Capítulo 09
—Ten, para ti.
JiMin aceptó tímidamente la bebida que YoonGi le había comprado, estaban fuera del edificio del mayor cerca de una de las tiendas de conveniencia que tenía una máquina de bebidas sobre la banqueta.
La verdad es que su plan inicial era visitar al mayor para darle una respuesta a su propuesta de trabajo, aceptó convertirse en su asistente y a modo de celebración YoonGi le invitó a beber algo.
Pero ya era muy noche y a JiMin se le antojó beber un café de la máquina de bebidas, así que no tuvieron que romperse la cabeza en pensar a que lugar ir para tomar algo.
—Uh... ¿cuando empezaría a trabajar? — preguntó, no estaba muy seguro si el mayor era consciente de lo que significaba ser su asistente, sobre todo si ya le había dicho a YoonGi que no tenía conocimiento alguno acerca de este puesto y tampoco tenía una idea clara acerca de las inversiones.
—No es necesario que empieces mañana si te preocupa el no saber que hacer — YoonGi sonrió en su dirección —. Este fin de semana te enviaré algo de material y podremos reunirnos para ponernos al día, te iré guiando poco a poco para que no te satures y te frustres. Así puedes comenzar el lunes a trabajar.
A JiMin le agradó la idea.
—Oye... — el rubio llamó su atención —. Respecto a tu otra propuesta...
—¿Ah?
YoonGi se hizo el tonto, ¿por qué sacaba el tema de nuevo?
—¿Tu... realmente quieres acostarte conmigo?— preguntó muy directamente.
YoonGi tuvo que guardar silencio durante mucho tiempo mientras se daba cuenta que JiMin realmente había preguntado acerca de ese tema. ¿Qué si quería acostarse con JiMin? Por supuesto que sí, pero después de haberle dicho aquello tan directamente se dio cuenta de que había sido un error, sobre todo cuando reparó en que JiMin pudo haberse sentido ofendido por la cuestión de pagarle por acostarse con él.
Sí, eso no había estado bien.
Tal vez sólo debió proponerle el puesto en su empresa e indirectamente darle señales.
Pero bueno, él es un estúpido muy directo y sin pelos en la lengua.
—Claro q-que no... yo... — YoonGi carraspeó con fuerza —. Quiero decir, no quería ofenderte con mi propuesta, tampoco quería tratarte como una cualquiera, es que yo... no pensé correctamente.
Era la primera vez que Park veía a ese hombre actuar de forma indecisa, se había puesto nervioso y está vez fue muy evidente.
Que raro era.
—No me ofendiste — mintió, sus labios se abultaron un poco —. Pero me tomó por sorpresa.
—¿En serio? — preguntó el mayor.
—Claro que sí — se quejó —. Es raro que me propusieras eso como un trabajo.
YoonGi rió.
—También fue raro para mi verte frente a mi puerta aquel día.
—¡Pe-pero... ¡Pero yo no te pagué a cambio! — exclamó avergonzado, eran cosas completamente diferentes, aunque básicamente había sido más cruel ya que él sólo había aprovechado a YoonGi para cumplir con una estúpida venganza que ni siquiera fue lo que él esperaba —. Sólo... ya no hablemos de eso.
YoonGi aceptó dejar de lado el tema. Ahora que JiMin había aceptado el trabajo en su empresa todo podía marchar con calma. La verdad es que necesitaba de alguien que le ayudara, el rubio podía no saber mucho sobre eso pero era la excusa perfecta para estar pegado a él todo el tiempo fingiendo asesorarle.
—Entonces, ¿estás quedándote con tu madre todavía?
—Sí — respondió —. Ya no es tanto por los golpes que le dieron, es más que nada por la preocupación de dejarla sola. No sé si esos tipos pueden volver a aparecer.
—Supongo que su objetivo principal sólo era darle una advertencia a tu madre — dijo, pegándole un trago a su bebida —. Hace unos días tuve una reunión con una pareja que tiene una agencia de hospedaje, rentan departamentos a buen precio y en lugares con mayor demanda, me contaron que hace algun tiempo habían pedido un préstamo con Sanghwo's Group porque les dieron facilidades de pago y muchas otras cosas más que los convencieron, al final, Sanghwo's los amenazó y les terminó quitando la zona con más demanda económica de todo Seúl en donde rentaban.
—Oh... — JiMin suspiró mientras bajaba la mirada —. Creo que tenemos mala suerte.
