Wataru vio que su amiga llego y se asusto por como lo miraba.
Wataru: ¡Moka-san, esto no es lo que piensas! ¡Mi cuerpo se esta moviendo por si solo!- Grito mientras trataba de alejarse de la peli azul, pero su cuerpo no le hacía mucho caso.
Moka: ¿Q-Que están haciendo?- Dijo tras salir de su shock y un fuerte sonrojo aparecía en su rostro mientras se daba la vuelta.- ¿Acaso has usado tu "encanto" en Wataru-kun, Kurumu-chan?
A pesar de la situación, ella sabia que el chico era demasiado tímido y reservado para hacerle ese tipo de cosas a una chica. El siempre hecho de ser abrazado lo pone fuertemente sonrojado, por lo que la posibilidad de que haga un acto pervertido a voluntad es extremadamente bajas.
La única explicación es que la Súcubo usara su poder en el chico.
Kurumu: ¿¡Como podría hacerlo!?- Reclamo mientras se paraba, pero el castaño seguía aferrado a sus pechos para horror de este.- ¡Además, sabes que Wataru es inmune a mi hechizo!
Moka: ¿¡Entonces porque!?- Exclamo con algo de furia.
Yukari: ¡Hey!- Exclamo aun escondida mientras movía los brazos del muñeco.
Los brazos del castaño soltaron los pechos de la súcubo haciendo que el callera al suelo. Sin embargo, el sintió que sujetaba algo en sus manos y se horrorizo al ver lo que era.
Eran unas bragas.
Un silencio domino el lugar mientras que una corriente de viento paso entre ellos. Wataru con miedo vio hacia arriba, algo que lamento hacer, al ver que la peli azul ya no traía sus bragas puestas.
Kurumu: ¿Eh...?- Ella se sonrojo al notar que la miraba y rápidamente se aparto. ¡Iyaaaaa!
La mente de Wataru ya no pudo más y su cabeza se sobrecalentó mientras vapor salía de su cabeza hasta dar una gran explosión y caer al suelo inconsciente.
Moka: Wataru...-Murmuro con una sonrisa puesta con los ojos cerrados, pero tenia una enorme vena en la frente. Ella estaba fuertemente tratando de controlarse y no explotar.
Yukari: ¡jajajaaja! ¡Te atrape, te atrape!- Rio la brujita llamando la atención de las dos chicas.
Moka: ¡Yukari-chan!- Exclamo sorprendida al verla y la mencionada se pasmo al ver que fue descubierta.
¿?: ¿¡Que tenemos aquí!?- Exclamo una voz mientras entraba, robando el muñeco voodoo y entrando en la enfermería.
Moka: ¡Kivat!- Grito al ver al murciélago de su amigo.- ¿Cuándo llegaste?
Kivat: Había llegado un poco después de tu y cuando vi a Wataru manoseando a la súcubo, sabia que algo andaba mal.- Dijo para dejar el muñeco en la mesa y señalarlo con su ala.- Este es un muñeco voodoo, la bruja de allí la uso para controlar a Wataru y hacer que atacara sexualmente a la súcubo.
Yukari: Oh, oh.- Murmuro antes de esconderse de nuevo, pero no se dio cuenta de que la punta de su sombrero era completamente visible y ya no hacia falta esconderse para librarse de su problema.
Murciélago: Así es como son las cosas.- Dijo un murciélago entrando en escena antes de irse.
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-Cambio de escena-
Dentro de un salón de clases vacío, Wataru, Kivat, Moka, Kurumu y Yukari estaban dentro para tener una platica.
Wataru: Moka-san, aunque no me gusta decir esto, tenemos que hacer algo con Sendo-san.- Dijo el castaño con algo de seriedad.
Kivat: Estoy de acuerdo, esta vez ella se salió del limite.- Dijo en el hombro de su compañero.
Wataru estaba enojado, pero mantenía la calma al saber que se trataba de una chica. Sin embargo, Kivat hablaba con más seriedad y una mirada más penetrante en dirección a la brujita.
Kurumu: A mi no me importa mucho lo que me hizo.- Dijo con una mano en la cara mientras se sonrojaba y tenia una sonrisa en su rostro.
Moka: Bueno, Wataru-kun, Yukari-chan aun es una niña.- Dijo tratando de calmarlo, pero ver a la mencionada sacarle la lengua mientras permanecía detrás de ella no ayudaba mucho.
Kivat: No es escusa. Ella ya es lo suficientemente grande para saber que sus actos tienen consecuencias. Una que otra broma puede llegar a ser molesta, pero pasable. Sin embargo, hasta las bromas tienen sus límites y uno debe saber cuándo detenerse.- Dijo con seriedad antes de mirar a la brujita.- Además, atacar a alguien con objetos para golpearlo no es una broma, sino agresión. Y usar un objeto mágico para manipular a alguien es una acción grave. Ella debe a aprender el lugar y momento para hacer las bromas y saber de qué tipo hacer.
Wataru: Si ella continua así, ella terminara odiada por todos y tarde o temprano se quedara sola.- Dijo mientras miraba a la chica continuando la explicación de su compañero.
Moka: Eso puede ser verdad...- Murmuro con tristeza.
Moka tenia que admitir que lo que ambos decían era muy cierto. Yukari se había pasado de la raya con sus bromas y se gano la ira del castaño, quien siempre se mantenía calmado y rara vez se enoja a no ser que algo sea muy serio. Ella no deseaba tal destino para la pequeña brujita. Sin embargo...
