___Capítulo 51: Lo que motiva a vivir___
___Capítulo 51: Lo que motiva a vivir___
Klein: ¡AHHHH! No pensé que mi padre sería capaz de encerrarme.
Kirito: Ya tranquilo, Klein. No falta mucho para que la tortuga llegue.
Asuna: ¿Tortuga? — Pregunto sin entender a quien se refería su novio.
Klein: Jamás creí ver a mi padre tan perdido fue como si no fuera él — Comentó recordando a su padre.
Asuna: No tienes que preocuparte, tu padre lo más probable es que esté siendo manipulado por Mephisto.
Klein: ¿Enserio sería tan poderoso para poder controlar a mi padre? — Pregunto preocupado por su padre, aunque lo negara amaba a su padre, ya que era la única familia que tenia actualmente.
Kirito: Si, Mephisto, Nightmare y Dormammu son tres de los seres más poderosos de cada universo. Nos hemos enfrentado a dos de ellos uno con ayuda de los Ultimates y otro encerrándolo en un bucle eterno — Explico causando preocupación al pelirrojo.
Klein: ¿Y como venceremos a Mephisto? — Pregunto con esperanza de que los hechiceros tuvieran una solución. Ya que si hablaban de que era tan poderoso, enfrentarlo seria lo mas difícil que vayan hacer.
Asuna: Tal vez y con suerte no nos enfrentemos a él.
Yui: Papá, la tortuga ya casi llega según mis cálculos, llegará en 3 minutos.
Kirito: Eso es bueno, Yui — Felicito a la pequeña acariciando su cabeza.
Asuna: Aún quiero saber ¿a qué te refieres con tortuga? — Pregunto nuevamente viendo al pelinegro, este volteo a verla con una sonrisa de par en par.
Kirito: Ya lo sabrás.
Asuna se quedó confusa pero su respuesta llegó rápido, los guardias que cuidaban la zona, fueron derribados por una estela de luz celeste derribó a los guardias, Asuna y Klein vieron esto sorprendidos y confusos.
Rápidamente aquella estela de luz se detuvo frente a la celda, mostrando a cierto castaño que sonreía de brazos cruzados.
Asuna: ¡Hermano! — Dijo sorprendida de ver a su hermano mayor frente a ella.
Koichirou: Hola hermana, cuñadito, mi pequeña princesa y desconocido — Saludo a los héroes.
Klein: Eh... ¿Hola?
Asuna: ¡Kirito necesito una explicación! — Ordenó agitando al pelinegro de los hombros, este apenas y podía hablar debido a la sacudida que estaba teniendo.
Kirito: Sisisisi. Pero primero deja de agitarse.
La castaña se calmó y a su vez Koichirou los liberó de las celdas.
Kirito: Veraz, cuando nos secuestró Wenwu, le pedí a Yui que le mandara un mensaje. Ella controla la tecnohechiceria, por eso un mensaje por un dispositivo electrónico sería más fácil y menos rastreable. También por la distancia...
Klein: Oh, eso sí entiendo. Ya que el resto de los Agentes de Atlas están en Nueva York, el hermano de Asuna estaba más cerca.
Yui: Exacto y papá también pensó en su super velocidad. Por eso llegaría antes que el equipo.
Asuna: Ah, pero aun así no quiero que te involucres con asuntos de heroes, hermano — Expresó con preocupación viendo a su hermano.
Koichirou: No te preocupes, hermana. No me meteré en problemas por esto — Dijo con confianza.
Kirito: Bueno, debemos enfocarnos en lo principal detener a Wenwu antes que traiga a Mephisto para eso, debemos establecernos de magia y llamar al resto del equipo.
Asuna: Hermano ¿por que no les hablaste cuando venias para aca?
Koichirou: Eso hice, pero no llegaban las llamadas, por eso deje un mensaje.
Kirito: Con eso bastará. Primero debemos encontrar el libro de-
Koichirou desapareció para aparecer a los pocos segundos con el libro 'De las almas necronicas' Kirito y Asuna quedaron perplejos al ver a Koichirou con el libro en manos.
Koichirou: ¿Hablas de este libro? era el único que estaba custodiado — Dijo sin entender pero con una sonrisa de orgullo como si hubiera hecho algo bien.
—¡Se llevaron el libro! ¡Todos a las catacumbas!
Kirito y Asuna miraron el techo en el cual se empezaba a escuchar como varios pasos se acercaban a donde estaban. Los dos hechiceros voltearon a ver al mayor de los Yukki el cual estaba con cara de 'perdón'
Koichirou: Ehhh... ¿perdón?
Asuna: ¡Hay que huir! — Ordenó tomando el libro cerrándolo, empezando a recuperar su magia lentamente.
Kirito: ¡Que quede claro que esto no es mi culpa! — Dijo cargando a Yui.
Klein: ¡Hay un estacionamiento detrás de aquella puerta!