—Bueno, no es culpa suya que ellos sean unos hijos de puta — YoonGi dijo terminando de tomarse todo el contenido de aquélla lata y aplastandola con una sola mano —. Pero no te preocupes tanto por eso, estoy seguro de que su único objetivo era asustarlos, vas a pagar sus deudas una vez que comiences a trabajar conmigo.
—Sí, sólo espero que no nos pongan alguna excusa, aunque no estoy tan seguro de poder pagar todo tan rápido.
El pelinegro lo observó, JiMin todavía se veía preocupado y pensativo acerca de aquélla deuda, comprendía que era difícil ahora que estaba desempleado y que aquellos idiotas los habían estafado.
—Bueno, que suerte que tienes un jefe tan considerado — dijo el mayor, pasando una de sus manos por su cabello —. Toma esto.
—¿Qué es? — JiMin preguntó cuando YoonGi extendió un sobre frente a él —. YoonGi...
—Es un adelanto de tu primera paga — le sonrió —. Y ni siquiera pienses en rechazarlo, ahora que trabajaras para mí, te darás cuenta del por qué lo hago.
—No entiendo.
El mayor suspiró y le hizo una seña a JiMin para que lo siguiera.
—Trabajar como mi asistente consiste en muchas cosas, JiMin. No sólo tienes que estar conmigo casi toda la jornada laboral, también tenemos que estar en comunicación 24/7 por reuniones pendientes y agendadas, documentos, etcétera, etcétera, así que no sólo será un trabajo de 14 horas, por lo que la paga es apropiada.
—¿Esa es la razón por la que nadie quiere ser tu asistente? — pregunta el menor.
YoonGi bufa mientras hace una mueca.
—No, es que a veces soy muy idiota con mis asistentes que ya todos me tachan por ser un rey despiadado.
—¿Rey despiadado?
—Sí, los empleados creen que no sé cómo me apodaron — rueda los ojos —. Es gracioso pero ofensivo.
—¿Por qué?
—Porque no soy despiadado sólo me gusta que hagan el trabajo tal y como se los he pedido, ¿es mucho pedir? — cuestiona mientras comienzan a caminar por la banqueta.
—Depende como lo pidas — JiMin dijo mientras lo seguía a su lado —. En mi trabajo me molestaba recibir clientes que nunca me decían un buenos días, gracias o por favor, son palabras tan básicas y de cortesía que pueden hacer feliz a uno, pero aún así siempre llegaban exigiendo algo de una forma muy descortés. Yo tenía que amarrarme la lengua, sonreír y ser amable aunque ellos incluso me barrieran con la mirada, me tenía que disculpar si algo los hacía enojar a pesar de que sus peticiones eran muy exigentes. Creo que si pides las cosas sin gentileza alguna no puedes esperar que un nuevo asistente llegue a tu puerta si ya sabe la clase de rey despiadado que eres.
YoonGi permaneció callado escuchando su relato. No pudo evitar sonreír al imaginarse a un JiMin siendo descortés, por supuesto, el chico era un ángel, desde luego que él nunca se tomaría el tiempo de ser grosero con alguien.
—Tienes razón — dijo dándole una brillante sonrisa —. Me gané ese apodo a pecho, así que no puedo esperar un excelente trabajo de alguien que me detesta... afortunadamente, no creo que tu me detestes.
JiMin rió.
—Por supuesto que no.
YoonGi pensó en decir alguna broma fuera de lugar, pero viendo lo cómodo y tranquilo que JiMin se veía ahora decidió dejarlo para después.
—Te llevaré a casa, vamos.
Sin esperar respuesta del más bajo siguió caminando ahora en dirección a su auto.
JiMin parpadeó rápidamente en su dirección, observó el sobre en su mano y debido a la angustia que sentía por no poder conseguir dinero para la deuda, revisó el contenido dentro del sobre de una forma discreta.
Su cuerpo se paralizó por unos segundos y sus ojos se abrieron de la sorpresa.
Lo que había dentro probablemente podía cubrir la mitad de la deuda.
[ ♦️♣️♦️ ]
El fin de semana fue todo un reto para JiMin adaptarse a su nuevo trabajo, YoonGi le estuvo enviando todo tipo de trabajos, lo guió y le ayudó a resolver sus dudas conforme pasaban los días. El viernes fue el comienzo de lo que podría ser su mayor tortura durante algún tiempo.
