[02]
una alarma lo hizo despertar y caer de la cama. Hoseok dio un quejido ante el golpe recibido. Suspiró de mal humor, notando que eran las seis de la mañana y ya estaba a una hora de que se haría la entrevista—¡Kim Namjoon, hijo de puta!—maldijo en bajo al ver la hora que era y salió corriendo en dirección del baño. Era el primer día, así que tendría que dar lo mejor de sí en conseguir el puesto de secretaria, debía hacerlo.
Mientras por otro lado, Namjoon ya se encontraba poniéndose la peluca y se río en bajo al escuchar el quejido y el golpe de alguien golpeando contra la madera del suelo. Negó avergonzado, pasándose un poco de brillo labial de un tono suave rojizo y chocó sus labios, contemplándose como había quedado y sus cejas se enarcaron al mismo tiempo, bastante sorprendido por su resultado—¡Ay mami, me veo raro! me parezco a mi tía la del barrio—chilló poniendo sus manos en sus mejillas hasta abrir la boca, personificando el cuadro del grito.
∞ ∞ ∞
Hoseok al terminar de arreglarse, salió caminando torpemente con las piernas abiertas y se puso una mano en la cintura y enarcó ambas cejas divertido, apareciendo por el campo de visualización de su amigo. Namjoon casi dejó caer la cuchara ante lo horrendo que se veía su compañero.
—¿Qué demonios andas puesto?—preguntó el ajeno barriendo su mirada sobre el cuerpo del chico—esa peluca corta...¿Dónde la conseguiste?
—La compré en una tienda de por aquí ¿Me veo guapo?
—No. Pareces de esas mujeres de cuarenta años que van a un funeral...sin ofender.
Namjoon ingresó un poco de cereal en su boca y se echó a reír ante la pose rara que el menor había agarrado.
—Gracias por tu apoyo, me costó arreglarme—empezó a caminar abierto, dirigiéndose a tomar un vaso de agua y Namjoon suspiró avergonzado.
—¿Qué sucede contigo? ¿Por qué caminas así?—río burlón el moreno dando otra cucharada a su cereal.
—¿Te parece divertido? me pica allí abajo—dijo gruñendo y sacandose la mitad de la braga que se le había metido en su culo—. ¿Dónde están los zapatos?
—Allí están—comentó muy tranquilo, señalando por el sofá, manteniendo una sonrisa en su rostro.
Hoseok le sonrío y se dirigió al sofá, contemplando una caja blanca, caminando abierto.Namjoon le analizó de pie a cabeza y frunció el ceño. No comprendía como Hoseok podía caminar casi despatarrado, como si le pesara algo en medio.Seguramente su amigo no se acostumbraba a la vestimenta.
Hoseok abrió la caja, imaginando que usaría unos zapatos bajos y cómodos, su sonrisa desapareció al ver unos tacones altos, tacones dorados, combinado con negro. Sus ojos se abrieron en par, sacando aquel par—¡Maldito jefe!—chilló avergonzado.
—Por cierto—interrumpió Namjoon—Trajo la ropa que usarías y...la peluca nueva. No puedes ir así, ni siquiera seduces a una mosca.
—¿Cómo que ropa? ¡Ya estoy vestido! ¡Me veo guapa como una flor!—se quejó señalando su largo vestido suelto, bajo las rodillas, unos calcetines rosados con puntos blancos que no combinaban para nada con su traje y sobre la peluca llevaba un adorno de gancho con diseño de flores.
—No es por ofender; pero pareces mi abuela en bata. En la siguiente caja te dejó tu traje y te ayudaré a...maquillarte, eres un desastre.
Hoseok maldijo en bajo y abrió la segunda caja, al sacar el vestido, su rostro palideció y un gran grito resonó por aquella casa.
∞ ∞ ∞
Después de unos minutos, un nuevo Hoseok salió caminando tembloroso del cuarto, balanceándose y apretando los labios. Un minivestido negro con mangas largas, una peluca de cabellera castaña, cabello ondulado y largo. Unos tacones negros con agujas doradas y un buen maquillaje hechos por Namjoon. Labios rojizos; pero no tan fuertes, delineador arriba de los ojos con sombras doradas.
—Parezco una puta—dijo de un solo el pelirrojo maldiciendo en bajo.
—Una puta de alta sociedad querrás decir—río Namjoon sorprendido—¡Te ves hermosa!—le guiñó el ojo.
—Callate antes de que te inserte el tacón en la cabeza—suspiró sacando de nuevo la braga—¡Joder con esta maldita braga!
—Ya te acostumbraras...yo ando un boxer—río divertido, burlándose de su amigo.
—¿Qué? ¿¡POR QUÉ TÚ ANDAS UN BOXER?!
