Naruto y Sakura fueron los últimos en llegar al castillo. Ya casi todos estaban en la mesa. Solo faltaban los niños que estaban conociéndose mientras llegaban los dos últimos miembros de la familia.

Mebuki y Kizashi Haruno se habían sentado al lado de Minato y Kushina. Satoshi estaba sentado al lado de su madre y al otro lado estaba la hermana pequeña de Sakura. En realidad era muy parecida a ella pero en pequeño.

Se disculparon por la tardanza y se sentaron al lado de los Haruno y de Natsumi e Hiro. Y después comenzaron a comer todos juntos como una gran y única familia. Quizás esa sensación hacía sentir a los chicos cierta violencia. Además que los demás parecían más alegres por la unión de sus familias que ellos dos mismos. La comida estuvo bastante bien. Los cocineros de la Ciudadela Gris eran realmente buenos y hoy habían hecho una comida especial en honor a los invitados de los Namikaze.

Naruto, al igual que Satoshi, no comieron mucho. Era normal por la tarde deberían participar en el torneo. Coger fuerzas era buena idea pero no llenarse hasta no poder moverse. Tras comer, los Haruno se despidieron de los Namikaze y se dispusieron a ir hacia su lugar en las gradas del torneo. Satoshi se fue junto con Naruto al lugar reservado para los participantes del torneo.

Salieron hacia la explanada donde estaba emplazado el torneo. Había una gran grada rodeando toda la zona de combate. Ya estaban prácticamente llenas. Los Haruno se sentaron en un lugar junto a uno vacío, que era donde iban los Namikaze. Además al otro lado estaban los Nara. Los dos vasallos más importantes eran los que tenían el honor de estar junto a los Guardianes del Norte.

Sin embargo había una pequeña grada más que era donde estaban todos los participantes. En total eran 53, uno por cada Casa del País de las Nieves. Si no había ningún muerto habría seis rondas de combates. El ganador tendría que vencer seis combates.

- Naruto. - Le llamó Shikamaru desde un asiento que le había guardado en la grada de participantes.
- ¿Tu padre te ha escogido al final? - Preguntó Naruto contento.
- Si, dice que quiere ver que me ha enseñado tu padre. - Dijo Shikamaru también contento.
- Mira, quiero presentarte a Satoshi Haruno. Es el hermano de Sakura. - Dijo Naruto dejando pasar primero al Haruno.
- Encantado de conocerte. - Dijo Shikamaru ofreciéndole la mano.
- Igualmente. - Dijo el chico sonriendo.

En aquel momento llegó la familia de Naruto. Eran Minato, Kushina, Natsumi que cargaba con Hiro y por ultimo Sakura que iba junto a la pelirroja. Todos menos Minato fueron a sus asientos. Sakura estaba sentado junto a Kushina y también junto a su madre que estaban al lado.

- Hola hija. - Dijo sonriendo Mebuki.
- Hola madre. - Contestó Sakura contenta también.

Minato se puso frente a su familia, pero mirando hacia las gradas, Estaba justo de espaldas a la arena de combate. Al verle allí todo el mundo se quedó en silencio.

- Quiero daros las gracias a todos por haber venido hoy aquí. Me honráis con vuestra presencia. - Dijo Minato mientras todos comenzaban a aplaudir. - Hoy se celebraran las dos primeras rondas. Eso serán cerca de 30 combates si no me equivoco. Mañana por la mañana la tercera y la cuarta. Y después mañana por la tarde las semifinales y la final. - Dijo Minato mirando a todos.

Todos aplaudieron de nuevo y Minato hizo una seña al Heraldo que se encargaría de anunciar los combates. Minato fue a sentarse al lado de su esposa para presenciar los combates.

- "Parece que Akira al final si se ha presentado..." - Dijo la pelirrosa mirando hacia la grada de los participantes. - "Que recuerde no se le daba del todo mal. Si tiene suerte todavía puede hacerlo bien unas cuantas rondas." - Pensó Sakura pensando en el que al fin y al cabo era un amigo suyo.