Se reunió con el mayor el sábado en una cafetería en donde desayunaron algo delicioso que obviamente YoonGi pagó, para después comenzar a revisar los documentos que YoonGi le había enviado el día anterior, sólo eran unos cuantos oficios que tenían que elaborarse, la mayoría de estos eran oficios que se movían dentro de la misma empresa de departamento en departamento solicitando ciertas cosas, oficios que se mandaban fuera de la empresa y documentos acerca de los inversionistas.
YoonGi también le habló acerca de que la empresa manejaba un sistema donde tenían toda la información acerca de todas sus inversiones y que era muy importante que él tuviera habilidad para recordar la mayoría de estos. Ahí se dio cuenta de que debía estudiar cada una de sus inversiones en caso de que se necesitará en cualquier ocasión, pues parecía un requisito importante.
Otra cosa importante que YoonGi le había dicho es que él estaría a cargo de su agenda, todas sus reuniones debían ser meticulosamente agendadas y que sólo estaba permitido tener dos citas por día, ya que la mayor parte del tiempo tenían reuniones de equipo para checar las ganancias y pérdidas de la empresa, reuniones en las cuales él también estaría presente y que le ayudaría a organizar los puntos que se abarcarian en esta misma.
Contratos, llamadas, reuniones, viajes de trabajo, citas, planeaciones, revisar correos electrónicos, etc.
JiMin entendió un poco el porque nadie quería ser asistente de YoonGi.
Lunes en la mañana, ya estaba presentándose a trabajar en aquella empresa. El lugar era gigante, tenían su propia sala de estar en la planta baja y el área de recepción, además de que había una pequeña cafetería en la misma área.
El edificio contaba con al menos 20 pisos y había muchas personas saliendo y entrando continuamente. JiMin veía todo a su alrededor casi maravillado, pero más perdido que nada, era raro estar ahí para trabajar y no para ver a YoonGi, aunque sólo había ido dos veces.
Muchos de los empleados vestían de traje extremadamente elegantes, se sintió un poco fuera de lugar pues él sólo había conseguido ponerse una camisa blanca de botones con mangas cortas, un pantalón negro un poco ajustado y unos zapatos negros que usualmente llevaba a su antiguo trabajo. Cuando estaba en Brighty's no se preocupaba mucho por como ir vestido pues la empresa le había dado su propio uniforme.
Pero bueno, él estaba ahí para ser el asistente de YoonGi, no importaba si decidía arreglarse demasiado.
Se acercó a recepción siendo recibido por una de las chicas, le entregó su tarjeta de entrada y su gafete con el cual le dieron total acceso y le indicaron que de ahora en adelante tendría sólo que llegar y postear su tarjeta de entrada en una pequeña máquina que escaneada su hora de llegada y de salida.
JiMin asintió dándole las gracias a la chica y se apresuró a subir al ascensor que lo llevaría exactamente al piso en donde se encontraba YoonGi, pero antes de que el ascensor se pudiera mover, otras tres personas se subieron en él, el menor se arrinconó rápidamente para darle mayor acceso a los demás. Quienes habían entrado eran dos chicas y un hombre, los tres vestían de traje con corbata, las mujeres traían medias y unos zapatos super bonitos y caros, el hombre vestía un traje café con unos lujosos accesorios que llamaban la atención.
Definitivamente se sentía fuera de lugar.
¿Qué estaba haciendo aquí? Todas estas personas seguramente eran extremadamente ricas o al menos tenían un buen nivel económico, y él era sólo una pequeña basura a lado de todos ellos, a parte de que tenía cero experiencia.
Su celular sonó en el bolsillo de su pantalón, logrando capturar la atención de los otros tres en el ascensor, se disculpó en voz baja y atendió la llamada bajo la escudriñadora mirada de las dos chicas y el hombre a su lado.
—¿Bueno?
—JiMin-ah ¿ya vienes llegando?
—Sí yo... uh... vengo en el ascensor.
—Oh, que bueno — YoonGi soltó una suave risita —. Estoy ansioso por verte.
El menor frunció el ceño aunque no estaba confundido ni molesto, sólo que era extraño tener que recibir tanta atención de aquel hombre, aunque podría acostumbrarse.
—Si, está bien.
—¿Cómo que está bien? — preguntó atónito YoonGi, exagerando un poco su tono de voz — ¿No vas a decirme qué también estás ansioso por verme?
El rubio se sintió avergonzado, las tres personas ahí parecían estar al tanto de él y su conversación, aunque no estaba seguro de que pudieran escuchar lo que YoonGi les decía, pero se habían dando cuenta de su presencia y probablemente estaban mirándolo buscando recordar quien era él, o tal vez sólo lo estaban juzgando por no lucir como ellos.
