𝘜𝘯𝘪𝘷𝘦𝘳𝘴𝘰 𝘢𝘭𝘵𝘦𝘳𝘯𝘰.

Esplendidos paisajes, pobladas y verdosas praderas, viejos espíritus navegando a través de la cálida brisa. Descansaba un dulce niño junto a sus padres. Con movimientos delicados sobó sus ojos dejando admirar las preciosas orbes verdes semejantes al jade.

Las pequeñas piernas de Jimin se movieron hasta bajar por completo el cuero que los cubría hace un momento, despertando así al Omega mayor.-"¿Cómo dormiste, mi amor?"-. Preguntó cosquillando los piecitos del menor sacándole tiernas risas.

-"Estoy bien"-. Levantó el pulgar en afimarción, sonriendo. Miró detenidamente a su hermano recostado y babeando sobre el pecho de su otro padre. Después de varios llamados lograron despertar al Alfa.

Los cuatro salieron juntos de la tienda. Alfas, Betas y Omegas saludaron respetuosos a sus líderes. Jungkook bostezaba mientras sujetaba la mano de Jin.

Jimin se acercó a sus amigos. -"Hola, futuro jefe'"-. Saludó burlón un pálido pelinegro causando carcajadas a su alrededor.

-"No seas envidioso Yoongi"- Contestó Hoseok, su mejor amigo en la aldea. Se conocían desde pequeños. Él ojiverde al ser menor, siempre era protegido.

Charlaron un rato, claramente temas no muy profundos sólo tenían siete u ocho años.-"Jimin, ¿Qué se siente ser el Omega elegido?"-. Había escuchado muchas veces a la curandera comunicarle a sus padres la grandeza que poseía, según la anciana fue seleccionado por las mismísimas divinidades.

Desde que estuvo en el vientre de Jin, todos apostaban que sería un Alfa fuerte, incluso sería más valiente que todo líder previo, sin embargo Namjoon ni Seokjin le dieron la más mínima importancia a la jerarquía del cachorro.

El día de su nacimiento llegó. La blanquecina piel y fino cuerpecito dieron evidencia a un futuro gobernado por un simple y débil Omega. Uno descendiente del Alfa puro junto al Omega de tigre.

Él niño derrochaba una elegancia digna del próximo líder, firme al hablar, sin olvidar su radiante melena y ojos verdes. Un Omega perfecto, objeto de muchas críticas.

-"Nada especial, ya llegará mi camino y debo seguirlo con sabiduría"-. Como primogénito heredero, pasó por diversos rituales, debía ser un excelente devoto ante la supremacía que los rodeaba, honrar firmemente a la madre naturaleza. Seokjin le enseñó la disciplina de apreciar cada mínimo detalle para luego agradecer la existencia de este.

-"Yo seré él mejor guerrero de nuestra aldea, prometeré ante los espíritus firme lealtad y
protegeré a mi Omega de cualquier peligro"-.Lanzó una sólida mirada sonrojando al rubio, Hoseok no sé quedó atrás.

-"Seguiré a mi padre, quiero ser igual a él, que sienta orgullo por mi y me casaré con Jimin"-. Los ojos de Jimin estaban expectantes hacía su amigos.

Yoongi es el hijo mayor de un general y un cazador, mientras Hoseok pertenece a un clan vecino, hijo de la gran amiga y consejera de Namjoon.

Él niño Omega se negaba profundamente, no quería ser propiedad de nadie. ¡Es el sucesor, tiene demasiados planes para el futuro!. Un Alfa sólo lo frenaría.

Al salir del trance observó como los primitivos Alfas luchaban uno contra uno buscando el poder ante el delicado Omega. Un aura molesta separó a los dos pequeños-"Basta de pelear"-. Seokjin acudió al rescate, regañando a sus amigos.

-"Sí, jefe Jin"-. Jin podría ser un Omega pero siendo el cónyuge del líder y descendiente del clan, poseía un poder incontrolable. Los habitantes de la tribu lo respetaban e admiraban. Por su carácter amigable.

Es de bobos negar el amor que existe entre sus soberanos, siempre unidos, tomando decisiones a la par, gobernando espléndidamente. Una relación que empezó de una manera muy peculiar.

No se casaron teniendo sentimientos el uno con el otro, más bien fueron comprometidos a solo segundos de nacidos para confirmar una importante alianza entre sus padres.

