Escena III: La historia personal de Kiluano Linto Bento con su madre Rintula

Fecha: 1 de mayo del 2019 (Noche)

Personajes:

· Kiluano Linto Bento

· Urtillo Kirto Yoro

· Yultela Urtila Hujeta

Lugar: El salón de manualidades – Centro Peruano Japonés

(Descripción del lugar: El salón de manualidades es un espacio amplio que consta de las siguientes características. En el lado izquierdo, se observa una mesa grande de color blanco que se halla decorado con varias sillas alrededor de color negro. En el lado derecho, se aprecia un televisor negro que se halla encima de un estante negro. El estante negro está sucio, porque está lleno de polvo. Además, se halla un escritorio al lado derecho y al costado del televisor.)

(Se abre el telón)

(Ingresa Yultela Urtila Hujeta caminando al escenario por el pasillo izquierdo)

(Ingresa Urtillo Kirto Ujoro caminando al escenario por el pasillo derecho)

(Urtillo Kirto Ujoro lleva dos cartulinas rojas, un paquete de hojas bond, papel brillante de color rojo, palos de madera y otros detalles para el día de la madre en sus dos brazos)

(Ingresa Kiluano Linto Bento caminando al escenario por el pasillo derecho)

Yultela: (cordial) Urtilo, pensé que me había olvidado de recoger los materiales para el taller, pero creo que realmente debo traerlos e irme a casa. Kiluano, por favor acércate a la mesa, porque vamos a hablar. Necesito permanecer tranquila para hacerle entender a este chico que debe tranquilizarse y hablar con su madre.

Urtillo: (bondadoso) Yultela, te traigo tus materiales que te olvidaste en casa. Por favor procura que no suceda eso, porque yo también tengo clases de poesía con los estudiantes y no quiero perder mi tiempo cuando te lleve las cosas que olvidaste, amor. Los chicos a veces son impacientes y quieren redactar poemas. Para enseñarles poesía, debo estar calmado para evitar estresarme.

Kiluano: (nostálgico) Profesor, vengo a hablar con Yultela para poder dialogar con ella. Me ha contado que mi madre la mandó a llamar y eso me preocupa. Entiendo que debe hablar con su esposa o amiga, pero a mí me ha llamado antes. Debería estar hablando con la profesora para que después ustedes charlen entre ustedes.

Yultela: (amable) Kiluano, es cierto. Debo conversar contigo antes de que lo haga con mi esposo. Urtillo, ahora no puedo charlar, porque necesito conversar con Kiluano para hacerle saber sobre una llamada que su madre me realizó esta llamada. No lo tomes a mal, pero no creas que me olvidaré de hablar contigo.

(Kiluano comienza a derramar lágrimas de su rostro)

Yultela: (cordial) Kiluano, ven aquí y por favor siéntate en una silla que se encuentra en la mesa blanca. Asimismo, creo que es necesario charlar contigo para evitar cualquier inconveniente. Ahora estoy con unas ganas de tomarme una taza de café. Me podrías ir contando tu historia personal.  No quieroser grosera e interrumpirte de una forma abrupta.

Urtillo: (amable) Yultela, es bueno especificar que no debes olvidarte de llevar materiales. En realidad, siento que ahora nosotros como personas grandes tenemos la obligación de mantenernos atentos en cuidar nuestras pertenencias de una forma apropiada. En realidad, creo que Kiluano no debería estar aquí, pero ahora debe conversar contigo. 

Kiluano: (llorando) Desearía que mi madre me quisiera de verdad. Ahora ni siquiera tiene tiempo para conversar conmigo. Estoy harto de mi padrastro, porque siempre busca que yo reprima mis sentimientos totalmente. Creo que incluso diría que yo me mantengo alejado de mi padrastro para evitar confrontarme con él.

Yultela: (cordial) Kiluano, espérame en la mesa por favor, porque necesitamos conversar de una vez. Si quieres te traigo un vaso de agua para poder hablar con tranquilidad y calma. Tu madre me contó que le gritaste a tu padrastro y hoy te voy a orientar para poder convivir con Rintero. No quiero que lo golpees, Kiluano.

(Urtillo Kirto Yoro ingresa caminando al escenario por el pasillo izquierdo)

Kiluano: (llorando) Maestra, si quieres yo te cuento mi historia personal con mi mamá. Cuando era un niño, yo solía ser muy unido con mi madre. Parece que todos tenemos un montón de recuerdos con nuestras madres, pero los míos son muy particulares. Quiero contarlos para recordarlos con mucho cariño.