Koichirou se adelantó y abrió la puerta dejando entrar a los héroes, rápidamente se subieron a uno tomando las llaves, acto seguido empezaron una persecución con los ninjas que estaban intentando llegar a ellos subidos en motos y carros.
Klein: ¡Debemos deshacernos de ellos!
Asuna: Me encargo — Con un poco de su magia creo varias ilusiones.
Las cuales confundieron a los enemigos, dividiéndose persiguiendo entre las ilusiones. Pero para suerte de los héroes, la propia ilusión había hecho que la camioneta en la que iban desapareciera del ojo humano.
En el templo del Mandarín este estaba viendo a la lejanía un bosque de bambú con nostalgia.
—Escaparon.
Mandarín: No hay problema, todo acabará cuando mi esposa e hija vuelvan mi hijo se dará cuenta que no busco el mal, solo necesita tiempo.
En Nueva York, Lisbeth, Silica y Sinon estaban encima de un edificio viendo a los alrededores.
Seven: Tengo las grabaciones.
Sinon: Transmitelas — Frente a las heroínas se empezó a reproducir el video de la batalla que se había llevado anteriormente contra Escarabajo.
Lisbeth: No parece tener más de 18, ¿puede que sea una niña?
Silica: Hum, parecía que vivía al límite y estaba muy animada.
Sinon: Es como si no fuera mucho al exterior. ¿Será una antisocial como Kirito?
Lisbeth: No lo creo, mira su muñeca.
Al acercar la imagen se podía apreciar un brazalete, un brazalete que solo tenían las personas internadas en hospitales.
Silica: Apenas y se alcanza a ver que dice.
Sinon: Es nuestra mejor pista, Seven...
Seven: Ya me adelante, Sino. Entre a la base de datos de cada hospital cercano. Y me arrojo a esto.
La pantalla mostró una ficha médica. Ambas heroínas lentamente leyeron la ficha.
Silica: ¿Solo tiene 15 años?
Sinon: Yuuki Konno.
Ya con el nombre y la ubicación de la chica ambas chicas asintieron, poniéndose en marcha al hospital en el cual reside la pelimorada.
Las tres heroínas llegaron entrando sin sus trajes, usando ropa informal. Sinon se acercó educadamente a la recepcionista.
Sinon: Buenas tardes, vengo a visitar Yuuki Konno, está hospitalizada en este hospital. Somos amigas cercanas de ella, queremos darle una sorpresa.
—¡Oh que alegría ver amigas de la joven Yuuki! Ella no habla mucho de sus amigas — Expreso con alegría la recepcionista empezando a teclear en su computador — Se encuentra en la habitación 211.
Sinon: Muchas gracias.
Las heroínas llegaron a la habitación, antes de poder abrir la puerta se escucharon varios movimientos. Sinon pensando lo peor, llevando su mano a un arma escondida.
Yuuki: ¡Ahhhh! ¡Esta vez si la rege! ¡¿Qué pasa si me descubren?! Nononono, eso no puede ser posible ¿verdad? si no, no es posible. Ellas no saben nada de mí. ¡Si!
Del otro lado de la puerta las heroínas se vieron entre sí, para después abrir la puerta de golpe. Yuuki giró lentamente encontrándose con las agentes de Atlas.
Sinon: Estas muy animada, como para estar enferma ¿no lo crees Yuuki?
Yuuki se quedó sin palabras y de un solo parpadeo, regresó a la cama acostándose.
Yuuki: Eh, pe-pero si-si estoy enferma... — Finge dolor.
Las heroínas se acercaron a la camilla en donde estaba la chica, cruzándose de brazos.
Sinon: Ya no hace falta que finjas, Yuuki. Dinos ya la verdad.
Yuuki: Je... ¿cómo explicarlo? — Dijo tímidamente viendo de reojo la foto que reposaba en la mesa que estaba a su lado.
Silica: ¿Esa no es Asuna? — preguntó viendo la foto que estaba encima.
Yuuki: Si, hace unos meses. Ella junto con Kirito visitaron el hospital, pasaron por muchas recamaras y cuando llegó mi turno... — Los recuerdos de la chica llegaron de golpe.
Recordaba aquello con cariño. La joven recostada en la cama sin esperanzas de vivir. Hasta que Asuna entró por aquella puerta. Los ojos de Yuuki se abrieron de par en par al ver que la chica estaba tan animada y amable. Hablaron por unos minutos y las palabras de Asuna hicieron que Yuuki cambiará su perspectiva.
Yuuki: Te has enfrentado a enemigos fuertes, ¿por qué sigues luchando? si puedes perder... — Asuna pensó unos segundos para después con una sonrisa, tomó su mano y respondió.
Asuna: Porque aunque sean fuertes, si me rindo después de recibir un golpe no merezco que me llamen heroína.
Yuuki abrió los ojos de par en par, mientras sentía como un aire pasaba por su frente, soltando leves lágrimas que la castaña seco para después acariciar su mejilla con ternura.