Tras fallidos intentos del enamorado Alfa en acortejar al esquivó Omega comenzó agobiarse. Jin buscaba escabullirse por los arbustos cada mañana, evitaba a toda costa ser presentado como Omega de Namjoon.

Después de un año finalmente logró su objetivo. Mientras disfrutaban del extenso río Seokjin se acercó discretamente y plantó sobre los gruesos labios un apasionante beso.

Luego de ese inesperado toque, la relación comenzó a prosperar hasta la unión eterna. Lunas más tarde el hebras rubias dio a luz al pequeño Jimin, más tarde nació Jungkook quien tenía dos añitos.

-"Ven mi amor, debemos ir con tú padre"-. Él niño obedeció, siguió a Jin hacia las canoas cargadas de lanzas y arcos, apunto de partir. Jimin no dudo en saltar a los brazos de Nam

-"No te vayas, Papi"-. Lloriqueaba abrazado al cuello del Alfa, como último recursos soltó fermonas tranquilizantes para calmar a su cría, la respiración agitada desapareció, ahora era Jinnie quien sollozaba y movía su labio inferior. Se acercó al Omega y repartió cortos besitos alrededor del angelical rostro.

Fue llamado por Seung, indicándole la próxima puesta de sol. Se les hacía tarde.

-"Volveré pequeño, cuída de Kookie,¿Si?, no le den problemas a papá, él estará muy ocupado sustituyéndome"-. Dejó al niño sobre la tierra y atrajo la cadera de su Omega para acercarlo.

-"Regresa pronto. ¡No te atrevas a dejarme!"-. Pudo sentir la preocupación de Nam por medio del lazo.-"No te preocupes Nammie, estaré bien"-. Las suaves palabras suavizaron sus nervios.

-"¿Qué haría yo sin mi maravilloso Omega?"-.

-"Probablemente estarías casado con alguien no tan guapo como yo y siendo infeliz por no tenerme a tú lado"-. Un gruñido satisfactorio escapó de Seokjin ante el impredecible pero agradable agarre del ojos verdes.

A pesar de cargar el absoluto poder en sus manos, Namjoon jamás actúo indiferente a las necesidades ajenas, él joven prestaba auxilio sin fines convenientes. Mayor parte del día recorría las praderas, admirando y disfrutando.

Felices aclamaron el compromiso del nuevo lider con el famoso hijo del jefe vecino.

Fueron presentados en una magnífica ceremonia, él deslumbrante Omega llevaba consigo un fino velo que cubría completamente su rostro.
Unieron sus perfiles y manos, al mismo tiempo damas envolvían ambos cuerpos con la misma tela que anteriormente llevaba Seokjin. Él director espiritual bendecía a los jóvenes, manifestando la unión eterna y fructífera.

Cantaron, danzaron durante la celebración. Los prometidos bailaron sin mirarse, estaba profundamente prohibido para las parejas líderes el contacto visual hasta el matrimonio

Apoyado en una mano, Seokjin sostenía su rostro mientras con la otra dibujaba aburrido sobre la tierra. Era evidente el descontento con el reciente compromiso.

Joon se acercó con temor al Omega.-"Hola, tú debes ser-"-.

-"Piérdete"-. Y Sin más se marchó, dejando al Alfa bastante confundido. Gracias a un impensado celo en conjunto, la euforia creció aún más. ¡Son seres destinados'.

La nupcia fue pospuesta hasta el término del celo.

El cabello rubio de Seokjin y las orbes verdes de Namjoon hacian de Jimin una mezcla perfecta.

-"Prometo renovar tú marca"-. Compartieron su último beso.-"Cuida de nuestros hijos. ¡No dejes que esos pequeños Alfas se acerquen a Jimin!"-.
Jin empujó a su destinado, soltando fuertes carcajadas.

Observó algunos Omegas decaidos por la separación.

Los primeros años él también lo hizo, deprimiéndose en su tienda, sin intención de alimentarse. Por aquel tiempo desconocía totalmente la existencia de un diminuto cachorro creciendo en su vientre, por desgracia el desorden hormonal le causaron un aborto espontáneo.

