—Lo odio, pero decía la verdad.

Empieza admitiendo Iida una vez todos estaban despiertos, Todoroki se dirigía a él mirándolo con un porte pacifico junto a Midoriya también vendado por los brazos.

—Por eso dejaré mi brazo así, me deje llevar por el odio. A consecuencia me lastimó gravemente el brazo izquierdo, específicamente plexo braquial.

Midoriya se asombró era casi otra advertencia como lo suyo con su sobreesfuerzo.

—Pero parece que solo tendré problemas al mover mi mano. Cuando encontré al asesino de héroes no pude pensar bien, visualizaba el dolor de mi hermano y de mi prometida, nublando mis juicios por completo...—dijo acotando Iida.

Sin embargo, mientras esa charla se llevaba a cabo, una rubia se encontraba caminando con un reverendo dolor de cabeza. Al fin había logrado conseguir su libertad, aunque aún no estaba del todo sana, pero podía moverse y no era explícitamente necesario que hiciera más cosas de las necesarias. Aunque sabía que pronto debía ir a ese lugar para regenerarse.

Había escuchado un rumor de que un grupo de niños de la academia de héroes habían sido atacados por el Asesino de Héroes, logrando tensarla, pero pudo neutralizar sus emociones y expresiones con la noticia para que nadie sospechara de su incremento de tensión cardiaca y física. Aunque eso no la calmó al encontrarse con el sabueso policía, que antiguamente era su primer jefe en el tiempo de las pasantías de héroes.

—Guau... Me alegro que estés mejor, Ziva-san. —dijo capitán sabueso.

—Inui-sama... No sabe cuánto me alegro de verlo. Aunque gracias por vuestra preocupación. —se acerca la rubia con aquella mirada celestina para empezar a caminar con él.

—Comprendo, guau... Usted esta aquí para visitar a su prometido, ¿no es así? Me temo que deberá calmarse primero, siento que todos estos años sigues siendo la misma niña explosiva de siempre —dice mientras le da unas suaves palmadas en la espalda.

Logrando que con aquello la rubia suspire resignada, a su maestro no le podía ocultar nada, siempre estaba allí el instinto animal que le alertaba acerca de su humor.

—Esta semana he aprendido la meditación, no creo que vaya a exaltarme... Aunque, ¿debería preocuparme por vuestra presencia en especial? Si está usted es porque algo serio se debe tratar con suma delicadeza —dice de manera seria y diplomática, pero él tan solo le dirige una mirada despreocupada y seria.

Para luego acercarse donde se encuentran don torino y otro héroe, hablando en la siguiente habitación, el héroe más mayor, se encuentra dirigiendo al joven Midoriya, mientras que los demás se quedan atentos. Sin embargo, la rubia al posar la mirada en su prometido parece descomponerse facialmente, sintiendo un ahogo de preocupaciones llegar a ella.

Iida tenya se encontraba con los brazos totalmente vendados, algunos rasguños, pero los vendajes eran extremadamente gordos por lo que supondría que era daños graves. Tan solo se dedicó a recomponer la postura tragando saliva, no podía armar un pleito, no hoy, no ahora, debía calmarse.

Debía..., una suave caricia en su cabeza la quita de su ensimismado pensar, encontrándose con el capitán. Quien le pedía tranquilizarse con esa mirada seria y postura recta, pero a la vez dulce, siendo así su presencia notada

—Puedes seguir sentado, guau...

Midoriya Izuku abre los ojos sorprendido y nervioso al escuchar el "guau" provenir del que ingresó hacia ellos.

—Ustedes deben ser los estudiantes que vencieron al Asesino de Héroes y recibe atención bajo vigilancia, guau.

Se deja ver el oficial con gran cabeza de sabueso con orejas marrones y hocico blanco con motitas pequeñas. Observándolos con seriedad a los jóvenes. Gracias a su gran tamaño no podían notar la presencia de la rubia en la situación, quien se mantenía seria ante lo que decía y empezaba a escuchar.

—Como estudiantes ya deben saberlo, aunque fuera contra el asesino a héroes, fue una violación en contra de las reglas —empieza a decir serio el capitán.

