Capitulo XV "Revelación"

Luego de esa gran noche, nuestro grupo de amigos se retiró al edificio de Marck para poder descansar y recuperarse para continuar con su largo viaje. Al estar a tan solo 3 cuadras de llegar, Kipo sintió un extraño aroma que provenía de la misma dirección, uno el cual no reconocía, no era de humano, ni de un mut el cual ella reconociera lo que la altero y la puso en estado de alerta, lo que antes era una sonrisa en su rostro paso a ser una simple mueca, con los ojos fijos sobre la puerta del edificio que ya podía divisarse gracias al aumento felino Lobezna al notar esta reacción por parte de Kipo, tomo el mismo curso de acción mientras le preguntaba que pasaba, A lo que Kipo respondió.

– Algo o alguien está en el edificio.-

– ¿Segura Kipo?-

– ¡Si! Desde aquí puedo oler un extraño aroma que proviene de dentro y la puerta está rota, puede que Marck esté en peligro.-

Al terminar lo que tenía que decir Kipo muto sus piernas y brazos para lanzarse a gran velocidad dejando a sus amigos detrás, el miedo que sintió por ponerlos en peligro la movió automáticamente, no es que no confiara en ellos para poder defenderse, pero, aun así, no pudo dudar no sabiendo que los esperaba.

Pero con lo que ella no contaba era que Lobezna se esperaba una reacción similar en caso de que algo sorpresivo o extraño les pasara, por lo que uso el gancho de su brazal para enrollarlo al abdomen de Kipo y así tirar de él y evitar que se les escapara. Kipo trato de forcejear, pero Lobezna ya había enredado la cuerda con un poste y por más que tirara no se podría librar de esa, al darse cuenta de esto desistió dejándose arrastrar por sus amigos, y al tenerla de frente Lobezna le pregunto con una tonalidad seria como si estuviera enojada.

– Kipo, ¿Por qué te escapaste así?-

– Lo siento solo no quiero ponerlos en peligro, no con algo que es tan extraño.-

– Kipo tienes que confiar más en nosotros, podemos defendernos solos, así como lo hemos hecho antes, lo haremos ahora, solo somos frágiles, pero juntos somos invencibles, quiero que lo pienses antes de hacer algo como esto la próxima vez porque por más que trates no te dejaremos ir, somos tus amigos y siempre te ayudaremos ¡Ahora vamos a ver qué le ocurrió a Marck!-

Al terminar Kipo abrazo a Lobezna y acto seguido Benson y Davo la siguieron, para luego murmúrale al oído.

– Juntos por siempre.-

Y así permanecieron unos segundos, hasta que Lobezna la separo para recordarle que Marck aún estaba presente. Al retomar conciencia sobre ello, Kipo sumo a la mutación los ojos y las orejas, para poder tener una mejor visión en la noche y las orejas para poder escuchar en caso de escuchar algo sospechoso estando una vez dentro, al estar frente a la puerta, pudieron divisar el interior, y no les gusto lo que vieron, más que nada porque estaba completamente oscuro y poco había que se pudiera ver, pero Kipo si podía ver y perfectamente, a simple vista nada parecía haber ocurrido solo que las luces estaban apagadas, por lo que decidió entrar primera y encenderlas nuevamente para que todos pudieran ver y que no los toparan por sorpresa.

Una vez procedió a entrar tuvo mucho cuidado con no hacer ruido, no quería alertar a quienes o que estuviera dentro y escapara, así que sigilosamente gracias a sus patas de jaguar se desplazó hasta llegar a los interruptores devolviéndole la luz a todo el edificio.

En ese preciso ínstate pudo escuchar un ruido que provino justo del primer piso, esto la alerto así que pensado que sería Marck subió a toda velocidad, mientras ahora si con las luces encendidas sus amigos exploraban la planta baja y el taller.