La pérdida lo hizo sentir inútil, únicamente pudo ser tranquilizado por su Alfa. Seokjin rogaba de rodillas el perdón de su marido ante la incapacidad de mantener al cachorro con vida, en cambio Nam solo intentaba calmarlo dándole la certeza de jamás repudiarlo ni abandonarlo, estaba eternamente enamorado de su esposo. Jin era joven y fértil pronto estaría nuevamente en cinta.

Un grito lo trajo a la realidad, mirando como él moreno partía una vez más a diferentes aldeas buscando proteger la suya y alejarla del peligro, no es algo nuevo considerando las amenazas constantes pero eso no evitó el dolor del lazo ante la distancia.

-"Cachorro, iremos al río, ¿Quieres ir?"-. Kook era un bebé de dos años, sin embargo portaba una inteligencia bastante adelantada a su edad, tenía un precioso cabello azabache y ojos cafes oscuros igual a los de Seokjinnie. Su jerarquía se le asignará pronto y ambos mayores estaban seguros que Jungkook sería un gran Alfa.

Jimin escapó descalzo, sientiendo entre sus pies la dócil hierva acariciarlo, con ayuda de su padre logró quitar las prendas que portaba.

Custodiados por guardias dieron paso al privilegiado río, donde solo el matrimonio real y sus herederos podían estar.

-"Pueden retirarse, gracias"-. Los dos acompañantes recibieron su petición con una determinada reverencia los dejaron a solas.

Él rubio se montó sobre la espalda de Seokjin algo tembloroso, sería la primera vez del niño en adentrarse tan profundo.-No tengas miedo hijo, yo estoy contigo"-. Un escalalofrio recorrió su cuerpo en cuanto unas largas hojas tocaron su torso.

Dentro del árbol, se llevó una sorpresa tan grande que su esponjosa boquita se abrió formando una tierna "O", no podía creer la cantidad de seres vivos que habitaban en ese lugar.

Pidió la autorización de su padre Omega y le fue negada. Mojaba sus pies enojado, mientras Jin permanecía sentado en una gigante rama.

Observó a Seokjin atentamente esperando el momento justo para sumergirse, por solo segundos el rubio mayor miró en diferente dirección y cuando devolvió la vista, sus ojos se abrieron y los latidos de su corazón iban a mil, su cachorro había desaparecido.

Por otro lado Jimin trataba de capturar peces o algunas ranitas, hasta que unos brazos lo sacaron a la superficie.

-"¡Jimin, no me vuelvas asustar así!"-. No importó regaño tras regaño del Omega, él niño seguía en trance ante tal espectáculo que les ofrecia la naturaleza.

-"Lo lamento papi, pensé que podría ser amigo de los pecesitos, pero me ignoraron"-. Abultó su labio inferior creando un muy conocido puchero. Ambos salieron del agua.

-"Sin duda, eres hijo de mi esposo"-. Negó la cabeza variadas veces.-"Ven, pon tú manito así"-. Estiró la palma del ojiverde palpando el duro tronco, repentinamente las orbes brillaron, ya no eran verdes más bien de un color azul fulgante.

Pocas veces Seokjin presenció este tipo de unión, la primera vez que lo hizo fue junto a Namjoon cuando este mismo tocó el Sauce.

Jimin pudo oír voces llamándolo, alabandolo.-"Pon tú orejita aquí, ¿Lo escuchas?, te hablan solamente a ti, son nuestros antepasados"-.

-"Al sostener tú cuerpecito por primera vez, supe lo especial de tú existencia. Harás mejores cambios, no necesitas seguir los mandamientos del actual lider, crea los tuyos. Cuando tú padre marché yo iré tras él y te lo prometo mi amor siempre serás nuestro orgullo, porfavor cuida de Kookie"-. No entendía las palabras de su papá, sonaba igual a una despedida.

De vuelta a la aldea Jimin no aguantó el cansancio y cayó dormido en los brazos de Seokjin, este último sintió su cuello tenzarse fuertemente, gimió adolorido, las lágrimas no tardaron en aparecer. Algo malo estaba pasando.

Él niño despertó asustado, por suerte recibio la ayuda de los guardias cercanos y fue llevado a la tienda.

En la tienda todo empeoró, Jin sufría dolorosos espasmos necesitado de su Alfa, cubierto de sudor y altas fiebres. Con medicamentos naturales calmaron temporalmente las enloquecidas fermonas del Omega, decidieron dejar a los cachorros junto a su padre para no alterar aún más al sensible tigre.