Yukari: Estoy bien con eso.- Dijo con una cara molesta hacia el castaño.- Soy un genio después de todo. Así que no necesito la amistad de gente con menor inteligencia que la mía-Desu.- Tras decir eso, poso su mirada más abajo.- Y en primer lugar...-Levanto su cara poniendo una sonrisa forzada.- He estado sola desde el principio.
Wataru: Sendo-san...-Murmuro triste al ver sus ojos, podía decir que ella hablaba en serio.
Sin embargo, el momento se rompió cuando la brujita levanto su varita a la altura de su hombro. En eso, una tetera, una vasija y una gran cubeta, cada una de metal, callo sobre la cabeza del castaño de manera consecutiva haciendo que callera al piso.
Yukari: ¡Jajajajaja! ¡Te he atrapado-desu!- Exclamo con alegría antes de salir de la sala de clases.
Kurumu: ¡Oye! ¿¡Como te atreves a lastimar así a mi destinado!?- Grito enojada saliendo del salón viendo como la brujita se iba.
Moka: ¿Estas bien, Wataru-kun?- Pregunto mientras ayudaba al chico a levantarse y este se acariciaba la cabeza donde lo golpearon.
Wataru: H-Hai... pero duele...- Dijo con dolor.- Aun así, ella debe aprender a comportarse.
Moka: Por favor, Wataru-kun. Me parece mal enojarse con una niña.
Wataru: Lo se, pero...-Hablo el castaño con una mirada triste.- Creo que no deberías consentirla tanto.
Moka: ¿Qué...?- Exhalo tras oir lo que dijo
Wataru: Yo también estoy de acuerdo con que no debemos enojarnos con Sendo-san al ser una niña... pero tampoco podemos pasar por alto sus travesuras.- Dijo mientras se paraba.- Si ella continua así, podría llegar a quedar completamente sola... y ese es un destino que nadie debería pasar.
Moka: Wataru-kun...- Hablo con voz ligera. Ella por fin entendió que el chico solo se estaba preocupando por ella y que si no actuaban... seria demasiado tarde para la pequeña. Ambos sabían que era estar solo y no deseaban eso a la brujita.
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-Cambio de escena-
Yukari estaba corriendo mientras se reía por la travesura que le hizo al castaño, pero realmente lo hizo para evitar llorar y mostrar su debilidad ante ellos.
Mientras corría, fue recordando sus días al empezar la escuela.
{He oído que esa chica es una bruja.}
{¿Cómo es posible? ¿Por qué ella esta en el mismo grado que nosotros?}
{Va diciendo "Desu, desu" a cada rato. Es como si ella tratara de seducir a los lolicones.}
{¿No es el trabajo de las brujas el jugarle malas pasadas a los hombres}
{Todo lo que haces es perder el tiempo.}
{¿Hablando de eso, las brujas no son más parecidos a los humanos que a los monstruos?}
{Ella no necesita estar en nuestra escuela ¿verdad?}
{Si, ni vale la pena que este aquí.}
{Apuesto a que sus calificaciones son buenas gracias a que usa magia.}
Ella recordó todas esas palabras que dijeron sus compañeros de clase. Ellos murmuraban entre ellos lo suficientemente fuerte para que los escuchara y ella solo se mantuvo sentada mientras trataba de contener las lagrimas y apretaba los dientes deseando que la clase terminara.
Fue por esa razón por la que ella no asiste tanto a clases, porque no quería seguir escuchando los comentarios de sus compañeros. Y gracias a su gran inteligencia, no tuvo muchos problemas en su actividad académica.
Ella por fin paro de correr al llegar detrás de la escuela.
Yukari se quedo parada meditando las palabras de Wataru, pues aunque no le gustaba lo que le dijo, una parte de ella admitía que tenia razón. Pero de repente sus pensamientos se rompieron cuando fue empujada al suelo cayendo de trasero.
Yukari: ¡Eso dolió, idiota! ¡Porque no te fijas por donde caminas!- Reclamo enojada a quien choco con ella, pero se congelo al oír su voz.
¿?: Bueno, comparado contigo, nosotros podemos ser idiotas.- Dijo una voz de un hombre y Yukari levanto la vista.
Yukari: Delegado...- Hablo al ver a la persona.
Lacayo 1: Esta mocosa es la que siempre rompe las reglas de la escuela.
Lacayo 2: El delegado está muy enojado.
Yukari: ¡Eso no tiene nada que ver con ustedes!
Delegado: Claro que si, sabes...- Tras decir eso, tomo la muñeca de la brujita y la levanto haciendo que quedara colgando sin tocar el suelo.- Tenemos que castigar a las personas que causen problemas en clase.
Eso exalto a la brujita y en eso los tres se la llevaron dentro del bosque.
Yukari: (Sálvame... Moka-san...)- Oro por ayuda mientras tenia los ojos cerrados.
Sin que los cuatro supieran, Kivat estaba encima de la rama de un árbol cercano. El siguió sigilosamente a Yukari cuando se escapo de Wataru y las chicas. El presencio todo y miraba esto con seriedad.
Kivat: Tengo que ir a avisarle a Wataru sobre esto.- Dijo antes de tomar vuelo.
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-De regreso con Wataru-
Moka: Creo que tienes razón...-Murmuro con tristeza.- Pero aun así, no debemos ser duros con ella.
Wataru: ¿Por qué?
Moka: Porque he oído que todos sus compañeros de clase se burlan de Yukari-chan.- Revelo dejando al castaño sorprendido.
Wataru: ¿Y porque harían eso? Ella es solo una niña y no tiene sentido despreciarla solo por la edad o su atuendo.