El Heraldo estaba frente a una gran urna de piedra con muchos papeles. El torneo sería totalmente al azar. El papel del vencedor seria introducido en la urna que había al lado y el del perdedor seria desechado. Un método muy simple y sin mucho esfuerzo. Además no saber quién sería tu rival le daba cierta emoción extra.

- Primer combate... - Dijo el hombre cogiendo los papeles. - ¡¡Nara contra Egami!! - Dijo el hombre creando expectación por primera vez en combate.
- Oh bien, el primero. - Dijo Shikamaru contento levantándose.

El Nara vio como un hombre de unos treinta años, de estatura y complexión normales se levantaba junto a él. Ambos bajaron por la grada hasta la arena. Al llegar allí ambos se saludaron dándose la mano y después se separaron cinco metros. Todo el mundo se había quedado en silencio esperando el combate.

- ¡Luchad! - Gritó el Heraldo.

Shikamaru se lanzó rápidamente contra su rival dando una veloz y fuerte estocada desde la derecha. Su rival la esquivó pero parecía que le había costado. Shikamaru era realmente rápido. Tres estocadas más y ya había acorralado tanto a su rival que estaba amenazando su cuello de muerte. Había dos formas de vencer. Matando a tu rival o haciendo que se rindiese. Normalmente un ataque potencialmente mortal como el de Shikamaru bastaba para que el oponente se rindiese por su honor al menos. Te podría haber matado pero no lo he hecho. Si no respetabas eso perdías todo tu honor.

- Me rindo. - Dijo el hombre admitiendo la superioridad de Shikamaru.

Todos aplaudieron. Pero el que más era Shikaku Nara que parecía sorprendido y agradado por la muestra de fuerza de Shikamaru. Y eso que aún no había visto nada.

Los combates siguieron avanzando de manera bastante sencilla. No duraban mucho ya que las primeras rondas servían para eliminar a los más endebles. En uno de los combates del medio le tocó luchar a Akira Nohara contra un miembro de otra casa Secundaria. La verdad es que el combate terminó bastante rápido. El chico había entrenado con Lord Haruno y su rival no era especialmente bueno.

- "Menos mal..." - Pensó Sakura aliviada. Se había puesto algo nerviosa. Si perdía en la primera ronda probablemente su padre se enfadaría con él.

La pelirrosa seguía muy enfadada con el pero seguía siendo su amigo de la infancia al fin y al cabo. Puede que solo fuese un torneo amistoso pero también era una muestra del poder de cada casa. Perder en la primera ronda te situaba entre las casas más débiles.

El siguiente combate fue para el hermano de Sakura que venció realmente fácil a su enemigo. El Haruno tenía un estilo de lucha bastante potente y habilidoso. Su reputación era bien merecida.

- Es bueno. - Dijo Shikamaru.
- SI. - Contestó el rubio.
- Siguiente combate. - Dijo el Heraldo cogiendo algunos de los últimos papeles. - ¡¡Namikaze contra Kamata!! - Gritó después haciendo que todo el mundo se quedase realmente impactados.
- Ugh... - Dijo Naruto algo fastidiado.
- Uff... vaya suerte en tu primera ronda. - Dijo Shikamaru riendo.

Naruto se levantó encaminándose hacia la arena. Y con el su contrincante. La pelirrosa se quedó impactada viendo a su rival. Era un hombre de más de dos metros de alto y que de ancho era el doble que Naruto.

- ¿Quién es? - Preguntó Sakura sorprendida.
- Es Dai Kamata... alias "La Montaña." - Dijo Minato respondiendo a Sakura. - "No lo tienes fácil en tu primer combate hijo." - Pensó después Minato.
- "Naruto..." - Pensó Sakura algo preocupada. También quería que el ganase. Como le paso con Shikamaru, su hermano y Akira. Vaya en el fondo quería que las personas cercanas a ella ganasen.

Los dos llegaron a la arena y fueron a saludarse. El Heraldo estaba entre ellos observándoles. A pesar de su gran tamaño Dai era alguien educado.

