Capitulo X "Ahuyentando a un halcón"
Retomando el capítulo anterior
Kipo y Lobezna se encontraban dentro de Cápsula, un vehículo especializado todo terreno, creado por Marck un inventor un tanto loco.
Dispuestas a completar la petición por parte del Gabinete se dirigen al territorio del halcón llamado Muerte Negra, la pregunta que se hizo Kipo al salir fue ¿Dónde diablos se encontraría dicha localización? Sorpresivamente se escuchó la voz de Marck que era emitida de la pared del Cápsula asustando así a nuestras heroínas, provocando que casi Lobezna pierda el control del vehículo, Lobezna le gritó
– ¡Marck, no hagas eso casi nos accidentamos! -
Marck se disculpó, pero había algo que olvidó decirles.
– Kipo en frente tuyo justo encima de tus pies podrás ver un panel que está pegado al techo.-
Kipo busca dicho panel y al verlo le contestó que ya lo había encontrado por lo que Marck continuo:
– Bien, ahora tendrás que sujetarlo de la parte inferior y bájalo con mucho cuidado, se puede romper si aplicas demasiada presión.-
Kipo nerviosa con mucha delicadeza toma el panel y lo desliza suavemente hacia abajo, al llevarlo a tope el panel se enciende iluminando un mapeado de la zona, ni bien Marck escuchó el sonido del instrumento le dio indicaciones a Kipo de cómo operarlo.
– Kipo ahora lo que tienes que colocar las coordenadas que te voy a dictar, para hacerlo en el costado del panel tienes un botón alargado casi del mismo largo que la pantalla, tendrás que presionarlo, eso te dará acceso a un teclado el cual saldrá de uno de tus apoya brazos, así que tendrás que retirarlos de ahí antes de que te hagas daño.
Kipo ve el botón del cual le hablo Marck, levanta ambos brazos y presiona el botón, del apoyabrazos izquierdo emergió el teclado el cual terminó suspendido sobre sus piernas. Con esto listo le pidió a Marck que empezará a dictarle las coordenadas, tras terminar de introducirlas en el mapa, presiona el botón Enter automáticamente en dicho panel, se traza una ruta de viaje y como destino marcaba una montaña, Mark le pidió a Kipo que para finalizar colocara el dedo índice sobre la pantalla y lo deslizara hacia arriba rápidamente, Kipo obedece coloca el dedo sobre la pantalla y lo desliza hacia arriba pero al hacerlo nada sucedió. Kipo le preguntó si había hecho algo mal pero Marck le respondió que no, solo tenia que esperar un momento y así en una esfera de cristal que Lobezna tenía frente al volante comenzaría a parpadear hasta cubrirse por completo de un color naranja tenue junto a un sendero de un color naranja mucho más intenso se hicieron presentes, comenzando a emitir un pitido cada vez que no lo seguían, antes de que alguien le dijera nada Marck explico:
– Esa esfera de cristal es la guía para el conductor, Lobezna tendrás que seguirla para que deje de pitar, al final los llevará a su destino.-
El camino marcado por la esfera era el más rápido para llegar a destino aunque eso no significaba que también el más seguro, sino todo lo contrario, el sendero lleno de baches, rocas, colinas empinadas, árboles derribados y para colmo una gran diversidad de muts salvajes y en extremos peligrosos, para su suerte el camuflaje les permitió pasar esa última cualidad con mucha tranquilidad.
No fue una buena experiencia para un aprendizaje, pero lo positivo es que Cápsula pudo surcar todos estos inconvenientes sin ningún problema, si algo se le atravesaba lo molía con sus pesados neumáticos, si una montaña era demasiado empinada los neumáticos se adherían a la superficie, si una criatura se acercaba lo suficiente se le aplicaba una descarga no letal para espantarla, todo esto sin dar a luz su presencia, realmente un transporte muy útil, pero donde realmente tendría que demostrar de lo que era capaz seria al llegar donde había anidado el halcón.
