Capitulo 3 (Arruinado Cumpleaños)

Primero que nada aclarare que este One Shot es del año pasado del cumpleaños de Kardia de escorpío, así que el de esta año y sera después.

En segundo lugar, debo decir que este One Shot esta entrelazado a otros que son en si una misma historia de diferentes matices, en done cada familia muestra su vida con nuevos integrantes.

Así que deben leer los anteriores si no sienten que lo entienden del todo bien y tienen preguntas, pero igual existirá una sorpresa el próximo año.

En tercer lugar.

¿Ya fueron a ver el vídeo de la semana pasada?

Si no, ¿Que están esperando? ¿Una invitación? Pues los invito a verlo.

Aquí les dejo el link:

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Aquí el nombre del vídeo:

Audio Fanfic Saint Seiya. Una Papá Para Kiki, Capítulo 12 (Piscis) [ShaMu] {ShakaXMu}

Y el nombre de mi canal, para que vayan a seguirme si así lo deses:

AMMU TEIKOKU YUDAINA.

Ahora si, disfruten el One Shot para este caliente escorpión, literal... Jajajaja pero no piensen mal, terrones.

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Es tan raro que Acuario este lleno de ruido.

Es tan extraño qué en Acuario todo sean risas.

Tan curioso que en Acuario ahora, la frialdad no es lo único que reina.

Desde que Camus y Milo, se casaron y tuvieron a su hijito Camil, las cosas jamás volvieron a ser silenciosas o llenas de indiferencia como antes existía en el onceavo templo.

Incluso Hyoga se había vuelto oficialmente hijo de esos dos dorados, legalmente fue adoptado por ellos, y así que es parte de esta linda familia.

Tan diferentes los padres, uno complemente serio, frío, indiferente, el otro lleno de alegría, diversión, y calidez.

Es extraño, pero Acuario y Escorpio son una dupla qué nadie ha logrado romper hasta ahora.

Incluso con la llegada de los padres del acuariano, las cosas no cambiaron mucho... ¿O si un poco?

-Feliz cumpleaños, abuelito Kardia- Un pequeño escorpioncito de cabellos peliaguamarino y ojos iguales al actual bicho se hace presente, llevando entre sus manos una cartulina con un hermoso dibujo hecho él mismo.

-Wow, wow, wow- Toma aquel cartel, admirando atentamente aquel presente que le acaban de entregar -¡¡¡MIRA MI VENTISCA HELADA, NUESTRO NIETO ES UN ARTISTA!!!- No puede evitar girarse para que su peliverde amor, el cual está sentado en una silla, delante del comedor, apreciando a ambos -Si, lo puedo ver. Que bonito dibujo hiciste Camil. ¿El regalo para tu abuelo Kardia?-

-Si- El pequeño bichito, asiente con su cabeza, mirando a su abuelo Degel -Lo hice durante toda la semana- Sonríe encantado el pequeño, qué de inmediato es cargado con un solo brazo por el escorpión mayor -Quise qué fuera muy grande- Alza sus bracitos formando un circulo -Es un dibujo de toda nuestra familia— Habla todo emocionado, abrazando la cabeza del peli azul -Para ti, abuelito Kardia. Te quiero mucho- Le regala un pequeño besito en la mejilla.

Si bien, en su actual reencarnación, aquel fallo cardiaco se había ido, y se sentía mucho mejor, el bicho mayor no podía dejar de sentir que este mismo órgano late demasiado rápido, que teme se le salga del pecho, aún así es no le importaría, se emociona por tan cariñoso y adorable nieto qué tiene, qué lo llena de muchos abrazos y mimos -¡¡¡Y YO A TI MI PRECIOSO ESCORPIONCITO!!! ¡¡¡TE QUIERO MUCHO, MUCHO Y GRACIAS POR EL MEJOR REGALO DE TODOS!!!— Tiene mucho cuidado de no arrugar su preciado cartel, abraza cariñosamente a su nieto, qué está sumamente cómodo en su brazo, sin miedo a caer.

Le produce cosquillas el esponjado y cabello de su abuelo -Ji, ji, ji. Los hice a todos— Menciona rápido el pequeño, señalando el regalo -Allí están los bisabuelos Krest, con el bisabuelo Zaphiri, los papis de mi abuelito Degel- Mira al peliverde, que lanza un suspiro nostálgico.