—Si Midoriya no iba lo asesinarían a ambos... —espetó Todoroki sintiéndose indignado—Nadie notó que el Asesino de héroes, apareció.

El sabueso tan solo lo mira, mientras que a Ziva se le sale una pequeña sonrisa ante la sensación de rebelión, pero solo dura por leves momentos. No podía negar que le gustara el carácter rebelde de los chicos, ella era así.

—¿Un héroe no debe salvar a la gente?! —exclama Todoroki, mirándolo tenso al sabueso.

—Por eso no eres un héroe completo. —dice serio el Sabueso—¿Qué es lo que enseña la U.A y Endeavor hoy en día, guau?

Ziva esta vez había bajado la cabeza sintiendo un dejavú en esta situación, recordaba perfectamente cada regaño del Sabueso, gracias a él, ella se mantenía firme y tranquila en momentos tan críticas. Podías salvar a la gente, si, podías ser impulsivo y salvar, pero también había mañas que con el tiempo se aprendían.

Si la gente no chismoseaba las cosas que se hacía en contra de las leyes, no habría castigo serio, pero aquello también te quitaba un poco el espíritu, y el Sabueso debía enseñar a los jóvenes que no siempre podían ir libres, que también habían reglas que cumplir si no el mundo empeoraría, ella ya había sido regañada por su impulsividad. Pero ellos fueron a mas que expuestos, inclusive varios héroes supieron quienes se habían enfrentado al Villano, sin embargo, solo un número pequeño sabía la realidad de su situación, por el cual no necesitaba de castigo severo.

—Es la opinión del oficial de policía —dice el gran Torino.

—Y el castigo ocurriría si el castigo fuese público, guau. Las quemaduras señalaran a Endeavor como el salvador, y todo terminara ahí, guau.

Todoroki, Midoriya e Iida observaban serios antes las palabras que dirigía el sabueso.

—Afortunadamente fueron pocos los testigos. Esta falta terminará así guau, ¿que prefieren? Personalmente no quiero culpar a jóvenes prometedores. Por un solo error guau. —dice quitando la lengua y levantando un pulgar.

—Como sea, nos harán responsables por no supervisarlos bien —dice el héroe policía, vestido de color celeste.

La rubia se hace presente una vez que el sabueso se hace a un lado, encontrándose recostada por el marco de la puerta mirándolos seria, aunque más específicamente se sentía la mirada en Iida Tenya, quien estaba dando reverencia al héroe, pidiendo disculpas.

—Bien, causaste muchos problemas... Si lo entiendes, deja de hacerlo —dice el héroe profesional, a Iida.

—Si.

Midoriya al mirar un poco más atrás del héroe profesional empieza a balbucear de pánico, al ver la mirada serial de la rubia, realmente a veces se parecía demasiado a Bakugo cuando estaba seria.

—¡Z-z-z-ziva-san!

Todoroki se tensa levemente al verla despierta, había escuchado perfectamente que había sido víctima del Villano también, pero parecía estar mejor, pero igual se la notaba desgastada por las ojeras que esta misma poseía.

—Muchas gracias por sus cuidados y atenciones oficiales, perdonen nuestras acciones, si me dejáis, es mi turno de visita. —añade Ziva acercándose a paso firme, quedando al mismo paso que el sabueso. —Muchas gracias por dejarme escuchar, Sabueso-sama —dice un tanto bromista.

Aunque para los chicos aquello le había hecho tensarse esperando una mala respuesta por el oficial, pero contra todo pronóstico el oficial solo ríe, y le devuelve el cabello rubio.

—jajaja de nada pequeña Katsu, nos vemos en otra vez, guau. Recuerden cumplir bien las reglas jóvenes, o nos volveremos a ver. —dice el oficial marchándose con el héroe profesional.

Sin embargo, el gran Torino se queda observando a la rubia, quien le hace una pequeña reverencia de respeto, y se acerca a Iida Tenya. Quien se había quedado estático al verla con bien, pero con esa mirada con la que sabías que estaban en problemas.

—No creí volverla a ver Ivanov-san, no en esta vida. —dice con suma seriedad El Gran Torino.

