Conociendo a Sarada...
Narra Kawaki
Exactamente las 10:00, tengo exactamente 15 minutos para dormir y aprovecharé cada segundo.
Llegué a buena hora está mañana, vi que la Uchiha llegó pero no quise hacer ni decir nada, de seguro, la metí en problemas por el comentario a su padre.
O tal vez piense que soy su no-
No, no , no, no
Imposible que algo así pase.
Demonios Kawaki
¿En que estas pensando?
Se regañó a sí mismo situando un libro que cubría su cara, casualmente el mismo que la azabache devolvió a la biblioteca.
El quería saber si realmente había enmendado su error y decidió ir a echar un vistazo a la biblioteca así en una de esas casualidades de la vida vería a la Uchiha, pero no fue así.
Ni siquiera la vio llegar.
Cuando estaba a punto de dormirse escuchó unos pasos que se dirigían a el.
- Hola...
Saludó sonriendo gentilmente
Kawaki se levantó en seguida llevándose la sorpresa de la azabache que lo miraba fijamente, estando al parecer muy feliz.
Kawaki: Hola...
Habló seriamente cerrando el libro y desviando la mirada.
Kawaki: Sarada...
Completó el saludo, aunque lo que menos esperaba era que la chica se arrodillara y se quedara a su altura para abrazarlo.
Sintió todo su cuerpo tensarse ante el contacto de el y la azabache.
Sarada: Muchas gracias...
Susurró aún pegada a su pecho.
Kawaki: Oye, ¿Que estás haciendo?, ya sueltame, odio los abrazos.
Y no era broma, realmente su fuerte no era el contacto afectivo físico.
Sarada: Lo siento...
Se separó sin quitar esa deslumbrante sonrisa.
Kawaki: ¿Porque me agradeces?
Se hizo el desentendido.
Sarada: Por lo de ayer, con mi padre, sé que fuiste tu, eres el único que me oyó cuando el me rechazó.
Desvió la mirada recordando ese bochornoso momento.
Kawaki: Sobre eso...
Se levantó de su lugar haciendo una leve inclinación.
Kawaki: Por lo que dije, lo lamento mucho, no debí ofenderte de esa manera.
La chica se quedó perpleja pero reaccionó.
Sarada: Tranquilo, estas perdonado.
Sonrió otra vez dejando un momentáneo silencio entre ambos.
Kawaki: Creo que ya pronto vamos a entrar a clases, debería irme.
Sarada: También yo...
Respondió llendose primero mientras que Kawaki se limitó a verla alejarse.
Sarada: ¿Que no vienes a clase?
Preguntó volteando a verlo
Kawaki: Si, en un minuto.
Sarada: No llegues tarde...
Habló para finalmente desaparecer en el umbral de la puerta a lo que Kawaki se quedó viendo como el viento sacudía las ramas de los árboles.
"Esa chica, me tomó por sorpresa"
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