Cuando Hoseok abrió los ojos, se encontró en un lugar desconocido, frunció el ceño mirando a sus lados y bostezó muy extrañado. Una enfermera que justo entraba en ese momento, sonrió feliz al ver aquel paciente despierto. El omega se acomodó mejor en la cama para luego ver un suero y luego recorrer con sus ojos aquella pita transparente que terminaba en una aguja y estaba metido en una de sus venas, casi sufre un segundo colapso al ver un poco de sangre.

—¡Oh, si hubiera llegado unos minutos más tarde, realmente no hubiésemos podido salvar al bebé!—dijo ella acercándose al pelirrojo.

—Entonces...si estoy embarazado—comentó el omega sintiendo un manojo de nervios acomodarse en su vientre bajo—¿Qué me pasó, como...llegue aquí?—preguntó desconcertado mirando alrededor.

—Un joven le trajo, ha estado durmiendo en la sala de espera desde ayer por la noche.

Jeon Jungkook había llegado a la clínica—¡Ayuda, ayuda!—gritó desesperado, notando que estaba vacía, maldijo en bajo y al ver a una enfermera a lo lejos, acostó a Hoseok sobre una banca y corrió donde la mujer, ella pegó un grito del susto cuando el joven la giró, notando al chico que parecía estar llorando—Por Favor...sálvalo, es lo único que tengo ¡Sálvalo!—pidió a gritos y se hincó a los pies de la mujer, que miró atrás del chico, notando el cuerpo inconsciente sobre la banca.

Hoseok al escuchar lo que la enfermera le comentó se sorprendió: ¿En serio Jungkook hizo algo así?

—Estaba desesperado—comentó ella acercándose a la computadora y estudiar un poco las pulsaciones del omega—llegó todo histérico, empujó al guardia de la puerta, diciendo que necesitaba que lo atendieran o que denunciaría a la clínica—río ella divertida ante los recuerdos de todo el personal tratando de calmar a un cachorro alfa—Su hermano se nota que lo ama mucho, es muy tierno. No ha parado de preguntar cada treinta minutos si usted ya había despertado.

Hoseok agachó un poco su mirada con un leve sonrojo, preguntándose si realmente la enfermera hablaba del mismo Jeon Jungkook, suspiró bajo, preguntándose qué desorden había hecho aquel alfa al final de cuentas.

—Dijo que...si hubiese llegado minutos tarde pude haber perdido a mi bebé—comentó con pesar.

La puerta de aquel cuarto se abrió, entrando el médico que estaba a cargo de la situación del omega, ambos se saludaron con respeto. La enfermera le sonrió al omega para hacerse a un lado mientras anotaba algo en la libreta donde mantenía información de aquel paciente.

—Kim Jaejoong, a sus servicios—dijo el médico—respecto a su caso, tal vez mi compañera ya le habló un poco lo delicado que es—se sentó haciendo una pausa—ya que usted es un omega mayor que ha quedado en cinta entre los 28 años y es su primer bebé. Usualmente los omegas siempre tienen su primer hijo antes de los veinticinco, así el cuerpo está más adaptado en ese tiempo a engendrar y se acostumbra fácilmente al crecimiento de un cachorro en su interior, pasado los veinticinco,en el caso de los omegas, la mente ya sabe cómo el cuerpo debe reaccionar por si queda de nuevo en estado de embarazo; el bebé estaba siendo rechazado por su cuerpo.

—Pensé que aún estaba a tiempo para poder engendrar un bebé—dijo extrañado Hoseok.

—Está en la línea amarilla,es decir, entre el peligro y lamentablemente su cuerpo estaba rechazando al feto, sintiéndolo como una amenaza. Los tres meses siempre son los más complicados. Suelen haber abortos espontáneos—el médico frunció el ceño notando la cara de sorpresa del omega —¿Siquiera sabía que tendría un bebé? Tiene dos meses y medio de gestación.

—Lo sospeché, pero...no quería admitirlo. No estaba listo mentalmente.

—¿Tenía miedo de su alfa? Tiene una marca en el cuello y no se ve bastante bien—comentó el hombre—Por cierto. Su hermano ha estado preguntando por usted, no me ha dejado en paz, entrando a mi oficina cada treinta minutos, ayer durmió a su par toda la noche, no pudimos desprenderlo de su lado—rió al recordar—su hermano cuida bien de usted.

¡Que no era su hermano, no tenían nada parecido en cuanto a físico se refería! ¡Y su fuera su hermano, de seguro lo hubiera tomado de los pelos y tirado a un río por insoportable!

—No es mi hermano—dijo el omega acostándose en la cama mientras veía al médico tomar un aparato para hacer la radiografía—ese es mi alfa—admitió con leve decepción para acostar a un lado y fruncir el ceño—lo único que tiene de bueno es su puntería y fertilidad.

