CAPÍTULO 10

Cuando se internaron en el comedor todas las miradas se centraron en ellos dejando por un instante de mirar a la nada. Nico fingió que no lo notaba y echó una mirada al estrafalario conjunto de mesas bajas con diferentes decoraciones. La mayoría ya estaban ocupadas pero no se movían a saludar a otros compañeros o amigos sino que miraban sin ver, pensando.
Era una vista bastante triste al compararla con el alegre bullicio que solía oírse allí, pensó Nico.
Solo había alguien que se movía entre las mesas,agarrando manos,dando reconfortantes palmadas en la espalda y sonrisas esperanzadoras. Las risas de algunos romanos rompían a veces la monotonía del comedor y cuando la gracia del chiste del pretor acababa, unas miradas de agradecimiento cubrían sus rostros y fue cuando Nico supo que los romanos seguirían a Percy a la luna si se lo pidiera. Esto lo sorprendió y le enterneció, porque sabía con certeza que eso no se le pasaría por la cabeza al hijo de Poseidon.
También sintió una pizca de envidia porque sabía que el no podría hacer eso,la gente nunca había sido su fuerte,la gente viva al menos.
Perdido en sus pensamientos como estaba no despertó hasta que sintió una mano en su hombro.
-Menos mal,pensé que ya os habías perdido. La comida espera por vosotros ¿sabéis?
-Menos mal que la comida espera porque dudo que tu lo hubieras hecho
Dijo Reyna divertida.
-Por favor,que mala opinión tienes de mi.
Dijo Percy con un gesto exagerado,fingiendo estar ofendido.
En ese momento llegó un sudoroso Will,con manchas de sangre seca en la ropa.
Se acercó a ellos
- Todos están estables, se recuperan completamente en unos días.
-Lo harán en dos.
Dijo Percy mirando hacia todos los lados del comedor como buscando a alguien.
- ¿Como pretendes hacer eso?
-Eh... Tu padre me debe un favor
- Que mi padre.... Que mi padre te debe...
-En un combate fui su campeón y como gané me debe una,aunque no estoy seguro porque la ultima vez me gano jugando al póquer así que...
- Al... ¿al póquer?
Las risas de Nico y Reyna los cortaron y en ese momento todos los romanos se sentaron y se dispusieron a tomar el almuerzo tras una encarnecida batalla.
Ellos se sentaron en la mesa principal y fue cuando Will reparo en el lugar en el que estaban y observo su alrededor con curiosidad. Nico pudo ver la imagen del águila dorada reflejada en sus ojos,abiertos por la curiosidad. Una sonrisa se acentuó en su rostro y pensó que estaba sonriéndo mas de lo normal. Esto le extraño pero no le desagradó el cambio.
Todos los romanos ordenaron un plato y enseguida la comida,preparada a la perfección apareció como por arte de magia en el plato,pero con el rabillo del ojo,Nico pudo apreciar una borrosa figura salir volando del lugar en el que reposaba la delicia. Will emocionado como un niño dijo alto y claro,como si le hablara a un sordo
-¡ESPAGUETIS A LA BOLOÑESA!
Todos en la mesa principal empezaron a reír al igual que las ninfas que le entregaron el plato en un santiamén.
Todos pidieron su plato correspondiente y empezaron a comer. Él no pidió nada, no tenia hambre y no iba a pedir nada solo para darle vueltas en el plato. Observó a sus compañeros de mesa. Todos comían menos Percy que miraba al frente con una pequeña arruga entre las cejas.
«Para ser el que tenía hambre no está comiendo mucho»
Pensó Nico extrañado.
Reyna también se percató de ello y le dio un codazo que lo despertó y con una sonrisa de disculpa se dispuso a pedir, pero Nico creía haber vislumbrado un brillo de tristeza en sus ojos. Nico pensó en todo lo que había pasado y pensó que ya era un milagro que quisiera comer y hablar.
-Pizza, hamburguesa, tacos, tortellini y...una manzana...una manzana azul, por favor.
Un centurión de pelo castaño y ojos color caramelo suspiro y dijo con voz de fingido cansancio
-Otra vez no, por favor,siempre se forma un atasco y siempre me toca tenerlas delante y me tiran la comida.
Nico no lo entendió hasta que tras la petición de Percy mas de una docena de ninfas se acercaran a la mesa principal y, peleando por situarse delante del grupo intentaban darle la comida al pretor.
Nico seguía sin entenderlo hasta que vio el sonrojo de las ninfas y lo comprendió. Como dijo el centurión,con el forcejeo su comida se había precipitado por la mesa y ahora estaba en el suelo aplastada. Una mirada de reproche inundó su rostro mientras soltaba un largo suspiro y una maldición en latín que mas o menos debió de significar «Mujeres »
Percy, un poco avergonzado,recibió la comida de las manos de una ninfa que había a su lado.
Le dio una sonrisa aturullada,pero perfecta.
«Como no»
-Muchas gracias
La ninfa con un intenso rubor se marchó ante las envidiosas miradas del resto.