Kurumu: Eso se debería por que ella es una bruja.
Wataru: ¿Por qué es una bruja?- La chica asintió ante la pregunta.
Kurumu: Veras, las brujas se consideran una raza fronteriza, la cual no se consideran ni monstruo ni humana. En el pasado, se decía que eran el puente entre ambos mundos... pero ahora son llamados mestizos.
Wataru: Mestizos...-Susurro en shock.
Kurumu: Además, aun en el mundo humano, existía la caza de brujas, los juicios de brujas y otros eventos similares... Realmente eran odiados por los humanos y no son aceptados en cualquier lugar.
Moka: Es por eso que quiero ayudarla.- Dijo entrando en la explicación.- Yukari debe de estar muy sola.
Wataru: Ya veo...- Susurro mientras miraba el salón y recordaba su infancia, siendo menospreciado por otros, ya sea humano o monstruo.- Ella es parecida a mi...
Moka: Wataru-kun...- susurro al entender a lo que se refería.
Ella sabía que su amigo es un mestizo también al nacer de un padre [Fangire] y una madre humana. Tanto Yukari como Wataru compartían la misma situación donde eran despreciados por ambas razas, pero al menos el castaño tenia a gente a su alrededor que lo ayudo a sobre ponerse.
Moka tomo la mano del mestizo, lo que hizo que la mirara.
Moka: Estoy a tu lado... y siempre seré tu amiga.- Dijo con seguridad para calmar al castaño, quien sonrió mientras asentía.
Wataru: Gracias.- Dijo con una sonrisa.
Kurumu: ¡Oigan!- Grito poniéndose entre los dos.- ¡No me dejen fuera!
Y de esa forma, un lindo y serio ambiente se rompe dejándolo en pedazos.
Wataru y Moka fingieron toser un poco para deshacerse del rubor que tenían. Recordaron como se juntaron las manos y ese tipo de cosas los puede llegar a avergonzar fácilmente.
Wataru: Vamos, debemos encontrar a Sendo-san y ayudarla.
Kurumu: ¿Ayudarla? ¿Después de cómo te trato?- Parpadeo anonadada mientras el chico asentía.
Moka: Wataru-kun tiene razón. Sabemos lo que es estar solo. Ella solo necesita amigas que la necesiten.- Hablo siendo otra con la misma experiencia que la pequeña bruja.
Kurumu arqueo una ceja ante lo que dijeron antes de dar un largo suspiro.
Kurumu: Bien, vamos por ella.- Suspiro derrotada.
Wataru y Moka asintieron, pero antes de que pudieran salir del salón, alguien entro.
Kivat: ¡Wataru, tenemos problemas!
Wataru: ¿Qué pasa Kivat?- Pregunto al ver como su compañero parecía apresurado.
Kivat: ¡Esos tipos que amenazaban a la brujita volvieron y se la llevaron al bosque!- Informo haciendo que los 3 presentes se quedaran en shock mientras Moka se tapo la boca.
Wataru: Kivat, guíanos. No hay tiempo que perder.- Ordeno serio y el murciélago asintió mientras volaba fuera del salón. El grupo de 3 lo siguió por detrás mientras corrían.
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-Cambio de escena-
En las profundidades del gran y denso boque, Yukari fue arrojada contra un árbol.
Yukari: ¡Ay! ¿¡Que es lo que haces-desu?
Lacayo 1: ¡Desu, desu, Cállate-desu!
Lacayo 2: ¡Que sonido tan desagradable!
Delegado: En verdad que es desagradable...- Dijo con una mano en la cabeza y una en la cadera tratando de parecer noble y superior antes de girarse y mirar con ira a la brujita.- ¡Que inmundicia!
En eso, los tres comenzaron a transformarse, donde sus dientes crecieron convirtiéndose en colmillos. Su piel se torno verde mientras le salían escamas, una cola de reptil les creció y sus mandíbulas crecieron mientras se alargaban.
El delegado y sus lacayos habían tomado su verdadera forma, que era...
Murciélago: ¡Hai, hai! ¡Yo daré la nota informativa!- Exclamo un murciélago entrando en pantalla.- Hombre lagarto: una bestia con apariencia de lagarto humanoide, posee mucha inteligencia.- Tras dar la información, se fue abandonando la zona.
Yukari se levanto mientras sacaba su varita al ver acercarse los tres hombres lagartos a paso lento
Delegado: ¡Nuestra clase no necesita a una sucia mocosa como tu que huele a orines!- Grito con fuerza y unas palabras en especifico resonaron en la cabeza de Yukari.
{Nuestra clase no la necesita...}- Resonó la voz de una chica.
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-Flash back-
Yukari estaba llevando el bote de basura para arrojar los desperdicios que contenía en el contenedor detrás de la escuela. Fue en eso que escucho la voz de una de sus compañeras.
-¿Qué le sucede a esa bruja?
Yukari: ¿Eh?- Parpadeo mientras se detenía y vio a tes de sus compañeras conversando.
-Mira que ser presumida solo porque obtuvo las mejores calificaciones.- Dijo otra de las chicas.
-Nuestra clase no necesita a una chica como esa.- Dijo una tercera.
-Tu lo has dicho.- Afirmo la primera.
-Después de causar tantos problemas a todos, ella será abandonada en poco tiempo.- Informo la segunda para luego las tres comenzar a reír.
Yukari solo se quedo escuchando la conversación hasta cerrar los ojos sintiendo un dolor en el pecho. En eso, ella saca su varita y la levanta activando su magia.