-Je, je, je, je. Mis querida suegros— Sonríe nervioso, a la vez que triunfante.

-Los bisabuela, te quieren mucho. Dicen que eres lo mejor que le pudo a ver pasado a mi abuelito Degel- Sin duda la inocencia del niño no le permite todavía leer entre líneas.

-¿Enserio?- Hasta el bicho mayor se cree esas inocentes palabras.

-Kardia... Sabes que eso...- El anterior Acuario, se detiene a mitad de la oración, decidiendo mejor solo negar con la cabeza, con una sonrisa cómplice.

-Bueno... Les caigo bien, creo...- Claro que le gustaría eso pensar, pero es evidente que no.

Desde luego le gustaría decir alguna de sus típicas palabras para sacar algo de su frustración ante este tema, pero desde que conoció a Camil, se prometió a si mismo no decir ninguna mala palabra hasta que su nieto fuera adolecente, todos desean conservar la inocencia y pureza del pequeño bichito.

-Oooh, mira abuelito también los dibuje a ustedes- Señala con su pequeño dedico a quien representa al peliverde -El abuelito Degel tiene su armadura dorada, con nieve saliendo de su mano y, tú abuelito, también con la armadura de escorpio y Antares- No es que quiera presumir, pero ama contar la historia de todos sus dibujos.

-¡¡¡ERES ASOMBROSO CAMIL!!! Capturaste mi perfil Griego- Sonríe tomándose el mentón, mientras profundiza un poco más su voz.

Degel le da mucha risa esto, y niega con la cabeza -Ay, no puede ser...- Le da mucha gracia ese comportamiento de su amado Kardia, ya que en efecto el escorpión dueño de su corazón, es de ese origen, y le parece una bobada lo que ha dicho.

-Además, capturaste la hermosura de mi tempanito de hielo. Que lindo se ve- Hasta parece hacerle ojitos a medio morir al dibujo -Aunque prefiero al original qué me da brazos yyyyyyy...- Alagar mucho la última palabra, para solo bromear -Mucho más- Sonríe pícaramente, mira de reojo al peliverde de ojos violetas qué frunce el ceño en señal de disgusto y vergüenza.

-¿Qué cosas más?- El niño ladea su cabeza con suma curiosidad, ante esta conversación.

Kardia rápido se pone algo nervioso, y desvía su mirada, tratando de pensar en algo para no hablar de mas -Esto... Es...- Pero no se le ocurre nada bueno.

-Cartas, Camil, cartas. A tu abuelo Kardia le dio cartas y poemas- Es lo mejor que se le ocurre para que el niño no pregunte más, a la vez que ayuda a aliviar el sonrojo en sus mejillas.

-Qué bonitos son- Sin duda es un niño que admira mucho el amor, ya que siempre lo ha visto de la mano de sus padres y tíos, por eso siempre se termina emocionando por ello -¿Y qué le escribes, abuelito Degel?- Ahora la curiosidad e Camil está sobre las cartas y su contenido.

-Emh...- Solo puede dejar salir eso, mientras sus ojos violetas bailan, por no saber que decir.

Cosa que toma Kardia como una perfecta oportunidad -Me escribe qué soy el mejor caballero dorado de escorpio del mundo, qué le gusta mi cabello, mis ojos- Sonríe triunfante, para seguir auto halagándose -Que lo vuelvo loquito cuando le digo que lo amo, también cuando lo cargo- Eleva más alto al pequeño peliaguamarino y le da suave vueltas -Y dice que le gusta que siempre estemos juntos, para que le de muchos besitos en la frente— Acción que repite con su nieto, el cual sonríe enternecido y abraza a su vuelo que quiere tanto.

-Qué románticos son, iguales a mis papis- Es allí qué recuerda algo el niño y rápido señala ambos en su obra -También los dibuje a ellos, aquí están aquí- En efecto, allí esta Camus -Mi mami usa la armadura de acuario, e hizo una flor helada con su cosmos, y mi papi tiene su armadura, y abraza a mi mami y también aquí está mi hermanito Hyoga con su armadura de Cisne, y a Shun con Andrómeda...- Se queda algo pensativo, ya que algunas palabras se le complican aún, pero alza sus bracitos para seguir explicando –Y yo estoy aquí- Se señala a si mismo con una orgullosa sonrisa -Junto a la armadura en su versión de escorpión y también dibuje un escorpión rojo porque quiero uno de mascota- Asiente varias veces, sonrojándose por la emoción que tiene al mostrar el enorme cartel qué le dio a su abuelito.