Ni bien llegaron a las coordenadas establecidas lo vieron bien a lo alto, en la punta de una montaña terriblemente inmensa casi desbordando lo absurdo, pero aun así allí estaba posado en su nido, descansando. Lobezna apretó los dientes
– Mira Kipo esto es una locura, no hay forma de que esta cosa llegue a la cima, no sin antes caer con nosotros dentro, será nuestro funeral.-
Kipo estaba tan preocupada como Lobezna lo estaba, pero aun así esto se tenía que hacer de una forma u otra, por lo que contestó:
– Lobezna sé que tienes tus dudas con respecto del plan, pero tendrás que confiar si no es en Marck o en Cápsula, confía en mí, sé que esto funcionara créeme.-
– Ahh Kipo no sé cómo lo haces pero siempre termino haciendo lo que quieres, creo que hoy no será la excepción.-
A modo de broma, con una voz un tanto engreída, los ojos entrecerrados y una sonrisa dijo Kipo:
– Quizás será porque soy muy convincente.-
Lobezna rio mientras le decía
– sí, puede que tengas razón Kipo.-
Ya con las dudas resueltas comenzaron a escalar la montaña con Capsula, gracias al gran poder adhesivo de sus neumáticos sumado a los 1499 caballos de fuerza que le otorgaba su sofisticado motor, pudo hacer de esa gran montaña un simple paseo.
Mientras más se aproximaban a la cima las cosas se ponían cada vez peor, el sendero natural de la misma montaña se volvía cada vez más angosto y para poder surcarlos tendrían que maniobrar, colocando así el neumático delantero izquierdo contra la pared de la montaña y acelerando lentamente colocaron a Cápsula en un ángulo de 45 grados permitiéndoles seguir, pero esto no sería el único obstáculo después de todo nunca lo es, al encontrarse a una altitud de 1000 metros el sendero ya estaba cubierto por una gruesa capa de nieve y debajo de esta una ligera capa de hielo, lo que provocaba que los neumáticos patinarán y lo que en un principio le resultó una ventaja ahora era una maldición, los neumáticos se adherían al hielo pero este era arrancado del suelo pegándose así al mismo neumático haciendo que cruzar desde ese momento se convierta en una misión imposible.
Lobezna detuvo su avance para preguntarle a Kipo que podrían hacer, pero Kipo no tendría la respuesta a su duda. Preocupadas porque ya no sabían qué hacer para lograr continuar su travesía entraron en pánico, estaban a una altitud ya muy elevada como para darse atrás y de la misma manera como para continuar, por suerte para ellas siempre hay una luz de esperanza que les brindara una solución. El comunicador de Cápsula se enciende nuevamente.
– Chicas veo que no están avanzando ¿ocurrió algo? –
Esa era la voz de Marck pues quien más tendría acceso a este canal después de todo. Kipo emocionada y con esperanzas le comenta su situación actual.
– Marck surgió esto, los neumáticos se adhieren al cristal provocando que patinen demasiado como para continuar o retroceder, estamos atrapadas y no sabemos qué hacer. Al concluir su explicación Marck les responde:
– No desesperen después de todo antes de que salieran creo haberles comentado que prepare a Capsula para todo tipo de climas y ese no es una excepción, lo que tienen que hacer es sencillo, Kipo a tu izquierda tienes un panel con gran gama de botones cada uno de estos está programado para adaptar a Cápsula a un clima distinto a la vez, los de clima frio son azules, los rojos para desiertos, celestes para agua, verdes para bosques o praderas y los marrones montañas, tendrás que presionar el de color azul que se encuentra alineado con el marrón, de esta manera se preparara para poder cruzar sin problemas-
Al terminar de explicar Kipo presiono dicho botón, Cápsula empezó a temblar de forma violenta aterrando así a Kipo y Lobezna haciéndoles pensar que caerían al vacío, pero por más que temblara no se movía de su posición estática.
Kipo y Lobezna no podían verlo, pero Cápsula estaba teniendo una transformación casi total. Ahora las 6 poderosas ruedas tenían forma de patas arácnidas y en sus extremos fuertes garras que se adherían a la superficie generando el agarre perfecto, tras terminar el tiempo de transformación Marck les preguntó ¿si se encontraban bien? ya que escuchó sus gritos de desesperación y terror, Lobezna furiosa contesta:
– Acaso estás loco Marck ¿es que quieres matarnos? -
Pero lo único que se escuchó por el comunicador fueron las carcajadas sin control de Marck al escuchar la voz enojada de Lobezna y por más que lo amenazará con matarlo él no paraba de reír, al lograr calmarse explicó que siempre que se encontrar dentro de Capsula nunca les pasaría nada, haciendo arrogancia a su intelecto les contó lo ocurrido.
