Parte 5.
Ver a Luhan todas las noches y no hablarle era una tortura constante para Sehun, no sólo durante la cena, sino saber que lo tenía a pocos pasos, sin restricciones sociales que lo detuvieran de ir a él y hacerlo suyo todo el día, todos los días. Era insufrible.
Sabía que desde la noche en que lo forzó a mirarlo Luhan le había cogido miedo a su presencia, pero esa mañana, cuando fue a dejarle el desayuno, esperando entrar y escuchar el tentador sonido de la regadera, encontró un bulto en la cama que cerró los ojos apenas lo vio, intentó no reírse para no delatar al castaño, por lo que siguió como si nada pasara y se sentó a su lado. No pudo evitar besarlo, y aunque sabía que estaba despierto, no se alejó; y Sehun se lo agradeció desde el fondo de su corazón.
Decidió darle todo el día para pensar las cosas, sentía que el menor por fin estaba cambiando de parecer respecto a sus sentimientos, por lo que estaba emocionado mientras llevaba la cena al cuarto de Luhan, imaginaba que por fin hablarían como lo solían hacer, que lo dejaría acercarse y que, quizá con un poco de suerte, le dejaría darle un beso de buenas noches.
Lo que no esperó fue verlo con tan poca ropa.
¡Joder, joder, y más joder!; la polla de Sehun apretó sus pantalones, la bandeja en sus manos tembló y tragó con fuerza. Sabía que Luhan trabajaba su cuerpo para no perder el control de su peso porque le gustaba comer, pero ver su vientre plano, sus caderas un poco más anchas de lo normal, y esa piel blanca, tan apetecible, tersa y todavía brillante por las gotas de agua que no terminaban de secarse, lo llevó al límite. Respiró profundo y se acercó al menor, dejando la bandeja en otra parte, sin romper el contacto visual.
Luhan no podía moverse, se sentía expuesto y, lo peor del caso, era que no le incomodaba, la mirada de Sehun lo quemaba por dentro, pero la quemazón era placentera; y por fin descubrió qué era sentirse deseado de verdad, Baek y Kyung se lo habían contado hacía meses, cuando se entregaron a sus novios e hicieron el amor por primera vez. Luhan sabía que era el único de sus amigos que todavía era virgen, nunca se sintió en la necesidad de acostarse con los chicos con quienes salía, no aparecían esas mariposas en el estómago, ni el nudo en la parte baja del abdomen cuando lo besaban. Pero ahora, con Sehun frente a él, mirándolo de esa manera, generaba un cataclismo en su interior, sus piernas temblaban y su rostro se sonrojó.
-Eres hermoso, Lu. Demasiado hermoso como para ser real.- Sehun le acarició la mejilla y se acercó aún más, dejando sus labios a milímetros de distancia. Luhan quería que lo besara, su mente había bloqueado todos aquellos pensamientos lógicos para inundarse de deseo, de lujuria y de necesidad.
-Sehun... yo... no.- un atisbo de coherencia apareció en su mente e intentó alejarse antes de que algo saliera mal, pero el mayor le pasó el brazo por la cintura y lo apegó aún más.
-No, Luhan, no vas a escapar.- y lo besó.
Fuegos artificiales explotaron detrás de los párpados de Luhan, el calor atravesó sus venas y la emoción lo abrumó por completo. Pasó los brazos por el cuello del mayor y se colgó de él. Mierda, se sentía demasiado bien como para estar mal, las manos de Sehun recorriendo su espalda, bajando hasta su cadera apretándola un poco para colarse debajo de su camiseta y repetir el mismo proceso directamente en su piel, pero esta vez continuando hasta su culo, metió la mano dentro de su ropa interior y estrujó su nalga; Luhan gimió en el beso y eso estimuló al mayor, quien metió la otra mano para seguir abusando de ese culo que lo volvía loco.
Luhan seguía gimiendo, las manos se Sehun sobre él eran gloriosas, aunque nunca lo admitiría. Sintió cómo el mayor le instaba a saltar, por lo que tomó impulso, saltó y enredó sus tobillos en sus caderas, logrando que sus entrepiernas se rozaran, provocando que un gemido saliera de sus bocas, rompiendo el beso durante un instante.
-Ay, Lu... amor... serás mi perdición. Mi perfecta perdición.- susurró Sehun sobre sus labios antes de besarlo con fuerza, introduciendo su lengua dentro de la cavidad del menor, violándole la boca a medida que caminaba hasta la cama; recostó a Luhan con cuidado y se enderezó sobre sus rodillas, observándolo con adoración. Recorrió su pecho con sus manos hasta llegar al borde de la camiseta, la agarró y la subió hasta sacársela, dejando a la vista esos apetecibles botones rosas que ya estaban empezando a ponerse duros.
Se inclinó de nuevo sobre él para poner la cabeza en su cuello, besando, lamiendo, mordiendo, dejando pequeñas marcas rojas que al día siguiente demostrarían que el menor era su propiedad; siguió bajando por todo su pecho hasta que su lengua se topó con su pezón derecho y se dedicó por completo en él, lo mordía con fuerza para luego lamerlo para calmar el escozor mientras que con la mano abusaba del izquierdo; Luhan se retorcía bajo él, su pene estaba más que despierto y su cuerpo estaba receptivo a todo tipo de estímulo.
