Capitulo XII "El interrogatorio"

– Kipo es tu nombre ¿no?- Preguntó James con una tonalidad ligeramente más seria, por lo que esto preocupo un poco a Kipo y lo que la llevó a preguntar.

– Disculpe Jimmy, pero ¿estas preguntas qué finalidad tienen?-

James retomó su actitud de tipo alegre y le contestó

– No te preocupes Kipo esto es de rutina, ya sabemos lo básico sobre ti o al menos lo que te llevó a Denver.-

Ahora James se pone de pie mientras coloca sus brazos sobre el escritorio a los lados de la carpeta y prosigue, pero esta vez con esa tonalidad un tanto seria.

– Pero por otro lado apareces de la nada con un vehículo que nunca nadie antes había visto y para el colmo nunca nadie te vio salir de la ciudad, así que me gustaría que me contaras ¿qué pasó? ¿cómo una niña y su amiga desaparecen de la ciudad sin llamar la atención y aparecen con esa cosa?-

– Bueno oficial me gustaría responder a sus preguntas, pero tendrá que estar dispuesto a creerme y le juro que le diremos la verdad, aunque suene un poco alocada. -

El oficial suspiro, se sentó nuevamente y con un gesto con su mano le pidió a Kipo que continuará.

– Empezando desde el principio, al llegar aquí y quedar sorprendidos por lo que lograron nos dijeron que para conseguir paso teníamos que hablar con la asamblea la cual estaba ubicada en el capitolio, por supuesto no sabíamos el cómo llegar así que le pedimos si nos indicarían el camino. Tras llegar y hablar con ellos y por cierto es un lugar maravilloso, nos dijeron que si queríamos obtener un paso seguro por Denver para nosotros y los humanos que llegarán, teníamos que hacer algo por ellos y eso era encargarnos del mega halcón. -

James interrumpió a Kipo para decirle.

– Bien todo eso está según el informe lo que a mí me interesa saber es cómo lograron que el halcón se fuera y de dónde sacaron esa máquina y por qué no está en los registros.

– Okey a eso iba, después de que nos dieran esa misión y aceptarla, un Doctor nos detuvo nos entregó un papel con una dirección y nos pidió que fuéramos a una determinada hora, solo por curiosidad asistimos claro está. Al llegar a esa dirección un gran edificio pintado de forma colorida era nuestro destino, nos acercamos a la puerta y ese mismo señor nos abrió la puerta con un sistema electrónico.-

Nuevamente Kipo fue interrumpida, pero esta vez James se encontraba un poco alterado como si estuviera ansioso por saber quién era esta persona

– Cuál es el nombre de este enigmático Doctor Kipo?-

Kipo ahora se enfadó un poco porque ya era la segunda vez que era interrumpida y eso no era algo de su agrado, por ende, frunció el ceño y exclamó.

– Señor dejé de interrumpirme por favor todo se le contará a su tiempo.

James inhalo una buena cantidad de aire la mantuvo y exhalo dejándolo salir por completo, luego llevó el abanó a su boca y nuevamente le dio una buena probada, se quedó quieto por un segundo para dejar salir todo el humo era similar a una chimenea.

– Lo siento Kipo, lo que ocurre es que esto de por si no es algo normal y no queremos que una cosa que pueda amenazar la paz de todo Denver esté suelta, y encontrar a quien la creo podría ayudarnos a mantener esa cosa fuera de circulación.-

Ahora Kipo se preocupó pensando que había metido en problemas a Marck después de haberlos ayudado. Por lo que la llevó a preguntar antes de continuar con el relato y comprometerlo del todo.

– ¿Qué le ocurrirá al creador de la máquina James?-

– Nada solo tendrá una vigilancia adicional porque si esas cosas caen en las manos equivocadas cosas malas podrían ocurrir lo entiendes ¿verdad?-

Y antes de que pueda decir algo más, un oficial interrumpió la reunión abriendo la puerta y pidiéndole a James que saliera un momento, James se levantó de su asiento mientras preguntaba.

