Kings of leon - Sex on fire. 🔥

Quédate donde estás
No hagas ni un ruido
Sé que están observando
Toda la conmoción
El juego de niños
Tiene a la gente hablando
Tu sexo está que arde

『𝓚𝔂𝓸𝓳𝓾𝓻𝓸 𝓡𝓮𝓷𝓰𝓸𝓴𝓾.』
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Era el aniversario de su boda y (T/N) estaba preparada para el regalo de su marido, ya tenían un buen tiempo que el no la toca y su autoestima estaba al aborde del precipicio, ella deseaba desenfrenadamente que sus cuerpos fueran uno solo.

(T/N) portaba únicamente una camisa de su marido de esas que le quedaban sumamente grande. Ella se  encontraba recostada en la cama con una paleta chupandola de manera provocativa, esperando a que llegara su marido.

—He llegado a casa querida! —resuena en la casa de manera enérgica

Al no recibir respuesta Kyoujuro se va directo a su habitación

—¡Mi amado! Te he estado esperando. — se levanta de la cama y se acerca a su marido con su objetivo en claro. "excitarlo"

—¿Pe.. Pero que haces amor? — pregunta Kyojuro sonrojado al ver como su querida esposa empieza a chupar la peleta de manera lasciva

—Señor, usted parece sumamente estresado ¿Porque no me deja  complacerlo hoy? — Kyoujurou sabía perfectamente que su esposa era muy extrovertida ala hora del sexo —¿Quiere una chupadita joven? Se la daré gratis señor, usted parece necesitar una mamada gratis. —

—¡Vaya! ¡Pero que buen servicio! — kyojuro ríe por el comentario de su esposa.

(T/N) lo besa dulcemente en los labios para después ir bajando lentamente, hasta quedar en cuclillas, ya estando ahí le hecha una última mirada al de ojos dorados y le sonríe tiernamente, como si ella no fuera la ninfómana que solía ser. Ella con suma delicadeza empieza a desabrochar aquel pantalón que cada vez con su roce de sus delicadas manos aquella erección iba creciendo, después de haber bajado aquel cierre, baja sus pantalones con ansias queriendo complacer a su marido, cuando por fin lo bajó hasta que quedara por los tobillos, sale aquel pene grande. (T/N) como toda una experta toma entre sus pequeñas manos el falo introduciendo el pene hasta donde su garganta aguantara.

Kyoujurou disfrutaba los tratos que recibía por parte de su esposa, tanto que gemia de puro placer, ambos se deseaban con la intensidad de mil soles y hoy iban a recompensar el tiempo que no pudieron saciar sus impulsos carnales.

Kyojuro estaba al borde de el éxtasis, que por mero impulso jalo a (T/N) para tomarla de los glúteos y alzar su diminuto cuerpo y llevarla hasta la cama para subirse encima de ella.

(T/N) metida en el papel de sumisa se deja atacar por el desenfrenado deseo que había provocado.

Kyoujurou de manera audaz se quita el pantalón y de una sola estocada entra en su esposa provocando un gran gemido por parte de ella. —¿Me dejas venirme adentro linda ? — pregunta de manera amable como todo un caballero con ojos de súplica y una tierna sonrisa.

— Si me lo pides de esa manera no hay como negarme. —

Y así Kyoujurou  prosigue con su vaivén hasta que dejo salir todo su semen dentro de (T/N) sintiendo un gran alivio.

—No pares mi amor. — chilla (T/N)

—En ningún momento dije que quería parar. — dice el

Hoy sería una noche larga y un gran aniversario para aquel matrimonio.

La oscuridad del callejón

El comienzo del día
La felación mientras estoy conduciendo
Estoy conduciendo
Los labios suaves están abiertos
Los nudillos están pálidos
Parece como si te estuvieras muriendo
Te estuvieras muriendo

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『𝓢𝓪𝓷𝓮𝓶𝓲 𝓢𝓱𝓲𝓷𝓪𝔃𝓾𝓰𝓪𝔀𝓪.』
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Se encontraba en aquel salón después de dar su respectiva clase, el estaba  revisando y analizando aquellos exámenes que previamente hizo en la semana a sus alumnos. Había terminado la jornada laboral y se dispuso a adelantar todo el trabajo que tenía, todo iba bien hasta que...

—Profesor Shinazugawa. — el albino voltea reconociendo al instante aquella aguda voz, bien sabía que era aquella chiquilla de apenas 19 años, su chiquilla.

—Que necesitas (T/A) — dijo sin mirarle

—¿Porque anda tan enojado guapo? ¿Acaso hice algo que le molestara?—

—Aquí no (T/N) y lo sabes. — sanemi seguia corrigiendo los exámenes.

—Oh vamos, no seas así guapo. —
(T/N) se acerca a él lentamente hasta quedar frente a su escritorio. Ella prosiguió a desabotonar los botones de su camisa dejando ver aquel pronunciado pecho que tanto le gustaba a Sanemi.

—No me provoques (T/N) — A pesar de que (T/N) y sanemi eran pareja y ya llevaban buen tiempo juntos, el siempre se tensaba y se ponía nervioso cuando (T/N) era así de atrevida.