Yultela: (cordial) Kiluano, entiendo que quizás hayas pasado por alguna dificultad grande. En realidad, todos merecemos descansar o desahogarnos de vez en cuando. Creo que puedes cambiar tu actitud para poder llevar mejor con tu padrastro. Recuerda que puedes guardarle respeto, porque también quiero que seas respetuoso.

Kiluano: (llorando) Maestra, es que antes mi madre ha sido muy buena conmigo. Es que la verdad mi mamá ya no es la misma de antes. Ahora ya no me quiere, porque solo para pensando en su novio. Ni siquiera nota mi existencia a menos de que yo me encuentre molesto con su enamorado.

Yultela: (cordial) Tu mamá me contó que no te comportas como los chicos de tu edad. Se siente preocupada, porque no puede estar tranquila luego de que empiezas a sentirte más enojado con ella todos los días. Me contó que intentas aislarte de tu padrastro, porque quieres permanecer lejos de él.

Kiluano: (llorando) Mi papá no quiere hacer nada, porque ambos están divorciados. Cuando era pequeño, mi mamá solía decirme que yo debía ser diferente a mi padre, porque él no tenía trabajo para mantenernos económicamente. Además, mi madre ya no me da abrazos ni cariño cada vez que me voy a dormir y ella ahora solo piensa en su enamorado.

Yultela: (cordial) Kiluano, deberías comprender un poco más a tu madre. Ella no creo que haya cambiado contigo. Tal vez antes ella simpatizaba más contigo, porque no provocabas ningún problema en realidad. En realidad, yo no quería decirlo, pero tal vez debas tomar terapia profesional en caso de ser necesario.

Kiluano: (llorando) Por supuesto que no. Entienda que yo no estoy mal. Mi madre es la que para pendiente de ese maldito hombre como si papá no le hubiera hecho daño. Cuando era un niño, ella me prometía que siempre me amaría como cualquier otra madre, pero cuando conoció a su novio Rintero todo cambió

Yultela: (grosera) ¿Entonces tú ya tienes problemas con tu madre por culpa de ese novio? ¿No piensas que deberías ser más productivo en la casa? ¡Vago de mierda! Solo paras provocando problemas y no deberías ni siquiera quejarte, porque eres un hombre grande para poder controlarte y reprimir tus sentimientos.

Kiluano: (llorando) Maestra, usted es una maleducada, porque usted no me conoce realmente. Mi madre tiene toda la culpa, porque ella siempre se comporta de una forma denigrante conmigo. ¿No debería cambiar su actitud? ¿No me va a dar menos ganas de entregarle nada por el día de las madres si es que se mantiene así?

Yultela: (grosera) Deja de ser tan vulgar y empieza a respetarme. Espero que nos entendemos profundamente. En realidad, siento que ahora todos debemos mantenernos en calma para evitar cualquier enfrentamiento o dificultad. No quiero decir que yo sea mala por decirte que eres vago. La verdad es que tú eres el único que debes cambiar.

Kiluano: (llorando) Maestra, tengo vergüenza de admitir que incluso he tenido ganas de escaparme de casa. Me siento tan aislado en mi propia casa, porque me siento apenado por decirle a mi madre todos los días que yo no me encuentro de acuerdo con su propio matrimonio. La falta de amor por parte de mi madre me afecta totalmente que incluso me hace pensar que ya no me quiere como antes.

Yultela: (grosera) Kiluano, es mejor que empecemos a pensar en una versión más positiva. En realidad, creo que nosotros podemos tener un poco de paciencia. No eres incapaz de cambiar la relación que mantienes con tu madre, porque eres su hijo. Por lo menos yo quiero que te comportes como un joven educado.

Yultela: (calmada) ¿Por qué te sientes incomprendido? ¿Hay algún problema que hayas atravesado antes? Tal vez pueda orientarte y consolarte si es así lo deseas. No quiero presionarte, pero quizás un buen consejo sería mantenerse completamente calmado en esa situación. No es mi culpa si tu madre fue mala contigo o no.

Kiluano: (llorando) No puedo tranquilizarme. Mi vida es tan difícil que sería capaz de tirarme por un puente si quisiera. Aunque lo único que me mantiene motivado es el anhelo de obtener el amor que mi madre debe darme. Yo solo soy un chico que quiere conseguir el aprecio de una mamá que tiene un marido tóxico.

(Yultela se retiran caminando del escenario por el pasillo izquierdo)

(Kiluano se retiran caminando del escenario por el pasillo derecho)

(Cierre del telón) (Fin de la escena III)