A la mañana siguiente Jungkook despertó antes, con cautela quitó algunos de los ungüentos medicinales del cuello de Jin. Alejó rápidamente la manito al escuchar quejidos molestos.

Jimin retuvo su mano antes de volver a tocar la marca. Los gritos sin sentido de Jungkook despertaron a su progenitor.-"¿Por qué gritas Jung?, despertaste a papá".

-"Pequeños, lo siento tanto, debieron estar muy asustados"-. Como disculpa repartió besitos alrededor de las caritas.

-"¿Qué es esa marca"-. Interrumpió Jimin.
Yoongi trató de explicarle recrenado una graciosa escena el significado, se reiría de él la próxima vez, Gigi no sabía lo equivocado que estaba.

Jin trenzaba los finos cabellos de Jimin al mismo tiempo que entonaba una gloriosa melodía antigua, él niño cerró sus ojos disfrutando de cada entonación. Amaba esa canción aveces él mismo la cantaba para Kookie.

-"Es lo que me une por la eternidad con tú padre"-. La cabecita ladeada de Jimin dan a entender la poca comprensión, Jungkook también prestaba atención aunque no mucha

-"Bien lo explicaré más sencillo, es una conexión entre Alfa y Omega al morder el cuello ya no hay vuelta atrás estás obligado a pasar todos los días juntos. Acérquense, ¿La ven?, mi Alfa me marcó le pertenezco solamente a su papá, reclamó a mi Omega y yo lo acepté"-. Enseñaba su mordida orgulloso mientras dos pares de ojitos la observaban con impresión.

-"Omega Seokjin, ¿Qué tal se encuentra?"-. Una mujer se acercó hasta ellos.

-"Mejor Min, gracias por preguntar"-.

Escucha a lo lejos tambores resonar y el inconfundible aroma de su marido se siente cercano, por instinto aceleró el paso, su tigre brindaba emocionado.

Vio como Omegas y Betas recibían a sus parejas. La preocupación invadió el cuerpo de Jin, Namjoon no estaba en ninguna de la canoas.

Giró su cabeza lentamente siguiendo la voz, se lanzó eufórico a los fornidos brazos de su Alfa.

-"J-Joonie"-. Las lagrimas le impedían hablar correctamente, cuando su vista por fin se aclaró notó una venda cubriendo el abdomen y pecho contrario.-"¿¡Qué te pasó!?"-.

-"Un ataque, no pude esquivarlo, lamento que hayas pasado un mal rato, me informaron del descompenso que tuviste ¿Estás bien ahora?"-.

-"S-sí"-. Despacio acercó sus labios hasta lo de Nam para juntarlos.

Los dos pequeños recibieron con besos y abrazos al Alfa, pasaron toda la tarde escuchando las aventuras y tragedias que ocurrieron en la batalla, hasta caer dormidos.

Tomados de la mano recorrían las orrillas del río.

Él bonito Omega desprendió fermonas sin previo aviso, alertando al lobo de Joon.-"Pronto tendrás tú celo, este período estarás más fértil. ¿Qué tal sí tenemos otro cachorro?"-. Seokjin frunció el ceño.

-"Jungkook aún necesita de mi, esperemos un tiempo más"-. Se acercó hacía él más alto y lo besó con suavidad.

-"lo que digas mi luz de luna, es tú cuerpo tú decides que hacer, yo puedo esperar toda la vida"-. Acarició el pálido rostro de su pareja.-"Seung tenía razón, siempre me lo dijo soy débil ante ti, me tienes encantado, por más años que trancurran yo te sigo amando como sí fuera el primer día, claramente no esperaba tú intenso odio y rechazo hacia mi en esos tiempos. Pero aún así soy el Alfa más afortunado"-.

No iba a contradecirlo. Recuerda las actitudes desagradables que tuvo al enterarse del matrimonio. No entendía absolutamente nada, su padre lo comprometió cuando apenas era un recién nacido y nunca se lo dijo. Ahora debía tomar el liderazgo en una aldea desconocida junto a un Alfa que en su vida había visto.

El día indeseado llegó y las damas de Seokjin trensaban el brillante cabello rubio, lo decoraron con preciosas flores nativas y lo vistieron con las pieles más finas.

Lloró todo el viaje, llenó de frustración.

Se casaría con Namjoon, no conocía su aspecto físico pero varíos chismosos decían que tenía hermosos ojos verdes, una tez morena y hoyuelos encantadores.

