Mandaron varias tropas para encontrar al rey desaparecido, los guardias que fueron a la guerra aun se estaban recuperando y Jungkook les dio un descanso. Otra semana había pasado, Jungkook seguía mirando la entrada del palacio junto a su hija cada día, mientras el general se ocupaba de organizar cada lugar donde buscar.

El castaño tocaba su vientre, recordando cuando la curandera le dio la noticia de que estaba esperando otro hijo y de que tuvo tiempo de contarle a su esposo antes de que se vaya.

—Ve a jugar, linda

Jungkook bajó a su hija, que iba a dando torpes pasos en dirección a una niña con la que siempre jugaba. El mayor vio la primer tropa que mandó regresar y sonrió esperando ver a Taehyung.

Y no, otra vez le daban la noticia de que no encontraban a su esposo. El menor bajó la cabeza y sintió la presencia de Yoongi frente suyo.

—Otra tropa mas irá, no se preocupe

El joven asintió, viendo como otro grupo de soldados salía del reino rumbo a buscar a su rey. Nadie tenía idea de nada, Jungkook se la pasó interrogando a cada persona del reino intentando saber si había algun lugar desconocido fuera del reino donde Taehyung podría estar, pero nadie sabía.

Todos estaban convencidos de que estaba muerto.

—Hola Jungkook

El nombrado se dio le vuelta encontrandose con Jisoo, ella le sonreía y el menor le devolvió una sonrisa. Ella se colocó al lado suyo y suspiró.

—Jungkookie, aun recuerdo cuando llegaste a este reino—comenzó a decir—Estabas tan confundido y todavía no sabías nada de como funcionaban las cosas y lo peor fue que tuviste que soportar las muertes. Eres muy fuerte y ahora... sucedió esto

—T-tu crees que Taehyung esta vivo ¿O no?

Los dos se miraron, Jisoo bajó la cabeza y negó. Jungkook frunció el ceño y miró al frente otra vez.

—Todos p-piensan que estoy loco por creer que Taehyung esta vivo. Pero yo lo se, él no esta muerto.

—Jungkookie, cuando Eunbi se enfermó yo hice lo mismo que tu. Negarlo hasta el final, lo negué hasta que me dijeron que mi hermana no pasaría la noche. Y seguí con mi vida, no vale la pena sufrir por alguien que no volverá.

—Solo hay que esperar, el volverá

Jisoo apretó sus labios y se dedicó a ver a su sobrina jugando en el césped. Yeri amaba mucho a Taehyung. Ya no sabía si debía confiar en que este vivo o no, si su cuerpo no fue encontrado tal vez haya una posibilidad.

Miró a Jungkook y sonrió, porque era fuerte y ya había soportado demasiado desde que llegó a Daegu. Si Taehyung no volvía, estaba dispuesta a quedarse a su lado y consolarlo. Se dio la vuelta encontrándose con Nayeon y Jennie, que la esperaban para saber como estaba Jungkook. Se acercó a ellas y una lágrima recorrió su mejilla.

—Pobre de Kookie, e-espero que se de cuenta de lo que esta haciendo

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