Capítulo 19: ||Compras||
Rio tomó la mano de Kaede y acomodó su bufanda amarilla. Era invierno y por lo tanto, ambas estaban bien abrigadas por el clima.
—¿Adónde vas a llevarme, Rio?
—Es una sorpresa... —respondió con emoción y burla mezcladas.
Rio guiaba a Kaede tomándola de la mano. Esta observaba los alrededores en busca de alguna pista para saber al lugar al que irían.
Pero no tenía ni idea ya que los lugares estaban tanto llenos de tiendas como de parques lo cual, causó una severa confusión en la chica.
Finalmente Rio se detuvo, frente a un centro comercial exageradamente grande. Kaede no entendía por qué estaban allí.
—¿Es aquí? —La rubia asintió y la llevó al interior de aquel gigantesco lugar.
Entraron a un almacén de ropa, únicamente para chicas. Kaede abrió tanto sus ojos al ver a donde la había traído la rubia.
—Rio, ¿qué, hacemos aquí? —soltó su mano con confusión.
—¿No es obvio? Vamos de compras, bueno, odio las compras pero sé que será divertido si es contigo —rió.
—Suena genial, pero olvidaste decirme que trajera dinero —Le recordó cruzándose de brazos.
—Considéralo un regalo de mi parte —sacó una tarjeta de crédito de uno de los bolsillos de su abrigo.
—Sé que no podré negarme porque harás que acepte de todas formas —suspiró algo derrotada—. Bien, vamos a comprar.
Estuvieron buscando en aquel almacén la ropa adecuada para cada una —siendo ayudadas por las encargadas—. Kaede encontró el conjunto ideal, pero Rio aún no.
—¿Qué tal este, Rio? —sugirió la peli-verde mostrándole un vestido escotado que de tan solo verlo se sabía que llegaba a más arriba de la rodilla.
—No, ugh, muy niña —Se quejó y buscó por más partes.
No le agradaba mucho lo que se hallaba allí. A sus ojos toda esa ropa era muy femenina y ella no era mucho de ese estilo.
Exhaló frustrada. Pensaba que sería mejor ir a otro almacén.
—¡Rio, Rio, Rio! —gritaba una eufórica Kaede a algunos centímetros de ella. La gente la observaba extrañada por sus fuertes gritos—. ¿Qué tal este? —mostró un conjunto más.
Se trataba de una blusa manga larga de color negro con algunos decorados y un pantalón de tela de color azul oscuro.
Rio analizó por un buen tiempo las prendas. Al menos no era tan femenino como todo lo demás que estaba en el lugar.
—Sí, me gusta —sonrió y tomó el conjunto—. ¿Vamos a medirnos todo esto? —Kaede asintió y fueron juntas a los vestidores.
Pero para su desgracia el almacén estaba tan lleno que tuvieron que esperar a que alguno se desocupara.
—Ah, maldita sea, estoy cansada —Se quejó Rio. Llevaban al menos veinte minutos esperando en la fila para los vestidores.
—Pero no llevamos casi nada.
Un rato más y era el turno de alguna de las dos usar el cambiador para vestirse.
—Rio, ¿vas tú o yo?
—Vamos ambas. Así no tenemos que esperar en esta miserable fila —agarró la mano de Kaede y la llevó consigo al vestidor.
Las mujeres no expresaron nada ya que no era malo para ellas cambiarse juntas.
—Rio, ¿qué estás haciendo? Si querías probarte la ropa primero, podías hacerlo y luego yo.
—¿Qué no te das cuenta? —cerró la puerta del cubículo y arrinconó contra la pared a Kaede—. Quiero ver tu lindo cuerpo.
Kaede frunció el ceño y dio un fuerte jalón a los cabellos de Rio haciendo que la liberara.
—¡Pervertida!
—Auch, relájate. Solo era una broma.
—Qué graciosa. Mejor vístete ya.
—No, tú primero.
—No, tú.
—Tú.
—¡Que no, maldita sea, tú primero! —Aquel gritó hizo que la piel de Rio se erizara de miedo.
—Bi-Bien, voy primero —comenzó a quitarse su ropa para medirse la otra que posiblemente compraría.
Una vez vestida se miró en el espejo del lugar de arriba a abajo.
—Vaya, Rio, te ves hermosa.
—¿He-Hermosa?
—Sí.
—Mejor vístete ahora tú porque hay mucha gente esperando —apuró. Se sentía nerviosa con todo eso y no quería tener que lidiar con eso.
—De acuerdo, pero sal —señaló la puerta.
—No es justo. Tú me viste y yo no.
—De hecho no fue así. Mientras te cambiabas te daba la espalda —tomó su conjunto y lo dejó sobre un perchero—. Ah, sal de una vez a menos que quieras que me enoje contigo.
Sin ninguna queja más, Rio salio del vestidor.
Kaede se probó su ropa. Era una blusa blanca que llegaba más arriba de su ombligo, una falda rosa y unas medias largas negras.
Hizo varias poses frente al espejo cuando quería ver como le quedaba la ropa.
Se cambió finalmente y salió de allí encontrándose a Rio con una cara aburrida. Parecía que la había hecho esperar bastante.
—Conque eres de las chicas que se tardan, ¿te gustó tu ropa?
—Sí, me queda muy linda. Quiero comprarla ¿y tú?
—También —sonrió y le hizo una seña a Kaede para indicarle que fueran a pagar las prendas.
Cancelaron todo con la tarjeta de Rio y salieron del centro comercial. Ya estaban algo cansada después de todo aquello. Pero algo hizo que ambas tuvieran ganas de quedarse al menos un rato más.
—Vaya, son hermosos —observaba embobada Rio el cielo. Fuegos artificiales lo decoraban.
—Sí —concordó la menor mirando la atmósfera de la misma manera.
Kaede desvió su mirada —luego de haber visto varios fuegos artificiales— hacia la chica junto a ella. Ahora que la tenía de cerca, admitía que podía admirar mejor su belleza.
No supo cómo, pero solo se dejó llevar o fue una de las tantas voces en su cabeza que la convencieron de hacer eso.
Tomó la mano de Rio y entrelazó sus dedos. La rubia la miró de reojo, pero mayormente su atención estaba en los decorados aéreos.
—Rio, mírame —ordenó hablando muy fuerte. Había mucho ruido al rededor gracias al estallar de los fuegos y claro, también por la gente.
Rio la observó algo sorprendida y su expresión aumentó al haber sentido los labios de aquella chica sobre los suyos.
Cerró sus ojos y correspondió.
Su mano libre viajó a uno de los extremos de la cadera Kaede.
Se sentía en un hermoso paraíso en aquel momento y Kaede también.
Bueno, ha pasado mucho desde la última vez que actualice. Pero me estaba quedando sin ideas :'(
Pero al fin las experiencias de mi vida ayudaron de algo.
En el capítulo anterior tuvieron su KarmaGisa, ahora tienen su NaKayano (no estoy segura de si el shipp se llame así o no).
Eso es todo lo que tengo que decir. Así que les agradezco por leer = ̄ω ̄=
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top