-"¿Te das cuenta lo egoísta que puede ser?
Si ese Alfa muere yo igual, tal como lo hicieron sus padres, además tendré que cargar las crías de ese idiota"-.

-"No seas cruel, Jinnie, es tú futuro esposo no puedes hablar así"-.

-"No quiero casarme con él..."-. Fueron sus últimas palabras antes de llegar al territorio ajeno.

Mientras esperaban practicó los votos una y otra vez en varias ocasiones su madre le corregía el habla. "Hazlo más alto Seokjin, es por el bien de todos". Se dio el término a la sofisticada ceremonia.
Después de recibir bendiciones y reverencias, caminó hasta un lugar tranquilo.

Tomo asiento en un tronco, analizó las ardientes llamas de la fogata, viajaban en dirección del viento, libres, en cambio él estaría enlazado de por vida.

Escuchó ramas crujir. Alguien se aproximaba, pensó en su madre o peor aún su padre, sus mejillas se sonrojaron cuando el desconocido tocó su hombro.

Era Namjoon, se alejó golpeandolo bastante brusco para luego soltar cruelmente "Piérdete".

Un conocido e incómodo calor sobre su vientre lo hizo detenerse abruptamente.

Su celo se aproximó, fue una gran sorpresa saber que los dos celos se habían sincronizado. Genial ese idiota era su destinado.

Trancurrido el periodo de calor, realizaron los rituales. Convirtiéndolos finalmente en esposos.

Por la noche cuando los astros se alinearon esperando la unión carnal e espiritual entre los nuevos líderes. Nam lo miró triste.

-"¿Qué?, ¿No quieres hacerlo?"-. Intervino Seokjin, sentía una horrible incomodidad estar casi desvestido frente a un extraño.-"¿Vas hablar o no?"-.

-"Para mi tampoco es fácil, mis padres murieron hace muy poco, toda mi existencia pensé en casarme con alguien que yo pudiera elegir pero estamos destinados a esto, si no es por este modo sería por otro, Jin no quiero que pases la vida infeliz, no voy a marcarte ni a tomarte, dejemos esto en las manos del destino, si nos unió es para ser felices"-.

Poco a poco cayó rendido en los encantos del tierno Alfa. Años más tarde Jin presumía su gran pancita ante cualquiera que se interpusiera en su camino, en las noches jugueteaban con él bebé, quien daba pataditas al escuchar su nombre.

Días después Seokjin dejaría de estar en cinta para así dar a luz.

-"Ya no falta nada, uno más y ya tendrás a tú cachorro contigo"-. Afuera de la tienda Joon podía oír los dolorosos gritos.

-"Puede entrar jefe"-. El Alfa sobó sus manos antes de seguir a la anciana y ahí lo vio, a su Omega cargando una cosita muy pequeña que lloraba sin compasión, se aproximó hasta ellos.-"Hola Jimin, soy tú papá Nammie y él es tú papá Jinnie estamos muy felices de tenerte aquí"-. Jin soltó una risita.-"Tú vientre aún está abultado, es muy tierno"-.

-"Gracias por ayudarme"-. Él Omega se dirigió a la anciana con una gran sonrisa.

-"Al contrario les agradezco a ustedes por permitirme traer al mundo al Omega predilecto"-.

Jimin no necesita ser un magno, no tiene que ser mejor que el resto, es adorable. Eso ya lo hace especial porque vino a este mundo siendo amado.

Con este AU doy finalizado Just a baby, no mentiré que estoy algo confundida y triste, pero no puedo seguir. Quiero sanarme a mi misma. En unos días entro a la universidad y no me siento para nada lista tengo mucho estrés en mis hombros. Espero que hayan disfrutado de cada capítulo

Fue una decisión difícil de tomar, sin embargo es lo mejor, lamento dejarlo incompleto , tenía muchos capítulos escritos y nuevas ideas, pero lastimosamente ocurrieron cosas en mi vida que me desmotivaron.

Que tengan una feliz vida y que sus sueños se cumplan ♡.

Gracias a todxs que votaron esta "historia", tendrán un pedacito de mi corazón siempre.

Puede que en un tiempo escriba nuevamente.

Muchas gracias por esto.

Pueden encontrar un two shot NamJin en mi perfil por si desean leerlo 🤗