—Soy una alumna, además la falda que yo uso es larga y es de tela pesada, así que puedo andar comodo. Como sea—suspiró tratando de recordar que debían empezar su falsa vida—tú eres mi prima mayor, la cual quedó a cargo de mí ya que mis papas murieron. Trabajas como secretaria y hace poco nos mudamos a esta pequeña ciudad...espero que te hayas memorizado tu papel. Además, debes quedar en ese puesto o el jefe te matará.
—Lo sé—comentó Hoseok caminando tembloroso hasta que cayó de boca al suelo.
Namjoon apretó los labios sintiendo el dolor de su amigo y lo ayudó a levantarse.
—Respecto a los tacones, te costará; pero te acostumbraras, mi hermana me dió un consejo para manejarlos un poco mejor. Apreta los dedos, puede ayudarte un poco.
—Mejor apretaré el culo para que la puta braga no se me meta—Namjoon suspiró al escuchar aquello.
—Es nuestra última oportunidad Hoseok, debemos hacer un buen trabajo.
Hoseok le sonrío a Namjoon y con su ayuda, caminando y tropezando por el camino, se dirigieron a la puerta de la casa, no sin antes olvidar sus nuevas identidades. Namjoon suspiró y le entregó unas suaves palmaditas al pelirrojo, quien se dirigió al carro, quitándose los tacones en el proceso y tirandolos al lado del pasajero.
—Te veo más tarde, trata de averiguar lo que puedas—habló Hoseok entrando al auto. Encendió el carro y bajó la ventana, contemplando una vez más a su amigo—y Namjoon...
—¿Si, prima?—Hoseok se río en bajo al escuchar aquello y suspiró un tanto divertido
—Ten un buen día.
Hoseok arrancó el carro, dejando a su compañero atrás. Namjoon sonrío apretando las pitas de su mochila, miró a los lados un poco confundido, preguntándose que lado debía agarrar para ir a su nuevo colegio.
Hoseok iba manejando muy tranquilo de la vida, con la música al volumen que deseaba, meneando un poco sus caderas mientras trataba de distraer y alegrar su mañana. Se detuvo en un semáforo y se movió un poco su peluca, se contempló en el espejo, procurando que su maquillaje se mantuviera en su lugar. Estaba bastante sorprendido del trabajo que su amigo hizo con él. El ruido de unos chasquidos y besos se hicieron presente, extrañado contempló a su izquierda, viendo a unos hombres que le miraban y le guiñaron el ojo.
Hoseok abrió y cerró la boca.
—Hola muñeca—habla alguien del carro ajeno mordiéndose los labios con mucha morbosidad— te ves bien buen ¿Te parece si salimos un día de estos? pasame tu númerito.
Hoseok miró de un solo al frente, viendo que el semáforo contrario ya se iba poniendo de naranja. Volvió su mirada a la izquierda y sonrío espléndido–Claro que si guapi—respondió con su voz ronca y aceleró. Los hombres abrieron la boca casi que se le quebraba la quijada mientras Hoseok aceleró gustoso de burlarse de esos malditos pervertidos.
En una oficina, un joven chico que no pasaba los veinte años, se mantenía en su silla negra de cuero, leyendo ciertos documentos, Era el CEO de una empresa que exportaba productos de aromas para lociones. Suspiró mientras leía los curriculums de las secretarías que deseaban postular para el puesto. Su madre, una mujer bastante joven de unos cuarenta años, ingresó con una amable sonrisa.
—Hijo...las chicas ya se encuentran afuera esperando. Vinieron como unas cuarenta y cinco mujeres...incluso, dicen que puedan ir agregando—suspiró—¿Estás seguro que no quieres hacer la entrevista Jungkook?
—Ya te dije que me da igual, no quiero verlas, además eres experta en esa. Pero por si acaso, buscame una que esté bien buena para pasar alguna vez el momento.
Su mamá rodó los ojos.
—Para esa gracias estan las putas. No te vas a meter con tu secretaria como lo hiciste con la anterior, la pobre le rompiste el corazón y salió llorando, por eso tienes una mala fama.
—Si...tanta mala fama que hay como treinta mujeres afuera queriendo el puesto—río divertido.
Su madre se sintió superada y apretó los labios.
—Como sea...después no te arrepientas si no te gusta la que elija. Yo seleccionaré la que me parezca más adecuada para este puesto y no caiga en tus redes...
—Sí, como digas—comentó haciendo una sonrisa ladina y guiñandole el ojo a su progenitora.
