Un portal rojo, en el sistema de clasificación de la Fundación tenía la designación "S" solo aptos para aurores de grado especial debido a que albergaba demonios sumamente poderosos.

De la ruptura varios brazos de aspecto grotesco aparecían. Los gritos y rugidos del otro lado eran muy atemorizantes...

—Ahri...

La demoaurora se vio envuelta en un aura de reiryoku debido a Gryal Codex. Invocando el alma de su Servant clase Lancer, Rango S: Scathach, lista para combatir.

—Debemos proteger a este chico–.

La dupla se puso en guardia para el inminente enfrentamiento...

—¡ZIIIIIRGGHHTTT!–.

Decenas de demonios salían bruscamente del portal...

—Ahri necesito que vayas y busques si hay estudiantes aún–. Exclamó mientras subía las mangas de su chaqueta.

La demoServant asintió y saltó del techo de la escuela.

—¡Escúchame Yujiro quédate encerrado hasta que yo te diga que salgas!–.

Estaba preocupado por Asami. Skoll y Hati eran sus guardias, pero no compartía el campo de visión como lo hacía con Rikka, debía seguir usando Orden del Pacto.

—Solo me queda confiar en que se encuentre bien–.

Las venas alrededor de sus ojos se resaltaron. Cerró los parpados para revelar sus ojos de sangre, el Sharingan.

—¡GAAAAGHHHT!–.

Apenas tocaron el suelo el Auror Cazador puso su mano izquierda, moldeando parte del techo de la escuela en dos grandes columnas para aplastarlos.

Tenía una visión de 360 grados dándose cuenta que varios demonios lo iban rodeando desde los bordes del edificio.

Tocando con ambas manos desintegró las paredes en la estructura, para reintegrar la materia en enormes columnas maleables que terminaban en picos muy afilados.

Como si fueran un organismo vivo las columnas perseguían a todo demonio que se fuera aproximando a Yutaiji, mientras el auror no desaprovechó para meter una de las columnas en la boca del portal.

—Con esto debo detenerlos aunque sea un poco–.

Los pocos demonios restantes, fueron víctimas de ataúdes hechos con el propio material de la estructura de la escuela, que los atraparon antes de ser empalados por las columnas.

Ahri espero que hayas terminado de evacuar.

Si, apenas y evité quedar atrapada por Zarojigēn Array.

Vale, regresa rápido porque esto no acaba.

Entendido, subiré en unos segundos.

Laa manos le dolían un poco, así que aprovechó para abrirlas y cerrarlas con el propósito de relajaras.

Zarojigēn Array su ritual innato en términos de su hermana Makimari tenía un potencial inconmensurable. La capacidad de deconstruir y reconstruir la materia mediante vibraciones hechas por sus manos, le daban la capacidad de hacer muchísimas cosas.

Todo eso sonaba muy bien, pero para hacer un uso óptimo debía estudiar mucho. Tener amplios conocimientos sobre física y química, para conocer las limitaciones de su ritual en la transfiguración de la materia, no lo hacían un ritual adecuado para todos.

La columna fue agrietandose hasta reducirse a trozos. Nuevamente los demonios saturaron el portal, saliendo en cantidades tan masivas.

—Llevare mi cuerpo al límite...

Las venas de su brazo izquierdo se resaltaron.

—¡Máxima Salida!–.

Chocó su mano con fuerza en el suelo...

Temblores de enorme magnitud, fueron el presagio cuando toda la estructura del colegio junto con el terreno a su alrededor fluyeron hacia arriba.

Aquel ataque tan masivo y de proporción inconmensurable era visto por Ahri-Scathach con asombro.

—¡SORA!–.

Gigantescos pilares de tierra reforzado con concreto ascendieron, bombardeando por todos lados el portal, pareciendo este solo un insignificante destello.

Yujiro permanecía en la plataforma en la que se ubicaba Yutaiji. No tenía palabras de lo que estaba viendo, era algo tan divino, el término más exacto para calificarlo.

Los pilares fueron descendiendo, perdiendo su forma volviendo lentamente a sus estados anteriores, el colegio.

Ahri-Scathach apenas tuvo la oportunidad se apresuró en subir al colegio donde reposaba Yutaiji de rodillas, agarrando todo su brazo izquierdo con el derecho.

—¿Eso que tienes sobre tu cuerpo es escarcha?–. Se agachó con el propósito de ayudarlo.

—Si, es lo que sucede cuando desato todo el poder de Sora de golpe, la mitad de mi cuerpo se congela–.

La escarcha fue desapareciendo poco a poco, dejando al auror como si nada a la vista de su demoServant.

—Necesito recargar la técnica, no puedo usarla hasta dentro de cinco minutos, solo me queda Jigoku–. Dijo con la respiración jadeando.

—Con lo que acabas de hacer tomate el tiempo que necesites–.

El portal aún con todos los ataques de Yutaiji creció en tamaño. Más demonios fueron saliendo para caer en el techo.

—Ahri, necesito que traces senderos con tu lanza–.