El médico enarcó ambas cejas al escuchar aquel comentario.

—Es...un padre bastante joven —dijo con tranquilidad aquel hombre—Me imagino que él no lo sabe. Preguntaba qué es lo que tenía, le dije que se había deshidratado y pareció calmarse, aunque ya sospechábamos un poco cuando le hicimos los exámenes.

—Usted no parece sorprendido—comentó Hoseok mientras el doctor le subía la camisa y abría un poco sus pantalones para poner después una gel helada que causó leves cosquilleos en el vientre del omega.

¡Ay, ajaajajaj! ¡Que me haces cosquillas! ah, muy helado...oye pero el doctorcito esta guapo ¿Estará casado?

—He visto muchos casos en mi corta carrera, lamentablemente—comentó el médico y miró en dirección de una pantalla—Le haremos un ultrasonido para que pueda ver a su bebé—dijo Jaejoong sonriendo causando en Hoseok una profunda calma.

Así que...¿Existían hombres tan guapos como ese doctor? 

Jungkook caminaba de un lado a otro contemplando el reloj, había avisado a sus padres que Hoseok se encontraba desde el día anterior en la clínica, tuvo un desmayo y los médicos le dijeron que era falta de hidratación. Se mordió la mejilla interior para luego notar a la enfermera salir del cuarto donde Hoseok se encontraba.

Si nadie más le hacía caso, detendría a esa enfermera hasta que le sacara información.Con zancadas poderosas se acercó a pasos apresurados, hasta bloquear el camino de aquella mujer que solo hacía su trabajo y trataba de evitar-a lo sumo-al cachorro alfa irritante.

—¡Pst, pst!—llamó aquel chico a la enfermera omega.

La mujer torció los ojos para verle cansada. Suspiró dando las mejores de sus sonrisas. Paciencia, paciencia.

—¿Si, joven?

—Jung Hoseok ¿Ya despertó? Vi al médico entrar—señaló en dirección de la puerta.

—Sí, ya despertó y se encuentra en buenas condiciones por el momento, más tarde mi jefe le dirá a usted si su presencia es necesaria en el cuarto, mientras tanto, siga sentado. Gracias, si me permite, tengo cosas que hacer.

Jungkook frunció el ceño, preguntándose porque todos parecían andar de malhumor, ignorante que todo eso se debía gracias a él. 

Miró a los lados, para ver si no había moros en la costa y se acercó silbando al cuarto donde se encontraba su niñero omega y quiso tocar la puerta; pero no lo hizo, abrió con lentitud, viendo al pelirrojo con el médico, el menor se acercó a pasos lentos, viendo una pantalla que parecía demostrar algo.

Un punto raro.

—¿Tienes un tumor?—preguntó Jungkook abriendo los ojos hasta no más poder creyendo que el omega tenía algún tipo de cáncer. El alfa frunció el ceño: No, de seguro era algún parásito.

—No joven, ese es un bebé.—dijo el médico con la mayor de las tranquilidades.

Jungkook quedó en blanco, choqueado ante aquella noticia.

—¿El bebé es un tumor?—dijo Jungkook aún sin comprender del todo aquellas palabras.

Hoseok le miró de un solo.

¿Acabas de decirle tumor a nuestro bebé?! ¡Tu pedazo de mocoso tienes M***[Se censura por el bienestar del feto].

—No idiota. Tendré un bebé, eso pasa —contestó de mal genio el omega torciendo los ojos.

—¿Por qué tendrás un bebé Hoseok?—movió su cabeza un ángulo a la derecha, tratando de buscarle forma aquella cosa; pero no la hallaba, siseo viendo aquella pantalla y se acercaba casi poniéndose encima del doctor, que se hizo a un lado para hacerle espacio al joven.

¡Que me lleve el diablo, ahorita! ¡que me muero de la vergüenza!

El médico subió su rostro permaneciendo en un profundo silencio, dirigió una mirada a Hoseok, que solo suspiró al percatarse a que se debía aquel gesto de rostro.

—Se me cayó cuando era pequeño—dijo Hoseok sonriéndole al hombre, quien solo se rió bajo ante aquella ocurrencia.

—Como decía—prosiguió Jaejoong—necesita tener mucho reposo, no levantar cosas pesadas, comer sano, imprimiré ahorita una alimentación balanceada para usted y el niño. También le recomendaré vitaminas prenatales, Sabe que está prohibido tomar bebidas alcohólicas y fumar cuando se encuentra en estado de gestación, siempre procu-...

Jungkook entrecerró los ojos aún viendo esa pantalla.