Era evidente, una de las chicas le murmuraba una cosa a la otra mientras que la rubia fruncia el ceño en su dirección, rodando los ojos para volver su mirada al frente, el hombre a su lado sólo lo observó momentáneamente entrecerrando sus ojos, como si pudiera adivinar quien era él.
—Yo... yo creo que... — JiMin comenzó a sentirse nervioso —. Uh... ya llegué.
Habló tan pronto como las puertas del ascensor se abrieron, apagó su celular dejando a YoonGi con las palabras en la boca y se apresuró a salir de aquel martirio.
Para su mala suerte las tres personas también se bajaron en el mismo piso que él por lo que seguramente los vería muy seguido, suspiró tratando de calmarse, avanzó lentamente hasta que pudiera llegar a la oficina de YoonGi pero tal parece que ver a alguien nuevo en aquel lugar llamaba mucho la atención, así que caminó de forma un poco rígida, sufriendo internamente por tener la atención de la mayoría.
—¡JiMin-Ah! — escuchó como alguien gritaba su nombre por todo aquel piso, se paralizó en su lugar, rogándole a los cielos que YoonGi no hiciera algo que lo dejara en vergüenza. El hombre llegó casi corriendo en su dirección, llamando la atención de todos en aquel lugar y dejando boquiabiertos a la mayoría por la forma en la que estaba actuando, YoonGi saltó hacia él tan pronto como lo tuvo enfrente — ¡Qué bueno que llegas! No vuelvas a dejarme con la palabra en la boca.
JiMin estuvo a punto de explicarle, pero antes de que pudiera reaccionar el mayor lo había rodeado con sus brazos pegando su cuerpo al de él.
¿Qué estaba haciendo?
De pronto fue como si una nube extraña cubriera toda la oficina, todos estaban sorprendidos e incluso escuchó un par de gritos de conmoción debido a la imagen que YoonGi estaba dando.
Sus mejillas se pintaron de un fuerte carmín y sus manos temblaron, ¿YoonGi pretendía matarlo de la pena?
—Oh... así que él es JiMin.
Una voz detrás de ellos hizo que el mayor parara su muestra de afecto, el rubio también volteó rápidamente a ver al hombre detrás de ellos, era el mismo que había estado en el ascensor con él.
—¡Jungkookie! ¿Qué haces aquí?
El tipo le miró ofendido.
—Tu me pediste que viniera.
—¿A si? — se cuestionó —. Supongo que lo olvidé, pero ven, ven, vayamos a mi oficina.
El chico asintió y le dio una rápida mirada a JiMin, el rubio se sintió extraño, hace un instante en el ascensor aquel chico le había mirado como si lo conociera, ¿Acaso YoonGi le había hablado de él?
El menor sólo comenzó a moverse cuando sintió un tirón en su mano, dándose cuenta de que YoonGi había tomado de esta para comenzar a guiarlo hasta donde sería su nuevo lugar de trabajo, por supuesto que esto no pasó desapercibido por nadie en la oficina.
Jungkook sólo pudo rodar los ojos y seguirlos por detrás, era extraño, demasiado extraño ver a YoonGi actuar de esa forma, cuando estaba en el ascensor alcanzó a escuchar un poco de la conversación de ambos, más que nada porque estaba justo a lado de JiMin y la voz de YoonGi se escuchaba exageradamente. YoonGi nunca había actuado así con nadie que le interesará, aunque tal vez... JiMin le interesará más de lo que pensaba.
[ ♦️🖤♦️ ]
Prestenme dinero para curar mi tobillo 😢
No cierto jakskdk.
Buenaaas gente, hace mucho que no vengo por aquí y la verdad es que me siento un poco triste porque quise actualizarles muchas veces, pero no pude. En el capítulo anterior les conté sobre mi mala suerte en vacaciones y sigo diciéndoles que dios no está de mi lado. 😭
La semana pasada ha sido de ir al doctor y a hacerme rayos x para ver que onda con mi pie, fue tan agotador y frustrante que terminé bajoneada porque no podía hacer casi nada. Hasta apenas hace unos cuatro días que las cosas han mejorado un poco y espero componerme pronto.
Hoy quise actualizarles porque ya llevaba mucho tiempo sin hacerlo y además porque ya tenía la mitad del capítulo escrito, si todo va bien este viernes les volveré a subir un capítulo nuevo, o incluso antes. ✨️❤️
Bye bye, besitos, cuídense mucho.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top