Las tres chicas se siguieron riendo... hasta que de pronto sintieron algo extraño. Bajaron la mirada... y vieron allí sus faldas.
-¡KYAAAAAAAAAAAAAAAAA!- Gritaron avergonzadas para luego bajar sus chalecas para intentar cubrirse.
-P-Por que tan de repente...?
-U-Uzo... Iada...
Yukari: Jajaja ¡Que bien se siente!- Exclamo alegre dando a conocer su presencia a las tres.
-¡Esa chica lo hizo!- Grito una de las tras mientras iba tras ella, pero tropezó con el bote de basura cayendo al suelo junto a las otras dos.
-¡Eres horrible! ¡En verdad eres una horrible bruja!
Yukari: No pretendo ser amiga de ustedes.- Dijo mientras les sacaba la lengua, pero si uno se fijaba bien, se podía ver cómo le salían pequeñas lágrimas.
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-Fin del flash back-
Delegado: ¿Por qué estas tan callada?- Dijo mientras miraba a la brujita quien tenia su varita apuntando a ellos.
Yukari salió de sus recuerdos y empezó a conjurar dando un par de vueltas mientras movía su barita, pero...
Delegado: Cállate.- Dijo para luego morder la punta de la varita y romperla. Fue masticando mientras que la brujita miro su varia.
Yukari: Mi varita mágica...- Murmuro en shock al ver que perdió el medio para usar sus poderes.
Delegado: ¡Puag!-Escupió los trozos de varita que tenia en la boca y se giro a la bruja.- Que mal sabor, que pésimo sabor.
Lacayo 1: ¿Qué debemos hacer con ella?
Lacayo 2: ¿Nos la comemos? Con esta niebla no creo que nadie se de cuenta.
Delegado: ¡Es verdad!- Exclamo abriendo sus fauces mientras su legua se movía y retorcía, con ansias de saborear algo mejor que un trozo de madera.- Comer a una mocosa tan sucia no estaría mal para variar un poco.
Yukari: ¿Eh...? No... ¡¡NOOOOOOO!!- grito de terror mientras cerraba los ojos y rezaba por algún milagro.
¿?: ¡Aléjense de Yukari-chan!- Grito una voz detrás de los hombres lagarto.
Todos miraron al dueño de la voz y Yukari vio una cabello rosa conocido.
Yukari: ¡Moka-san!- Exclamo al ver a la peli rosa.
Como el bosque era tan denso y con mucha niebla, Moka junto a Wataru y Kurumu se tuvieron que separar para poder encontrar más rápido a Yukari. Fue en su búsqueda que oyó el grito de la brujita que la pudo encontrar antes.
Delegado: Che, ¿Tu de nuevo?- Dijo con odio al ver a la chica.- Bueno, al menos ese idiota no vino contigo.
Lacayo 1: Vamos, comámosla a ella también.
Lacayo 2: Estoy de acuerdo.
Delegado: Ella luce más buena y jugosa... ¡Lo más importante, esos pechos, sus muslos y ese trasero!- Dijo con gran lujuria mientras le salía baba de la boca.
Yukari: ¡Por favor, no te preocupes por mi y huye, Moka-san!- Exclamo sorprendiendo a la chica.- ¡Puedo ocuparme de esos monstruos de bajo nivel por mi cuenta!
Moka: ¡Eso no esta bien, Yukari-chan!- Exclamo asustando a la chica mientras que ella fue caminando con tranquilidad a su dirección pasando a los hombres lagartos, quienes solo se la quedaron viendo en sus lugares.- No actúes de manera tan dura cuando te enfrentes a un problema que no puedas solucionar. Cuando sientas miedo, está bien pedir ayuda.
Yukari: Yo...- Murmuro bajando un poco la cabeza, sin ser capaz de decir algo.
Moka: No tienes porque forzarte a ti misma... No tienes por qué estar sola.- Ella por fin llego a la pequeña bruja.- Aun eres joven, así que tienes que ser un poco más honesta.
Yukari: No me fuerzo a mi misma.- Dijo mientras se pasaba una mano por debajo del ojo, limpiándose una lagrima.
Moka: Te sientes muy sola ¿no?- Ante eso, Yukari reacciono. Esa fue toda la prueba que ella necesita para entender como se sentía.- Si estas sola... si te duele estar sola, está bien decirlo.
Yukari desvió la mirada para no ver, ella no quería admitirlo, no quería parecer débil, quería demostrar que es fuerte y una adulta para que dejaran de tratarla como a una niña. Ella se giro a ver a Moka y se sorprendió al ver como ella... le sonreía como si le entendiera.
Mola: Yo también he estado demasiado sola.
Yukari: ¿Tu también, Moka-san?- Pregunto atónita, pues pensaba que alguien tan bella y popular debía estar siempre rodeado de gente, pero ver como ella le sonrió mientras le salía una lagrima le hizo entender que no mentía.
Moka: Esa es la razón por la que no puedo dejarte sola... quiero ayudarte, Yukari-chan.- Tras decir eso, llevo sus manos para tomar las de Yukari. Mientras tanto... ella lloraba sin quitarle la mirada encima.
Yukari: Moka-san...-Nombro totalmente conmovida por sus palabras y dejando salir ese lado suyo que siempre mantuvo encerrado en su corazón por pensar que era una debilidad. Su tristeza.
Yukari ya no pudo soportarlo más y se abalanzo a los brazos de Moka y lloro dejando salir todos sus sentimientos reprimidos desde que llego a la academia. Moka solo la abrazo con ternura y dejo que ella sacara todo, ella lo necesitaba.