- Quería aprovechar para felicitaros por vuestro compromiso. - Dijo Dai ofreciendo su mano.
- Muchas gracias. - Contestó el rubio. - "Es verdad... todo este torneo era para eso... me había olvidado." - Pensó Naruto.

Los dos se separaron cinco metros. Naruto desenvaino su espada. Era una espada larga o también conocida como espada de una mano y media. Era una espada con la hoja larga pero también más liviana. Se podía usar bien tanto con una mano como con las dos. De ahí su sobrenombre.

La Montaña llevaba un espadón o espada ancha. Era una espada aún más larga pero el doble o triple de ancha. Solo podía usarse con las dos manos y requería más fuerza que habilidad para matar con ella.

- ¡Comenzad! - Gritó el heraldo.

Naruto se lanzó contra su rival sin pensárselo dos veces. Ambos chocaron sus espadas. Y como esperaba todo el mundo Naruto salió peor parado del choque. Aun así no había caído al suelo como todos esperaban. Pero la espada de Naruto se había ido hacia atrás mientras que la de La Montaña seguía hacia delante. Naruto trató de parar cada golpe recibido pero a cada uno salía peor parado y más desequilibrado.

- "Así no lo lograras..." - Pensó Minato.

Naruto empezó a tratar de desviar los golpes. Sin embargo eran tan fuertes y rápidos que no lograba desviarlos del todo y casi parecía que en cualquier momento lo iba a partir en dos.

- "Ni así..." - Pensó después su padre.

Naruto se separó de La Montaña y se lo quedo mirando algo fastidiado. Aquel enorme hombretón era increíblemente fuerte la verdad. Sin embargo Naruto esbozó media sonrisa y se lanzó de nuevo hacia su rival. Todos pensaron que era un gesto en vano la verdad. La mejor idea para derrotarle seria esquivar sus ataques y ganarle por agilidad. Pero Naruto se lanzó de frente.

Ambos volvieron a chocar sus espadas. Sin embargo esta vez Naruto no salió disparado hacia atrás. Ambos quedaron en tablas mientras hacían toda su fuerza. Naruto empezaba a ponerse rojo mientras sus brazos y sus piernas temblaban. Pero igual con su rival. Ninguno de los dos era capaz de hacer más fuerza que el otro y vencer.

- "In... increíble." - Pensó Sakura realmente sorprendida por la fuerza de Naruto.
- "Esto... supera mis expectativas." - Pensó Minato sorprendido.

La Montaña media dos metros y pesaba 120 kilos. Naruto media poco más de uno con ochenta y pesaba 79. Y aun así estaba igualando la monstruosa fuerza de su rival. Naruto dio un enorme gritó empujando con toda su fuerza la espada de su rival. Por el efecto el gran espadón se clavó en el suelo. Naruto sintió relajarse todos sus músculos. Velozmente y antes de que Dai pudiese desclavar la espada, Naruto situó su hoja frente al cuello de La Montaña.

- Ah... - Dijo sorprendido el hombre. - Me rindo. - Dijo después enfadado consigo mismo.

Todo el mundo aplaudió bastante emocionado. Naruto había tenido una muestra de fuerza sorprendentemente enorme. Todos aplaudieron felicitando al rubio. Incluido los participantes.

- "Naruto es sorprendentemente fuerte." - Pensó Sakura todavía asombrada.

Había terminado la primera ronda así que ahora había que volver a empezar con la segunda. Unos cuantos combates algo más emocionantes que la media de los anteriores se fueron sucediendo.

- ¡¡Nohara contra...!! - Dijo el Heraldo que se le había atascado abrir uno de los papeles.
- "Con que lo haga bien una ronda más bastará... si no le toca luchar contra Shikamaru, Satoshi o..." - Dijo Sakura antes de ser cortada.
- ¡Contra Namikaze! - Gritó por fin abriéndolo.
- "O... ya nada." - Pensó Sakura algo frustrada.

Los dos bajaron al campo de batalla. Sin embargo ningún de los dos tenía una actitud especialmente cordial. Naruto le sacaba dos años a Akira, eso se notaba.