– Lo que ustedes acaban de contemplar o creo que el término mejor usado para esta situación sería sufrir, fue el pase de neumáticos a patas de Cápsula estas en sus extremidades cuenta con unas grandes y poderosas garras que se aferran a cualquier superficie, en este caso rompió el hielo y se aferró a la roca de la misma montaña, así que será imposible e impensable que caigan, o al menos no por culpa del cambio de faces.-
Al terminar algo le hizo ruido a Kipo
– Como que al menos no por culpa del cambio de faces ¿Qué estas omitiendo? -
Preguntó un tanto curiosa, pero en lugar de recibir respuesta corta las comunicaciones. La cara de Kipo de violeta se tornó roja por el enojo ante la actitud tan inmadura de Marck por suerte este le duró poco, inhalo una buena cantidad de aire lo retuvo durante unos segundos lo exhalo y amablemente le pidió a Lobezna que continúe.
Lobezna retomó la marcha notando esta vez que los cambios modificaron mucho la conducción de Cápsula, el volante retomaba su funcionalidad normal con una ligera diferencia, al girarlo en una dirección todo el vehículo se movía sobre su propio eje logrando realizar un giro de 360 grados sin moverse de su posición, con relación a los pedales, el freno retrocedía el acelerador avanzaba y el embrague ya no estaba al igual que la palanca de cambio ambas desaparecieron, realmente esto no resultó un inconveniente un momento de práctica le bastó para poder seguir sin problemas.
A partir de este momento lo único que se podía interponer en su camino eran los pequeños desprendimientos que generaba Cápsula al aferrarse a las rocas que no estuvieran del todo firmes y los desprendimientos naturales que llegaban desde lo alto, pero con paciencia y absoluto cuidado en lo que hacía lograron ascender a una altitud de dos mil metros, ya para entonces podían ver con total claridad al halcón si se asomaban al vidrio frontal por suerte el camuflaje funcionaba de maravilla, estando así de cerca y que el mega no las detecte sin duda alguna algo maravilloso, pero aun esto no era suficiente tendrían que acercarse mucho más para colocarle el instrumento por ende continuaron escalando. Ya una vez alcanzados los dos mil quinientos metros de altitud el comunicador se volvió a encender, pero lo que escucharía a través de él no les gustaría en lo absoluto.
– Chicas, soy yo Marck tenemos un problema uno grande muy grande, según la computadora central de mi laboratorio los sistemas hidráulicos de Cápsula están congelados.-
Lobezna lo interrumpe para preguntarle
– ¿Qué quieres decir con eso Marck? -
Se mantuvo el silencio por unos momentos, nadie habló ni Marck ni nuestras amigas, pero tenían que saberlo
– Lo explicaré de una manera mucho más sencilla, si continúan avanzando con Cápsula ya no podrán bajar ¡No lograran regresar!-
Los rostros de nuestras amigas ahora solo expresan miedo, horror ante lo que sucederá a continuación y la opción que tengan que afrontar, pero no era el momento de perder la calma Kipo se recompone rápidamente.
– Marck escúchame con atención, quiero que seas más específico y me expliques porque no podremos regresar.-
– Kipo los hidráulicos de Cápsula fueron sometidos a temperaturas demasiado bajas por lo que se encuentran congelados, si siguen forzándolos se quebrarán y ustedes caerán, si quieren continuar tendrán que hacerlo a pie. -
– Pero Marck esa no puede ser la única opción tiene que haber otra manera, desde que nos conocimos y nos mostraste a Cápsula la has presumido como si fuera lo mejor que existe, tiene que tener una función que nos permita seguir.
– Solo hay 2 opciones llegados a este punto, detrás de ti Kipo hay un pequeño portaequipaje, dentro podrás encontrar 2 abrigos uno para ti y el otro para Lobezna, es probable que les quede grandes ya que los diseñe a mi medida, pero las mantendrá calientes en caso de que decidan seguir a pie, la otra opción que les queda es volver a colocar los neumáticos de Cápsula y saltar por la ladera de la montaña, al encontrarse en la altitud justa se abrirán los paracaídas de emergencia y así llegarán a tierra a salvo para poder replantear el plan, está en sus manos chicas ¿Que eligen? Siguen o abandonan?-
Lobezna y Kipo se miraron directo a los ojos, pero no tenían dudas todas las cartas estaban sobre la mesa solo tendría que elegir, pero cual, una de ellas las pondría en severo peligro mientras que la otra las retrasaría en gran medida, y tiempo no es algo que tengan en abundancia. Kipo lo pensó solo un momento y dio a saber su elección.