Mientras que ellas dos estaban en eso, los tres hombres lagartos estaban viendo toda la escena. Pero ellos no estaban ni conmovidos ni felices... sino en shock.
Lacayo 1: ¿C-Como puede cambiar el estado de animo tan rápido?
Lacayo 2: ¡Nos han ignorado por completo!
Delegado: Imperdonable... ¡Esto es imperdonable! ¡Como se trata de algo imperdonable, devoremos su cuerpo tan jugoso!- Grito mientras que su mente justificaba sus acciones ante la declaración que hizo. Salto para comerse a Moka, pero...-¡AAAAAAAAGH!- Fue mordido en la cola por Yukari.
El delegado se volteo lentamente y miro como la pequeña brujita, a quien se le cayo el sombrero, le mordía la cola con fuerza enterrando sus dientes lo más profundo que podía.
Delegado: ¿¡Que demonios estás haciendo, maldita mocosa!?- Grito en cólera mientras hacia salir sus garras y decidió terminar con la brujita de una vez por todas.
Yukari abrió los ojos con horro al ver que no podría ese ataque de que seguro terminara con su vida. Sin embargo, alguien la tomo y la tiro al suelo evitando que fuera golpeada.
Cuando abrió los ojos, vio que era Wataru quien la había salvado.
Wataru: Me alegra haber llegado a tiempo...-Murmuro con una sonrisa mientras aguantaba el dolor.
Wataru fue rasguñado y herido en la espalda. Le dolía mucho, pero no era nada de lo que no podría soportar. Ya ha aguantado peores golpes por parte de los [Fangires].
El castaño se levanto de a poco y ayudo a la brujita a levantarse. De inmediato corrió y se alejaron de los hombres lagarto. Moka aun estaba acorralada, pero...
¿?: ¡Te tengo!
Moka: ¿¡EEEEEEH!?- Alguien la había sujetado y levantado.
Era Kurumu en su verdadera forma, quien se llevo volando a Moka hasta Wataru por petición de este. Le había pedido que se llevara a Moka con ellos cuando viera una oportunidad.
Ella por fin bajo y dejo a la peli rosa junto a medio humano y a la brujita.
Kurumu: Por dios, peses mucho ¿Sabes?- Comento con cansancio y la mencionada se sintió ofendida. Ella hacia mucho ejercicio y cuidaba lo que comia.
Yukari: Por que...-Susurro.
Wataru: ¿Hm?
Yukari: ¿Por qué me salvaste?- Pregunto mirando al chico.- Te hice muchas bromas y te he golpeado con mi magia. ¿Por qué viniste a ayudar a alguien que no ha sido buena contigo?
Wataru: Porque se cómo te sientes. Se cómo se siente estar solo y acosado por otros.- Respondió sorprendiendo a Yukari.- Cuando era niño, no tenía casi ningún amigo y se me la pasaban molestándome, siempre estuve solo y sin amigos. A los únicos que tenia eran a mi familia. Por eso sé como te sientes y quiero ayudarte. No quiero permitir que otros pasen lo que yo sufrí si puedo evitarlo.
Yukari no sabia que decir, no creía lo que escuchaba. Tenia a dos personas que compartían su dolor y eso de alguna forma... la hizo feliz. Se sentía que yo no estaba sola.
Delegado: Tch~, ustedes dan asco.- Dijo mirando con mirada asesina al grupo.- Ustedes han roto las reglas al proteger a esa enana, ¡por lo que nos los devoraremos como castigo!
Wataru: Ustedes, no son más que unos cobardes que molestan a los más débiles... y eso es algo que no puedo perdonar.- Les dijo a los tres hombres lagartos mientras apretaba los puños y las marcas de vidrio aparecían en su rostro, mostrando su estado de ánimo. Kurenai tomo el volante del conductor.
Delegado: ¡Basta ya, vamos a comerlos a todos!- Grito con las fauces abiertas, pero Wataru ni se inmuto y en cambio miro a Moka.
Wataru: Moka, ¿Te importaría ayudarme?
Moka: Para nada, en cambio, por favor hazlo. Mi otra yo quiere salir también.- Le respondió mostrando su rosario.
Sin más que decir, Kurenia retiro el rosario del cuello de Moka y esta empezó a transformarse.
Wataru: KIVAT.
Kivat: ¡Siempre preparado, Wataru! ¡Es hora de darles a estas lagartijas lo que se merecen!- Exclamo para volar hacia el castaño y morderle la mano.- ¡GABUT!
El cinturón apareció en la cintura de Wataru y este de inmediato tomo al murciélago alzándolo hacia adelante.
Wataru: ¡Henshin!- Exclamo para poner a Kivat en el cinturón boca abajo y el chico se rodeo de mercurio junto a unas ondas antes de que estas se rompieran y mostraran a Kiva.
Moka también termino su transformación y Moka-sama emergió con su sensual forma de cabello plateado y ojos rojos. La aura demoniaca que expulsaban los dos hizo que los hombres lagartos hicieran una mueca de miedo, pero su arrogancia les impidió correr. Ambos monstruos de clase S miraron a los tres sin pestañar y pareciendo aburridos con lo que veían.
Yukari: (¿Esas son... las verdaderas formas de Moka-san y Kurenai Wataru?)- Pensó con asombro al ver a las dos personificaciones Vampíricas que tenía al frente. El poder de ambos era descomunal.
Delegado: Que... ¿Qué demonios son ustedes dos?- Gruño mientras que sus lacayos exigían lo mismo, pero su respuesta no fue nada más que una mirada fría de parte de Kiva que ellos pudieron sentir a pesar que el guerrero tenía casco.
