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LA TRANSICIÓN DE
ÁNGEL A DEMONIO
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         Al día siguiente, Eunji había tomado la decisión de hacer pública su relación con Suho, pero no de una manera espectacular o llamativa. Optó por actuar con naturalidad, sin dramas ni grandes anuncios, pues Suho amable y románticamente se había ofrecido a acompañarla hasta su carpa luego de su adorable confesión y unos cuantos mimos y besos en los labios.

         Sin embargo, en un ambiente donde los rumores se propagan rápidamente, no pasó mucho tiempo antes de que algunos compañeros los vieran tomados de la mano o compartiendo miradas cómplices. Las miradas de sorpresa y curiosidad no tardaron en llegar. Eunji y Suho, aunque discretos, no pudieron evitar la especulación de los demás estudiantes.

         Al principio, algunos se sorprendieron, otros simplemente asintieron como si fuera algo que ya hubieran intuido, como Sooah y Jukyung. Pero, en general, la actitud de la pareja no cambió. Continuaron siendo ellos mismos, sin darle demasiada importancia a lo que los demás pensaran o dijeran.

         Eunji, en particular, se sentía satisfecha de haber dado ese paso. Aunque le costara mostrar sus sentimientos, se sintió aliviada al tener una relación honesta con Suho. La naturalidad con la que manejaron su relación hizo que todo fuera mucho más sencillo de lo que había imaginado.

         Hasta aquel miedo o rechazo que le tenía al amor y a formalizar parecía ser que había disminuido.

         —Hyunkyu, ¿te hiciste caca antes?—le cuestionó Taehoon a su amigo, mientras este estaba metía su mano en aquel juego que detectaba mentiras.

         —¿Bromeas? ¡No!—el sonido del juego le hizo saber al grupo que el chico de anteojos mentía.

        —¡Que mentiroso!—todo el grupo empezó a golpear al chico con martillos de platicos mientras carcajeaban. Suho y Eunji se encontraban sentados juntos en el círculo de amigos.

        —Yah, Sihyun—habló Hyunkyu mientras se dirigía a su compañera de clase—. ¿Te crees la más linda del universo?

        —¡No!—contestó la chica con la mano en el aparato. Al final, terminó gritando por el pequeño voltaje del juego revelando su mentira—Suho—todos los miembros voltearon hacia el susodicho—, ¿te gusta nuestra Eunji?

         —Si—todos esperaron la respuesta de la pequeña máquina. Soltaron gritos de sorpresa cuando la electricidad corrió por su mano—. Te juro que esta máquina miente—Suho rápidamente buscó la mirada de Eunji, temiendo de que se enojase con él—. Si me gustas. Y me gustas mucho MUCHO.

         Eunji terminó soltando una risita por lo tierno que se veía Suho.

         —Lo sé, Suho—lo calmó cuando vio el temor en los ojos del pelinegro.

         —¡Yah!—gritó Seojun asustando a Eunji—¡Está cosa claramente no miente!

         La pelinegra soltó un suspiro por lo bajo al saber las intenciones del azabache.

         —No sigas, Seojun—advirtió.

         —Tks—el motociclista se paró y se acercó hacia la pareja—. Este tonto—golpeó con fuerza la cabeza de Suho con el martillo de plástico, haciendo que todos jadearan sorprendidos—. ¡Ella no te merece!

         Seojun en un rápido movimiento cogió el cuerpo de Eunji para cargarla en sus hombros y escapar. Lamentablemente no llegó a dar dos pasos cuando las manos de Suho agarraron sus piernas y lo desequilibraron y lo hicieron caer al suelo con Eunji en brazos.

         —¡Yah!—exclamaron horrorizadas las mujeres del grupo al ver la forma tosca y dura con la que había caído Eunji.

         —¡Ah! ¡Siento que me partí la espalda!—grita Eunji desde el suelo mientras es ayudada por Jukyung.

         —¡Lo siento, lo siento!—se disculpa de inmediato Seojun a la vez que le daba un golpe en la nuca a Suho—Por tu culpa hice caer a Eunji—le susurró al pelinegro a su lado, quien también se disculpaba con su enamorada.

         —La llevaré a su carpa—dijo Suho en tanto que cogía a Eunji en brazos estilo princesa.

         —¡Waa! ¡Que romántico!—exclamó Sooah mientras zarandeaba el brazo de Taehoon por la emoción—¿Dónde está Soojin? Se está perdiendo esta gran escena—murmuró la chica, buscando con la mirada a la pelinegra que llevaba desaparecida después del desayuno, después de escuchar el rumor de la confirmación de la relación entre Suho y Eunji.

         Soojin se encontraba observando a Suho y Eunji desde la distancia, viendo cómo caminaban juntos, compartían risas y se mostraban afecto. Era la primera vez que sentía su corazón roto, una sensación nueva y dolorosa que nunca había experimentado antes.

         Ni siquiera el dolor de las golpizas de su padre dolía como aquella opresión en su pecho que experimentaba cada que miraba como Eunji miraba con ojos iluminados a aquel hombre que fue con anterioridad su amigo de la infancia.

         Por mucho tiempo, ella y Suho habían sido cercanos, compartiendo momentos y creando recuerdos juntos. Sin embargo, la imagen de Suho feliz junto a Eunji hizo que Soojin se diera cuenta de que las cosas habían cambiado drásticamente entre ellos. Había una conexión especial entre Suho y Eunji que parecía indescriptible y que dejaba a Soojin sintiéndose desplazada y llena de anhelos que no podía expresar.

