xviii. || end of summer
🪷⠀18. ▍FIN DEL VERANO
⡽© finnickg1rl⠀⨳⠀
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El golpe había sido más fuerte e inesperado que el de la playa, sin duda viajar a través de esas perlas era rápido pero doloroso. Además, esta vez, ambos no habían caído en el duro suelo de Nueva York. Sino que en nada más ni nada menos que en el mismísimo Campamento Mestizo. Percy lo reconoció de inmediato al levantar la mirada y encontrarse con el árbol de Thalia.
Dorian se levantó rápidamente tratando de recuperarse de lo sucedido en menos de treinta segundos. Percy lo había besado, en verdad. Y no podía sentirse menos nervioso. Entonces, se aclaró la garganta y...
──E-eh... ¿Percy? ──El rubio se volteó rápidamente y se reincorporó para levantarse del suelo, aún mirando al pelinegro.
──¿¡Funcionó!? ──Exclamó ansioso, acercándose con cuidado hacía el otro chico.
──Si, si, si. ──Ambos sonríeron como nunca antes. Los ojos de Dorian brillaban de felicidad, y los de Percy también, pero por afecto. ──Y no se siente extraño.
──Tu voz es muy linda. ──Comentó Percy casi hipnotizado, como embobado.
──Gracias. ──Dorian suspiró alegre. ──Gracias por todo.
──De nada... ──Se formó un silencio para nada incómodo. Era reconfortante. Un abrazo al corazón para ambos, también se dieron uno de verdad. ──Vamos, aún esto no acaba.
──Claro. ──El caminar hacía el Campamento hizo que Dorian tuviera un golpe leve de realidad. ──No sé porque siento que los siguientes veranos serán más catastróficos...
Luke. El asunto de Castellan aún quedaba en su lista de pendientes. No sabía si advertirle a Percy, Dorian suponía que él ya lo sabía. Aunque si no, daba igual; lo más importante era encontrar a Annabeth, pues ella confíaba en Luke a ojos cerrados.
Al entrar al Campamento, Percy se sorprendió al ver que todos los mestizos se encontraban recibiendoles después de la misión. Dorian estaba acostumbrado a la pequeña celebración que hacían cada vez que alguien regresaba de su misión, pero sin duda, ser el héroe y recibir la gloria, era distinto.
Grover y Annabeth se lanzaron a los brazos de sus amigos, aliviados por el sentimiento de que ambos estuvieran a salvo. La hija de Atenea intercambió algunas palabras con Percy antes de llevárselo a quién sabe donde. Mientras que Grover, por otra parte, se quedó junto al pelinegro.
──¡Amigo! ¿Estás bien? Te ves bien. ──Dijo el sátiro sintiendo una vibra diferente de parte del semidios.
──Me siento bien. ──Respondió Dorian feliz.
──Se nota, además... ¡Hey, hey, hey! Un momento. ¿Dijiste algo...? ¡Dijiste algo! ¡Hablaste! ¡Es un milagro!
──Grover, tranquilo. ──Dorian rió un poco. Los que estaban cerca presenciaron la escena muy sorprendidos. ──¿Dónde están los demás?
Después de recibir las felicitaciones de Quirón, algunos campistas ──sobre todo de Afrodita.── y hasta inclusive del Señor. D, a su manera por supuesto. Se empeñó en buscar a Annabeth, aunque también estaba preocupado por Percy.
Rodeó la gran fogata y a los mestizos que se encontraban ahí. Recorrió el comedor preguntándole a los hijos de Atenea por la ubicación de Annabeth, hasta que por fin dio con ella.
──¡Te estaba buscando! ──Exclamaron ambos al mismo tiempo. Dorian le sonrió y la chica le abrazó como respuesta.
──Entonces... ──Annabeth se separó para mirarlo. ──¿Percy te besó? ──Y pudo jurar que Dorian estaba sonrojado a pesar de que ya estaba oscuro.
──Oh, si. Bueno... es un tema que aún tenemos pendiente. ──Contestó nervioso rascándose la nuca. ──Te estaba buscando porque tengo algo que decirte. Sobre quien robó el rayo. ──Lo último lo murmuró para que ningún chismoso se diera cuenta.
──¿Tienes pruebas de qué fue Clarisse? ──Preguntó Annabeth en voz baja.
──No, Annie. No fue Clarisse. El traidor es Luke. ──Respondió en tono serio. ──Antes de que me interrumpas, tengo pruebas.
──Las quiero escuchar. Lo que me estás diciendo es muy peligroso.
──Grover nos dijo que las zapatillas voladoras, las que Luke le entregó a Percy, se pusieron como locas al estar cerca del Tártaro. ¿No te parece extraño? ¿Qué justamente después de eso, hayan encontrado el rayo maestro en la mochila de Ares? ──Annabeth sintió como las piezas del rompecabezas se unían, pero no lo quería aceptar. ──Dime loco, pero tiene mucho más sentido que Clarisse siendo la ladrona.
──Pero... no entiendo. ¿Por... por qué?
