Capítulo III.


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El silencio reinaba en el pasillo, no se oían murmullos, no se oían pisadas o risas como ya era costumbre, ni siquiera se escuchaban las respiraciones de las dos personas que estaban ahí, tal parecía que ambos habían dejado de respirar en el mismo instante en el que habían llegado esperando a que el otro hablara. Elin miraba a Remus con curiosidad, sus mejillas seguían sonrojadas y sentía que si seguían mirándose sin decir nada estallaría por olvidar cómo se respiraba correctamente; por otro lado, Remus miraba cierta cantidad de segundos a Elin para después desviar su mirada nervioso, no entendía cómo las palabras que había practicado con Sirius ahora ya no las recordaba, era un misterio para él tanto como la chica que estaba frente al castaño.

Elin dio una buena bocanada de aire tomando valor para ser la primera en hablar, pero antes de que siquiera pudiera pensar en qué diría Remus se le adelantó.

—Q-quería disculparme —Remus carraspeó incomodo tras haber tartamudeado—. No fue correcto correr tras haberte tirado, yo corrí porque... —las palabras se quedaron atascadas en su garganta tras mirar fijamente a Elin, el solo mirar aquellos ojos avellanas que en ocasiones lograban asemejarse al oro hicieron que Remus no pudiera decir la verdad, por unos segundos escuchó la risa de la chica dirigida hacia él tras confesar aquellos sentimientos que tenía hacia ella, tuvo miedo de ser rechazado y mintió—. No soporto ver sangre —Elin parpadeó varias veces y recordó que ella se había raspado las rodillas y las manos por lo que Remus tuvo contacto con su sangre cuando le ayudo a levantarse.

—Oh, por Helga. Tienes hemofobia, yo creí que... —Elin se detuvo de golpe tras darse cuenta que estuvo a punto de decir "Creí que me odiabas"—. Olvídalo, espero que no te hubiera hecho sentir mal ni nada por el estilo —esta vez la chica le miró preocupada provocando que el corazón de Remus diera un vuelco no solo por la mirada de Elin, sino por la culpa que comenzó a sentir, ella se estaba preocupando por él por una mentira, pero si decía la verdad temía por la reacción que ella tuviera.

—No, no me hiciste sentir mal. Solo necesitaba un respiro.

—Lo entiendo —la sonrisa de Elin provocó que Remus también sonriera ligeramente, la atmósfera a su alrededor había cambiado, ya no era incomoda esta comenzaba a ser reconfortante y tranquilizadora para ambos, al menos hasta que escucharon las voces de otras personas y recordaron que se encontraban en medio del pasillo, ellos dos, solos. Tanto Elin como Remus sintieron sus mejillas arder y se alejaron considerablemente el uno del otro.

—Es tarde, la cena ha terminado. Siento haber hecho que perdieras la cena.

—No ha sido nada, no tenía hambre de igual manera —sus miradas se encontraron de nuevo hasta que sin notarlo los estudiantes comenzaron a rodearlos y pasando entre ellos haciendo que fueran separados y por la gran cantidad de alumnos fueron jalados en direcciones distintas, Elin brincaba y se paraba de puntas intentando ver a Remus, mientras que él siendo considerablemente más alto que la mayoría solo lograba ver la cabellera de la chica—. ¡Soy, Elin! —el grito de la castaña llegó a los oídos de Remus, el cual sonrió al notar que ninguno se había presentado correctamente—. ¡Elin Olsson! ¡Ouch es fue mi pie! —Remus rió tras escuchar esto último.

—¡Remus Lupin! —gritó de regreso Remus esperando ser escuchado, Elin le escuchó, fuerte y claro sintiendo la emoción recorrer todo su cuerpo mientras sonreía tontamente al igual que el de ojos chocolates, los dos sonreían como si les hubieran dado la mejor noticia del mundo y así fue como ambos se presentaron formalmente a pesar de ya saber el nombre del otro con anterioridad.


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Remus no había ni tocado la manija de la puerta de su habitación cuando la puerta fue abierta y él fue jalado hacia el interior de la habitación, dentro de esta se encontraban sus tres amigos, Peter estaba sentado en su cama mientras James estaba junto a Sirius frente a Remus los dos tenían una sonrisa en el rostro y tal parecía que aguantaban las ganas de sonreír.

—¿Cómo te ha ido? ¿Le has dicho?

—¿Te ha besado? ¿Tú la besaste? —Remus se sentía algo cohibido por las preguntas de sus amigos, pero este sentimiento se quedaba a un lado ya que era gracioso ver a Sirius y a James desesperados por saber lo que había ocurrido como si de unas vecinas chismosas se tratara.

—Bien. No. No. No —respondió todas las preguntas mientras deshacía el nudo de su corbata y se acercaba a su cama, estaba algo cansado después un día lleno de emociones, pero aquello poco les importaba a sus amigos ellos no esperarían al día de mañana para saber lo que había pasado.

—¿¡No!? ¿No le has dicho? —Remus negó antes de suspirar y dejarse caer en su cama viendo el techo de esta.

—Mentí. Entre en pánico cuando iba a decirle y simplemente le dije que había huido porque no soporto ver la sangre —murmuró lo último mientras pensaba en las miles de situaciones que hubieran ocurrido si hubiera dicho la verdad.

—Por Merlín. ¿Acaso no entendiste mi plan? Te disculpabas, la invitabas a salir, se hacían novios y yo sería el padrino de su boda. No era tan difícil entenderlo, has arruinado mi plan y mi sueño de ser padrino en una boda —se quejó Sirius exageradamente mientras se dejaba caer en el suelo.

—Espera, ¿Tú el padrino? Creí haberte ganado en piedra, papel o tijera. Se supone que yo seré el padrino —se quejó James y de esta manera empezó una pelea entre ambos chicos sobre quién sería el padrino de la boda de Remus. Mientras ellos discutían Remus se hizo el sordo y solo pensó en lo linda que era la sonrisa de Elin, ella le había sonreído, después de meses pensando en cómo sería que ella le dedicara al menos una simple mirada y ahora no solo había recibido una mirada de parte de la chica, sino que le había hablado y le había sonreído. Con estos pensamientos y la pelea de fondo Remus cayó profundamente dormido, sin saber que Elin también había estado pensando en él hasta caer dormida.





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¿Alguna notó la hermosa portada que tiene la historia? Me ha encantado, esta tiene por mucho lo que me imaginaba desde un inicio para la portada y los colores son simplemente hermosos.



Pelirroja W

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