—Mmh.. sabes... Como que tengo ganas de algo. — dijo ella pensativa

—¿Como de que? — preguntó el

—Como de abrirte las piernas papi. — dijo ella tiernamente

—Ya vas empezar con tus leperadas. (T/N) respetate y respetame a mi. — dijo sanemi sumamente sonrojado

—¡No quiero! — y rápidamente fue y cerró las ventanas y puerta del salón.

—¡Tocame ahora! —Demandó

Sanemi se levantó con una sonrisa ladina, se acercó a ella y la toma bruzamente de las caderas para atacar sus labios de forma violenta.

—Te dije que no me provocaras. —

(T/N) correspondiendo aquel violento beso, bajo una de sus manos hasta el genital de su pareja y le dio pequeñas caricias.

—Yo se que tanto como yo igual tu lo deceas. — dijo (T/N)

(T/N) lo tomo del brazo y lo jalo hacia el escritorio, ella se subió arriba de este levantando sus piernas pricionando  las caderas de sanemi, haciendo que sus sexos quedarán totalmente expuestos a el roce de sus cuerpos.

(T/N) poseía el uniforme de la preparatoria, ella siempre usaba la falda sumamente corta solo para seducir a sanemi con sus grandes muslos.

—Entonces si así lo quieres, yo te complaceré. — dijo ronco sanemi atacando sus labios mientras que una de sus manos traviesas iba escabullendose directo de bajo su falda para llegar a la ropa interior de (T/N) hasta llegar a su clitoris para comenzar a masajearlo y llegará al orgasmo.

(T/N) gemia sin pudor alguno, pues para ambos era excitante que alguien llegara a escucharlos y eso para ellos lo hacía aún más candente.

Finalmente (T/N) logró su objetivo de saciar sus necesidades.

Tú
Tu sexo está en llamas
Consumido
Por lo que acaba de pasar
Caliente como una fiebre
Huesos que crujen
Podría saborearlo
Saborearlo
Si no es para siempre
Si es sólo esta noche
Oh, es aún así la mejor
La mejor, la mejor

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『𝓘𝓰𝓾𝓻𝓸 𝓞𝓫𝓪𝓷𝓪𝓲.』
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Se sentía incomodo, sudado y nervioso. Era totalmente indefenso ante aquella profesora de ojos (C/O). Aquella profesora lo tenía aprisionado bajo sus caderas montandolo, ella comenzó por dar varios besos por su cuello haciendo gemir al pobre chico, el ya no aguantaria guardar la compostura y dejaría salir su verdadero ser, por que el tenía unos inmensos deseos carnales de hacerla suya, besarla apasionadamente con esa locura que quemaba, con esa intensidad que daba miedo, el quería hacerla suya.

Desde hace varios meses no sabía bien si eran alucinaciones suyas o realmente era verdad.

Aquella nueva profesora de arte, llegaba muy provicativa sólo para el, siempre llegaba con esas minifaldas que provocaban que a iguro se le pusiera duro.

Ahora ella por alguna extraña razón se encontraba montando lo en ropa interior, dando pequeños sentones a él pene de iguro.

Iguro ya no aguantaba más, cada caricia, cada toque por parte de la profesora (T/N) lo volvía realmente loco.

Finalmente el no aguanto y se dejó llevar, tocando cada parte de su cuerpo llegando deleitarse y estrujando aquel trasero redondo que la profesora tenía.

—¡Así iguro, tocame más por favor! — gimió la profesora

Cuando por fin la escena iba cada vez subiendo de tono y el iba a penetrarla, el destino fue cruel con el y fue despertado de aquel sueño húmedo.

—Obanai, despierta idiota. ¡Otra vez te quedaste dormido en la clase! — Sanemi su amigo se encontraba irritado por despertarlo cada vez que este se dormía en clases

—Idiota, vete al baño. ¡Aaaaah mis ojos! No puedo creer que se te haya parado. —

Iguro se avergonzo, era la cuarta vez que tenía una ereccion a causa por sus sueños húmedos.

—No es lo que parece. — Iguro tomó su mochila y se la coloco en su regazo.

—Idiota porque últimamente estas raro. ¿No te has masturbado lo suficiente o que?. —

Iguro comenzó a analizar desde cuando le pasaban estas cosas tan bochornosas, cuando en ese instante la causa de sus deseos sexuales pasó frente a sus ojos.

—¡Hola Iguro muy buenos días!. — saludo (T/N) tomando sus pertenecías saliendo de él salón.

—H-hola Profesora  (T/N) B-buenos días. — cada vez que cruzaba palabra con aquella chica, iguro se ponía extremadamente nervioso, no sabía formular una frase sin tartamudear.

—Con qué es la Profesora con la que se te para eh? — susurro sanemi burlón cerca de la oreja de iguro.

La profesora, tomó la mano de iguro y le dejó una nota. Ella le sonrió y sin más se fue.

La nota decía su número telefónico y un "Llamame".

Iguro quedó totalmente rojo y asombrado.

Tú
Tu sexo está que arde
Consumido
Por lo que acaba de pasar
Y
t

ú

Tu sexo está que arde
Consumido
Por lo que acaba de pasar

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¿Que dicen quedo bien pedorro o muy cringe?

Mi estado mientras escribía esto:

Bromi. ¡No olviden votar y comentar!