Moka: Así que... ¿Necesitan estar los tres juntos para intimidar a una niña?- Pregunto con seriedad antes de sonreír con burla.- Ustedes sí que son patéticos.
Delegado: ¿¡Que dijiste!?
Wataru: Lo que escuchaste. Son tan patéticos que necesitan superar en numero a alguien para sentirse superiores; y más aún, una niña.- Dijo para luego poner una mano en su cabeza.- Ustedes dan pena ajena.
Delegado: ¡Eso es todo! ¡Atrápenlos y mátenlo!- Ordeno y sus dos compinches salieron dando un rugido.
Lacayo 1: ¡Usar armadura y traer mascotas esta contra las reglas de la escuela!- Grito yendo hacia Kiva.
Lacayo 2: ¡Teñirse el pelo y usar una falda demasiado corta también esta en contra de las reglas de la escuela!- Grito yendo hacia Moka-sama.
Para humanos, esto habría sido un espectáculo intimidante para presenciar y hasta morirse del miedo. Sin embargo, para Kiva y Moka-sama, quienes enfrentaron a seres más aterradores y poderosos, esto apenas era una ligera brisa. Ambos ni se molestaron en poner una postura y cuando ambos lacayos del delegado de clase de Yukari llegaron a ellos...
*POW*
Ambos hombres lagartos fueron enviados a volar de repente por una sola patada que les dio Kiva y Moka-sama con una velocidad descomunal. Ambos lacayos terminaron colgados en las ramas de unos árboles cercanos y habían perdido los dientes por las patadas, pero el sabor de la tierra y zapato o bota de acero quedaría en sus bocas por un tiempo.
Yukari: (Ambos son uno de los monstruos legendarios, ¡Vampiros!)- Pensó exaltada al ver el poder y velocidad de ambos.
Tanto Kiva como Moka-sama bajaron sus piernas dominantes y fijaron sus miradas en el líder lagarto, quien ahora temblaba.
Delegado: De ninguna manera... Solo una patada... ¡Solo una patada y mis hombres fueron derrotados!- Exclamo atónito al ver a sus compañeros en las copas de los árboles.
Moka: Solo puedes intimidar a los débiles.- Dijo desde atrás del Delegado, quien se asusto sin voltear al reconocer quien era el que se encontraba a su espalda.- Son miserables basuras.
Wataru: Y la basura ir donde tiene que ir.- Dijo de la misma forma intimidante al lado de delegado dándole la espalda con los brazos cruzados.
Delegado: Ese poder...-Dijo mientras se alejaba un poco y se daba la vuelta.- ¡Esta en contra de las reglas de la escuela!
El ultimo hombre lagarto salto abriendo sus fauces yendo a atacar a Moka-sama, pero ella tranquilamente contra ataco.
Moka: Ya cierra la boca.- Ordeno mientras daba una patada a la boca del delegado, el cual rompió sus dientes con facilidad mientras lo enviaba a volar hacia arriba.
Kiva saco el silbato rojo del costado derecho de su cintura y lo llevo hacia Kivat.
Kivat: Muy bien.- Dijo animado mientras recibía el silbato.- ¡WAKE UP!
Kivat se separó del cinturón mientras Kiva cruzo sus brazos. El día se volvió noche y mostro la gran luna creciente en el cielo. Kiva dio un gran salto, sobrepasando rápidamente la altura del delegado mientras que Kivat rompía las cadenas de la bota metálica del guerrero mostrando su forma roja con alas de murciélago.
Kiva dio una vuelta en el aire antes de girarse y dar una patada voladora hacia el delegado. El guerrero choco contra el hombre lagarto y este choco en el suelo con gran dolor aun con el pie del rider en su abdomen mientras algo de tierra se levantó.
Kiva: Conoce tu lugar.- Murmuro con seriedad mirando fijamente al delegado, quien tenia una expresión de dolor, antes de poner más fuerza en su pisada y al mismo tiempo, la marca de Kiva apareció en el suelo donde ambos estaban quedando en el centro de la marca.
El delegado escupió una gran cantidad de saliva quedando inconsciente mientras que unas cadenas aparecieron y sellaron la bota de guerrero una vez más.
Yukari y Kurumo quedaron atónitas por el poder de Wataru. Se podía ver que era un monstruo de clase S con tal poder que tenía. Ambas pensaron que era increíble.
Moka: Impresionante. En verdad eres bueno peleando.- Dijo en un tono serio, pero con una sonrisa en su rostro.
Kurumu: ¡Maravilloso, lo que se esperaba de mi destinado!- Exclamo la súcubo con total alegría.
Yukari: ¿Por qué?- Pregunto atrayendo la atención de todos los que seguían despiertos.- Aunque hice esas cosas tan terribles a todos... ¿Por qué me han salvado-desu?
Al oír la pregunta, Kiva dio un largo suspiro.
Wataru: Ya lo había contestado antes ¿no?
Yukari: ¿Eh?
Wataru: Puede sonar meloso, pero queremos ser tus amigos.- Dijo con simples, pero la brujita se sorprendió.- Ya no estás sola, niña.
Yukari se sorprendió al oír esas palabras y se fijo en Moka-sama, quien solo miro hacia otro lado pareciendo un poco avergonzada de brazos cruzados. Incluso ella no es tan mala para dar un comentario que destruiría la felicidad y esperanza de una niña, por lo que decidió permanecer callada.
La brujita luego se giro a Kurumu, quien le dio una sonrisa, dando a entender que ella también seria su amiga. Finalmente, se giro a Kiva, quien asintió con calma mientras le levantaba un pulgar en alto.