La señora Jeon suspiró con leve pesar, se giró sobre sus talones y salío de aquella oficina. Ella se había divorciado de su esposo hace años, así que el pequeño fué criado más por su papá, que deseaba un heredero para la compañia. La mujer empezaba arrepentirse de haberle dado la custodia de su hijo a ese hombre, ella no tenía con que cuidar a Jungkook, era joven y de una familia humilde, se casó con su esposo porque creía que era amor. Pero el hombre la usó solo porque la vío hermosa y ella no pudo soportarle todos los tratos al tipo.
Su hijo parecía ir por el mismo camino. Se había hecho un egolatra y bastante dominante, con poco respeto a las mujeres que las veía para pasar el raro. La señora Jeon realmente se arrepentia de la actitud de su único hijo.
∞ ∞ ∞
Hoseok maldijo en bajo cuando el carro se le había pinchado una llanta a medio camino ¡Apenas estaba a quince minutos del edificio! vió a lo lejos el edificio de veinte pisos que sobresalía entre las casa—¡¿¡Por Qué tiene que pasarme esto a mí?!— maldijo en bajo, preguntándose que hacer. Unos carros pasaron al lado y le pitaron. El policía maldijo en bajo y tomó sus tacones, su cartera y sacó su celular lo más rápido que pudo—¡Ojala me conteste el maldito de mi jefe!—maldijo poniéndose los tacones mientras los silbidos de unos hombres que caminaban por la calle no se hicieron esperar.
—Mamasita, yo si te doy y no consejos. Por donde más te guste, por la boca, por delante...y por atrás.
Hoseok apretó su culo y con los ojos bien abiertos al escuchar aquella palabras, miró al hombre con una mirada aniquiladora.
—¿Hoseok...qué sucede?—habló Jin desde la otra línea.
—¡Jefe, se jodío una de las llantas del carro y ya voy treinta minutos tarde a-...
—Ya encontré tu localización ¿Cómo se arruinó la llanta? el carro es nuevo, justo lo compré hace dos semanas para tú trabajo.
—¡Pues lo estafaron porque la llanta hizo ¡Ca-Bum y no more run run!
—Entonces tendrás que irte caminando—el jefe contempló la hora y frunció el ceño—ya que vas tarde, tendrás que correr..
—¿Qué?—preguntó Hoseok sorprendido al escuchar aquello.
—Que corras perra.
—¡Ay hijo de pu-...
La llamada fue cortada y Hoseok miró el aparato eléctrico y dio un grito de cólera, dando saltos y golpeó la llanta del carro, sin querer su tacón se quedó trabado y desinfló una de las llantas buenas. El pelirrojo maldijo en bajo, metió el celular a la cartera y justo cuando decidió que debía correr, se fué de boca al suelo. Enseñando su ropa interior, Hoseok subió su rostro con lentitud y apretó los labios—¡MIER***!—gritó con sus potentes pulmones, levantándose y quitándose los tacones, echó a correr como alma que se lo llevaba el diablo. No sin antes darle una patada voladora al imbécil que se quiso pasar de inteligente con él al decirle semejantes palabras sucias.
—¡TODO SEA POR EL MALDITO TRABAJO Y DINERO!—gritaba mientras corría con tacones en manos y la gente se hacía a un lado, mirándolos muy asustado.
Namjoon llegó al nuevo colegio y soltó un suspiro, apretó los labios y justo cuando iba ingresar, unas chicas la pasaron golpeando por el hombro, las jóvenes se giraron a verle y se disculparon rápido. Namjoon enarcó ambas cejas al ver aquellas jóvenes bien arregladas, frunció el ceño poniendo sus manos sobre la cintura para contemplarse en el vidrio de la puerta notando un poco su físico—Bueno, mirate, no eres tan feo—se animó a sí mismo y sonrió caminando muy feliz de la vida, estudiando los rostros de alguna que otra chica por allí—Las jóvenes en mi época no eran tan desarrolladas—comentó sorprendido y apresuró sus pasos para llegar a su salón—¿Qué le dan de comer ahora?—se quejó haciendo una mueca.
—¡Ah, vamos tarde!—escuchó a unas chicas gritar y corriendo muy preocupadas.
—Me recuerdo cuando era joven—empezó hablar consigo mismo, saludando a una que otra alumna—era el mejor del grado en notas—suspiró con pesar—Me pesa la edad—el tipo hizo una mueca—Bien...el colegio es pan comido.
Lamento la tardanza ;A; estoy llena de fanfics que tienen horarios y pues debo cumplirlos y este aún no tiene horario, lo siento —se va a llorar a una esquina.
Cualquier error de ortografía, redacción, avisar por favor, esto se corregirá cuando el fanfic pase a edición]
¡Recuerden el lema de la familia!
∞¡Somos sol que calienta; pero no quema 7w7r!∞
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