-Es impresionante tu imaginación Camil. Es muy lindo que dibujara a toda la familia- Halagar a su nieto es algo que Degel hace en automático, pues es feliz al verlo tan alegre, y como lo que es aun niño sano y entusiasta.

-Gracias, abuelito Degel, me gusta mucho dibujar y quisiera aprender más- No se limita nunca en sus palabras, tiene una enorme confianza en toda su amada familia.

-Oh, ¿De verdad?- Le impresiona este gusto artístico qué no se sabe hasta ahora de donde lo heredo -Si mal no recuerdo, existe una escuela para artistas en Francia... Aunque no se si aun exista— Se pone pensativo al recordar el siglo XVIII.

-Me gustaría ser un artista, y también el futuro caballero de Escorpio- Sonríe, asintiendo muy gustoso –Por eso voy a entrenar mucho para ganarme la armadura y estudiaré muy duro para hacer ambas cosas— El pequeño niño tiene una determinación absoluta qué impresiona al anterior Acuario, para dedicarle al peliverde una gran sonrisa que sin duda es herencia de parte del bicho mayor que lo sigue cargando con euforia.

-Se que lo vas a lograr. Solo debes poner mucho empeño y trabajar duro en tu deseos- Admira a su querido nieto, dedicándola una dulce mirada -Ya eres alguien sumamente talentoso en ambos ámbitos- Degel habla con completa sinceridad, ya que para él, la facilidad de palabras es muy poco común en él.

-Sipi, lo haré- Asiente con enorme decisión, frunciendo su ceño y sonriendo -Mamá dice que si quiero lograr lo que deseo debo de esforzarme el doble y papá siempre me dice que soy el más inteligente de todos, y me compra muchos colores y crayones, además dice que luego me comprara acuarelas y... Un lienzo- Habla muy rápido, ya emocionado por la motivación que tiene a su alrededor.

Sin duda esas últimas palabras hacen estremecer al Acuariano del siglo XVIII por el trauma de aquella época.

Pero a pesar de la bonita atmosfera, ya no se sigue hablando de temas alegres, ya que Kardia empieza a hablar sobre algo en particular -Bichito bonito de mi corazón. Me encanta tu dibujo pero... ¿No crees que alguien sobra?- Su mirada se vuelve algo seria, aunque su mueca de felicidad sigue presente.

Camil ladea su cabeza confuso -¿Eh? ¿Alguien sobre?- De inmediato se fija en su dibuja, inspeccionándolo.

-Si— Asiente el peli azul. -Creo que él- Señala al actual Escorpión.

-Pero... Abuelito Kardia, es mi papi. No lo puedo quitar- Preocupado mira al Escorpión del siglo XVIII.

-Kardia, no te atrevas a decir cosas feas sobre Milo y menos delante de Camil- Degel frunce el ceño, mirando serio a su amado bicho.

-Ay mi témpano. No estoy diciendo nada malo de Milo... Es solo que...- Su sonrisa forzada, demuestra que no lo aprecia mucho que digamos -No me agrada... Bueno, me cae algo... Es el papá de mi nieto y eso hace que lo soporte un poco... Pero no tanto para verlo en mi regalo de cumpleaños- Habla entre dientes, tratando de no demostrar su cólera.

-Pero... Es parte de la familia, es mi papá y lo quiere mucho a usted- Camil lo mira con esos ojos iguales al Escorpión que no le cae bien a Kardia, pero al ser enmarcados con las cejas herencia de Degel y Camus, le hace figura que está mirando a un pequeñito Camus.

-Si, eso lo sé...- Se derrite por complete al ver esa carita tan linda de su nieto.

-Además, le está preparando su platillo preferido la Musaka- Esa mirada, esa adorable vocecita, provoca que comience a sentir culpa el mayor por hacer de menos al padre del niño.

Tanto es así el efecto, que esta recapacitando un poco, contemplando los pros y contras de llevarse mejor con Milo.

