Cap 4

P.O.V rayita

Creo que recomendarle que se apuntase a aquel deporte fue la peor idea de mi vida.

Desde que se apuntó al equipo, hace un mes, no le podía ver tanto como antes. Se había vuelto popular, todo el mundo quería estar junto a él. ¿No os parece la gente una total hipócrita? Pero, en el fondo me alegraba por él. Sin embargo, yo no pertenecía a aquel lugar... Por eso a lo largo de ese mes, por mucho dolor que pasara en secreto, me distancié un poco de Francis. Lo único que yo quería era que fuese feliz. Él estaba destinado a brillar y yo no entraba en los planes, era comprensible. 

Algo que Francis no sabía era que yo estaba enamorada de él. Desde un primer momento supe que era especial cuando intentó protegerme a pesar de que él saliese dañado por mí, no obstante él se ganó mi cariño en poco tiempo y no pude evitar enamorarme de mi mejor amigo. Incluso a mí me sonaba patético cada vez que lo pensaba, pero no podía negarlo porque aquellos días fueron unos de los más duros de mi vida. 

Le echaba de menos, le echaba mucho de menos... Pero no podía pedirle que dejara el equipo y todo lo que había conseguido por mí. ¿Qué clase de persona sería? Me limitaba a recordar todos los momentos que pasamos juntos con cariño cuando me sentía sola. No se olvidaba de mí pues todas las noches me mandaba mensajes, pero un mensaje no era lo mismo que hablar con Francis directamente. Poder abrazarle y oler su perfume, sintiéndome tan segura en sus brazos... Joder como le echaba de menos. 

El único consuelo que me quedaba era ir al baile, que se iba a celebrar dentro de dos días, con él. Sería mi última oportunidad para decirle que le quería, antes de que él se fuese a una universidad de París. Y a saber cuanto tiempo pasaría para que le pudiese volver a ver. Por eso me armé de valor aquel día y me encaminé hacia su taquilla pensando en mi posible declaración. 

Podría aguantar de todo, de todo menos lo que vi en aquel momento.

–Francis, ¿quieres venir al baile conmigo?–Vi como una chica de nuestro curso le estaba pidiendo ir al baile. Él la miró con sorpresa, sin darse cuenta de que estaba allí delante. Noté como mi corazón se hacia pedazos en ese momento. Unas lágrimas cayeron por mis mejillas.

–(T/n)–dijo Francis con preocupación al verme plantada como un pasmarote. Froté mis ojos con ira, me di la vuelta y salí corriendo de allí como si la vida me fuese en ello–. ¡(T/n)! ¡(T/n) espera por favor!–Me llamaba persiguiéndome–. ¡(T/n) para! ¡Tengo que hablar contigo!–No importaba cuanto me llamase, no iba a parar. Y es curioso como siendo él el que corría más que los dos no pudo alcanzarme, es lo que yo llamo sacar fuerzas de flaqueza. 

No paré de correr hasta mi casa. No fui el último día a clase.

...(***)...

Y así fue como pasé el viernes del baile. Sola, en mi casa y con depresión. Con depresión porque mi mejor amigo se había ido con una de mi clase a un baile romántico. Aunque me mandó doscientos mensajes aquella tarde preguntándome que iba a hacer, mejor dicho, desde el incidente no dejó de mandarme mensajes. Por mi parte me limité a ignorarlos.

Entre cambio y cambio de canción oí un ruido. Me incorporé en mi cama sorprendida y apagué la música. Oí piedrecitas chocar contra mi cristal... No podía ser... Salí a toda velocidad a mi balcón. Imposible...

–¡Francis!–Traía un traje negro aunque no le veía muy bien porque mi patio solo estaba iluminado con la luz que salía de mi casa–. ¿¡Qué haces aquí!?

–Vengo a verte.

–¿Y por qué te has colado en mi jardín?

–¿Me hubieses abierto la puerta?

