— Mañana a primera hora estaré acá en tu casa — le dijo el chico antes de besar su mejilla y empujarla fuera del auto

— No seas tonto — la chica río.

— Hablo muy en serio — sentenció.

— Claro — le dijo la chica antes de despedirse y meterse a su casa

Ciertamente, ese chico iba completamente en serio con sus palabras. Mañana a primera hora estaría en su casa para pedirle la mano a su madre y con ello, la autorización de que le permitiese enamorar a su preciada y hermosa hija.

"Dos Iris Azules"

— Creí haberlo visto todo y resulta que no fue así — le dije a Chris con burla

— ¿Quieres que inicie con mi discurso de lo idiota que luces cuando estás con Kate?

— Podría hablar durante horas del mismo tema sobre ti — replique.

— Eres tan estúpido.

— Y tú un imbécil.

— ¿Qué nos está pasando?

— Se llama amor. Muchos salen heridos. ¿Deseas aventurarte?

— ¿Crees que pienso dar vuelta atrás?

— No lo sé, dímelo tú — alce mis hombros.

— Miramos, estamos en una tienda donde venden osos de peluches personalizados y con una bolsa de galletas con chispas de chocolate — mire la bolsa en mi mano y la estantería de los tamaños de peluches

— Estamos perdidos.

— Como no tienes idea hermano.

Reímos por lo estúpidos que nos debíamos de ver ante los empleados de la tienda. Chris tenía planeada una sorpresa para Arya, claro la sorpresa implicaba comprar una caja de galletas de chispas de chocolate y un oso de peluche personalizado. ¿Cómo había terminado aceptando? Cierto, el chico estaba desesperado porque lo acompañase para no lucir tan tonto sólo, el deseaba verse tonto en compañía. Vaya, no encuentro fallas en su lógica.

— ¿De qué tamaño crees que sea el adecuado?

— ¿No pensarás comprar uno que sea más grande que la chica o sí? — dirigí mi mirada hacia Chris solo para encontrarlo sosteniendo un oso de peluche que lo superaba por mucho y su existencia no se veía

— ¿Acaso crees que es mucho? — pregunto extrañado.

Reí sin contenerme de sus evidentes nervios por lo que estaba por hacer mañana por la mañana, en medio instituto, tanto que no recordaba el pequeño dilema de meter un oso gigante al instituto, disimular la sorpresa hasta el receso y luego ubicar a Arya entre todo el montón de estudiantes que de seguro seguirían al oso gigante como su escuadrón.

— ¡Hombre! Respira y piensa con claridad — le recordé y tan sólo en ese momento soltó el oso —. Ya comprendo porque no servías para nada en Fortnite. Estabas con los nervios matándote.

— Usualmente los disimulo bastante, pero créeme que esta vez olvidé el disimulo y cuidado. ¡Quebré la vajilla favorita de mamá!

— ¿La de platos y vasos blancos con detalles dorados?

— La misma.

— ¿Cómo continuas con vida?

— Le dije porque estaba así.

— Le diste lástima.

— Básicamente. — alzó sus hombros antes de girarse a mirar de nuevo los osos

— ¿Deseas que sea sorpresa o qué todos los estudiantes se percaten de ello? — le pregunté paseándome entre el pasillo con los estantes llenos de osos

— Discreto.

— Perfecto, busca un oso que entre en su casillero — golpeó su cabeza y se insultó por ser tan estúpido —. ¿Qué piensas escribirle?

— Su nombre — respondió con simpleza —. ¡Señorita! — llamo a la chica tras el mostrador y está no dudo en acercarse con prisa

— ¿Ya decidió por cuál diseño?

— Sí, un oso de ese tamaño — señaló el tamaño perfecto — y escríbele en un corazón rosa pálido Arya.

— ¡Esperen! — grite recordando el apodo de Kate hacía Arya

— ¿Qué mierda te pasa?

— Que sea un panda.

— ¿Algo más? — consultó la chica.

— No, eso sería todo. ¿Cuándo estará listo? ¿Puedes agregarle un lazo? — dijo Chris.