– Lobezna, tenemos que seguir eso es lo correcto.-
– ¿Estás segura de esto Kipo? Ni bien salgamos de Cápsula, el halcón nos podrá ver y seremos presa fácil.-
– Lo sé y lo entiendo, pero tenemos que seguir es demasiado importante y hay mucho en juego como para que nos echemos atrás ahora.-
Este curso de acción que estaban por tomar a Lobezna no le gustaba, pero esa era la decisión que había tomado su amiga y como tal la apoyaría.
– De acuerdo Kipo, iremos tras el halcón.-
Tras estas palabras en un acto impulsivo de sus propias emociones Kipo abrazo a Lobezna y al oído le dijo.
– Gracias por confiar siempre en mí.-
Mantuvieron el abrazo por unos momentos hasta que Lobezna aparto a Kipo pidiéndole que le pase su abrigo, Kipo se apartó dio media vuelta para así poder abrir el porta equipaje, en medio del mismo un botón rojo brillante tenia inscrito en el la palabra OPEN, por lo que presiono el botón así abriéndolo, metió su mano dentro y retiro ambos abrigos de color blanco resultándoles realmente convenientes para tratar de pasar desapercibidas de los ojos vigilantes del mega. Ya con los abrigos puestos y dispuestas a cumplir con su cometido abrieron la compuerta del techo así ya exponiendo al verdadero peligro, al verdadero reto.
Kipo y Lobezna se deslizaron por un costado de Cápsula, colocándose pegadas a la pared y sus brazales listos comenzaron a escalar la gran pendiente y el último tramo, con sus poderoso y afilados ganchos los clavaban en la pared para así ir trepando lentamente la ladera. Tras pasar media hora de subida los brazos de nuestras 2 amigas estaban agotados, la temperatura bajo cero y los fríos vientos no ayudaban, pero esto no las detendría, siguieron trepando y siguieron, sus manos y caras se congelaban lo que les provocaba un terrible e intenso dolor constante que no cesaba, pero aun así esto tampoco las hizo titubear nada las detendrían.
El tiempo pasó, pero finalmente llegaron al nido de muerte negra quien posaba tranquilamente sobre él. Ambas subieron al nido por la parte de atrás evitando ser vistas. Kipo le pidió a Lobezna que esperara un momento mientras ella colocaba el dispositivo, entró al nido con mucha cautela de no hacer ruido se fue acercando poco a poco hasta poder tocarlo.
Una nueva problemática se topó con Kipo al ya estar en posición, como trepar sin despertarlo, podría intentar subir usando sus plumas, pero sin duda esto lo despertaría, la otra opción era usar el gancho, si bien esto despertaría al mega la llevaría de una forma segura y rápida al cuello, permitiéndole dejar el dispositivo para luego huir a toda prisa. Siendo esa la opción más viable no quitándole lo peligroso, la llevó a cabo, apuntó su brazal al cuello del mega para luego disparar el gancho, éste a gran velocidad y casi sin ser desviado a pesar del viento fue directo a su objetivo clavándose así con fuerza en la carne del animal, ni bien sintió la punzada el halcón despertó enfurecido por el dolor comenzó a aletear para alzarse al vuelo.
Al notar esto Kipo trato de soltar el gancho tironeando de él, pero no lo logró a tiempo lo que la llevó a rastras junto al halcón, en poco tiempo el mega ya se encontraba en pleno vuelo junto a Kipo la cual ahora era presa del viento, lo único que pasó por su mente en ese momento era el de no soltarse ya que eso significaría su fin, por la altitud que había alcanzando ni transformarse en mega la salvaría o al menos no querría corroborar eso, así que presiono el botón del brazal para retraer el gacho y mínimo estar encima del halcón y colocar el dispositivo.
Mientras Kipo era arrastrada a los cielos Lobezna se encontraba paralizada, de un momento a otro su mejor amiga se había ido y ella estaba sola, sin saber qué hacer y presa del miedo, pero la fortuna le sonríe una vez más al escuchar la voz de Marck.
