IX




2018.

⚠️ El día de la tragedia ⚠️


Jié ensanchó la comisura de sus labios a medida que se probaba diferentes vestidos y conjuntos para acudir a aquella fiesta ilegal y sin tener el permiso por parte de su hermano, Hoseok. El cual le había dicho por lo menos unas quinientas veces que no acudiera y optara por acompañarlo a cenar o realizar alguna otra actividad pero por supuesto que la chica no aceptó. Ella deseaba ir y divertirse, los últimos días fueron una carga enorme en su espalda gracias a la escuela. Ahora solo quería olvidarse de ello.

La relación de Jié y Seokjin no era del agrado de Hoseok, y él se había encargado de hacérselos saber. No veía las buenas intenciones en su hermana y parecía ser que solo se aprovechaba de ella para sacarle algún beneficio y Jung estaba más que seguro que se trataba de dinero y acostarse con ella para que aceptara. Eso explica el porque las fuertes cantidades de dinero que había en el estado de cuenta y misteriosamente Kim abrió un negocio de comida semanas después.

No menospreciaba a Seokjin por ser de bajos recursos pero se notaba a un kilómetro lo que él buscaba en Jié. Y ella al estar enamorada, aceptaba.

El castaño subió las escaleras con tranquilidad adentrando sus manos en los bolsillos de su chándal negro. Visualizó a su hermana salir de la habitación portando una falda en color negro que muy apenas lograba cubrirle, una blusa corta pegada a su cuerpo y que de igual manera esta apenas cubría lo necesario y como olvidar lo que ella siempre utilizaba: zapatos de tacón alto. Él nunca reprochó su forma de vestir pero sabía a lo que se enfrentaba al ser una mujer y añadiendo que era demasiado guapa, no le gustaría escuchar morbosidades hacía ella.

— Hoseok, no digas algo ma.... — Él la interrumpió negando y sonriéndole. Solo dejaría que se divirtiera un poco más y después trataría de hablar con ella para que se enfocara más en sus estudios.

Jié era buena chica pero las amistades de Park, los dos Kim y Jeon, no eran buenas.

— Ya, esta bien. Diviértete ¿si? Si sucede algo o necesitas que vaya por ti, no dudes en llamarme. Estaré despierto un poco más — Ella asintió con una sonrisa en grande que causaba que los chicos soltaran suspiros y por último, abrazó a su hermano con mucha fuerza sin saber que ese sería el último abrazo que le daría — Te amo.

— Yo igual, hermanito.

Al llegar a la fiesta, Jié se divirtió, por supuesto que lo hizo pero entonces entre más pasaban los segundos, minutos y horas, aumentaban su estado de ebriedad.

Taehyung miraba a Jié sin que esta se percatara pues solo se enfocaba en Jin quien la besaba con mucha fuerza. El chico de rulos asintió en dirección a Jimin y este actuó rápido, antes de que se despegara de sus labios y tomara el vaso de plástico. Park vertió un polvito blanco en la bebida de la chica y quince segundos después se atrevió a beber sin percatarse de lo que Jimin había colocado mientras que los demás chicos esperaban el efecto en ella.

Pero de un momento a otro, Jié se molestó con Jin por haber coqueteado con otra chica y esta salió de la fiesta admirando lo solitario que se encontraba el lugar, solo había un pequeño camino que era en dirección al bosque, todo lo demás era arboles y más árboles, recordando que era un lugar abandonado y una fiesta ilegal, Jié soltó un insulto por lo bajo y comenzó a caminar sin dirección alguna.

— ¡Jié! — Gritó su novio, pero ella no volteó. Nadie presenciaba la pelea solo una chica vestida de negro que miraba a Jié hasta que la vio desaparecer de la nada. Ella cerró sus ojos con fuerza y soltó algunas lágrimas.

Detrás de ellos, Park, Jeon y Kim los perseguían pero había una persona más que le gritaba a Jié que parara de una buena vez o las cosas saldrían peor.

La chica de negro se encogió en si misma, escuchando los gritos de Jié mientras decía "Por favor, no me hagan nada". Su corazón se partió en dos al escucharla sufrir por un buen rato hasta que no hubo más gritos, solo murmullos de los chicos.

