El momento.

PJ y Palette entraron de nueva cuenta en la casa, ya era tarde según su logística, así que se acercaron a buscar a Error, pero en el camino se toparon con la sorpresa de que ahí estaba el tío de PJ, Fresh.

-¡Heya, Jammy!.-

-Ay no...- susurró el nombrado mientras se acercaba a saludar a su tío.- ¡Hola, tío Fresh!.-

-Having fun?.-

Paper desvió la mirada hasta su padre, quien no podía dejar de mirar a Fresh con molestia.

-Am... ¡Sí!.- sonrió levemente.- De todas formas... ¿Qué haces aquí?.-

-¿No puedo venir a ver a mi sobrino favorito?.- sonrió.

El hijo del Destructor se limitó a sonreírle a su tío, mientras volvía a mirar a su padre, esperando a que él supiera cómo deshacerse de Fresh.

-En fin, ¿ya van a dormir, kiddos?.-

-Uh... Sí.- PJ pensaba en una forma de despistar a su tío.- ¿Dónde dormirás, tío Fresh?.-

-Aquí abajo, como siempre, imagino.- se alzó de hombros.

Error, aprovechando que Ink seguía dormido en el sillón, decidió sugerir algo.

-Podrías dormir arriba, como hiciste hace rato, de todas formas, pensaba destruir esa cama, Ink y yo dormiremos aquí.-

-Realmente espero poder divertirme un rato con ustedes, bruh.- sonrió de forma un poco tétrica.

-Bueno...- el Glitch desvió la mirada, debía pensar en algo pronto.

Error se sentía molesto, tener ahí a Fresh le era muy problemático, sabía perfectamente que, si bien, su hermano menor no estaba por completo aliado a Chara, él le había ayudado en varias ocasiones antes, siendo la más reciente, que Goth se encontrar con ella la última vez.

-¿Geno sabe que estás aquí?.- soltó inconscientemente.

-Sure, bro, él sabe.- 

-¡Bien! iré por él.- abrió un portal a la habitación de su hermano y al encontrarlo encima de Reaper, abrazándolo, mientras estaban recostados sobre la cama, le molestó bastante, aún recordaba las palabras que la Muerte le había dicho mucho antes de tanto problema.

-Ah, mira, es tu hermano~.- sonrió Reaper mientras pegaba más a Geno a su ser.

-¡Guff!.- se quejó al sentirse preso de los brazos de su pareja.- ¡Suéltame!.- se movió con cuidado de no lastimar a la Muerte.

Fresh mantuvo su sonrisa, sin embargo, su rostro mostraba cierto fastidio y enojo, de cualquier forma, no dijo nada.

-Geno, baja, ¿quieres?.- suspiró Error.- y trae a tu par de mocosos...- 

-¿No se supone que Goth y Raven estaban con ellos?.- preguntó Palette en voz baja siendo escuchado sólo por PJ.

-Tal vez están con el inútil de mi hermano.- suspiró.

Inmediatamente después de que Error cerrara el portal, trató de relajarse, tendría que haber un pequeño cambio de planes, pero al final, esperaba que nada cambiara el resultado que tenían en mente, que básicamente era sobrevivir la noche y analizar al enemigo de cerca.

Aunque, tal vez fuera mucho más complejo que sólo eso.

Al poco rato, Geno bajó finalmente con sus dos hijos y Gradient, casi a la par, Ink despertó, alegando que tenía que irse a cumplir con su deber aún si era de noche, dejando a cargo al Destructor; y ahí estaban, Reaper se mantuvo arriba descansando, no tenía más qué hacer, Geno, Error y Fresh estuvieron "jugando amistosamente" con los menores, sólo un simple juego de cartas para mantener ocupado a Fresh y al mismo tiempo a Geno.

Siendo que el tiempo se les venía encima, Error se levantó de su asiento y le indicó a su hijo mayor que lo siguiera hasta la cocina, donde, supuso, nadie los escucharía.

-Escucha, niño, no tenemos mucho tiempo, casi llega el momento de actuar, yo seguiré cuidando adentro, tu hermano se queda conmigo y también el otro hijo de Geno, nosotros mantendremos ocupados a Fresh, dejo todo en tus manos.- suspiró el destructor mirando a su hijo con determinación.

PJ, sintiendo que no podía fallarle a su padre, asintió decidido.