La demoaurora ya estaba en posición de combate pero se volteó a verlo confundido. —¿Por?–.

—¿No confías en mi?–.

—Con mi vida Maestro Yuu–.

—Hu... ma... nos...

—Cada vez salen más fuertes–. De la oscuridad metió su mano para tomar su katana, la cual le brillaba su hoja.

—Yo me encargaré de esto, tu necesitas descansar Maestro Yuu–.

—Tu mismo lo has dicho, estamos comprometidos, la responsabilidad es de ambos–.

Ese era su hombre, el de la inquebrantable determinación y voluntad indomable.

Ambos lados dieron un paso, moviéndose increíblemente rápido para chocar.

Deslizandose desde abajo Ahri golpeaba la punta de su lanza para dibujar una raya.

Clavó su katana en la cabeza del demonio antes de tocarlo con su mano derecha.

Todo su cuerpo se llenó de bultos antes de ir cayendo su piel y carne finalizando en una montaña de polvo.

—¡GROOARRR!–.

Decenas de demonios saltaron listos para asesinarlo.

—¡VENGAN!–.

Usando su Zankidatkaitsu parecía que detenía el propio tiempo.

Arrojó su katana en posición fija, mientras el fue acomodando a cada demonio en una fila, no sin antes haberles tocado la cara a cada uno.

Las cabezas de los demonios explotaron, mientras sus pechos fueron perforados por la hoja de Onimaru clavandose en el suelo.

—Ya esta listo Maestro Yuu–. Ahri-Scathach tomaba su lanza de una montaña de demonios que había asesinado.

De nuevo el portal creció en tamaño. Ya no salieron demonios pero en su lugar una enorme mano escamosa atravesó.

Cuernos, colmillos y unos ojos sedientos de sangre.

Yutaiji observaba con molestia suspirando por lo que estaba a punto de ocurrir.

—Maestro Yuu...

—Si.. Es el jefe de la mazmorra–.

El Rey de la Avaricia: Smorrk

Con su salida el portal desplegó una torre de luz qué fue esparciendose por el cielo.

—Esto es malo, una barrera que no podrá desaparecer hasta...

—Qué lo matemos–. Agregó la demoaurora.

Sus pies reposaron en el techo, destrozando parte de la estructura.

Con un rugido de alto poder destruyó los vidrios del colegio, demostrando su imponencia total.

Con su sola aparición el cielo fue consumido por nubes chispeantes desbordantes de intensos relámpagos.

—¿¡Pero que está sucediendo!?–. Asami junto con Skoll y Hati llegaron al techo del colegio, llevándose la impresión de lo que sucedió apenas en unos cuantos minutos.

Las fauces del dragon comenzaron a desprender humo.

Su sentido del radar se activó...

—¡AL SUELO!–.

Abrió su boca, desatando una potente llamarada tan caliente que fue capaz de perforar la barrera que los encerraba.

Alrededor de los cuatro adolescentes se desmoronó una cúpula que el auror construyó para protegerlos.

—Maestro Yuu, debemos detenerlo antes de que se libere totalmente del portal–. Le ofreció la mano para levantarlo.

Yutaiji fue hacia Asami y Yujiro. —Necesito que se alejen lo más que puedan, Skoll y Hati están más que dispuestos a protegerlos–. Volteó hacia Ahri-Scathach. —Nosotros nos encargaremos de el–.

—Pero Yuta–. Era su primer amigo. El amor que sentía por el era mayor a su miedo.

—Eres mi amiga, no voy a arriesgarme a que te pase algo–.

—Pero...

—Vamos Asami–. Yujiro le tomó del brazo comenzando a correr seguidos de los lobos demonio.

—¿Entonces eso es lo que hiciste al venir aquí? ¿A conseguir pretendientes cuando ya estas comprometido conmigo?–. La joven demoaurora le miró con mucha seriedad.

—Qué fastidio...

Tocó el suelo con su mano derecha para desintegrar uno de los senderos qué Ahri-Scathach había hecho con su lanza.

El rápido movimiento fue clave debido a la posición en la que estaba el pie del dragón para desestabilizarlo.

—Vas a tener que aceptar que te lleve al cine Maestro Yuu–.

—Pero si yo... bueno esta bien–.

Más demonios salían del portal para proteger a su amo recién atacado.

—Sígueme Ahri–.

Desaparecieron en solo un parpadeo...

Dos destellos, uno negro y uno fucsia asaltaron desde arriba con su espada y lanza.

Tocó con su mano derecha para saltar lo más que pudo hacia adelante, tocando ahora con la izquierda.

Ahri-Scathach con un equilibrio permanecía sobre su lanza materializando distintas runas.

V U E L E N

Varios demonios se elevaron al cielo, donde Yutaiji los esperaba para atravesarlos con una lanza hecha a partir de otro demonio.

Ambos aurores retrocedieron violentamente cuando Smorrk batió las alas para elevarse a los límites de la barrera.

El Cazador se aferró tocando con Sora, moviéndose y arrojandose al aire cara a cara con el dragón.

Smorrk cargó nuevamente su aliento...