–No lo creo. Acabo de sentir un déjà vu de esos... ¿Pero cómo es que siempre te cuelas?

–Tengo de topo a tu vecino, somos amigos. 

–Eso explica muchas cosas...–dije con una sonrisa. Cambié la cara al darme cuenta–. ¿Por qué has venido a verme?

–Porque tú no lo has hecho.–Me sonrojé avergonzada–. Así que no me has dejado otra opción.

–Pero hoy es el baile... Pensé que querías ir con... 

–¿Con ella?–Se rió–. Si me hubieses dejado explicarte la situación... ¿Puedo subir y explicártelo?–Fruncí el ceño. Pensé que aquella no era la mejor idea después de todo lo que había pasado.

–No creo que sea buena idea...–Me abracé a mí misma nerviosa e insegura. 

–Bon, sino me vas a dejar subir por tus escaleras... Tendré que subir por mis escaleras.

–¿Qué? ¿¡De dónde has sacado esa escalera!?–Era una escalera muy alta, con la que se llegaba hasta el tejado sin problemas.

–Me la ha prestado tu vecino–dijo con una sonrisa. ¿Cómo narices la había conseguido meter en mi jardín? Con cuidado la colocó al lado de mi balcón y comenzó a subir. 

–Estás loco.

–Loco por ti, ma chérie~.–Me sonrojé con fuerza por sus palabras. 

–Vamos Francis... De-deja de decir tonterías...–Me crucé de brazos–. ¡Y si te caes yo no quiero saber nada! Que lo sepas...–Se rió ante mis palabras.

–(T/n), a mi ella no me gusta. ¿Y sabes por qué?–Miré como ascendía hacia mí, preocupada y confusa–. Eso es porque a mí me gusta otra chica. Una chica que me ha querido tal y como soy desde el principio, cuando para ojos de los demás era un violador. Una chica que ha estado a mi lado a pesar de los insultos. Una chica que me ha salvado la vida poniendo en riesgo la suya. Una chica que siempre me ha apoyado, tanto en los malos como en los buenos momentos. Una chica la cual es la más dulce, loca, divertida y amable del mundo. La misma de la que no pude evitar enamorarme en el primer momento en la que la vi caminar hacia mi con esa sonrisa tan hermosa. Y la chica con la cual quiero estar hoy, y todos los días de mi vida.–Para cuando él alcanzó mi balcón, yo ya estaba llorando. Su sonrisa alegre me tranquilizó un poco.–¿La conoces? 

–Eres un imbécil. Realmente eres un imbécil demente.–Froté mis ojos intentando hacer que las lágrimas desapareciesen, no tuve éxito–. Ven aquí ahora mismo. No quiero que me acusen por ayudar a que se produjese un suicidio.–Agarré su camisa y le obligué a que entrase en mi balcón. Nada más puso sus pies en mi balcón le abracé con fuerza sin dejar de llorar–. ¡Eres un putain estúpido! ¿Sabes lo que te he echado de menos?

–Je suis désolé, chérie.–Acarició mi pelo intentando calmarme–. Yo también te he echado mucho de menos. Mais, yo pensé que no querías verme... Me evitabas y creí que...

–Me separé porque yo no me sentía bien con todos ellos. A parte... Quería prepararme. Para cuando te fueses a la universidad y que así el cambio no fuera tan grande... Pero he fallado.–Agarré con más fuerza su chaqueta–. No lo he logrado porque cada día que pasaba lejos de ti era mucho peor que el anterior.–Lloré empapando su camisa blanca–. No quiero separarme de ti... Porque te quiero, Francis.

Tomó mi barbilla y con delicadeza hizo que le mirase a los ojos. Sonreía de una manera tranquila.

Juntos, es una promesa. ¿Recuerdas?–Secó mis lágrimas–. Y pienso cumplirla hasta el final porque... Je t'aime aussi. 