Al subir al primer piso y llegar a la habitación de la cual había provenido el sonido se encontró con un sujeto vestido completamente de negro, y para su suerte de este sujeto provenía uno de esos armos que no lograba reconocer desde ya hace cuadras atrás, por lo que procedió con preguntar ¿Quién era y que hacia allí? El sujeto misterioso no le respondió, solo se dio media vuelta para poder verla y así abalanzarse sobre ella con 2 cuchillos en sus manos, Kipo para defenderse, de este inminente ataque, dio un salto hacia atrás para que no la alcanzara, pero no fue suficiente, el sujeto era demasiado rápido, por lo que la alcanzo con facilidad, lanzado su primer corte directo al estómago de Kipo, gracias a sus reflejos de jaguar ella, logro evitar que fuera algo letal y solo fue superficial, al ponerse nuevamente de pie noto que aquel sujeto peligroso se había esfumado y ahora sus amigos podrían también estar en peligro, por lo que bajo al garaje, pero siempre sin sacarse de la cabeza la pregunta de ¿Quién era ese sujeto? Y si sus amigos se encontrarían bien.

Una vez en el garaje, Kipo no solo se encontró con sus amigos, sino también con Marck quienes estaban todos amarrados de brazos y piernas al igual que amordazados y el sujeto de negro que lastimosamente no era 1 sino 6 de ellos. Pero algo era extraño de uno provenía un olor familiar, no de hace mucho tiempo sino reciente, este rastro era débil porque estaba siendo opacado por el de los otros 5 pero aun así logro distinguirlo y al momento de darse cuenta de quién era, escucho su voz.

– Nos vemos de nuevo Kipo. Dijo Adán mientras se retiraba la máscara de la cabeza.

Kipo retrocedió lentamente hasta que cayó sobre si misma al tropezarse con sus propios pies por shock que esto le género, mientras preguntaba ¿Por qué? Adán no le respondió a Kipo, solo permaneció en silencio, mientras ella repetía la misma pregunta cada vez sonando aún más triste y desilusionada, por la cruel verdad que se presentaba ante ella. Llegado a un punto en el que no aguanto más y Adán le ordeno a uno de sus hombres que noqueara a Kipo.

Pero Kipo no era ninguna tonta no se dejaría atrapar y subestimarla no fue una buena idea, cuando el individuo se acercó lo suficiente, Kipo de un salto lo alcanzo asestándole un golpe con todas sus fuerzas, mandándolo a volar contra la pared haciéndola pedazos, Adán suspiro para así poder decir.

– Resistirse en este momento no te llevará a nada Kipo, ríndete ahora, y vete con tus amigos, ustedes no son nuestro objetivo.-

– ¡¿Entonces quién es su objetivo?!-Pregunto Kipo furiosa mientras algunas lágrimas se deslizaban por sus mejillas.

Marck sonrió, para luego de una mordida sacarse la mordaza y decir.

– El objetivo de estos tipos soy yo Kipo, me quieren a mí.-

Al terminar de hablar uno de los sujetos de negro se acercó a Marck y le dio un puñetazo directo en la cara para así callarlo.

– No era necesario.- Dijo Marck con la nariz rota, mientras cubría con la sangre de la misma todo el piso y gran parte de su ropa.

Adán dio uno pasos frente a los demás y le dio una sola orden a todo su grupo.

– Capturen a la chica jaguar, yo iré a ver al herido.-

Todos sus subordinados a la ves contestaron.

– ¡Si señor!-

Y tan rápido como terminaron la frase, los 4 restantes mutaron sus brazos y piernas a jaguares, para pelear contra Kipo. Ahora todo le quedaba claro por qué no reconocía los aromas todos eran como ella, todos eran parte mut. Pero este no era el momento ni el lugar para pensar en ello, Kipo adoptó una postura de combate y se lanzó a por el primero de su izquierda, esta acción por parte de sus atacantes no la vieron venir por lo que no pudieron reaccionar a tiempo, llevándose así el primer golpe, que lo dejo fuera de juego, en su mente se repitió a sí misma, eran 4 quedan 3.

