ACTO I (Cuarta Escena)
Escena IV: La conversación de Rintula Bento con Rintero Irkilo
Fecha: 2 de mayo del 2019 (Día)
Personajes:
· Rintero Irkilo
· Rintula Bento
· Telio Linto
· Irtule Lintua
Lugar: La sala de estar de la casa de Kiluano
(Descripción del lugar: La sala de estar de la casa de Kiluano es un espacio amplio que se caracteriza por los siguientes aspectos. En el lado izquierdo, se puede observar un sofá marrón que se encuentra deteriorado. Delante del sofá, nos encontramos con una mesa blanca que se encuentra totalmente limpia y contiene encima de ella un florero que tiene un ramo de jazmines blancos. En el lado derecho, se encuentra un televisor negro que se halla arriba de un estante negro. Debajo del televisor, se encuentra un estante en forma de ele que es de color negro. En este armario, podemos apreciar varias fotos puestas en marcos de color negro que muestran a Kiluano de niño, Kiluano con su madre y con su padre. Además, también hay cuatro jarrones de color blanco colocados encima del estante negro.)
(Se abre el telón)
(Ingresa Rintero Irkilo caminando al escenario por el pasillo derecho)
(Rintero lleva un ramo de rosas rojas en su mano izquierda y luce con corbata y terno)
(Ingresa Rintula Bento caminando al escenario por el pasillo izquierdo)
Rintula: (enamorada) Buenas tardes, amor. Veo que traes un ramo en tu mano y quiero saber si es tuyo. Yo ando enamorada de ti que no puedo esperar para poder convertirme en tu esposa. Quiero sentirme como una novia de las películas románticas que se viste de blanco y sale de luna de miel con su esposo. Aunque ahora recuerdo que también soy una madre.
Rintero: (caballeroso) Rintula, la verdad es que tu carisma y amabilidad me hacen enamorarme más de ti. Aunque deberíamos deshacernos de tu hijo, porque provoca demasiados problemas. No quiero tener a un hijastro muy maleducado como Kiluano. Es un monstruo y no quiero tenerlo cerca. No soy machista como él dice y debo informarte que necesita ir al psicólogo.
Rintula: (amable) Rintero, quiero que conversemos sobre nuestra relación. Siento que también tienes un poco de culpa en tu relación con Kiluano. Tengo tantas preguntas por hacerte que sinceramente no puedo estar tranquila sin preguntarte sobre tus razones para no querer a Kiluano en nuestro matrimonio.
(Rintero Irkilo le entrega el ramo de rosas rojas a la mano izquierda de Rintula Bento)
(Rintula Bento coloca su brazo izquierdo sobre su mentón e inclina su cabeza hacia el lado izquierdo)
Rintero: (sincero) Tu hijo se viste y habla de una forma femenina, porque siento que empieza a comportarse como tú. No entiendo cuál es la necesidad de que intente alejarse de mí. Yo solo quiero convertirlo en un buen hombre al distanciarse de nosotros. No es una mujer para que sienta aprecio por los demás y sea sumamente cariñoso.
Rintula: (confundida) No entiendo tu molestia, porque eso ya depende de Kiluano. A ti no te debe molestar la actitud de mi hijo y no estoy de tu lado. Espero que no empieces a ser dramático o exagerar que mi hijo te golpeó o insultó, porque yo misma me voy a enojar contigo. Rintero, ¿Lo has entendido?
Rintero: (asustado) Está bien, mi amor. No fue mi intención hacerte enojar de ninguna forma y no quiero que me veas como una amenaza completamente. Yo no quiero dejar de amarte, pero veo que pronto te vas a hartar de tu hijo para que lo eches de casa. Mi consejo es que te deshagas de él completamente, porque no merece la pena.
Rintula: (cordial) Rintero, ahora me siento completamente lista para decirte que hay que darnos un tiempo. Siento que no estoy preparada para casarme todavía, porque necesito estar segura de que te llevarás bien con mi hijo. Siempre me acuerdo que mi madre me decía sobre escoger un buen marido y formar una buena familia.
Rintero: (honesto) Amor, ¿Y acaso su madre tuvo razón en lo que decía? No puedo imaginar mucho de tu infancia, porque pienso que deberíamos prestar atención a nuestro matrimonio. No sabes cuántas ganas tengo para verte vestida de novia y yo de novio. Espero que tu anterior matrimonio no se haya dado igual.
Rintula: (nostálgica) Mi anterior marido se llamaba Telio. Nos divorciamos, porque no tenía trabajo para mantenernos a mí y a Kiluano cuando era un niño. A veces lo extraño, pero ahora estoy contigo. Siento que ahora debo enfocarme en ti y olvidar lo que alguna vez pude sentir con ese hombre. Solía ponerme sonrojada durante varios días.