– ¿Qué ocurre ahora?-

– Un miembro de la asamblea quiere hablar contigo, con relación a este grupo de jóvenes.-

– De acuerdo dame un momento ya salgo.-

El oficial cerró la puerta, James al terminar de levantarse camino hacia la puerta y salió para atender a la petición de dicho sujeto. Ni bien salió Kipo suspiro de alivio recostandose sobre la silla como si de un muñeco se tratara después de todo se había salvado por poco y a nada de meter a su nuevo amigo en terribles problemas.

El oficial se llevó a James por el mismo camino que nuestro grupo de amigos había recorrido al entrar hasta llegar a la recepción, allí parado esperando junto a la puerta un sujeto vestido con una baja blanca, camisa roja con gráficos de palmeras y shorts, el oficial que había acompañado a James le señalo este extraño sujeto y le dijo.

– Jimmy él es quien quiere hablar contigo dijo que su nombre es Marck y solo eso fíjate que se le ofrece.-

Sin nada más que decir se retiró, James se aproximó a Marck le extendió la mano y le dijo.

– Marck un gusto yo soy James ¿Qué se le ofrece?

Marck tomó la mano de James para no ser descortés y mientras lo hacía pregunto.

– ¿Usted señor tiene a unos jóvenes, una de ellos se llama Kipo, viste una chaqueta de cuero y su piel es de un color lila un tanto particular?-

Ya con solo el nombre James sabía de quién se trataba pues era con quien estaba hablando hace unos momentos, por lo que procedió a responder con otra pregunta.

– ¿Y usted señor qué relación tiene con ellos si puedo yo saber?-

– Eso James es algo que no le incumbe en lo más mínimo, solo tiene que saber que hay cosas que es mejor no hacerlo.-

Dichas estas palabras de las cuales James no se esperaba para nada o no por parte de una persona vestida de esa manera tan ridícula.

Contestó apretándole la mano y diciéndole con un tono mucho más brusco del con el cual se había presentado haciendo saber que no estaba contento con lo que Marck le dijo.

– Señor solo quiero que sepa una cosa, por su contestación no lo meteré en prisión gracias a su posición, pero de ser un caso diferente créame que se arrepentiría de lo que ha dicho en este momento.-

Esta amenaza que James le propuso a Marck no le afectó para nada después de todo él había tratado con amenazas mucho peores que un oficial de mediana edad enojado. Por lo que reaccionó sujetando con aún más fuerza la mano de James venciendo la que este estaba aplicando, y al hacerlo sonrió se le acercó al oído para decirle con un murmuro.

– Señor usted no sabe con quién se está metiendo, en su lugar yo tendría cuidado con lo que dice.-

Al terminar de hablar se fue apartando de su oído lentamente al estar en su posición normal soltó lentamente al oficial mientras sonreía con los ojos entrecerrados con esa sonrisa enfermiza que lo caracterizaba, le dijo para rematar la conversación con un acento burlón.

– Puede traer a Kipo y sus amigos por favor Jimmy, muchas gracias.-

Sujeto la mejilla del oficial para luego darle 2 cachetadas suaves, Marck sabe perfectamente que es intocable mientras se mantenga en la asamblea, pero sabe al mismo tiempo cuales son los límites de una persona por lo que se abstuvo a seguir molestando dejándolo marchar.

James apartó la mano de Marck cerró la boca apretando bien los dientes para contener su ira e evitar darle una buena a Marck, se dio media vuelta retirándose de esa situación que le resultaba tan irritante para ir a por Kipo y compañía.

Al estar frente a la puerta de su oficina al tener toda esa rabia dentro se desquitó abriéndola de un portazo por el enojo que aun corría por su interior, nadie lograba sacar tanto de quicio a alguien cómo él lo conseguía Marck tenía un don para ello. Kipo al escuchar el ruido que género la puerta volteo al igual que sus amigos para ver que lo ocasión y al notar que fue James preguntó.