Ahora los restantes se encontraban parados frente a ella, hasta que el primero dio su primer golpe, pero Kipo sujeto su brazo derecho en el aire para poder lanzarlo en dirección contraria, haciendo que termine chocando contra La gran loba dejándolo también fuera de juego, en eso los otros 2 aprovecharon mientras Kipo lanzaba su compañero para poder atacarla con la guardia baja, cortándole con sus garras, pero lograron apenas alcanzar la pierna de Kipo ya que los ataques dirigidos a su cuerpo los logro bloquear, con el escudo del brazal al des mutar rápidamente su brazo, ahora que dejo ver su ultimo as tendría que ver cómo usarlo, ya no podría agarrar desprevenidos a estos 2 últimos agresores, por lo que se aventó a gran velocidad al más próximo a ella, utilizando el escudo como un muro tacleo a su oponente arrastrándolo varios metros y al alejarlo lo suficiente de su compañero, con su brazo de jaguar le asesto un golpe para alejarlo del escudo, luego volvió a acercarse a él, para golpearlo con el mismo con todas sus fuerzas directo en la cara, al igual como este lo había golpeado a Marck, dejándolo al igual que al resto fuera de acción, solo quedaba un oponente detrás de ella, y con este al ver que los demás no lograron nada y él tampoco, des muto sus extremidades sabiendo que en su propio juego no podría vencerla, opto por un combate de cuchillos, entonces Kipo se dio cuenta de quien la había atacado arriba estaba ahora frente a ella, con este tendría que tener mucho más cuidado, ya que fue el único que logro hacerle daño, pero al mismo tiempo la había atrapado desprevenida, ahora con la adrenalina del combate las cosas podrían ponerse a su favor.

Esta vez quien no dejo espacio para pensar fue aquel vestido de negro, realizando el mismo movimiento que antes en el primer piso, se abalanzo a gran velocidad sobre Kipo para ver si lograba asestarle al menos un golpe, pero Kipo al verlo anteriormente ese movimiento supo que, si retrocedía no lo lograría a tiempo, él era mucho más rápido, así que se las ingenio des muto su otro brazo mientras lo cubría con su escudo, para que así su oponente no viera lo que iba a hacer, y al hacerlo pudo hacer uso del gancho del otro brazal, al momento de bloquear el ataque de su adversario con el escudo apunto el gancho a la pared que se encontraba del lado izquierdo a ella, y al ver que se clavó en ella y tenía al tipo justo donde lo quería, separo ligeramente el escudo de los cuchillos, mientras se encontraba distraído, por el gancho y luego los golpeo con un ligero golpe para retirarlo de sus manos dejándolo así desarmado, acto seguido se separó de el con una patada directa al estómago, tomo distancia dejando parado a su oponente desorientado y adolorido llegando a la pared contraria de la cual había clavado el gancho, guardo el escudo para volver a mutar su brazo al del jaguar, cerro bien el puño lo levanto apuntado al rostro del agresor y presiono el botón para retraer el gancho llevando así el puño de Kipo a gran velocidad contra el rostro del sujeto, golpeándolo con gran fuerza hasta chocar finalmente contra la pared. Al sentir ver que ya no estaba consiente destrabo el gancho de la pared termino de contraerlo para guardarlo y preparase para pelear con Adán, pero al buscarlo a su alrededor no lo pudo encontrar ni a él ni a ninguno de sus subordinados.

Kipo no entendía ¿en qué momento?, ¿cómo era posible que se desvaneciera incluso su aroma? Ya nadie quedaba en la habitación, o al menos ningún enemigo, por lo que fue corriendo a soltar a sus amigos, pero al quitarle la mordaza a Benson este le dijo.

– Kipo, Adán se fue por la puerta del garaje mientras peleabas contra el ultimo, tienes que perseguirlo, yo me encargo de soltar a los demás, tú ve por él.-

Kipo sin pensarlo 2 veces salió corriendo por la puerta, para tratar de alcanzarlo, pero solo pudo distinguirlos a la distancia como se desvanecían en las sombras, sin dejar rastro. Ya no tenía ningún sentido seguirlos, por más que tratara no los alcanzaría a tiempo por lo que se dirigió de nuevo con sus amigos para ver en que condición se encontraban y poder hablar sobre estos acontecimientos, tan extraños, pero por sobre todo con quien quería hablar era con Marck, Kipo en este momento quería explicaciones de lo sucedido y de que era el grupo de Adán ya que estaba la posibilidad de que se encontraran con ellos nuevamente más adelante.

Al regresar con sus amigos, Kipo encaro a Marck y le hiso todas las preguntas que circularon por su mente, sin dar espacio entre una y otra para que el pudiera responder, siquiera una de ellas, Kipo se encontraba en un estado alterado, se encontraba aun con la adrenalina del combate, la ira de que lastimaran a sus amigos y la tristeza por lo de Adán, al no saber cómo procesar todas estas emociones solo lo las dejo salir, explotando en preguntas del ¿Por qué?

En un intento por calmarla, Lobezna se puso de pie, se paró frente a Kipo y le surtió una bofetada en la mejilla derecha. Kipo se colocó la mano sobre donde la había bofeteado, pero antes de que pueda si quiera quejarse, Lobezna le dijo.

