IV
— ¿Por que hiciste eso? Ese no era el plan — Dijo Taehyung algo molesto, su mejor amigo colocó los ojos en blanco y le restó importancia. Lo hecho, hecho estaba. Y no podía hacer nada más.
— Solo quería comprobar si era ella, ¿entienden? Pero, bueno, no sé. Quiero decir, las fotografías están en mi celular — El peli naranja se encogió de hombros, frunció sus labios manteniendo su atención en el teléfono móvil que se encontraba descansando en la mesa.
— Por supuesto que es ella, de eso no hay duda, tan solo es confuso, ¿y si está fingiendo no recordar nada?
— ¿Y si de verdad, no recuerda nada? — Preguntó Jungkook.
— Dejemos este tema, por ahora, y Jimin deja de agobiarla. No queremos tener problemas con Hoseok — Taehyung reprendió a su mejor amigo, el mencionado soltó una risita por lo bajo sin poder creer las palabras de Kim. Ellos nunca decían el " no queremos problemas" al contrario, los buscaban como si necesitaran de ello para poder vivir.
— ¿Desde cuando nos importa el no tener problemas? — Alzó ambas cejas, Kim chasqueó la lengua un poco harto de lo terco que era Park.
— Desde que Jung Hoseok es un peligro para nosotros. ¿Es que no entiendes? Recuerda lo que sucedió aquel día, Jimin. No puedo creer que lo hayas olvidado — Empezó a negar con su cabeza, Jungkook era el único que se mantenía neutro, solo mirando a sus dos amigos discutir por razones muy absurdas. Su mirada viajó de ellos a Jié que había entrado a la cafetería muy cabizbaja, llevaba su mascarilla abajo de su barbilla, algo nerviosa y sin saber que hacer entre tantas personas. Él no la recordaba de esa manera.
— Ya, dejémoslo así. Solo deja en paz a la chica — Concluyó Taehyung. Su mejor amigo soltó una risita burlona, tomó algunas papas fritas y las llevo a su boca.
— Olvídala, no te acepto antes. Menos ahora — Taehyung lo miro mal prefiriendo no hablar más sobre el tema. Pero de un momento a otro, sus miradas se encontraban en la chica que al parecer había ocasionado un caos.
Otra chica, ajena, le gritaba miles de cosas por "no haberse fijado por donde caminaba", Jié solo se quedó estática sin saber que decirle o hacer. Al parecer, a la chica contraria se le había resbalado su almuerzo en cuanto pasó a un lado de Jié. Pero ella no tuvo la culpa, solo estaba de pie esperando que algunas personas desalojaran la cafetería. Un chico de tez pálida, cabello tintado de color menta y vestido totalmente de negro, había hecho presencia en la cafetería, tomó a la chica de la mano pero antes de irse, le susurró algunas cosas a la contraria. Esta cambio su rostro automáticamente a uno de preocupación y temor.
— ¿Jié, conoce a Yoongi? — Preguntó Jungkook un poco confundido con lo que acababa de pasar hace algunos segundos.
— Yoongi era el mejor amigo de Jung en ese entonces, ahora no tengo idea.
— Deberías borrar esos videos, Jimin.
— ¿Para? Son pruebas que debo tener — Tomó su teléfono móvil y lo guardo en el bolsillo de su pantalón, Taehyung negaba con desaprobación, pensando en esos videos horribles que Park tenía.
— Son enfermos ¿lo sabes? Es una situación delicada y horrible, hay muchas personas involucradas y se pueden ver en el video. Entre esas, nosotros.
— No llegarán a nadie, confíen en mí.
Por otro lado... Jié era llevada a cualquier lugar por Yoongi, tenía entendido que ahora él se ocuparía de ella en el instituto. Le molestaba por que no era una niña pequeña, sabía cuidarse pero su hermano era tan... difícil. Desde que había despertado en un hospital, aislada, las paredes totalmente blancas y extrañamente, sus muñecas se encontraban esclavizadas, no podía separarlas de la cama. Y las primeras pensamientos llegaron a su mente: ¿por que estaba en un hospital? ¿Y con unas pulseras ajustadas a sus muñecas al punto de doler demasiado? No entendía nada, y tampoco recordaba.
