Capítulo I

"¿quieres ir hoy al parque de diversiones?"

JungKook leyó el mensaje, sorprendido. Taehyung le había enviado un mensaje, en donde le estaba invitando a salir... De nuevo.

JungKook comenzó a pensar antes de responderle. No era la primera vez que este le enviaba un mensaje invitándolo a salir, se le hacia demasiado extraño. Taehyung casi nunca le dirigió la palabra a él cuando estuvo de novio con su hermano.

Y ahora lo estaba invitando a salir tan insistentemente ¿...por qué?

A lo mejor, era que quería saber de Jimin, y él era la persona más cercana al susodicho.

Pasó sus manos con frustración por su cabello ¿qué debía hacer? ¿aceptarlo o rechazarlo?

Sí lo rechazaba, lo más seguro es que, le volvería a enviar.

"Está bien"

"Perfecto, paso por ti a las 5:00 PM. Ponte más lindo de lo que ya eres <3"

Terminó de leer el mensaje y no pudo evitar sonrojarse por el halago.

Miró la hora en su pantalla, la cuál marcaba las 3:14 PM, se levantó de la cama y fue hacia su closet. Aún faltaba mucho para las cinco, pero quería aprovechar el tiempo que tenía para verse bien, como Tae se lo había pedido.

Se detuvo un momento ¿cómo podía pensar eso?

-Calma JungKook, sólo es una salida. Él sólo quiere saber de tú hermano. No va a pasar nada.

¿Verdad?

***

Tae envió el mensaje y dejó el celular a un lado de él. Sonrió malévolamente. Después de tanto insistir, JungKook había dicho que sí. Realmente él era alguien más difícil que Jimin, pero por fin lo había conseguido, y su plan había comenzado a dar marcha.

-No debiste dejarme, Jimin. Ni siquiera las lágrimas que derramará JungKook, van a pagar todo lo que me hiciste sentir.

---

El timbre de la casa sonó y JungKook miró el reloj que estaba en su mesita de noche, éste marcaba las 5:00 PM. Tae sí que era puntual, bajó las escaleras rápidamente, para su fortuna, no había nadie en la casa, así se ahorraría explicaciones.

Abrió la puerta y vio a Tae parado frente a él, realmente lucía sexy. Sacudió su cabeza para eliminar esos pensamientos. Bajó su mirada un poco más, y en su mano izquierda vio en ella ¡Una rosa! Por Dios.

-H-hola -saludó, el menor, nervioso.

-Un gusto volver a verte, JungKook.

-L-lo mismo d-digo -Se golpeó mentalmente ¿Qué rayos le pasaba? ¿Por qué tenía que tartamudear?

-Esto es para ti -le entregó la rosa.

-¿Por qué? -preguntó, extrañado, mientras tomaba la rosa.

-Sólo quise ser detallista. Espero que no te haya molestado eso -le mostró una sonrisa muy coqueta. JungKook no pudo evitar sonrojarse ante ello, y para Tae no pasó desapercibido.

-No, para nada. Fue... un lindo... detalle...

-¿Listo para irnos?

-Sí -cerró la puerta tras él.

-A propósito, ya vi que seguiste mi petición, te ves muy bien hoy -lo elogió.

-G-gracias -el menor sentía como el ardor en sus mejillas aumentaba.

Al llegar al auto, Taehyung, como todo un caballero, le abrió la puerta a JungKook, este sólo rió y entró al vehículo, mientras veía como el mayor rodeaba el auto, para luego sentarse en el puesto del piloto.

-Nos vamos a divertir como nunca, JungKook -finalizó la frase encendiendo el auto, y colocándolo en marcha.

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