Yukari comenzó a llorar de felicidad. Ella ya no estaría sola. Mientras tanto, Moka-sama camino hacia su compañero blindado.
Moka: ¿Mi rosario?- Pregunto alzando la mano.
Wataru: Por supuesto.- Asintió mientras sacaba el articulo y se inclinaba ligeramente mientras lo entregaba.- Cualquier cosa para mi señora.
Moka: Adulador.-Sonrió mientras colocaba el rosario en su cuello.
De esa forma, el sello se reestableció y ella volvió a su forma normal. La vampiro de cabello rosado fue cayendo hacia Kiva, quien la atrapo. Kivat dejo el cinturón, provocando que la armadura se desmontara y cambiara de nuevo en Wataru, quien volvió a su personalidad tímida y amable.
Wataru: ¿Estas bien, Moka-san?
Moka: Si, solo un poco cansada.- Respondió mientras se apoyaba en el mestizo y le sonreía, cuya sonrisa de la devolvió.
Una tierna escena se formo... pero se arruino cuando Kurumu se abalanzo desde atrás del castaño.
Kurumu: ¡Eres realmente increíble, Wataru!- Exclamo mientras frotaba sus pechos en la espalda de este, causando que la víctima se sonrojara a ya no poder.
Moka fulmino con la mirada a Kurumu y de inmediato aparto al chico de ella, pero ella no rindió y solo se abalanzo otra vez. Una pelea se llevo a cabo entre ambas chicas. Wataru solo suspiro mientras se alejaba, Jiro le recomendó que permaneciera lejos de este tipo de situaciones.
Yukari: Ano~- El castaño se giro y miro a la pequeña brujita.- ¿Me podrías decir que era esa armadura que traías puesta?
Kivat: Esa, pequeña niña, es la armadura de Kiva.- Contesto el murciélago mecánico en el lugar del castaño, pero de repente el murciélago sintió un escalofrió al ver la mirada de Yukari, los cuales brillaban. Le salió una gota de sudor mientras retrocedía lentamente. El conocía esa mirada... y le temía.- Oh no...
Yukari: ¡Kawaiiiii!- Chillo mientras abrazaba a Kivat, quien se vio apresado por los brazos de la niña, que tenia más fuerza de lo que aparentaba.- Kurenai-san, ¿Es tu mascota?
Wataru: El es mi compañero y gran amigo.- Respondió mientras reía ligeramente mientras que Kivat trataba de escapar de la prisión llamada "abrazo".
Yukari no se había tomado tiempo en prestarle atención a Kivat, por lo que no se dio cuenta de lo lindo que era. Pero ahora que lo sabe, y gracias a las palabras que le dijeron, se sintió libre de expresar como se sentía.
Wataru sonrió al ver la expresión de la brujita y llevo su mano hacia su cabeza para acariciarla ligeramente. Ella lo miro sorprendido y algo sonrojada
Wataru: Espero que nos llevemos bien, Yukari-chan.- Dijo con suavidad y Yukari se sorprendió un poco antes de dar una gran sonrisa de felicidad.
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-Unos días después-
Kurumu: Me he enterado de que Yukari-chan se ha portado mejor.- Dijo mientras ella y Moka llevaban unas cajas a su salón de clase. Ella recordó los nuevos rumores de ella que se escucharon.- Ella pidió disculpas a la clase por sus fechorías del pasado. Por el contrario, todo el mundo comenzó a pensar en cómo la habían tratado.
Eso era verdad. Yukari se disculpo a toda su clase al ver como había tratado a sus compañeros. Del mismo modo, todos empezaron a recordar cómo habían tratado a la pequeña brujita y se sintieron avergonzados consigo mismo. Ella solo era una niña y la agredían verbalmente en grupo. Se sentían tan tontos e infantiles al hacerle eso a alguien menor a ellos.
Tras eso, ellos también se disculparon con Yukari y comenzaron a tratarla mejor. Con eso, fueron viendo que ella es una buena niña y los ayuda de vez en cuando con problemas que tienen en sus tareas.
La brujita se sentía feliz de que ya no la rechazaron y que por fin tenia buena compañía.
Kurumu: Parece que de a poco las cosas están mejorando.
Moka: Me alegro.- Dijo con una sonrisa mientras que Kurumu abría la puerta de su salón y ambas ingresaban... solo para quedarse congeladas en su lugar.
Yukari: ¡Wataru-san! ¡Love-love desu!
Se podía ver a Yukari abrazando a Wataru, quien estaba entre sorprendido y avergonzado con la cara roja. Mientras tanto, ambas chicas miraron esto dejando caer las cajas que tenían en las manos.
Moka: ¿Yukari-chan?
Yukari: Ah.- Ella se giro y vio a Moka y Kurumu, quienes tenían la boca abierta al ver la escena. Cuando las vio, ella sonrió.- ¡Buenas tardes!
Kurumu: Yukari, ¿Qué estás haciendo?- Exigió mientras trataba de mantener la calma.
Yukari: Pues, mi clase esta justo al lado de la suya. ¡Así que he venido a pasar el rato aquí!
Moka: Pasar el rato...-Murmuro teniendo un mal presentimiento... y si que lo tenia.
Yukari: Esto es porque yo quiero mucho a Moka-san, ¡Pero también me he enamorado de Wataru-san!- Declaro sorprendiendo a los tres. Wataru sonrojado, Moka aturdida y a Kurumu con una vena saliendo de su cabeza. Mientras tanto, Yukari se sonrojo mientras apretaba más el abrazo hacia el castaño.- Cuando Wataru-san salto para protegerme, pude sentir una atmosfera madura. ¡Y quede totalmente encantada cuando se enfrento a esos rufianes en su gloriosa armadura!