Logrando que aquello ensombreciera a los tres chicos, sin embargo, la personalidad de la rubia había cambiado a una sonrisa nerviosa. Mientras se volteaba un tanto incomoda a encarar la conversación.

Ya tendría tiempo para arreglar los asuntos con su prometido.

—Son las sorpresas de la vida, Don torino. Me alegra verlo en su mejor año. —sonríe de manera lasciva y burlona.

Logrando que Midoriya sintiera un escalofrió al ver la mueca en los ojos del pequeño héroe en estatura, de enojo, pero enseguida al parecer que este la inmovilizaría una tela de araña lo atrapó y alejó de ella.

—Ja, has mejorado bastante en percepción, era de esperarse que agarres las manías de Toshinori. —ríe negando— ahora suéltame, sé que esto aún no estás en tu mejor forma. Vamos que te dejaré tranquila.

Katsu asiente y deshace de manera líquida la telaraña de la araña que había detrás de todoroki, quien había entrado por la ventana, y espantado a varios pacientes por el camino.

—Un placer siempre poder hacer frente a sus desafíos, senpai. —al no poder aun inclinarse por la herida, solo hace una señal de manos en forma de agradecimiento.

Logrando que con solo eso el mayor dejara a los chicos en manos de la rubia, que una vez no había mayor supervisando sonrío como lo suele hacer de manera villanesca, Bakugo Katsuki.

—Ahora verán lo que, si se llama regaño, chicos. —sonríe con malicia, haciendo crujir los huesos de sus manos al acercárseles.

Logrando que los tres retrocedieran ante el peligro, y tragarán saliva, temerosos por sus vidas.

—¡Lo lamentamos Ziva-sama!

Por lo que Iida es el primero en lograr salvarles el pellejo.
Dando un paso al frente y colocarse frente a sus compañeros y tomando la responsabilidad que merece.

—¡Lo lamento Ziva! No los lastimes, ellos fueron quienes me salvaron e hicieron entrar en razón, yo... —empezó a defender mirándola firmemente, sin embargo, se quedó absorto al verla frente a ellos.

La escena que sus ojos y los de los otros dos chicos veían era para dejarles incrédulos. Ivanov Ziva se encontraba sonriendo, pero las lágrimas resbalaban por sus mejillas, la realidad era otra, a pesar que parecía enfadada estaba agradecida de que no le haya ocurrido nada a sus kouhais y prometido.

—G-Gomene... Perdónenme por no haber sido yo quien los proteja, no estuve allí para protegerlos, yo... M-me alivió saber... Que estaban bien... ¡Maldita sea ya no se arriesguen así cuando estoy internada! —exclama lloriqueando, pero enfadada, parecía un manojo de sentimientos encontrados.

Ya que los tres chicos ni sabían cómo habían quedado de un momento a otro abrazado por la mayor, quien sollozaba por tenerlos con bien. A pesar de ser una malhablada y verla siempre con el mal carácter, se preocupaba por ellos, no solo por Iida por ser su prometido y pareja, sino que por ser los siguientes héroes.

Los chicos avergonzados y tensos, intentaban calmar a la chica rubia que se encontraba sollozando, aunque después de un rato largo, recibieron su regaño, pero ya más tranquilo ya que una vez que la vieron recostarse en Iida, supieron que se había quedado dormida y tranquila.

Después de todo, Ivanov Ziva era una chica sentimental cuando le sobrepasaba la situación, y esta era una de las pocas veces que sucedía. Aunque los chicos habían prometido y puesto de acuerdo que tenerla en ese estado no le hacía justicia a la visión que tenían de ella, por lo que harían de todo para que no volviera a suceder.

Se esforzarían para ser mejores cada día, mejores héroes en un futuro cercano.

Yahabían aprendido la lección. 

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Hola! ¿que tal?

¡Vaya capitulazo se vino, eh?
Conocieron un poco mas a Ziva, junto a eso vieron como se vino abajo la muralla de insensibilidad y caracter fuerte de Katsu ante los chicos, ¿se esperaban tanto cariño de ella hacia los chicos? ¿que pasara en el próximo cap? ¿que es eso de que volvera a ir al lugar para regenerarse? ¿alguna idea?

Todo esto y mas en el próximo capítulo ¿les gustó el de hoy?