- "Me encantaría matarle..." - Pensó Akira enfurecido.
- "Este chico..." - Pensó Naruto.
- "Ahora que lo pienso, Naruto lleva raro desde esta mañana... cuando... ¿No será que? ¡Oh no!" - Pensó Sakura asustada. - "¿Acaso Naruto ira a...?" - Se preguntó Sakura aún más asustada.

La espada de Akira era muy similar a la de Naruto. Sin embargo parecía estar hecha con algún material de peor calidad. Pero eso significa que sus estilos serian parecidos.

- ¡¡Empezad!! - Gritó el Heraldo haciendo que el corazón de Sakura se acelerase.

Akira se lanzó contra Naruto muy violentamente. Como si la vida le fuese en ello. La verdad es que sentía una rabia infinita. El miedo que había tenido al ver como derrotaba a La Montaña se había esfumado. Solo pensaba en matar a Naruto a toda costa. Si eso ocurría Sakura podría volver al castillo de los Haruno.

Naruto paraba o desviaba cada uno de los golpes. Pero para sorpresa de todos Akira era bastante rápido y Naruto solo podía defenderse. De vez en cuando trataba de atacar pero el golpe era detenido por el Nohara que estaba impulsado por la rabia.

Además el rubio iba dando pasos hacia atrás ya que estaba siendo acorralado por las incesantes embestidas del chico. Akira fue a dar una puñalada hacia el estómago de Naruto con su espada, el rubio trató de desviarlo sin embargo no lo logró del todo y no pudo evitar llevarse un corte en el brazo izquierdo. Eso asustó un poco al os presentes. Había sido un corte feo, sin embargo no era nada del otro mundo. No perdería el brazo ni nada por el estilo.

- "Naruto..." - Pensó la pelirrosa asustándose bastante.

Naruto se quejó un poco. Aquello dolía y escocía a la vez. Akira se frenó un poco por que Naruto parecía enfadado. Aunque trató de controlarse. Hacia unos meses había decidido ser algo menos iracundo.

Lejos de detenerse el combate chocaron sus espadas con fuerza. Pero Naruto ganaba en eso y empezaba a ganar terreno. Cuando había bajado a base de fuerza la espada de Akira, dio media vuelta sobre sí mismo y le dio un fuerte codazo en la cara rompiéndole la nariz en el proceso. Después sin darle tiempo a reaccionar chocó su espada contra la suya de nuevo haciendo que la bajase y después le dio un golpe ascendente con tanta fuerza que hizo que su espada saliese despedida de sus manos desarmándolo.

Akira ya estaba contra la pared y Naruto dio una fuerte punzada en dirección hacia su cabeza. Todos se asustaron pensando que Naruto mataría al chico. Sobretodo Sakura que sospechaba de alguna manera que el estado anímico de Naruto se debía a el encuentro de este medio día.

Sin embargo la espada se había clavado contra la pared de madera a dos centímetros de la cabeza de Akira. Estaba desarmado y Naruto ya había demostrado que podría haberlo matado. Naruto se acercó al oído de Akira y le dijo unas cuantas palabras que solo ellos dos supieron. Tras separarse de Akira, el chico se rindió dejando como vencedor a Naruto.

- "Menos... mal." - Pensó Sakura aliviada.
- El chico de los Nohara no lo ha hecho nada mal. - Dijo Minato sorprendido.
- ¿Qué esperabais? Fue mi alumno. - Dijo riendo Kizashi Haruno.

La pelirrosa daba por hecho que Naruto ganaría el combate. Así que el hecho de que Akira hubiese dado un buen espectáculo y ninguno de los dos hubiese salido gravemente herido o algo peor estaba bastante bien.

Satoshi y Shikamaru también ganaron sus combates. La primera y la segunda ronda se habían acabado y por hoy también el espectáculo. Ahora quedaba casi toda la tarde libre, la ciudad estaría muy animada. Aunque Naruto primero tendría que ir a cuidarse el corte del brazo.

CONTINUARA...