──¿Por qué lo haría? ──Dorian la interrumpió. ──¿Acaso Hermes no les dio una pista cuándo hablaron con él? ──Annabeth quedó congelada, tratando de ordenar sus pensamientos. ──Escucha, algo es obvio aquí. Clarisse no traicionaria el Campamento que tanto ama, y Luke... tiene razones para hacerlo.
Los fuegos artificiales se hicieron presentes y el asombro de los mestizos al verlos en el cielo se hizo presente.
──Está con Luke. ──Dijo Annabeth después de un rato.
──¿Qué?
──Percy. Ahora está con Luke... ──Entonces, ambos supieron exactamente que tenían que hacer.
──Nuestros padres no son perfectos, pero se esfuerzan. Conocí a tu padre, pero él... ──Annabeth se encontraba ya escondida entre los árboles con la gorra de invisibilidad. Dorian también estaba allí, presenciado en como Luke mantenía una batalla de espadas contra Percy.
Aún no era momento de intervenir.
──Última oportunidad. ──Sentenció Luke teniendo acorrolado al rubio. Hasta tenerlo en el suelo completamente indefenso.
Annabeth actuó con prisa contra Luke para distraerlo por unos momentos, haciendo que el chico quedara totalmente confundido. Dorian, en un movimiento rápido, tomó a Percy para tratar de levantarlo y sacarlo de allí. Luke no se percató de ello, estaba confuso al ver a la hija de Atenea ahí.
──¿Annabeth?
──Escuché todo. ──La mirada de Luke pasó de ser desafiante a una avergonzada. Sus ojos pasaban de la chica, hacía Percy, de él hacía Dorian y así sucesivamente.
Y como un cobarde, huyó por el portal.
──Es gratificante saber que no me equivoqué. ──Dorian suspiró de alivio, aunque no era el momento.
En los siguientes días, Quirón sólo se propuso hacer de los últimos días de verano, algo tranquilo. Ya había sido mucha acción por una semana.
Dorian se encontraba junto a los hijos de Démeter, quienes estaban fabricando hogares para los pájaros del bosque. Se esmeraban bastante en cuidar la naturaleza, al igual que los sátiros y las ninfas. Por lo que a veces, pedían que los demás se ofrecieran para hacer actos de caridad en el medio ambiente. Lo malo es que la mayoría no los tomaban en serio, solo algunos hijos de Apolo, Iris, e Hypnos. Aunque estos últimos eran bastante flojos.
Percy avergonzado, tuvo que interrumpir el pequeño taller.
──Disculpen, necesito a Dorian por unos minutos. ──Katie Gardner asintió ante la petición de Percy, así que Dorian se disculpó y fue a dar un pequeño paseo con su amigo.
──¿Pasó algo? ──Preguntó sereno, como siempre.
──No. O bueno, si. ──Dorian lo miró confundido. ──A ver, tenemos muchas cosas pendientes. ¿Cierto?
──Ah, claro... ¿por dónde empezamos?
──Que te parece... ¿desde el túnel del amor? ──Cuestionó el rubio.
──Ahora que lo recuerdo, Afrodita me hizo entender que ella fue la culpable de que Ares dejara su escudo adrede. ──Comentó el pelinegro. ──No importa, continúa. ──Percy rió nervioso.
──Bueno, quería saber si... acaso tú también habías sentido... algo, en el bote. ──El hijo de Poseidón sabía que hablar de ello sería difícil. No se había imaginado que tanto.
──¿Algo? Si sentí "algo".
──¿Qué sentiste?
──Como si en mi estómago hubieran miles de mariposas revoloteando. Fue extraño. Algo parecido a cuando sientes ansiedad, como ahora. No sé si siento las mariposas o estoy muy ansioso, ¿me entiendes? ──Ambos empezaron a caminar hacía el bosque.
──Te entiendo. ──Respondió el rubio casi al instante. ──¿Sabes qué significa eso?
Dorian se detuvo un momento para asegurarse de que ningún árbol se convierta en una ninfa del bosque chismosa. Aunque era un poco difícil saberlo, se escondían muy bien.
──Percy... ──Dorian se colocó en frente del chico y le tomó una mano. ──Él que yo haya recuperado la voz, es gracias a ti. Pero también significa que... es amor verdadero. Y no lo entiendo del todo.
──Grover dijo que en el Lotus te dijeron que sin importar que la persona que te besara estuviese enamorada de ti o no, la maldición se rompería, ¿cierto? Así fue.
──Si, pero tú no estás enamorado de mí.
──Eso no quiere decir que no me gustes. Porque me gustas. Me gustas y mucho. ──Percy no sabía en qué momento pasó a confesar sus sentimientos hacía su amigo. Se apartó un poco de él y agachó su cabeza. ──Perdón. ──Para su sorpresa, Dorian lo terminó abrazando. Colocó su barbilla sobre el hombro del pelinegro y con gusto, aceptó el tierno gesto.
──¿Desde cuándo? ──Preguntó Dorian aún abrazado.
──Creo que... lo confirmé cuando te sentaste en la silla de Hefesto. ──Respondió seguro mientras se separaron. ──Cuando te conté sobre mis sueños.