— ¿Por que Hoseok te pidió esto? Puedo cuidarme yo misma — Se zafó del agarre del chico, este se volteó mirándola con desaprobación. Se encontraban en un lugar un poco más aislado de toda la comunidad estudiantil.
— Debes entender a tu hermano, algo está sucediendo y hay que asegurarse que estes segura — Dijo colocando sus manos dentro de los bolsillos de su pantalón negro ajustado, Jié se tomó el tiempo para pensar en podría estar pasando ahora mismo para que empezaran a cuidarla como si se tratara del presidente.
En eso, Jimin acompañado de sus dos mejores amigos, pasaron por el frente de ella caminando como si fueran superiores a todos. La mirada del peli naranja cayó en Jié, le sonrió pero esta desvió su mirada hacía Yoongi quien observaba a cada movimiento que Park realizaba.
— Te espero en el cuarto de limpieza — Canturreó, Min se acercó a él con pasos firmes y su mirada molesta. Se colocó frente a Park, tratando de intimidarlo y cualquier palabra que saliera de su boca que no le gustara, acabaría con él, tal y como Hoseok se lo había pedido.
— Ella no irá contigo.
— Lo siento, no estoy hablando contigo — Soltó una pequeña risita, desvió su mirada hacía la chica y asintió con su cabeza para después mirar a Yoongi con burla e irse del lugar con sus dos mejores amigos detrás como si fueran cachorros que perseguían a su madre.
Jié hizo el ademán de ir tras ellos como se lo habían pedido pero Yoongi la detuvo tomándola de su mano.
— No vayas, recuerda que Hoseok pidió que... — Jié lo interrumpió con un quejido frustrado, soltó su mano del pálido y colocó sus ojos en blanco. Tan solo quería saber que era lo que sucedía y el porque Jimin empezaba a ser tan misterioso. ¿Él tenía algo que con Seokjin? ¿Porque lo había mencionado?
— Yoongi, agradezco esto pero de verdad, puedo cuidarme. Además, solo será rápido, si hay algún problema vendrá contigo.
El mencionado se resignó soltando un suspiro, finalmente la dejó ir. Tratando de convencerse que Jimin no le haría nada malo o Hoseok armaría la tercera guerra mundial. Debido a que se encontraban cerca de la entrada de la universidad, una figura vestida totalmente de negro quien también cubría su cabello con una gorra del mismo color, estaba de espaldas pero podía reconocerla aún si estuviera a tres kilómetros. Era él. Y no estuvo equivocado cuando se dio la vuelta, Min, sin importarle si en el futuro le dieran una suspensión... trotó hasta esa persona.
— ¿Que es lo que haces aquí? Vete, no puedes estar cerca — Le reclamó, la otra persona soltó una carcajada sarcástica y negó con su cabeza. Del bolsillo de su chaqueta sacó un cigarillo junto al encendedor, lo llevó hasta sus gruesos labios y lo prendió.
— Mi castigo ha terminado. ¿Magnífico, no? — Sonrió con el objeto aún entre sus labios, Yoongi empezaba a colapsar del coraje. Quería reventarlo a golpes en ese preciso momento, ¿como podía llegar como si nada?
— No, no entiendo como es que estas aquí. Te dieron cincuenta años y aún así, no fue suficiente para todo lo que causaste.
— Ser una persona de influencia, esas es la clave, Min Yoongi.
Por otro lado... Park Jimin esperaba con paciencia a la chica, recargado en el cuarto de limpieza con sus dos amigos a cada lado. Jié hizo presencia en aquel lugar un poco tímida, sosteniendo el asa de su mochila con ambas manos, el peli naranja le sonrió y sin decir algo más, le extendió el celular para que la chica mirara el video.
No duro ni tan solo cinco segundos cuando empezó a entrar en un ataque de pánico, sentía su cabeza estallar y muchos flashback llegaron a su mente, causando que Jié se desmayara. Park no le importó, es más, soltó una carcajada por verla colapsar de esa manera, sin pensar que eso era demasiado peligroso para ella. Taehyung fue el único en auxiliarla, rogando que no se haya golpeado tan fuerte la cabeza.
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