– ¡Kipo tienes que calmarte, aun estas muy alterada por lo de recién!-

Kipo escucho las palabras de Lobezna, tomo aire, una gran bocanada, para luego exhalar profundamente, así repitió un par de veces, hasta que finalmente logró calmarse, y repetir las preguntas a Marck, pero esta vez una por una, espesando por ¿Quiénes eran los sujetos vestidos de negro?

– Esos tipos extraños, andaré sin rodeos, son un grupo armado de New York llamados jaguar negro, a ellos se les dan las misiones de extracción de recursos valiosos, de diversos lugares del país, y como lograste notar son parte mut al igual que tu Kipo, solo que ellos ahora van en contra de todos obedeciendo solo a quien esté a cargo actualmente de New York.-

– Okey, ahora estoy aún más confundida, como puede ser que sean parte mut si yo fui la primera no podrían ser mayores que yo, pero el ultimo contra el que pelee el de los cuchillos, el no parecía menor y eso me aterra.-

Kipo en ese momento hizo una pausa de la nada, quedándose totalmente quieta, hasta que Benson le pregunto.

– ¿Qué sucede Kipo?-

– Esto es malo chicos, recuerdan a la doctora Emilia, ella se transformó en un mega, sin haber nacido como tal, lo que significa que han logrado replicar su trabajo.-

– ¡Maldita sea, esto definitivamente no pude ser bueno! - exclamó Benson.

– Esto ahora puede ser mucho peor a como lo habíamos pensado chicos, pero no desesperen, podremos con ellos, solo, solo tenemos que traer a los humanos que se encuentra en peligro a las Vistas y luego pensaremos en cómo lidiar con estos nuevos problemas, sí.-

Si bien esta idea que planteaba Kipo no le gustaba a nadie, era lo más realista a realizar, no podían con todo a la vez, y las prioridades eran las personas que podrían estar ahora mismo en peligro, ni ella misma estaba de acuerdo con lo que planteaba, pero el momento de ser una niña ya se había acabado, ahora tendría que pensar con la mente clara por más que doliera.

Luego de pensar en ellos paso a la siguiente pregunta.

– ¿Por qué te buscan Marck? ¿Qué tienes de especial?-

– Oh vamos Kipo yo creo que esa respuesta la tenemos todos ¿no? - Marck hizo una breve pausa, esperando que alguien contestara, pero al notar que nadie lo hacía prosiguió.

– Chicos vamos es porque soy un genio, y por su puesto por el camuflaje óptico, si debe de ser más que nada por eso, pero, en fin, lo que a mí me gustaría seria saber cómo se enteraron de ello, ya que no le he contado de esto a nadie y bueno es invisible ¿cómo alguien la habría visto?, pero bueno esas son preguntas que ya resolveremos luego o no jajajajaja.-

– Marck no es gracioso, si sabían sobre la máquina, significa que tienen a alguien que nos observa, y tendrías que tener más cuidado-. Afirmó Kipo.

– A Kipo si he tomado todas las medidas necesarias, pero, aun así, créeme que estas cosas puedan ocurrir le dan emoción a la vida.-

– ¡No! Marck no es así, morir no es emocionante, es horrible y terrorífico, como puedes pensar así, la vida no es un juego Marck.-

– A Kipo, cuando uno pasa mucho tiempo encerrado y sabe demasiado, lo mejor es tomarte la vida como un paseo divertido, antes que tomarlo en desgracia, créeme sigue mis consejos y vivirás mejor.- Remato Marck mientras se retiraba de la conversación dirigiéndose a su computadora para terminar con algunos ajustes que le habían quedado.

Kipo seguía sin estar de acuerdo con la ideología de Marck, por lo que se retiró al exterior para pensar en cómo continuar con el viaje ahora que estos tipos estaban al asecho. Pero lo que más le preocupaba y ponía furiosa es el hecho de que a Marck no le importe su propia seguridad al tomarse todo a la ligera.

Kipo se quedó en las afueras vigilando desde el tejado de una casa de en frente, mientras sus amigos dormían, para así poder mantenerlos a salvo, hasta que el sol finalmente se asomó por detrás de las montañas, haciendo dar cuenta que ya era de mañana y era el momento de regresar para partir, pero no sin antes hablar una última vez con Marck.

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