Se podía ver que ella quería mucho al castaño ahora y no lo dejaba ir, pues la victima trataba de zafarse, pero no podía. Parece que la chica debió aprender algún hechizo que la mantenga tan unida a su persona. No encontraba otra explicación.
Yukari: En otras palabras, espero que el salte hacia a mi muchas veces más-desu.- Dijo con una sonrisa feliz y un pequeño sonrojo sin dejar de abrazar al mestizo.
Wataru: E-Etto... Yukari-chan. Nosotros no podemos hacer eso...
Kurumu: ¡Correcto! ¡Wataru es mió!- Exclamo mientras iba y sujetaba el brazo de Wataru, haciendo que Yukari abrazara el otro brazo mientras ambas empezaban una pelea de jalones donde Wataru es el premio.
Ambas se peleaban y decían que Wataru era de una de ellas. Por otra parte, Moka se quedo viendo esto congelada hasta que bajo su mirada con sus ojos ocultos en la sombra de sus flequillos mientras temblaba.
Moka: No puedes, Yukari-chan...-Murmuro atrayendo la atención de los tres y estos se sorprendieron de como ella salto alzando sus brazos en dirección al chico.- ¡Wataru-kun es mío!
Wataru: ¿¡Eh!? ¡M-Moka-san... espera...!
Moka: *Kappu...Chu~*.
Wataru: ¡AAAAAH! ¡Otra vez no~!- Su grito se escucho en toda la escuela, mientras tanto Kivat miraba desde una ventana la situación de su compañero.
Kivat: Bueno, al menos sabemos que Wataru no tendrá problemas en dejar dependencia.- Comento viendo todo con una pequeña sonrisa. Puede ser caótico, pero sentía que su amigo era feliz a pesar de todo.
Por otra parte, Moka-sama suspiro ante todas las locuras que hacia su otra yo y sus nuevas amigas desde el interior de la peli rosa, pero había una leve sonrisa en su rostro.
Ura-Moka: (Kurenai Wataru... Kiva...)- Pensó con gran interés, el guerrero se había ganado su atencion.
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-Castle Doran-
Jiro: Otoya, molesto bastardo. Parece que tu nieto logro despertar y adoptar tu habito de atraer mujeres. Has maldecido a tu propio nieto con tus genes.- Fue hablando mientras miraba la foto del hombre para luego sonreír.- Aunque en cierto caso, esto será divertido de ver.
Midori: Y que lo digas, no sabes cuanto espere para ver a Wataru-sama en este tipo de situación.- Dijo con felicidad, pues esto era mejor que cualquier telenovela.
Los tres guardianes de Wataru estaban hablando entre si dentro del [Castle Doran]. Habían sido informados por Kivat de lo sucedido. De como Wataru era atacado por la brujita al estar cerca de la vampira, por quien la brujita tenia sentimientos. Luego de como se enteraron de su situación y decidieron ayudarla para que finalmente la salvaran de tres estudiantes que terminaron en la enfermería por el castaño y la vampira.
Los tres se sentían orgullosos de como el chico estaba creciendo y como conseguía nuevos amigos. Sin embargo, se sorprendieron al saber que ahora la brujita tenia sentimientos por su amo. Bueno, es nieto de un gran playboy y su padre también era un imán de chicas. Parece que el encanto que heredo de ambos creo en el joven una naturaleza de atracción natural e inconsciente.
Rikki: En todo caso, Otoya de seguro que estaría orgulloso de él.- Hablo con neutralidad, pero con una sonrisa.- Lo bueno las chicas con la que tiene amistad son hermosas y buenas influencias para él.
Jiro: Yo objetaría con eso de buenas influencias. Una le chupa la sangre, otra lo ataca usando sus activos y ahora tiene a una niña apasionada. De seguro que su timidez podrá ser más controlada... pero no me quiero imaginar cómo terminará todo.
Midori: Relájate, esto le está haciendo bien a nuestro pequeño, además de que ahora se le nota más contento.
Jiro: Tu solo disfrutas de esta comedia romántica.
Midori: ¿Y quien dijo que no lo hacia?- Pregunto con unas palomitas en mano.- En todo caso, ¿Crees que las vaya a invitar a comer aquí como hizo con la niña vampiro?
Jiro: Eso depende de él.- Dijo mientras recordaba como cada vez que Wataru regresaba y cenaban, contaba lo bien que se la pasaba con sus amigas. Eso ya era raro, al ser tan tímido y miedoso, le era difícil hacer amigos. Solo tuvo unos pocos, pero eran los únicos que hacía en mucho tiempo. Sin embargo, ahora estaba haciendo más amigos y con mayor rapidez y eso lo hizo feliz.- Es bueno que este haciendo amigos tan activamente.
Riki: Tal vez debería hacerle un almuerzo para que comparta con sus amigos.
Jiro: Creo que deberías.- Dijo estando algo de acuerdo con la idea.
Midori: Por cierto, Jiro. ¿Pudiste arreglar la motocicleta para Wataru-sama?
Jiro: Lo hice... y le va a gustar.- Dijo con una sonrisa triunfal y orgullosa.
Riki: Conociendo a Kurenai, no creo que se resista mucho tiempo para presumir.- Comento y sus dos compañeros asintieron de acuerdo.
Los días para el [Fandiri] apenas comienzan.
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