Unió nuestros labios creando un hermoso beso. Nuestro primer beso. Es curioso eso que dicen que cuando la persona correcta aparece todo parece más mágico, pues es cierto. Todo era tan mágico y tan perfecto, que una parte de mi rezaba porque no fuese un sueño y sonase mi despertador. Nos separamos por la falta de oxígeno, aunque con gran lentitud. Sus ojos se encontraron con los míos, se acercó de nuevo para a continuación besar mi frente con dulzura.

–Juntos.–Entrelacé sus dedos con los míos. Decidí que era bueno entrar dentro pues hacía algo de frío fuera. Me senté en la cama mientras él se cruzó de brazos con una sonrisa divertida. 

–¿No vas a bailar con ton copain (tu novio)?

–No estoy vestida para ir al baile.–Señalé mi cursi, pero sexy, pijama de corazones–. A no ser de que sea de disfraces. Además, ¿novio?–pregunté arqueando una ceja divertida al ponerme en pie.

–No es necesario que vaya a ningún lado para bailar con MI novia.–Rodeé con mis brazos su cuello y le acaricié riendo. 

–Me gusta como suena eso de novia.–Besé sus labios de nuevo. <<Madre mía... Podría acostumbrarme a esto~>>. Una idea cruzó mi mente haciendo que me separase un poco de él–. Espera, que a TU novia se le ha ocurrido una gran idea.

–Me gusta como suena eso~.

Comencé a buscar una canción en el móvil. (La canción del vídeo XD) Lionhearts, ahí estaba. Le di al play, y tras posarlo en la mesita me acerqué a Francis. Le ofrecí mi mano. 

–¿Me haría el honor de bailar conmigo, mon copain?

–Avec plaisir, ma chérie. (Con mucho gusto).–Tomó mi mano y comenzamos a bailar la canción pegados. Esa canción era tan bonita y yo era tan feliz bailando junto a él. Pasos lentos, giros y amor... Parecía el baile de un videoclip. En definitiva, nuestro primer baile no puede definirse con otra palabra que no sea: perfecto.

Tras unas cuantas canciones más, risas, charlas, besos, caricias y abrazos por parte de ambos, ya eran más de las doce de la noche. Francis y yo estábamos algo cansados, por eso creí que era una buena idea la de irnos a dormir. 

–Quédate a dormir–propuse ilusionada. La propuesta le pilló de sorpresa, se veía con solo ver su cara. 

–No sé... Tus padres...–dijo nervioso y algo sorprendido.

–Es que es tarde y no quiero que vayas tu solo...–reconocí con cierta preocupación–. Mis padres volverán tarde. Por lo que tenemos la casa para nosotros solos~.–No tardó más de unos segundos en reaccionar y cambiar su cara.

–¿Eso es una propuesta indecente?–preguntó con picardía.

–Solo si tu quieres que lo sea–respondí de la misma manera. Se rió después de besar mi frente otra vez.

Yo me introduje entre las sábanas mientras Francis se quitaba la chaqueta y los zapatos. Intenté ponerme lo más al borde que pude para dejarle sitio, pues mi cama no era extremadamente grande. Con cuidado se metió en mi cama y con sus brazos me atrajo hacia él. Nos despedimos con un beso en los labios, deseándonos buenas noches. 

Esa fue también la primera vez que dormimos juntos. Sumando todas mis experiencias, esa pasaría a ser una de las mejores de mi vida con diferencia. Tuve el bello presentimiento de que iba a pasar muchos más momentos como ese a su lado antes de caer dormida. 

...(***)...

¡Hola! Eh... Jejejeje, sé que esto tendría que estar ya terminado... Pero es lo que tiene cuando vas a casa de tu familia y tu familia viene a tu casa ^^,  En fin espero que os gustase. 

La canción es de uno de mis canales favoritos y pienso firmemente que esa canción es perfecta para esta historia. Amo la letra jajaja <3. 


Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top