— Claro que le agregare un lazo — la chica llevó su mano a la libreta pensando —. Estará listo en dos horas.

— Gracias, pagaré cuando venga por él.

— Adiós — la chica se despidió con un movimiento de mano y ambos salimos de la tienda —. Necesito comida o mi rendimiento no llegará hasta la tarde. Invitas a la comida Chris, me secuestraste hasta este sitio, ¿cómo pretendes que sobreviva?

— Bien, bien. Vamos por una hamburguesa o una pizza — dijo rendido y nos encaminamos al restaurante de comida rápida más cercano

Habíamos logrado convencer a la profesora de dejarnos salir más temprano con la excusa de que llevaríamos la fotografía mañana mismo, pero ciertamente, veía muy lejos la probabilidad de presentar el trabajo mañana. Aunque este día no se podía considerar del todo perdido, ya saben, Chris invitará a al almuerzo como un buen mejor amigo y llenará mi estómago en lo que busco la manera de encontrar una buena foto para la entrega de ese trabajo.

Me senté en la única mesa vacía del local y Chris fue a hacer el gran pedido de comida. Saque la cámara lista para capturar lo que fuese que esperaba capturar y espere mirando la ventana, espere por minutos interminables hasta sentir la presencia de alguien justo en frente mío.

— ¿Lan?

— Hola Keydan — saludo alegremente.

— ¿Qué te trae por acá? — indague amablemente antes de tomar su mano y darle un apretón

— Vengo con mi novia — señaló con su barbilla a la chica que hacía la cola detrás de Chris —. ¿Qué haces por acá?

— Vengo con mi novio — señale a Chris causando su risa

— ¿Engañas a mi hermana con él? Porque es este el momento en el que inicio con mi protocolo de hermano mayor y recito la reglas de no romper su lindo corazón.

— ¿Qué? Es mi amante, planeó dejarlo cuando me alimente — le guiñe un ojo riendo

— Entonces debería de mantenerte vigilado — tomo una servilleta, saco un bolígrafo de su chaqueta y escribió algo —. Mi número, estaremos en contacto.

— Te enviaré un mensaje.

— Fue un gusto volverte a ver — dijo levantándose, se giró para mirar la enorme orden que traía Chris —. Cuida bien de ese chico.

— Claro. Cuando tenga la oportunidad lo atropello — respondió Chris y se sentó a mi lado —. ¿Quién es ese tipo? Tiene un aire muy parecido al de Kate — comentó tomando un papa

— Es su hermano mayor. ¿No llenaste los vasos? — pregunté incrédulo al agitar el vacío vaso

— No soy un pulpo. Te toca ir a llenarlos si no quieres morir de sed — tome la servilleta con el número de Lan y lo guarde en el bolsillo de mi pantalón

— Claro — tome ambos vasos y me acerque al área de bebidas

Un poco de hielo en ambos vasos, llenos hasta obligarme a caminar con cuidado o ser derramaría la preciada Coca Cola. Deje ambos vasos en nuestra mesa antes de iniciar a devorar la pizza de Chris, mi hamburguesa y las deliciosas papas que jamás podrían faltar cuando se iba por comida rápida. Una loca idea se cruzó por mi cabeza, saque la servilleta, apunte el número y envíe el mensaje.

¿Me puedes ayudar en algo?

¿Qué necesitas?

Sonrió al ver la respuesta de Lan. Tal vez el día no podría estar tan perdido después de todo. Tendría la fotografía y quién quien lo sabría, tal vez un poco de ayuda con algunas cosas.

¡¡WENAAAASSS!!

Espero que disfrutarán del capítulo (como tanto yo lo hice escribiendolo♡). Voten, comenten y dejen muchos corazones. :')

Tengo dos devastadoras noticias:

1) Bloqueo completo.

2) Mi computadora decidió ponerse malita y joderme, así que no habrán actualizaciones hasta que la mande a reparar. :( Pero ¡Hey! Miren el lado bueno, puede que cuando regrese el libro este finalizado y publiqué todo de una vez. ¡YAY! \(^-^)/

Un abrazo psicológico bonitos!!