—Parece un frijol, eso no es un bebé—interrumpió Jungkook sorprendido con la boca abierta al ver aquella imagen—es muy pequeño...pero...¿Porqué un bebé?–dijo el menor aun no saliendo de su sorpresa que su niñero iba tener un hijo, no recordaba que Hobi tuviera pareja y luego de darle vueltas al asunto pensó en alguien. Ese alfa pelinegro que acompañó a su niñero a sacarlo de la cárcel, se cubrió la boca a no más poder.

—¿Acaso tengo que decirte como se hace un bebé?–alzó la voz Hoseok.

—No puse atención en esas clases, eran aburridas—prosiguió Jungkook para entrecerrar los ojos—¿Piensas decirle a ese alfa? Por lo menos mejorará los genes del bebé, es muy atractivo—Hizo un puchero para luego agregar en bajo—aunque yo soy mas bonito—dijo quejoso.

Hoseok puso los ojos en blanco desviando la mirada.

¡Arrástrenme al infierno, m****[Se censura por el bienestar del ingeniero]

El doctor se quedó en un profundo silencio al escuchar aquel debate que el niñero y el cachorro alfa se tenían, mientras más hablaban, el tono aumentaba y Jaejoong temió que terminaran tomando los objetos que habían presentes y los usaran como armas.

Suspiró al pensar en una idea y mantener la paz de aquella clínica. Todo fuera por la paz de su clínica.

Después de unos minutos, Jungkook fue sacado de la clínica a la fuerza, con ayuda de los guardias de aquel pequeño edificio, quienes se quedaron incluso en la entrada, impidiéndole el paso. Jungkook gruñó, golpeando el basurero cercano que había, para luego tragar duro ante aquellos enormes alfas gorilas que lo partieron mentalmente, sonrió nervioso y se quedó sentado en una de las bancas de afuera.

Varios minutos que Hoseok había terminado su plática con el guapo doctor, quien le dio consejos sobre su embarazo, también le entregó unas páginas que decía como mantener una alimentación balanceada, salió de la oficina mientras pensaba que hacer.

Bueno, ahora ya sabía que Jungkook era idiota de idiotas.

Hasta un trono podía hacerle por semejante ocurrencias. Realmente no sabía si era mejor decirle que el bebé que esperaba era suyo: ¿Cómo era posible que no supiera como se hacía un bebé? ¡A su edad debía saberlo!

Muchos sabían hacer un bebé; pero pocos aprendian a ser padres.

Lo peor de todo era que el alfa era 10 años menor, apenas empezaba la adultez.

Hoseok realmente se preguntó que hizo mal en su vida pasada para estar pagando semejante castigo. Su caminar era rápido, olvidando en algún momento que Jungkook iba tras él siguiéndolo. Luego se culpó, por no haber tomado los supresores, era normal que el lobo alfa reaccionará a su celo y él le correspondiera por su instinto de apareamiento.

Como envidiaba a los Betas, no debían pasar por ese tipo de situaciones.

Además su omega ¡Era un maldito calenturiento! ¿Cómo pudo aceptar a ese tipo?

Hoseok se juraba que sí había comprado los malditos supresores, buscaría más tarde en el cuarto, seguramente lo dejó en algún lugar del cuarto que olvidó, en alguna maldita esquina debían estar, por lo menos.

 Lo peor del caso es que su alfa, era ignorante que lo había marcado y tenían un lazo de por vida y un cachorro en camino. Suspiró con amargura

¡¿Y para que p*** existen los condones y anticonceptivos?! ¡Que la bendición se la metan por el orto! Ah no...a mi me la metieron.

No se percató que Jungkook había estado llamándole por su nombre desde hace segundos, su mente ahorita estaba muy concentrada en qué hacer con su futuro. Tendría un bebé, su bebé y el padre era un alfa inmaduro—¡Jung Hoseok!—gritó el menor girando de un solo al pelirrojo.

El pelirrojo reaccionó.

—¿Eh, qué?—preguntó nervioso el omega, reaccionando al llamado del menor. Se pasó la mano por la mordida al sentir un leve dolor allí.

—¿Qué dijo el médico? —preguntó el pelinegro con leve curiosidad—¿piensas decirle a su papá? ¿Te vas a casar? ¿Estabas comprometido y yo no lo sabía? Yo te creía puro y casto.

¡Pues lo era cuando tú pedazo de imbe-...no Hobi, no te alteres, le hace daño al bebé!

—¿Qué?—preguntó Hoseok para luego rodar los ojos—Él no lo sabe...fue una calentura del momento—dijo quitando las manos del menor que se habían posicionado sobre sus hombros—yo puedo encargarme de mi bebé.

Hoseok casi lloraba ante la angustia y el rencor.