──Oh, eso fue culpa de Hypnos... parte del plan de mi madre. ──Comentó el hijo de Hera un poco avergonzado. Rió levemente para calmar la tensión.
──Bueno, se lo agradezco. ──Bromeó el rubio. Al pasar los segundos, habló nuevamente. ──Creo que somos algo jóvenes para una relación.
──Ttanquilo. No voy aparecer en tu casa con un ramo de flores y pedirle a tu mamá permiso para casarme contigo. Mi madre puede ser la diosa del matrimonio, pero no tan así, ¿sabes? ──Contestó el pelinegro en tono divertido. Percy respondió con algunas risas.
──Por supuesto. Solo quería saber si estábamos en... ¿la misma página? Por así decirlo. ──Dorian asintió. ──Me alegro. Igual, no quiero perder lo que sea que tengamos...
──Somos... ¿amigos que se gustan? ──El pelinegro pareció vacilar ante su respuesta.
──No. Prefiero el término "futuros novios". ──Aclaró Percy.
──Cool. ──Dorian asintió sonriendo por la seguridad del rubio.
──Cool. ──Afirmó Percy.
El fin del verano ya se sentía a la vuelta de la esquina. La mayoría de los campistas ya habían empacado o incluso, ya marchado hacía sus casas. La otra minoría se quedaba a disfrutar del campamento todo el año restante, un ejemplo: Dorian.
Para su sorpresa, este sería el primer año sin su fiel amigo Grover y su mejor amiga, Annabeth. Y Percy le aseguraba que volvería antes de lo esperado, puesto a que solo quería verificar si su madre había vuelto. Tal vez era hora de salir a socializar más. Ya podía darse el lujo de disfrutar su voz, no lo volvería a ser callado.
──¡Okay! ¡Para todos los que no se queden todo el curso, váyanse! Tú, fuera. Haz las maletas. Te vas a casa. ──Exclamó el Señor. D con el fin de que todos los campistas se fueran de una vez.
──Que amoroso. ──Comentó Dorian acercándose a Percy con una sonrisa.
──¿Siempre hace eso?
──El año pasado tenía unas pistolas de agua. Creo que ahora está muy calmado. ──Percy rió un poco. ──Voy a despedirlos. ──Explicó el pelinegro caminando hacía el límite del valle con fin de decirle adiós a sus tres amigos.
Annabeth se encontraba acariciando el árbol de Thalia para cuando llegaron a la cima de la colina.
──¿Emocionada por ver a tu padre? ──Preguntó Dorian con tono alegre. Él estaría de lo más encantado si estuviera en su lugar.
──Quiere que conozca Nueva York, así que voy a fingir que nunca fui. ¿Y luego un lugar llamado Disney World? ──Respondió la chica alejándose del árbol para ver a sus amigos.
──¡Oh! Ese siempre ha sido mi sueño. Amo todas las películas de Disney, sobre todo La sirenita. Es mi favorita. ──Percy sonrió al notar la emoción de Dorian, aún sentía un poco de tristeza por no poder hacer mucho para sacarlo del Campamento. Más sabía bien que ahí dentro estaría a salvo.
──Disfruta. Sé una niña. ──Contestó el rubio hacía la hija de Atenea.
──Gracias, sesos de alga.
El momento se vio interrumpido por la voz de Grover. El sátiro estaba corriendo hacía ellos.
──¡Oigan! ¡Oigan!
──¿Ya te la dieron? ──Preguntó Dorian aún más feliz que antes. Grover asintió mostrando su licencia de buscador. ──Es hermosa...
──¡Oficialmente autorizado para iniciar la búsqueda de Pan! ──Mencionó el sátiro de lo más contento mientras recibía un abrazo del pelinegro.
──¿Dónde vas a empezar? ──Habló Annabeth.
──Parece que se ha comprobado, anotado y detallado en pie de página cada centímetro del mundo natural. Y luego se revisó de nuevo. La teoría del Consejo es que Pan siempre está en movimiento, y que es cuestión de tiempo. Pero nadie se ha molestado en revisar el mar.
──Conozco a alguien en la administración por si necesitas ayuda. ──Sugirió Percy.
──Yo te aviso.
Luego de mirarse entre los cuatro con nostalgia, el momento no podía ser más triste. Pero también, enternecedor.
──Oigan. Hagamos un pacto. Ahora. Pase lo que pase, nos reencontramos aquí el año que viene. Los cuatro. Aquí mismo. ¿Trato? ──No dijeron nada, solamente sonríeron y asintieron con un cálido abrazo grupal.
De alguna forma, Dorian sintió por fin que pertenecía. Encajaba en alguna parte. Después de mucho, se sentía completo.
Hasta el siguiente verano.
majito's note:
FIN DE LA PRIMERA TEMPORADA, estoy llorando de emoción. Es la primera vez que termino un fic, basta. 😭
¡Espero que les haya gustado! Tanto como a mi me gustó leer sus comentarios, ver sus reacciones y querer que actualizara. 💘
Claramente no es el fin, pero por ahora es un cierre.
Anyways, gracias por apoyar y amar a Dorian tanto como yo lo amo!
Nos vemos, hasta la segunda temporada ♡♡♡
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