Por una parte, se robó a su hijo, lo embarazo, pero se casaron, dieron vida a su precioso nieto. Milo es bueno, y ridículamente amoroso con Camus y Camil. Si se pone a pensarlo bien, no es mal partido.

Sin embargo, los celos paternales están presentes.

-Tal vez... Lo es juzgado mal a veces...- Baja levemente su cabeza, poniéndose a realizar una introspección sobre sus acciones con Milo.

-¿Juzgado mal?- Camil, pegunta sin entender del todo el significado de esas palabras.

-Al fin estas pensando mejor las cosas- Asiente satisfecho Degel, el único que acepta mejor la relación de Camus y Milo. Qué si bien, vigila qué el actual Escorpio ame de verdad a su preciado hijo, el octavo dorado se lo ha ganado con buenas acciones.

Sin embargo y en ese preciso momento, el Griego pelicerúleo sale todo feliz de la cocina del onceavo templo, llevando entre sus manos cubiertas por los guantes de cocina, una charola grande de Musaka -¡¡¡ESPERO QUE TENGAN MUCHA HAMBRE!!! ¡¡¡ESTE ES EL PLATILLO PRINCIPAL PARA MI SUEGRO POR SU CUMPLEAÑOS!!!- Habla tan emocionado qué no se fija de la alfombra mal doblada qué lo hace tropezar, provocando que la comida que llevaba se dirija en dirección a Kardia y Camil.

A lo cual el Escorpión mayor reacciona a cubrir a Camil con su cuerpo, pero lamentablemente no todo lo que lleva es salvado.

-Ay no...- Musita en el suelo, consternad por que la comida ha caído sobre su suegro.

-¡¡¡KARDIA, CAMIL!!! ¡¡¡¿ESTÁN BIEN?!!!- Degel se asusta, levantándose de la silla, preocupado por que algo malo les hubiera pasado.

Al escuchar que su suegro peliverde, llama a su hijo se aterrada, sobre saltándose -¡¡¡¿CAMIL ESTÁ CON ÉL?!!!- Milo, mira angustiado al peli azul.

-No pudiese ser...- Kardia habla con furia, mientras camina para depositar al niño en los brazos de su amado Degel -Solo una cosa debías hacer y la haces mal...- Se está conteniendo solo porque Camil está presente.

-Je, je, je ¿Suegro?- Se pone de pie, para retroceder, pero también para asegurarse que su pequeño bebé este a salvo -¿Camil, no te lastimaste? ¿Verdad, mi amor?- Preocupado y aterrado espera la respuesta de su pequeño, que en efecto no tiene ni una pisca se esa comida caliente sobre él.

Sin embargo los ojitos del pequeño bichito se comienzan a aguar -El... El... Regalo de mi abuelito... Kardia... Snif, snif...- Se siente bastante triste y dolido de su inocente corazón, y por su pesar comienza a llorar, y para acto seguido ocultarse en el pecho del peliverde.

El ex Acuariano se sorprende por este acto del pequeño, pero su instinto paternal le dicta que debe calmarlo pronto -Camil... Esta todo bien. No te preocupes- Le comienza a acariciar la espalda para tranquilizarlo aunque sea un poco.

-Ay, mi bebé...- Ver llorar a su pequeño bichito le parte el corazón, frunciendo el ceño en son de angustia –Discúlpame, no quise...- De repente siente el cosmos enfurecido de Kardia tan cerca, que por mera supervivencia se gira para verlo, traga saliva y suda frio al darse cuenta del estado de su suegro.

-¡¡¡DESTRUIRTE MI REGALO ESPECIA QUÉ MI NIETECITO ME HIZO CON TANTO AMOR!!!- Solo mira el cartel lleno de comida, bastante quemado por la comida caliente que se derramo sobre él.

Poco le importa que su piel se ha irritado por aquella Musaka, es un caballero dorado ha soportado calores extremos en su cuerpo, pero esto es algo que no puede siquiera soportar.

-Su... Sue-Suegro...- La voz de Milo empieza a temblar, sabe que esta en problemas - Fue un accidente no quise...- Milo siente el terrón en su ser, al ver como se acerca peligrosamente el hombre que nunca lo ha querido.

-Corre maldito bicho rastrero- Habla entre dientes, frunciendo el ceño por el enorme coraje que le genero esta torpeza de su yerno.