Desde la más mínima sombra de Yutaiji Ahri-Scathach surgió.

B A R R E R A

Smorrk desató su llamarada, y aún con la protección del comando de runas no fue suficiente debido a que se iba agrietando.

—¡Ahri lanzame!–.

La demoaurora de inmediato le tomó de la mano para arrojarlo antes de que su barrera fuera destruida, recibiendo las intentas llamas.

Pasando sobre su cabeza fue frenando y deslizandose por su cuello, donde nuevamente Ahri-Scathach apareció desde una de sus sombras.

—¡Roaaaar!–. El cuerpo de Smorrk comenzó a brillar.

B A R R E R A

Todo su cuerpo desató un pulso de energía que desapareció por unos segundos la barrera que los encerraba.

Los dos, el maestro y la servant caían inconscientes hacia donde se ubicaban la jauría de demonios a esperas para matarlos.

Su sentido del radar se disparó permitiendo a Yutaiji despertar. Tomó a Ahri para seguido tocar con Sora la nada.

Pudo construir barreras de las particulas atmósfericas para detener poco a poco su caída, pero eso también lo estaba lastimando por protegerla.

—¡Lo tengo!–.

Usando ZAN fue moviendose ágilmente por las plataformas atmosféricas para descender a pocos metros de los demonios... Logró tocar la superficie del suelo.

Con Sora formó múltiples picos largos para empalar a tantos como pudo, limpiando el panorama por unos segundos.

Aquellos charcos de sangre se hacían ríos por todos los demonios que iban muriendo, pero aun seguían saliendo más.

—Me estoy quedando sin reiryoku, no podré mantener a Ahri-Scathach, tengo tres opciones, lograr acercarme nuevamente a Smorrk para matarlo con Zarojigēn Array, intentar llevármelo con mi Expansión de Dominio o darle toda mi energía a Ahri para que gane–.

—Ninguna, haré uso de mi propia reserva–. Ahri recuperó la percepción.

-¿¡Yuyu, yuyu estás ahí!?-.

-Maki-.

-Estoy enterada de lo que está sucediendo, estamos al otro lado de la barrera pero no podemos pasar-.

-Si, lo imaginé-.

-Mandamos a llamar a Satsuri debido a su ritual para evadir las barreras-.

-Entiendo-.

-No creo que llegue a tiempo así que escucha bien-.

-¿Si?.

-Desac...

Las barreras tenían la propiedad de interrumpir cualquier tipo de señal. Debido al momento en que esta falló la Capitana del DECAAN pudo contactarlo, pero tan pronto se recuperó la estabilidad de la barrera la llamada se cortó.

Sin tiempo para centrarse en eso tocó el suelo para levantar un muro, lo suficientemente grueso para ganarle tiempo.

—Ahri estate atenta–.

Las venas en su mano derecha se resaltaron...

Tocando bajo el con su mano derecha desató Jigoku a toda su potencia, desintegrando la mitad de la escuela, haciendo llover trozos de piedras.

"Los Aurores poseían varias reservas de reiryoku, estas se llenaban automáticamente al dejar de usarlas. Hacer pausas en su uso hacían que el llenado fuera más lento y en los casos de hacer uso continuo agotaba las reservas completamente"

Como Auror de Grado Especial poseía un valor de su reiryoku que no podía calcularse. Pero debido a su condición con Rikairi ella drenaba la mayor parte de su energía redujendolo a los valores de un auror de grado semi especial.

Estar usando su ritual de forma constante estaba llevando al límite sus brazos, en una guerra de desgaste que no podría ganar a menos de apostarlo todo.

—¡Expansión de Dominio!–.

Haciendo su sello "Mudra" con ambas manos apuntó la vista hacia Smorrk, qué en respuesta le lanzó otro aliento llameante infernal.

—¡Maestro Yuu eres un irresponsable!–.

—¡Bankai: Jardín Prisión de Enmhawn!–.

Bajo sus pies se dibujó su Xy Gua Raishen (Aguja de las Siete Marchas)

Desplegada la brújula múltiples manos y puños hechos de oscuridad sólida fueron arrivando, hasta llegar al límite de enormes brazos qué se juntaron para hacerle frente al ataque de Smorrk.

—¡Necesito encerrarlo!–.

La potencia del ataque de Smorrk iba en aumento, haciendo del plan del auror una inutilidad.

—¡Quién se canse primero pierde!–.

D E S V I A

La demoaurora no iba a ignorar a su prometido haciendo uso nuevamente de un comando rúnico...

—¡Eres mio!–.

Las manos del dominio obtuvieron la victoria luego de que el aliento infernal de Smorrk se desviara. Permitiendo que una de las extremidades sombrías le agarrara, he inmediatamente más manos fueron tras el.

Ahri-Scathach veía con una sonrisa como su querido había logrado la victoria.

—¡YUU!–.

Los ojos de Yutaiji quedaron en blanco, cayendo inconsciente al suelo...

Igualmente Ahri perdió su Cosplay cayendo también inconsciente al suelo...

Capítulo 12:

Rojo