– ¿James que paso?-

– Kipo estan libres, pueden irse parece que tienen amigos de arriba, pero esto créeme no se quedará así llegaré al fondo de esto Kipo.-

Kipo aún no sabía que había pasado pero lo que haya sido no deja de muy buen humor al oficial que digamos, pero lo bueno es que ahora eran libres y podrían proseguir con su viaje, pero antes de salir por la puerta Lobezna detuvo a Kipo y le pidió que se agachara un poco para poder decirle algo.

– Kipo estamos libres, pero ¿no crees que olvidamos algo?-

Kipo se detuvo un momento y analizó lo que Lobezna le había dicho, después de considerarlo todo lo recordó ¡Cápsula!

– ¡Rayos!-

Grito Kipo mientras golpeaba con el puño cerrado la palma de su otra mano.

Este gesto llamó la atención de James por lo que pregunto.

– ¿Qué pasó Kipo?-

Kipo se puso firme como un soldado, al notar que James la escucho, pero en cierta manera quien no lo habría hecho por el grito que pego tendrías que ser sordo para no haberlo escuchado, pero, en fin. Con una voz temblorosa porque sabía que tendría que mentirle contestó.

– Nada oficial ya nos vamos.-

Y casi murmurando transformó sus brazos en jaguar para poder sujetar a todos sus amigos y decirles a sus amigos.

– Rápido vámonos antes de que empiece a sospechar aún mas de nosotros.-

A un paso acelerado se dirigieron rápidamente a la salida donde los estaría esperando quienes ellos supusieron que sería Marck y así fue al llegar a la entrada, junto a la puerta de cristal estaba parado a un costado reposando sobre la pared, nuestro grupo de amigos se acercó a él y le dieron las gracias por sacarlos de ahí, pero al mismo tiempo Kipo le pidió disculpas por no poder evitar que Cápsula fuera retenida por los oficiales.

En el rostro de Kipo se notaba el arrepentimiento y la culpa de haber perdido algo que era muy valioso para la única persona que les extendió una mano, pero por sobre todo por haberle fallado eso era lo que más le dolía, por supuesto Marck noto que algo la devoraba por dentro así que trato de calmarla, colocó su mano derecha sobre su hombro luego la mano izquierda la llevo a su mentón levantado su mirada para poder verla a los ojos y así decirle.

– Kipo Cápsula es mi más grande invento, pero es solo una máquina es reemplazable lo importante aquí es que ustedes se encuentren bien, y otra cosa no tienes que culparte por estas cosas no le has fallado ni a mí ni a nadie es más cumpliste con tu palabra y gracias a ti ahora ese mega ya no horrorizada Denver, así que tranquilízate todo estará bien.-

Al terminar Kipo largo unas lágrimas y lo abrazó con fuerza para poder decirle al en murmurios.

– Gracias.-

Así permaneció un rato, hasta que Marck lo sintió un tanto incómodo ya que varios en la habitación los miraban, y le pidió a Kipo que se separara que tenían que irse. Al lograr separarla se retiraron por la puerta principal para ir de nuevo al laboratorio, pero en eso que salieron Kipo le preguntó a Marck.

– Marck, Cápsula sigue dentro de la comisaría que haremos para recuperarla.-

Al terminar, aunque no le podían ver la cara al completo ya que estaban detrás de él se le podía notar una mueca que se le había formado al escuchar a Kipo, obviamente estaba sonriendo ya lo tenían bien en claro nuestros queridos amigos.

Marck metió su mano en un bolsillo trasero del pantalón, para de él retirar un control nuevo uno verde, un verde radiactivo, al tenerlo en la mano se lo levantó por sobre su cabeza y presiono el único botón que llevaba el control, todo esto sin detenerse ni en un solo momento.

Al hacerlo se escuchó un fuerte sonido que provenía detrás de ellos justo en dirección a la comisaría, lo que al mismo tiempo los llevó a voltear y a preguntarle a Marck.

– ¿Qué hiciste Marck?-

– Oh eso nada solo se activa el modo de recuperación de Cápsula, a partir de ahora se encenderá e irá directamente al laboratorio como ya te había dicho antes Kipo, Cápsula es mi mejor invento si no le hubiera puesto una forma de recuperarla en caso de que algo le pasara no sé qué clase de inventor seria, pero bueno sigamos, hay cosas que hacer y el tiempo apremia.