Sehun continuó su recorrido bajando la ropa interior del menor, dejando finalmente desnudo ante sus ojos. Oh, mierda. Luhan nunca dejaría de ser hermoso, y su desnudez lo ponía aún más; se saltó su entrepierna, la cual se encontraba ya húmeda y tiesa, para seguir besando y lamiendo sus muslos después de separarle las piernas de golpe y posicionarse entre ellas. Luhan quiso cerrarlas, pero el mayor no lo dejó y siguió acariciándolo con la lengua, la ropa empezaba a pesarle, por lo que se levantó de golpe de la cama y se desnudó por completo.
-¡Sehun, no! No hagas esto por favor, te lo ruego. Tú no quieres hacerme daño, y si sigues así vas a herirme mucho.- Luhan se había acurrucado en el centro de la cama e intentaba taparse con su camiseta.
La furia lo invadió. Supuso que apenas se alejó, la mente de Luhan se volvió en su contra y le hizo ver la supuesta realidad de las cosas. Terminó de desnudarse y se acercó a la cama, agarró a al menor del tobillo y le jaló hasta tenerlo cerca otra vez. Le agarró el mentón con fuerza e hizo que lo mirara.
-No, Luhan. Ya me tentaste muchas veces, y ya no me voy a contener, así que colabora de una maldita vez y abre las piernas para poder hacerte mío.- lo empujó y se subió sobre él; el menor empezó a gritar y ya golpearlo en el pecho, hacía tiempo que las lágrimas corrían por sus mejillas, la situación empezaba a salírsele de las manos.
Sehun le agarró de las manos y con su cinturón las amarró por encima de la cabeza en el cabezal de la cama, así no podría escaparse de él. Luhan intentaba zafarse y pataleaba para alejarlo, pero la fuerza de Sehun era mayor, por lo que lo bloqueó con sus piernas y enterró la boca en su entrada.
El alarido de Luhan pudo perforarle los oídos, pero no le importó y siguió lamiendo y metiendo la lengua en el virginal ano del menor; mierda, se sentía muy estrecho y caliente, estaba impaciente por enterrarse en él hasta el fondo, correrse y mancharlo con su semen, por dentro y por fuera, para así marcarlo como suyo.
Metió dos dedos de una vez, para dilatarlo a mayor velocidad, y Luhan gritó con más fuerza.
-¡SÁCALOS, SEHUN, POR FAVOR! ¡NO! ¡NO, SEHUN; ME DUELE, POR FAVOR SÁCALOS!-
El mayor lo ignoró y siguió dilatándolo, fue difícil porque el menor se negaba a relajar los músculos y sus gritos no ayudaban a tranquilizarse. Sacó los dedos de un tirón y se acercó a su rostro.
-Shhh... no llores, amor. Tampoco te tenses de esta forma, ¿no ves que todo eso hace más difícil que te haga mío? Es inevitable, Lu. Haz las cosas más sencillas, ya no llores más, ¿sí?- le susurró, pero en su voz se notaba la ira contenida. El menor se estaba ahogando, le dolían el pecho y la garganta por tanto gritar y no sentía las piernas, por lo que cerró los ojos y asintió. El mayor sonrió triunfal y volvió a dedicarse a su maltratada entrada, chupó sus dedos y volvió a introducirlos; Luhan no gritó esta vez, ni se tensó, lo miró y vio que el menor había apartado la mirada, parecía ausente, pero lo ignoró y siguió con su trabajo.
Lo sintió abrirse poco a poco, y cuando estuvo listo, sacó sus dedos y alineó su polla, que seguía tiesa y roja, para introducirse en él lentamente. Luhan gimió con dolor y más lágrimas abandonaron sus ojos, pero no gritó ni intentó resistirse; Sehun, en cambio, estaba en el cielo. El culo de Luhan lo apretaba y lo succionaba de una manera casi ilegal, empezó a moverse de manera inconsciente, enterrándose hasta las pelotas para retirarse hasta la punta e introducirse de golpe, abusando de la próstata del menor, quien empezó a gemir contra su voluntad, porque la sensación de Sehun empujando en él lo hacía estremecer, pero saber que era precisamente él quien enloquecía a su cuerpo generaba un pensamiento de asco hacia sí mismo.
Quería olvidarse de todo, de que el hombre sobre él era su padrastro, de que estaba siendo violado y de que lo habían secuestrado. Seguía llorando, no podía parar, deseaba que se detuviera porque no soportaba disfrutarlo tanto, lo sentía mal.
-Ah, Luhan. Eres demasiado estrecho, me aprietas demasiado y se siente delicioso. Ah, amor; sí, sigue ordeñándome.- no se había fijado en que Sehun estaba inclinado sobre él, murmurándole guarradas al oído entre besos y mordidas en el cuello. Estaba demasiado excitado, sentía su orgasmo muy cerca y Sehun lo sabía al parecer, porque escurrió una mano entre sus cuerpos y empezó a masturbarlo con fuerza mientras le seguía susurrando al oído: -Córrete para mí, Lu, córrete fuerte para que ese culito tuyo se haga más estrecho y pueda llenarte de mí.-
El orgasmo de Luhan alcanzó niveles sublimes.
Luego se desmayó.
Sehun siguió follándolo hasta correrse, dos veces. Estar en el interior del menor, siendo rodeado de su calor y la suavidad de sus paredes internas; no se dio cuenta de que el menor estaba inconsciente hasta que intentó besarlo y sintió los belfos del castaño inertes. Salió de él sin cuidado y no se extrañó de ver su semen salir de la entrada del menor,junto con algunos hilos de sangre, por lo que fue al baño lentamente y volvió con una toalla húmeda y un botiquín, lo limpió y le aplicó un antiséptico,después le soltó las manos y también las desinfectó, luego dejó todo en su lugar y dejó la habitación sin mirar atrás.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top