-He quitado ya la barrera.- Error se escuchaba un poco nervioso.- Cuídate, niño... - 

Nuevamente el menor asintió y salió de la cocina para jalar a su primo y su medio hermano fuera de la casa, dejando a Error aún inquieto y, tenía que aceptar, preocupado.

Dejando el Anti-void de lado, en el triste y desolado Reapertale, los pocos Dioses sobrevivientes al ataque de aquella chica con deseos de venganza se refugiaban en el Jardín de la Diosa de la Vida. Era cierto, Reaper se enfrentó a Chara y por esa razón estaba herido, pero justo después de su retirada, la chica volvió a atacar el lugar, tenía oportunidad si su único rival estaba ahora fuera de combate.

R!Chara había sido despiadada, tal vez las bajas más significativas fueron 2: La Diosa de la Guerra, Undyne y el mismísimo hermano de la Muerte, Papyrus.

El Jardín se veía sumido en un tenso silencio, los únicos presentes estaban muy mal heridos y otros, al borde de la muerte, pero ¿cómo es que Reaper no pudo sentirlo? ¿por qué no ha vuelto a defender su universo? Bueno, la misma causante de las muertes se había encargado de recoger aquellas almas.

Toriel, la Diosa de la vida, se encontraba ahora mismo discutiendo con Asgore, teniendo al moribundo Guardián del Balance como intermediario.

-¡Necesitamos llamar a Sans!.- 

-Él no ha venido, ¿cómo podemos asegurar que sigue vivo?.- Asgore agachó la mirada.

-Mi hijo está a salvo...- suspiró melancólico al recordar la ausencia de su segunda creación.

-¡Tenemos que avisarle!.- insistió la Diosa de la Vida.

Había un cuarto y último Dios en el lugar, más bien, Diosa, Alphys, la Diosa de la Sabiduría se mantuvo en silencio al, por primera vez, sentir que no tenía una solución racional para este problema.

El Dios del Cielo, al ver a su mano derecha sumamente herido, sintió una gran impotencia que se vio reflejada en un gruñido prolongado y sonoro.

Todos los Dioses comprendían que ya habían perdido mucho y no sabían si ella volvería a atacar, pero sabían perfectamente que si no los atacaba a ellos, se iría tras Sans.

-Tenemos que avisarle...- susurró finalmente Toriel.

-Él se dará cuenta solo...- suspiró Gaster.

Aquella chica, la causante de tanto desastre, sonreía a lo lejos, finalmente veía a los Dioses sufrir, todo gracias a ella. Suspiró tranquila, todo le estaba saliendo más que bien y pronto tendría la dicha de usar a Goth para terminar con la existencia del Dios de la Muerte.

Chara volteó a mirar a su acompañante, aquella flor que, desde que supo del regreso de su mejor amiga, le apoyó. El momento había llegado ya.

En el Anti-void, Paper ya había decidido cómo se acomodarían, Palette se quedaría en el suelo, lo más cerca posible de Goth, pero no lo suficiente para no ser visto y él se encargaría de vigilar desde arriba como su padre le había pedido, así que PJ se adelantó para estar preparado, dejando a su primo y su medio hermano completamente solos.

Las cosas eran un tanto incómodas, Goth definitivamente no podía guardar más sus sentimientos, debía decirle, debía decirle ahora... pero no podía evitar sentir miedo al respecto. Por su parte, Palette también se sentía un poco incómodo, sentía una gran necesidad de abrazar a Goth e irse ambos a cualquier otro lugar.

El Semidiós, sintiendo realmente necesario confesar sus sentimientos suspiró lentamente y se acercó demasiado a Palette.

-Palette... yo... yo... ¡Ugh!.- fue interrumpido por un pequeño pincel que le golpeó justo en el cráneo. Rápidamente buscó al dueño de tal agresión y al ver a su primo señalar a lo lejos, supuso que ya era demasiado tarde, más le valía saber fingir o sino, nunca habrá confesado sus sentimientos.

Palette alentó al Semidiós dándole un fuerte abrazo y empujándolo levemente hasta la chica que lo buscaba a unos metros de su posición actual.

Mientras Goth caminaba a encontrarse con Chara, Palette recordó de repente, una vez vio a su madre hacer algo similar con Cross. Dream igual le abrazó antes de una batalla, le dio ánimos de la misma forma que él acababa de hacer con Goth, la única diferencia fue que, su madre, le susurró un "te amo" antes de dejarlo ir. 

Tal vez eso era a lo que se refería PJ, aquel sentimiento de nombre desconocido tal vez se llamaba amor...

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