Sabe que va a morir, así que es mejor hacerle caso y salir huyendo escaleras abajo, mientras es perseguido por el cumpleañero Kardia, que poco le importa ahora la fiesta que iba a tener en acuario esta tarde; Ya que Milo arruinó el mejor regalo del mundo e hizo llorar a Camil y eso, no se lo va a perdonar.

Además que no puede gritarle como es debido, ni golpearlo como quiere, ya que podrían asustar a Camil y eso también lo sabe Milo, por eso prefiere escapara, no va a utilizar a su hijo como escudo, para evitar al cólera de su suegro.

A los pocos minutos, Camus sale de la cocina, bastante confundido por el ruido qué suena.

-¿Qué pasa?- Mira a su papá cargando al pequeño Camil, consolándolo para que se calme, pero lamentablemente no puede parar de llorar, y esto preocupa peor al Acuariano -¿Camil? ¿Papá, qué paso? ¿Por qué llora mi bebé?-

Lanza un suspiro, mientras sigue cargando con cuidado a su nietecito -Milo tuvo un accidente con la Musaka, le cayó encima a Kardia, mientras lo llevaba cargando- Señala con su cabeza al pequeño niño -A Camil no le paso nada, pero...- Su voz se torna triste, mientras mira el cartel en el suelo, todo lleno de comida aún caliente -El regalo que le dio a tu padre, termino arruinado—

-Ay no...- Suspira, lamentándose este hecho, para acercarse a ambos mientras deja el pan que había hecho para acompañar la comida principal -Camil, no te preocupes... Mi pequeño escorpioncito- Le acaricia la cabecita, mientras se pone a su nivel y busca su rostro.

Sin embargo, el bichito sigue lloriqueando, abrazándose a Degel. Quiere limpiar sus lágrimas, por el sentimiento de tristeza que tiene es muy grande.

Y allí están, dos Acuarios consolando al pequeño bichito de la familia, el actual dorado de Escorpio siendo perseguido por su suegro y cumpleañero Kardia, qué ahora si le grita hasta de lo que se va a morir.

Mientras que Hyoga, siendo el encargado de ir por el pastel, viene con este con mucho cuidado desde Rodorio, acompañado de Andrómeda.

Sin duda, pronto recibirá la sorpresa de que la comida especial para su abuelo Kardia se ha arruinado, gracias a su distraído y descuidado padre. 

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Buenos días, tardes, noches, ¿Que hora es? ¿Quien me ha robado el reloj?

¿Como están mis terrones de azúcar?

Espero que estén super bien.

Yo aquí publicando un hermoso One Shot por el cumpleaños de Kardia de Escorpió, ya que hoy anda de manteles largos.

Eso si diré, que no es regalo de este año, sino el del pasado, por ende tendrá mas como casi todos jajaja.

Ya ni modo me alcanzaron los días.

En fin, espero que les gustara y si tiene alguna duda, deben leer otros, por que todo esto esta entrelazado con demás One Shot de diferentes dorados, y ademas que el próximo año al culminar todos estos regalo con esta temática, sabrán de que trata.

Ya saben que todo esto esta planeado desde el año 2021, pero que nomas no, no se ha dado oportunidad... Aunque la idea viene desde años antes, peor ya planeado bien en ese.

Ahora vamos a cantarla la canción oficial de la familia terrón de azúcar para el buen Kardia.

Y uno, y dos, y tres...

Un día feliz para ti, hoy es tu cumpleaños si que si, felicidades Kardia, tu cumpleaños si que si.

Un día feliz para ti, hoy es tu cumpleaños si que si, felicidades Kardia, tu cumpleaños si que si.

Espero que le den muchas manzanas a este glotón caballero, y un acuario también que le enfrié las ideas jajajjaa.

Gracias a todos los terrones por apoyarme y siempre leerme, comentarme, y dar votito a todas mis locuritas.

De verdad se los agradezco de todo corazón, son los mejores del mundo mundial.

Por favor, cuídense mucho, hagan caso a las medida de higiene y a todos los terrones de Acapulco Guerrero, espero que estén bien y que se recuperen, de verdad se los deseo de todo corazón.

Los quiero mucho terrones de azúcar.

Ammu se va.

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