Sin embargo una se quedo y con rubor cubriéndole las mejillas se acercó al hijo de Hades .
-¿Quieres...quieres tomar algo?
Nico se ruborizó también pero lo negó con un gesto de cabeza y la ninfa,muy aturullada y avergonzada se marcho corriendo.
Percy río y Reyna los miro a ambos,incrédula.
-Voy a tener que hacer que os sirvan los sátiros,de verdad.
Todos rieron por largo rato,incluso el centurión sonrió y Nico se hallaba entre la confusión, ante el hecho de que había atraído a la ninfa, y entre los celos de que también sentía, al ver que habían ido a por Percy. Nico se dio cuenta de que el ya no reía y una mirada triste y distraída ocupaba sus ojos verde mar. Entonces, Nico se dio cuenta,como si le golpeara un mazo,de que no volvería a ver a Annabeth. Tal vez no se hubiera percatado bien de ello por la euforia de la batalla,por la preocupación que sentía por su hermana pero el hecho era que le dolía. Nico siempre le había en envidiado,pero no podía odiarla,por eso su vida era una mierda. Con él era simpática y comprensiva y el no encontraba ningún comportamiento negativo hacia él. La conocía desde hacía tanto tiempo...
Recordó las dos palabras que en la fiesta de Percy le susurró al oído,unas palabras que le borraron el color del rostro.
«Lo sé »
No podía creer que hubiera muerto,era fuerte, inteligente, luchadora...
Nico siempre pensó que viviría hasta el final. No iba a llorar,no allí, en medio de toda la legión pero la tristeza de la pérdida de una vieja amiga le dolía en lo mas hondo. Lo peor es que no había notado su muerte y este pensamiento lo sorprendió. Miro al frente y se encontró con la mirada de Percy clavada en él y como si se leyeran la mente,los dos supieron que habían llegado a la misma cuestión. Nico enseguida apartó la mirada,no quería que le preguntara,que hiciera que intentara que convocara su espíritu porque Nico sabía que da igual lo que le pidiera,no se lo podría negar.
«Yo ni siquiera he recibido palmadas en la espalda y le seguiría a la luna también »
Pensó Nico asqueado de si mismo.
«Eres patético »
Se dijo sin piedad.
Lo que sacó a Nico de sus pensamientos fue un sordo golpe que como descubrió, había sido provocado por una gran porción de pizza cayendo en su plato. La había puesto allí Percy.
-No quiero,Percy. Si tuviera hambre hubiera pedido algo.
-Como sigas así te vas a morir de inanición,Nico Di Angelo.
E'ta mu h'uena
Terminó con la boca llena de pizza.
Una sonrisa le estropeó la cara de exasperación que intentaba mantener en su rostro.
-Pon todas las caras que quieras pero vas a comer.
Dijo Percy señalándole con una patata frita.
Nico agarró la pizza y le dio un mordisco de mala gana y Percy le sonrió satisfecho.
Reyna río y Will murmuró un débil
-Si, deberías comer...
Después,con cara de pocos amigos, siguió ensartando los espaguetis en su tenedor.
Nico se dijo que le preguntaría por su mal humor mas tarde.
Cuando todos terminaron de comer, Reyna se levantó,solemne
-Romanos,hoy habéis luchado valientemente por nuestro legado y por nuestro futuro. Se que el cansancio os abruma,muchas batallas en muy poco tiempo pero no podrán con nosotros, Roma perdurará y vuestro sacrificio no sera olvidado.
Miradas de fiero orgullo siguieron a su discurso.
-Efo
Dijo Percy con un gran trozo de pizza en la boca y todos rieron.
Reyna en pie sonrió y una mirada que claramente decía
«Que voy a hacer con este»
le cubrió el rostro. Los romanos fueron vaciando el comedor y Nico se dio cuenta de que se le había olvidado la razón por la que estaban allí y ahora,el pensamiento de que pronto moriría volvió con mas fuerza, haciendo que Nico tragara duró y se levantara como si le doliera todo.
Reyna se estaba marchando ya, pero paró al ser llamada por el hijo de Hades.
-Reyna,tengo que ver a mi hermana.
La pretora lo miró profundamente y Nico vio comprensión en su mirada.
-Yo...yo te acompaño
Giró la cabeza y vio a Percy mirándole con determinación y con algo, que solo pudo apreciar Nico,porque era el único que lo había sentido durante tantos años:odio hacia si mismo.
Nico asintió con la cabeza.
-Will,yo te enseñaré el campamento si quieres.
Dijo Reyna tras echar una mirada triste a Percy.
Este la miró y tras lanzar una mirada confusa a Nico y a Percy
Dijo:
-Si si,por favor.
Los semidioses se separaron y Nico,al lado del hijo de Poseidon caminó lentamente con el presentimiento de que la conversación no sería muy alegre.
//////////////////////////////////////////////////////Huolap🙌
Siento no haber podido subir antes pero he tenido una horrible semana de exámenes😔
Espero que os guste la historia y comentad si no o si sí
Espero poder subir capitulo en estos días😅

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top