Rintero: (honesto) Rintula, ¿Cuánto quieres a tu hijo? Dime la verdad, porque ahora quiero presentarme ante ti como un hombre que pretende cumplir tus caprichos. Si tienes problemas con tu propio hijo, entonces lo voy a echar de casa o que vaya con su papá y se acabó. Así te olvidas de él por completo y sin preocupaciones.
Rintula: (preocupada) Es que no es tan sencillo, Rintero. Yo amo a mi hijo, pero ya no tanto como antes. Siento que me hace recordar a los aspectos negativos de su padre. También puedo ver que se volvió un poco distante conmigo, porque ya no me presta atención para lo suficiente. No es tan cercano a mí como cuando él era un niño.
Rintero: (malvado) ¿Enserio? Yo pienso que es un poco fácil hacer crecer rápido a Kiluano. No es tan importante que ese chico se enoje por lo que voy a decir. Yo estoy dispuesto a hacer lo que sea para que nuestro noviazgo se convierta en matrimonio. Es tiempo de que Kiluano aprenda a madurar.
Rintula: (enojada)¿Cómo te atreves a llamarle la atención sin mi autorización? Yo soy la única que puede regañarle a ese chico en cualquier momento. Es momento de que tú más bien aprendas a respetarlo, aunque él también deba hacerlo. No estoy satisfecha con tu actitud, porque siempre te comportas de una manera tóxica con mi hijo.
(Rintero se acerca a Rintula y se dan un abrazo)
Rintula: (alterada) Es mejor que nosotros podamos tener una relación sana en vez de una tóxica. No quiero ser maleducada contigo, Rintero. Creo que incluso podría contarte que nosotros debemos ir a terapia en vez de mi hijo, porque no nos entendemos. Espero que puedas entenderme a mí y a Kiluano en vez de juzgarle con mucha frecuencia.
Rintero: (malvado) A mí me parece que podríamos mandar a Kiluano a un instituto psiquiátrico. Es que a veces se me agota la paciencia. Asimismo, creo que ahora podemos agradecerle a tu hijo por hacerme rabiar su actitud infantil que me molesta demasiado. Le falta ser más productivo en la casa y debemos explotarlo.
Rintula: (enojada) Rintero, me vas a ponerme mal y te digo que ni siquiera me dejas hablar. Es el colmo que ni siquiera contigo pueda conversar tranquila, porque parece que no puedes mantenerte callado en ningún momento. Ahora recuerdo que vendrá mi ex esposo y te ordeno que no te metas con él.
(Ingresa Telio caminando al escenario por el pasillo izquierdo) (Ingresa Irlute caminando al escenario por el pasillo derecho)
Telio: (cordial) Buenas tardes, he venido a visitar a mi hijo. Espero que no esté interrumpiendo mucho. Debo aclarar que soy el padre de Kiluano y ojalá me dejen pasar, porque vengo a hablar en vez de pelear. No me gusta la gente conflictiva. Rintula, sé que estamos divorciados y espero no incomodar a tu enamorado.
Rintula: (amargada) Telio, no quería que volver a verte ahora, porque la verdad que me hartas. No estoy enamorada de ti y ahora tengo un nuevo novio. Tu hijo te extraña al parecer y la verdad me está empezando a hartar. Llévatelo si quieres, aunque tal vez mi novio pueda cambiarlo, pero te digo que es un poco conservador.
Irlute: (educada) Yo soy la amante de Telio. Ese hombre me mantiene enamorada de él por su cuerpo sexy. Espero que ninguno de ustedes me lo quite, porque soy capaz de denunciarlos por rapto o secuestro enfermizo. No quiero que nadie moleste a mi novio, ya que siempre me acostumbro a darle besitos en la cara.
Rintero: (grosero) Señor, su hijo se comporta muy mal y usted no debe soportarlo. A mí me llama machista, pero yo no busco generarle algún daño. Su hijo tiene poca cortesía y usted debe ser consciente de ello. Ahora debo decir que Kiluano no es un hombre, porque ni siquiera sabe comportarse como un caballero.
Telio: (educado) Señor, usted no tiene ningún derecho para denigrar a mi hijo de ninguna forma. Asimismo, pienso que debe mantener su boca cerrada en vez de quejarse por lo que mi hijo haga con usted o no. Espero haber aclarado tu duda y no te metas con mi hijo, porque no te corresponde.
(Telio Lintua se retira caminando del escenario por el pasillo izquierdo)
(Irlute Lintua se retira caminando del escenario por el pasillo derecho)
(Rintula Bento se retira caminando del escenario por el pasillo izquierdo)
(Rintero Irkilo se retira caminando del escenario por el pasillo derecho)
(Cierre del telón) (Fin de la escena IV)
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