Jié corría como podía para evitar que Jin la alcanzara pero sus pies no dieron para más y cayó al suelo, visualizó a los demás chicos detrás de él y temió. Seokjin se arrodilló frente a ella y con malicia le sonrió, ella sabía que debía luchar pero dentro de ella muy dentro de su corazón... no volvería a ver a su hermano. Lo confirmó cuando su novio comenzó a tratar de deshacerse de su ropa pero ella gritaba por ayuda, nadie lo hizo, al contrario, Jimin y Jungkook la sostenían de los brazos y lo demás que sucedió no era necesario contar. Los efectos de la droga comenzaron a hacerse presentes y aquello fue el comienzo del caso más resonado en todo Corea del Sur.

Cinco chicos en la escena, cinco chicos quienes abusaron de Jié y uno de ellos grabó todo. Jin sacó el arma que escondía pero Jimin lo detuvo y este disparó a la nada, en ese momento, Yoongi había tropezado y la cámara estuvo a punto de caer pero la sostuvo con fuerza.

— ¿Que harás con ella? — Preguntó Jimin observando a la chica en el suelo totalmente inconsciente y desnuda con signos de violencia en su cuerpo.

Seokjin no respondió, solo limpió el rastro de sudor que resbalaba por su frente al igual que los demás chicos.

— Probablemente nadie se entere de este lugar, es un terreno baldío, alejado de la ciudad — Mencionó Jungkook. Los demás chicos sonrieron pero Yoongi negó apagando la cámara.

— Comenzarán a investigar los lugares donde ella se encontraba y a las demás personas. Darán con nosotros de manera fácil.

Ellos no tenían idea de lo que Jié sintió. Cinco chicos siendo un asco de personas, abusando de la confianza que la chica les tenía, ella siempre los catalogaba como buenos, amables y respetuosos. Jié nunca presenció algún comportamiento inadecuado viniendo de ellos.

El sentimiento de estar en peligro es horrible, ella parecía desmayar en cualquier momento debido a los nervios. Todo su cuerpo temblaba de manera increíble, sollozaba, suplicaba y recordaba a sus seres queridos. Ella alcanzó a susurrar "Te amo Hoseok". Y aquellas palabras causaron carcajadas en los chicos, siendo tan cínicos y disfrutando del miedo que Jié sentía.

Seokjin tomó el cuerpo y lo lanzó al barranco, sin ningún esfuerzo, los cinco chicos miraron como el cuerpo de Jié caía hasta que por fin se detenía, podían visualizar desde lo lejos lo mal que había quedado pero sin embargo, no sintieron ningún tipo de culpabilidad. Todo había quedado grabado.

La chica de negro observó correr a Jié en busca de su hermano tratando de gritar para que la ayudara, ella gritaba y gritaba tanto que su garganta dolió pero cuando se dirigió hasta el camino que la llevaría a la carretera, ella se desvaneció. La chica observó solo un objeto en el suelo y se trataba de su teléfono móvil pero decidió dejarlo en el lugar, se dio la vuelta y aquel auto blindado se había hecho presente, de ellos bajaron cinco personas, reían entre sí y dos de ellos fumaban, la chica se enfocó en Seokjin quien era uno de los que ingería la sustancia tóxica, se veía normal, cada uno con sus cabello despeinados pero se veían normales como si no hubieran cometido ningún tipo de crimen.


Nueve de la mañana.

Y no había rastros de Jié. Hoseok temblaba, bebía café y a la vez un cigarillo, se encontraba rodeado de policías buscando a su hermana por cualquier rincón. Llamó a cada uno de sus amigos pero nadie sabía nada, según ellos, la dejaron fuera de casa. Pero no creía aquella versión, no escuchó ningún carro aparcar a ninguna hora de la madrugada.

Jung permaneció dentro de casa tratando de calmar sus nervios pero no funcionaba y mucho menos si se encontraba bebiendo café.

Sus oídos crearon un sonido abrumador, se paralizó y por último, la taza de café cayó al suelo. Todo esto en cuanto le informaron que por fin la habían encontrado.

Pero lamentablemente, no se encontraba con vida.

El grito que soltó Hoseok no se comparaba con el dolor que sintió en todo su ser, se desplomó de rodillas, suplicó que no fuera verdad pero las cosas así fueron y no había vuelta atrás.

Ella, su hermana, su mejor amiga, Jié, había muerto a causa de un feminicidio.

Llevó sus manos al corazón sintiendo como este latía con mucha frecuencia, al escuchar todo lo que ella había sufrido.


Entonces, todo Corea del Sur se enteró de lo que había sucedido, así comenzando una larga investigación y volviéndose uno de los casos más escuchados en todo el país.




Este capítulo me ha dolido demasiado, si no les gusta leer esto, por favor no lo hagan. Se vendrá mas cosas en los siguientes capítulos y también diré que la historia no será muy extendida.

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