–Lobezna, Kipo alguien responda he escuchado un fuerte sonido y el rastreador del chip ahora se encuentra en movimiento a una altitud increíble, supongo que lo lograron daré inicio a la secuencia de encendido, solo denme un momento.-
–¡Marck espera! Soy yo Lobezna ¿por dónde me estás hablando?-
–Los trajes tienen comunicadores al igual que Capsula ¿dime que paso?-
–Kipo trató de subir al mega con su gancho, pero solo lo asustó y ahora se encuentra encima de él y no sé qué hacer. -
–Primero cálmate, segundo vuelve a Cápsula y desciende como lo planeamos y sigue a Kipo desde tierra tendría que estar configurada como nuevo objetivo y otra cosa, la vamos a recuperar así que tranquilízate nada malo le sucederá a Kipo.-
Lobezna se descongela y comienza a correr hacia el borde de la montaña para luego saltar de ella, mientras caía a gran velocidad disparo su gancho contra la pared para hacer de lastre y así ir descendiendo gradualmente su velocidad de caída hasta lograr detenerse justo frente a Cápsula, Lobezna soltó el gancho y lo retrajo para lograr recuperarlo, entró al vehículo lo puso en marcha introdujo la secuencia para volver a los neumáticos espero un momento, tomó aire y presiono el acelerador a fondo así saliendo disparada del sendero, cayendo directo así al vacío, esperando que los paracaídas se activen tal como Marck les había contado.
Ya estando a unos 500 metros del suelo los parecidas se activaron logrando un ligero descenso, ni bien llegó Marck volvió a comunicarse.
– Lobezna, parece que ya te encuentras en el suelo ahora sigue a Kipo.-
No recibió respuesta por parte de ella, pero al notar que su punto en el mapa se movía no la necesitaba. Ahora Marck cambió las comunicaciones para poder hablar con Kipo y así informarle de su plan.
– ¿Kipo me escuchas?-
– ¿Marck? Si te escucho, aunque me gustaría saber por dónde me estás hablando dejémoslo para luego dime que necesitas, estoy un poco ocupada en este momento.-
– Kipo ya tengo una idea general de lo que pasó, Lobezna me contó todo y parece que no se las está poniendo fácil, pero tranquila tengo un plan que resultara, pero es un poco alocado ¡¡jajajaja!!-
Marck al terminar comenzó a reír de manera enfermiza
- ¿Te encuentras bien?-
Pregunto Kipo un tanto preocupada
– Si, si descuida a veces pasa, trabajar con sustancias un tanto peligrosas no suele ser bueno, pero eso es historia para otro momento enfoquémonos en el presente, según la computadora te encuentras a una altitud de tres mil quinientos metros y antes de comunicarme con vos le pedí a Lobezna que te siga con Cápsula, pero desde tierra, lo que nos falta ahora es que coloques el chip ni bien figure en la computadora que está activo tendrás que saltar de él y confiar en mí.-
Escuchar de este plan no tranquilizo para nada a Kipo más bien la preocupo en mayor medida, lo que la llevó a decir
– Marck, no voy a saltar sería imposible que sobreviva a esta altura, sin duda alguna no lo hare.-
– Mira tendrás que hacerlo de una u otra manera el mega bajara, o al menos no hasta dejar de sentirse amenazado y créeme eso no ocurrirá al colocar el chip, así que tendrás que saltar quieras o no.
– Al menos puedes decirme porque quieres que salte sin ningún tipo de seguro, y no me respondas una tontería porque juro que me las pagaras.
– Espera, espera, aun no te he terminado de contarte todo, porque crees que te he hecho poner ese traje.
Kipo se preguntaba porque esa pregunta si ya se había respondido, pero al igual no resistió y en forma de pregunta respondió.
– ¿Por el frio?
Marck nuevamente rio de esa extraña manera que incomodaba tanto a Kipo.
– No, no, no Kipo no solo por eso, ese traje va tan bien con Capsula porque al igual que el vehículo se adapta de maravilla a los diversos problemas, cuando saltes del halcón se activarán unas membranas debajo de tus brazos, que te permitirán planear y así aterrizar sobre Capsula, y tendrá que ser si o si sobre ella si fallas te estrellaras contra el suelo y créeme no quieres hacer eso, no lo querrás en verdad.
Con todo claro ahora solo quedaba terminar de llevar a cabo el plan, Kipo coloco el chip en el cuello del mega halcón, se puso de pie apoyo la pierna derecha un poco por encima de donde se encontraba el gancho insertado para aplicar la mayor cantidad de fuerza posible y así liberarlo, al conseguirlo se asomó por un costado cerro los ojos y se aventó de un pequeño salto a la nada.
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