Nuevamente en el presente, Yuuki sostenía aquella foto con cariño.
Yuuki: Ella me demostró que vivir es magnífico, aun cuando no hay motivo especial para ello — Una leve lágrima pasó por su mejilla hasta caer en aquella foto.
Sinon: "Kirito nos contó que, Asuna y él. Visitaron hospitales para visitar a los niños y secretamente curar enfermedades avanzadas. Eso no se sabe ante el ojo público solo lo sabemos nosotros tres. Pero si a ella la curo levemente Asuna... quiere decir que..."
Lisbeth: Venimos porque sabemos que te involucraste cuando, Escarabajo atacó. Portabas una espada, queremos saber dónde está.
Yuuki: Oh ¿Hablan de la espada de ZEK? — Pregunto.
Silica: ¿Así se llama 'La Espada de ZEK'?
Yuuki: Bueno asi me dijo que se llamaba antes de entregarme todo su conocimientos.
Sinon: Leafa, ¿qué dicen los archivos de Kirito?
Leafa: Lei el archivo que creó Seven de los Artefactos. Busque la espada de ZEK. Según lo que decía. En la espesa habitaba el espíritu de un ser ancestral primer portador de la espada, según la breve explicación que hay. Dice que 'Aquel que blande la espada tendrá mi poder. Así lo dicto yo, el espadachín ZEK' es todo lo que dice.
Lisbeth: Bueno podemos deducir que no es un artefacto poderoso ¿o si?
Leafa: Te equivocas, está registrado como un artefacto peligroso debido a que a su portador le otorga habilidades, conocimientos y aptitudes que solo el portador tenía. Kirito lo registró como 'Amenaza nivel Nightmare'
—¡¿NIGHTMARE?! — Preguntaron las heroínas sorprendidas.
Sinon: Tsk, esto cambia las cosas — Volteo a ver a la chica la cual estaba atenta de lo que decían las heroínas — Lo siento, Yuuki pero tendrás que darnos la espada. Es muy peligrosa como para que lo tengas.
Yuuki: Eh... si, se las daría sin problemas. Pero hay un pequeño, pequeñísimo gran problema — Dijo con nervios.
Silica: ¿Cual es?
La pelimorada mostró su muñeca, mostrando el símbolo de un corazón morado con una espada en medio, las heroínas confundidas no supieron qué significaba aquella marca, hasta que Yuuki habló.
Yuuki: ZEK, dijo nadie más excepto yo, podría blandir la espada. Según sus palabras 'Nadie más, que tú. Podrá blandir mi reliquia. Aquel que la blanda que no seas tu, morirá por miasma' no se si eso es malo.
Lisbeth: Es malo, significa que no podemos llevarnosla. Ah, no podemos hacer más ¿verdad Sinon?
Sinon: No — Respondió para después acercarse a Yuuki — Puedes conservarla, pero debes prometernos. Que no la usaras, para nada. Esto solo será temporal, hasta que Kirito y Asuna vengan y puedan extraerse el emblema.
Yuuki se entristeció ante ello, quería conservar aquel artefacto ya que con ella se sentía viva y su enfermedad desapareció.
Seven: ¡ALERTAAAAA!
Las heroínas quedan adoloridas ante el grito de la peliplateada para cambiar a preocupación al oír aquella alerta de Seven.
Sinon: ¡Reporte!
Seven: Recibí un mensaje de un tipo llamado Koichirou Yukki. Dice que Asuna, Yui y Kirito fueron secuestrados — Todas quedaron perplejas ante la revelación.
Lisbeth: ¡Eso no es posible!
Silica: ¡Kirito, Asuna y Yui no pudieron haber sido secuestrados!
Yuuki abrió los ojos sorprendida ante la noticia, ¿Asuna fue vencida?
Sinon: ¿Detalles?
Seven: No se mucho, nada mas dice que irán a una aldea perdida. Yui mandará coordenadas cuando recuperen energía. Pero es todo lo que se. Dicen que debemos prepararnos, según el mensaje, esto es una amenaza nivel eh ¿Mephisto?
Sinon: ¡Debemos irnos ya! — Expresó con preocupación y miedo en sus ojos — Hablamos de una amenaza incluso superior a la Nightmare ¡A todos los Agentes de Atlas! ¡Quiero que se alisten para la batalla!
Silica: Sinon...
Sinon: Perdonen, pero esto es urgente. Debemos marchar... — Volteo a ver a Yuuki — Por ahora es todo — La heroínas empezaron a marchar para ir rumbo a la torre Atlas.
Pero antes de poder salir, Yuuki se puso de pie rápidamente alcanzando a las chicas.
Yuuki: ¡Oigan!
Las chicas voltean a ver a Yuuki la cual con determinación exclamó:
Yuuki: ¡Iré con ustedes!
—¡¿EHHHH?! — Expresaron las heroínas al unísono sorprendidas de la valía de la pelimorada.
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