Capítulo 4

«¿Muy bien y ahora?» me pregunto al tener a Solar sentada sobre mí. A penas se encuentra consciente lo sé por cómo se mueve, cada vez que intentaba algo se iba de lado «esto es gracioso en parte», pero yo no soy de hierro vale, tenía que quitármela de encima antes de termine haciendo alguna estupidez.

— Solar, reacciona, esto lo estás haciendo por el alcohol, detente, no me provoques.

— Pero...qué dices ByulYi siempre he querido hacer esto contigo...no te das cuenta lo que a veces me provocas— pregunta arrastrando sus palabras, espera ¿qué acaba de decir?

Para mi sorpresa, asombro, maravilla, terror, miedo, ya no sé ni cómo decirlo me beso, la chica que he amado por cinco años me acababa de besar. Fue más bien un intento de beso, tan torpe que sus labios besaron la parte derecha de mí boca.

Quiere volverme loca. Ya cegada por lo que acababa de pasar la tome de la cintura y con un rápido movimiento al que ella no pudo reaccionar la coloque debajo de mí y sin pensarlo la bese, comencé a besarla con fuerza, y a tocar su hermoso cuerpo.

Algo dentro de mí gritaba que esto no estaba bien y cuando más claro lo tuve me alejé de golpe de ella, casi provocando mi caída. Ella en su estado de ebriedad intento agarrarme fallando terminando por caer. Al estar negándose a que la levantara del piso la terminé por cargar en mis brazos y la puse en la cama, de alguna forma apenas puso la cabeza en la almohada quedo dormida. Yo por mi parte tomé una almohada y sábana para dormir en el mueble de la habitación y por supuesto apenas pude pegar el ojo en toda la noche.

¿Cómo iba a dormir después de mi primer beso con Solar? aunque para mí no cuenta mucho debido que estaba bajo la influencia del alcohol.

— Mierda, mierda— era lo único que repetía en mi cabeza y si ella mañana lo recuerda todo y por sentirse mal me aleja...

[...]

No podía creer lo que Byul nos acababa de contar, Solar, mi hermana, besándola. Simplemente no supe que decir, estaba en shock, no iba a regañar a Byul por besarla de vuelta, después de todo sé que las dos se quieren, pero simplemente no sé qué decir.

— Mierda Byul, joder no sé qué decirte— esa fue Hwasa que al parecer estaba en shock igual que yo.

Un silencio incomodo tomo la habitación hasta que sentimos como Solar se despertaba.

— Oh, mierda, que dolor de cabeza tengo, de verdad no volveré a beber nunca— dijo llevando las manos a su cabeza para presionarla por el dolor.

—Ven te ayudo a levantarte, ve y toma una ducha que apestas a alcohol— dije ayudándola.

De pronto miró fijamente a Byul, cómo si intentara recordar algo o como si ya lo recordará, todas nos quedamos inmóviles rezando que no recordara nada.

— Espera— dijo tomando de los hombros a Byul para acercarse a su rostro.

— Te ves hecha mierda ByulYi, qué pasó contigo— comenta burlona, con lo que todas suspiramos aliviadas.

— ¿Solar no recuerdas nada de ayer? — pregunto Hwasa

— La verdad.... No recuerdo nada luego del tercer trago que me di. — dijo sonriendo apenada, bien no recuerda nada, dirigí mi vista a Byul quien dio un suspiro de alivio disimulado.

[...]

Si, Solar no recordó nada en todo el día, para mi suerte y en lo más profundo desgracia. Era ya de noche, las nueve en específico y necesitaba tomar aire "fresco", por lo que me dispuse a bajar a sentarme cerca de la piscina para despejar mis pensamientos. Cuando iba por el lobby del hotel me encontré con Solar quien con mucha insistencia quiso ir conmigo hasta la piscina, donde nos sentamos al borde con los pies dentro del agua.

— Y bien ByuYi, ¿qué tal Nueva York? — pregunta y estoy segura de que fue para eliminar el silencio incómodo.

— Genial Solar, todo es tan animado, hay energía por todas partes, y lo mejor de todo estoy aquí contigo..., digo con ustedes mis mejores amigas— por un momento el rostro de Solar se iluminó y con la misma se apagó.

— Oh, con nosotras, si es genial que estemos todas en esta aventura, cierto, todas...

— ¿ByulYi no tienes frío?

— Un poco nada más, también estamos en verano y no es cómo que las noches sean TAN frías, así que puedo decir que estoy bien, ¿por qué preguntas?

— Es que yo si tengo frío— respondió mirándome a los ojos.

— Ah, entonces entremos, no quiero que tomes un resfrió por estar aquí, venga— dije tomándola de la mano para ayudarla a levantarse, pero negó con la cabeza.

— No ByulYi no quiero irme quedémonos un rato más sí, yo aguanto.

— Ok, pero, mejor— dije acomodándome atrás de ella, puse mis piernas a sus lados, coloqué mi cabeza en su hombro y la abracé.

Se sentía tan bien tenerla así de cerca, sentir su calor corporal, fue un momento mágico, al menos para mí, aunque no duró lo suficiente. De un momento a otro ella se pone de pie nerviosa —Venga ByulYi entremos.

— Pero ahora mismo dijiste que querías quedarte otro rato, bueno, no importa— dije un poco decepcionada —. Venga vamo...— mierda me había enredado con una manguera y ya iba directo a la piscina, no, no, no, la piscina no, no sé nadar.

Caí al agua y sin esfuerzo me comencé a hundir, digamos que no sé ni siquiera agitar mis manos para poder resistir en la superficie. Sentí como me quedaba sin aire para comenzar a oscurecerse mi alrededor.

[...]

— ¡ByulYi! — grité al verla caer al agua.

«Mierda ella no sabe nadar», se está hundiendo, yo sé nadar, pero no lo suficientemente bien, mierda, mierda, esto no puede estar pasando.

Mi cuerpo reacciona y me lanzo al agua para sacarla de allí, la tome por un brazo y la saco como puedo, gracias a Dios en el agua no pesa nada, logré sacarla. No estaba respondiendo y yo ya estaba desesperada, ByulYi, mi ByulYi, comencé a hacerle el RCP.

— Venga ByulYi no me puedes hacer esto, no tú...

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