Un carraspeo inundo el agradable silencio estableció entre ambos al iniciar con ese beso, ambos miraron en dirección al remitente y las mejillas de la chica se coloraron aún más, al ver a su madre de pie y mirándolos con el ceño fruncido.

— ¿Podrían explicarme que fue eso? — indago con un tono neutro. Ambos asintieron sin ser capaces de responderse ellos mismos esa pregunta —. Los espero en la cocina. No tarden. — dicho esto, dio media vuelta dejando a los dos jóvenes

La chica rozo levemente sus labios, tratando de concentrarse en que lo sucedido era real. Una delicada caricia en su mejilla la trajo de vuelta a la realidad. Alzo la mirada encontrándose con los oscuros ojos del chico y una sonrisa cálida adornando su perfecto rostro.

— Pienso en ti todo el tiempo y lo sabes. — le susurro el chico, dejando un casto beso sobre su frente e iniciando su recorrido a la cocina

— Lo sé... — le respondió, ganándose una sonrisa del chico

"Dos Iris Azules"

El mundo debía de estar conspirando en mi contra, no cabía duda y me podía hacer toda la popo del mundo sobre ese detalle. Ignore de nuevo el tono insistente de Love Me Love Me, colgando la llamada y con esa, iban veinte sin ser respondidas.

— ¡Apaga ese teléfono Ros! — grito histérica mi abuela

— ¡Dame un segundo! — tome el causante de la histeria de la abuela y mi nerviosismo

La canción resonó por toda la habitación, inundando con su melodía las cuatro paredes que rodeaban mi encierro a las 21:15 p.m., su nombre resalto y mi corazón golpeo con fuerza. Keydan debía de padecer alguna enfermedad al creer que respondería alguna de sus llamadas y lo dejaría morir con el teléfono adherido a su oreja creyendo que le respondería alguna de sus llamadas ¡Ni una sola seria respondida! Y me temía que la abuela entrara vuelta una loca y probablemente lanzando el teléfono contra alguna pared o lo que fuera con tal de destruir ese objeto.

— Apaga el teléfono. — hablo con impaciencia al golpetear la puerta

— No puedo. — y claro que no podía

— ¿Por qué niña? — indago con histeria

— Mamá podría llamar y si me quedo dormida no escuchare su llamada.

— Hablare con tu madre.

Dicho esto, sus pasos fueron un eco arrastrado por el pasillo hasta desaparecer en su habitación y el rechinar del viejo colchón me confirmo sus intenciones de dormir hasta el amanecer. Lancé el celular justo al lado de un Wilson dormido y continué con la redacción de la dichosa escena del beso y es que se me dificultaba narrar algo que no ha sido experimentado por mi existencia ¿Como lo hacían los demás escritores? Tal vez ellos ya habían dado su primer beso y mantenían una idea clara de cómo narrarlo con pasión o que se yo, pero nada de eso estaba a mi alcance. Había escrito una pequeña lista de las normales acciones de la chica y el chico al besarse.

Esos eran los únicos puntos que conformaban mi deplorable lista para narrar un tonto beso, pero ese tonto beso estaba iniciando a crear el estrés en todo mi cuerpo y ese punto... no era para nada bueno en mi vida, por dos simples razones; A) Mi estado de ánimo no era el mejor y B) Pasaba todo el tiempo tratando de lograr ese "malestar".

— ¿Kate? — grite espantada al escuchar la grave voz en medio del profundo silencio —. ¡Era hora de que respondieras a mis llamadas! — negué espantada y giré sobre la silla

— ¡Wilson! ¿Acaso estas mal de esa cabecita? No pretendía responder las llamadas de esa persona... — le rete entre susurros y alejando el teléfono de sus traviesas patitas

— Escuche cada una de las palabras que dijiste Katherine. — rodé los ojos por mi torpeza

— ¿Has visto lo que ocasionaste? Ahora debo de hablar con él. — lo señale con el dedo índice y mis manos temblaron al escuchar la grave risa de Keydan al lado de la línea

¿Acaso no le bastaba con ser hermoso? ¡También tenía que reírse de esa manera tan... tan... él!

— ¿Por qué tanta insistencia Olsson? — hable con claras intenciones de que captara mis ideas de terminar lo más rápido posible con esa llamada

— Hola, gracias por preguntar y todos nos encontramos bien. — hablo con evidente sarcasmo

— No estoy para tus chistes. — sentencié sentándome en la cama

— Lo siento... — volvió a reír y un escalofrío inundó mi cuerpo —. ¿Nos vemos mañana? — preguntó de repente

— ¿Ah?

— Que ¿si nos vemos mañana?

— ¿Habrá alguna actividad en el instituto y yo no estoy enterada? — fruncí el ceño extrañada

— No, que este enterado.

— ¿Entonces? — indagué aún más confundida

— Solo responde a mi pregunta bonita. ¿Nos vemos mañana?

— ¿Y si me violas? Tengo mucha vida por delante Keydan. — le reproche

— Confía en mí, no es nada del otro mundo. — lo imagine encogiendo sus hombros y una sonrisa se deslizo por mis labios

— No queda de otra Keydan.

— Dormiré feliz con tu respuesta. Buenas noches bonita.

— Buenas noches Key... — le susurre colgando la llamada

Yo no dormiría nada feliz después de esta llamada. ¿A este chico que le había picado? ¿Acaso había aparecido alguna nueva enfermedad y yo no estaba enterada? Resople mirando de mala gana al gato que había iniciado todo esto y sus traviesas patas. ¿Qué tenía planeado este chico?

— Si me violan mañana, será tu culpa Wilson. — le hable con la frustración acumulada

El felino soltó un maullido antes de saltar fuera de la cama y pasar su cola entre mis pies. Eso era jugar sucio. 

¡¡He vuelto!!

No publique el miércoles porque el colegio no ha dejado de molestar y estoy haciendo un proyecto (con mis amigas. ¡Saludos :D!) de una empresa :v

¿Les gusto el capitulo? ¿Quieren que el otro capítulo sea narrado desde el punto de vista de Key o Kate? ¿Ya escucharon el álbum de Shawn? ¡Yo sí y es hermoso! ¡Vayan a escucharlo! GO

Los dejo y les mando un bonito abrazo 7u7

PD: Tono de llamada de Kate en multimedia.