– Pero que pasara si la siguen, no te encontrarán.

– Con relación a eso tampoco hay de qué preocuparse Cápsula irá directo a las afueras donde perderá a todos quien la persigan y luego entrar por un sistema subterráneo antiguo de la ciudad que se dirige directo al taller del laboratorio, así que como puedes notar Kipo tengo todo esto bajo control y como te he dicho antes tranquilízate, ya no hay de qué preocuparse, la parte peligrosa ya pasó.

Está claro por más que se lo repita un millón y tuvieran su efecto en el momento al cabo de un rato entraría en duda nuevamente algo no le gustaba a Kipo de todo esto, pero, ahora no era el momento de ponerse a pensar sobre esto, tenían que irse de Denver a más tardar para mañana y proseguir con su viaje.

Ya de regreso en el laboratorio, Marck les pidió que se quedaran fuera unos momentos que tenía que arreglar unas cosas, antes de que pasaran, esperar unos momentos no les molestaba sino la forma en la que actuó Marck como si ocultara algo. Pero al fin y al cabo de una media hora Marck se aproximó por la puerta y les pidió que pasaran nuestro grupo de amigos ya se encontraban impacientes pues todo fue muy extraño.

Al pasar por la puerta principal, lo que deleitaron sus ojos los llenó de emoción, un cartel enorme que cruzaba la habitación con las palabras lo consiguieron amigos en el medio una gran mesa llena de platillos dulces junto a jarras llenas de jugos de distintos sabores, vasos con hilo para que les resulte aún más refrescante, Marck estaba parado aun lado de la mesa y les dijo emocionado.

– Chicos disfruten esta fiesta que he realizado para ustedes, se lo tiene totalmente merecida.-

Al terminar de hablar se hizo a un lado para darles paso libre a nuestros amigos y así él se retiró al taller, Kipo le preguntó si no quería hacerles compañía, pero Marck se negó afirmando que tenía cosas que hacer.

Lobezna y Benson sujetaron a Kipo y la llevaron junto a ellos a la mesa para que pudiera también disfrutar de lo que se habían ganado con esfuerzo.

Y así el tiempo pasó, comieron, bebieron y charlaron de todos los sucesos que habían vivido estos tiempos desde que iniciaron el viaje, esto le recordó a Kipo que por momentos como estos son los que la motivan a seguir, sus tan preciados amigos que ella desde hace tiempo mucho tiempo los consideraba familia.

Después de las anécdotas, charlas y risas habían quedado satisfechos, y al momento justo ya que Marck estaba esperándolos a un lado de la escalera, lo que dio a saber que sea en lo que sea que estuviera trabajando estaba completado. Desde ahí mismo les hizo una señal para que se acercaran a él, por lo que Kipo y compañía se levantaron y fueron junto a Marck. Al estar a pocos pasos de él, les pidió que se detuvieran para decirles una cosa.

– Chicos la fiesta que les preparé solo fue la primera de las cosas que tengo para ustedes ahora viene el plato principal, síganme por favor.-

Kipo y Lobezna entrecruzan miradas con intriga, que les habrá querido decir Marck paso este pensamiento por la cabeza de ambas, más aún había más para darles, entusiasmadas bajaron las escaleras junto a Marck, mientras se preguntaban que sería lo que Marck les tendría preparado. Pero esto ya lo sabrían solo tendrían que esperar un momento a llegar.

Ya una vez en el taller lo primero en notar Lobezna fue que Gran Loba no estaba, lo que cabio su humor de emocionada a furiosa en un instante a decir verdad esta es una cualidad que de verdad da miedo, y Kipo enseguida noto lo mismo que Lobezna por lo que muto sus brazos para sujetar la con fuerza, en ese momento Marck al ver a Lobezna tan enojada y furiosa sonrió con esa turbia sonrisa saco un control morado con tonalidades negras y se lo aventó a Lobezna, mientras le decía.

– Lobezna presiona el botón grande izquierdo.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top