Metió sus manos en el bolsillo del pantalón para seguir caminando, debía contarle a Jin, nadie mejor que su amigo para un consejo ¿Cierto? Tal vez el mayor le diría que podía hacer al respecto. Tomó una calle nueva, que lo iba dirigir a la casa de aquel alfa. Necesitaba conversar con su mejor amigo.

Respecto a decirle a sus padres, ellos, de seguro se decepcionarían.

Jungkook se quedó quieto señalando la calle que lo dirigía a su casa, para luego señalar en dirección donde el omega había agarrado. Frunció el ceño ¿Será que Hoseok pensaba darle la notica al padre del bebé? Como sea, siguió en silencio al omega.

Hoseok respiró con profundidad al ver aquella puerta, tragó duro, lleno de un manojo de nervios, se estaba arrepintiendo de haber llegado aquel lugar, agradecía que la ciudad fuera pequeña y llegó rápido; pero sus pies flaquearon. Tocó la puerta y Jungkook se posicionó a su lado para subir la mirada. Tocó el timbre mientras metía sus manos en los bolsillos del pantalón trasero, Jungkook recorrió un poco sus ojos sobre aquellas manos notando a Hoseok actuar muy extraño, frunció el ceño.

¿Qué con ese comportamiento?

Jimin abrió la puerta, sorprendiéndose de ver aquel omega pelirrojo, entre sus piernas se coló el pequeño Namnam, que pegó un chillido de la emoción al ver aquel rostro familiar y justo cuando iba tirarse sobre Hoseok, un gruñido proveniente de Jungkook lo hizo retroceder. 

Hoseok le pegó en el pecho al joven al ver aquel comportamiento—Jeon Jungkook—dijo decepcionado—Es un bebé.

El pequeño Namjoon se escondió detrás de su padre, Jimin miró al alfa para luego enfocar su mirada en el pelirrojo.

—Hoseok ¿Se te ofrece algo?—preguntó aquel rubio ofreciendo una suave sonrisa.

—¿Se encuentra Jin?—preguntó Hoseok ofreciendo una sonrisa por igual, el rubio tomó a su pequeño Namjoon sobre sus manos para cargarlo al percatarse que estaba a punto de llorar.

Jin apareció detrás de Jimin y al hacerlo, sus ojos se enfocaron de un solo golpe en Jungkook y luego en su amigo.

—Tendré un bebé—dijo de un solo Hoseok, había pensado mucho cómo dar la noticia a su amigo; pero los nervios le fallaron y terminó por ser cortante con la noticia.

Jungkook miró aquel alfa recordando algo, se cubrió la boca, señaló a Jin y luego a Hoseok.

—¿Entonces él es el padre de tu bebé?—preguntó Jungkook en voz alta señalando a Jin—¿¡En serio te metiste con este alfa?!

¡Ah hijo de tu-...Hobi el bebé, hazlo por el bebé. El no tiene la culpa de tener un padre tan idiota.

Jimin dirigió una mirada a Jin y bajó al pequeño Namjoon, su mirada se había vuelto fría de alguna manera. Hoseok abrió los ojos en par al percatarse de la lengua suelta que Jungkook tenía y menudo mal entendido el que se iba a crear.

Justo cuando Hoseok se iba defender y explicar la situación, sobre el hecho que Jin no era el padre. Jimin ya había tomado del cuello de la camisa a su alfa y le susurró algo en el oído. En cambio, el pequeño Namjoon solo se quedó en silencio preguntado que estaba sucediendo.

—¿Quieres morir?—preguntó el rubio arrugando su nariz y mostró sus colmillos, cambiando por completo el color de sus ojos a unos grises brillante. Jin pasó con dificultad la saliva y miró a su amigo para luego enfocar su mirada en su esposo, soltando un chillido y negar con fuerza.

Hoseok entró a la casa para defender a su amigo; pero Jimin se la agarró contra él tomándolo de los cabellos—¡Ay estúpido mi pelo idiota!—gritó Hoseok molesto.

Jungkook ingresó a la casa bien tranquilo contemplando la decoración interna mientras el pequeño Namjoon corría a jalar de los pantalones a Jimin para separarlo y que no le hiciera daño a su papá, ni al omega pelirrojo, el omega de Jimin había tomado control.

La puerta se abrió por tercera vez y los presentes no se habían percatado de la sexta persona—¿Pero...qué está pasando aquí? —preguntó aquella voz y todos se giraron a ver de un solo.

[Cualquier error de ortografía, redacción, avisad por favor, esto se corregirá cuando el fanfic pase a edición]

¡Recuerden el lema de la familia!

∞ Somos Sol que calienta; pero no quema 7w7r ∞