         Odiaba el hecho de que Suho fuera el motivo de esa brillante sonrisa en el rostro de Eunji.

         Cada risa compartida, cada gesto cariñoso que presenciaba entre la pareja, era como un golpe directo a su corazón. Soojin luchaba por contener las lágrimas mientras trataba de aparentar una sonrisa que escondía el dolor interno.

         La amistad que había disfrutado con Suho ahora parecía un recuerdo lejano, ahora solo podía odiarlo por desear el lugar junto a la mujer que se había ganado su corazón.

         A pesar de todo, se mantenía firme en su decisión de no dejar que los demás notaran su dolor. Se esforzaba por sonreír, por interactuar con normalidad mientras luchaba internamente con la tristeza. Principio del formulario

         Se prometió a si misma que sería paciente para acabar con aquel romance para ella tener el final feliz que se merece.

         —Como es que no puedes ver que yo te amo más que él—murmuró Soojin entre susurros, mientras los veía desaparecer en la carpa.

         Suho se encontraba en medio de una constante lucha interna. Por un lado, Jukyung le atraía de una manera que no podía ignorar: su encanto, su carisma, la forma en que iluminaba una habitación con su presencia. Todo en ella era cautivador, un imán que lo atraía sin remedio.

         Sin embargo, cada vez que Eunji aparecía en su campo de visión, su mundo se tambaleaba. Había algo en ella que despertaba una serie de emociones desconocidas. Podía sentir su corazón acelerarse, sus mejillas enrojecerse y una sensación de calidez recorrer su cuerpo. Era un torbellino de sensaciones que no podía explicar.

         Eunji no encajaba en el molde de lo que él consideraba atractivo, pero la forma en que ella lo miraba, la determinación en sus ojos, la manera en que su risa resonaba en su mente incluso horas después de haberla escuchado... todo eso lo desconcertaba. Y, sobre todo, la forma en que su presencia alteraba su mundo tranquilo y ordenado.

        Intentaba racionalizarlo, negarlo incluso, diciéndose a sí mismo que eran solo sensaciones momentáneas. Pero su cuerpo no podía mentirle. Había una atracción que escapaba de su control, una conexión que no podía explicar.

         El dilema de los sentimientos, dividido entre dos personas, se convirtió en una constante contradicción en su interior. Jukyung representaba lo atractivo, lo evidente; mientras que Eunji desataba una serie de reacciones que él no lograba comprender del todo, pero que sentía profundamente en cada fibra de su ser.

         —No creo que sea adecuado—jadea el chico mientras siente los labios húmedos de su reciente enamorada sobre su cuello—. ¡Ah!—los gemidos escapan entre sus labios.

         —Qué raro—se burla la mujer a la vez que mete su mano entre los pantalones Suho para acariciar algo con ímpetu—, no veo que me detengas.

         Era cierto, tranquilamente podría separarla y el alejarse, pero no podía hacerlo. Era lo que siempre ocurría cuando tenía los labios de Eunji encima suyo. Había ocurrido desde el primer día.

         Él no podía jamás decirle no a Eunji.

         Llevar un dilema entre el corazón y el deseo es como caminar por un campo de minas emocionales y neblinosas hormonas.

         Por un lado, está Jukyung, con quien puede hablar sobre cualquier cosa, alguien que entiende sus pensamientos sin necesidad de palabras. La calma y estabilidad que le brinda son como un refugio seguro en medio de la tormenta.

         Sin embargo, está Eunji. Cada vez que está cerca de ella, siente que todo se enciende. Es una chispa, una conexión visceral que no puedo ignorar. Su presencia es como una melodía inesperada que se cuela en medio del silencio. La manera en que me hace sentir es abrumadora, en el mejor de los sentidos.

         Como ahora, que deja que disfrute de su cuerpo como ninguna otra chica se lo permitiría.

         Con Jukyung, las cosas son más predecibles, más seguras. Pero con Eunji, hay un misterio, una atracción que me empuja hacia lugares que nunca imagina explorar. Es un torbellino de emociones que parece no tener fin. ¿Es el deseo de lo desconocido o es algo más profundo que simplemente no puedo explicar?

         Hace tiempo Suho no podía contestar la pregunta que rondaba en su mente cada que veía a la castaña y a la pelinegra, juntas. ¿Cómo escoger entre la comodidad de lo conocido y la intensidad de lo incierto?

         Pero tiempo después obtuvo la respuesta de aquella pregunta, se arriesgaría por la intensidad de lo incierto junto a Eunji, porque ella le había mostrado el deseo carnal que por tanto había odiado por culpa de su padre.

         Suho creía que estaba bien. Guiarse por sus deseos y no por lo que le dictaba su corazón. Después de todo, ¿Qué de malo podría ocurrir?

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¡Annyeonghaseyo!
❝안녕하세요❞
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Entre deseos y amor, ¿Qué puede salir mal?

Aquí todos los personajes tendrán su desarrollo de personaje, ya sea de buena o mala manera gente

Eunji quería empezar bien con su relación, pero parece ser que Suho no va a colaborar mucho en esta

Y con este capítulo entramos al tercer y último acto ♡

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Este capítulo está dedicado a uGgaboa

Gracias por comentar y votar en mi historia, hermosa 💖

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