YoonGi acostumbra a levantarse cinco minutos para las 6 de la mañana, se lava la cara, los dientes y luego se pone ropa lo suficientemente cómoda para salir a correr al rededor de la cuadra, en casa tienen un gimnasio privado pero él siempre ha preferido sentir el fresco viento de la mañana.

Por lo regular tarda 40 minutos corriendo y luego regresa a casa para pasar la siguiente media hora levantando pesas en el gimnasio, para después darse una ducha y comenzar a arreglarse para ir al trabajo, todo mientras checa de vez en cuando los pendientes que tiene para ese día.

Nunca desayuna en casa, principalmente porque aborrece poner a correr a todos los trabajadores sólo para hacer un simple desayuno para él, así que siempre toma una fruta que la señora Kim compra en el mercado casi todos los días y con eso suele aguantar hasta el medio día cuando su estómago comienza a gruñir por hambre.

Su celular suena avisándole que alguien le ha mandado un mensaje, se está terminando de peinar acomodándose ligeramente el cabello hacia atrás, dejando al descubierto su frente. Hoy tiene muchas reuniones programadas y la verdad es que necesita verse lo suficientemente decente por el resto del día.

Toma el celular con una mano para revisar quien le ha mandado mensaje, dándose cuenta que es JiMin respondiendo a su mensaje de esta mañana.

"Estamos bien, ella aún tiene dolor corporal pero no es nada grave. Muchas gracias por preguntar."

YoonGi sonrió suavemente al leer su respuesta, rápidamente tecleó un mensaje de vuelta para el rubio, diciéndole que pasaría a verlos después del trabajo y que llevaría algo para que cenaran juntos. Aunque está casi seguro de que JiMin va a negarse, no le importa en lo absoluto, de todos modos llegará con la comida.

Dos días han pasado y JiMin sigue quedándose en casa de su madre para cuidar de ella, ahora que no tiene trabajo es él quien se tiene que hacer cargo de su madre quien todavía sigue adolorida por los golpes que recibió, además no se ha dado un tiempo para ir a la cafetería pero hace un día él contrató a alguien para que les ayudarán con la limpieza del lugar.

JiMin no lo sabe pero hoy en la tarde la cafetería estaría quedando como nueva. Habló con el dueño del local y se pusieron de acuerdo para arreglar el lugar de nuevo.

No está seguro de que pasará de ahora en adelante con el negocio de la madre de JiMin, pero está dispuesto en involucrarse en todo lo que le sea posible.

—Ya era hora de que llegaras.

YoonGi levanta la vista al escuchar a la voz de Moonbyul delante de él. Sonrió enormemente en su dirección y se acercó a ella con tranquilidad.

—Buenos días para ti también.

La mujer rodó los ojos.

—Te recuerdo que tu reunión comienza en menos de media hora, ¿ya tienes todo listo? No pienso andar corriendo para arreglar tus desastres.

YoonGi la abrazó por los hombros apretandola con fuerza.

—Tranquila. Tengo todo bajo control, sólo hazme un favor antes de irte, llama a San para verlo después de la reunión.

Ella se soltó de su incomodo agarre.

—Está bien — dijo acomodándose el cabello —¿Cuánto tiempo más piensas seguir sin un asistente? Te recuerdo que tengo trabajo que hacer y ser tu asistente no es parte de mi contrato.

YoonGi rió.

—Lo sé, lo siento — dijo con sinceridad —. Prometo que pronto buscaré a alguien.

La expresión en el rostro de la chica no cambió el absoluto, siguió mirándolo con desaprobación. Ella mejor que nadie sabe que será muy difícil que alguien tome el lugar de asistente para Min YoonGi, joder, el pago era lo suficientemente bueno pero ninguno parecía tolerar el mal trato del jefe.

—Bien, entonces me voy — dijo —. En tu escritorio deje unas carpetas con información acerca de la reunión, espero que sepas lo que haces.

—Por supuesto que sí. ¿Quién crees que soy?

Moonbyul se ahorró sus comentarios y simplemente dio media vuelta para poder regresar a su lugar de trabajo original. Desde que había estado batallando para encontrar un asistente, Moonbyul le ayudaba con las cosas básicas. A veces también San le brindaba su ayuda pero como su amigo era un ejecutivo más, entonces tenía otros trabajos que hacer. Moonbyul formaba parte del equipo de finanzas, la conocía desde la universidad y era una excelente chica con unos dotes increíbles para tener todo bajo control, por algo siempre le pedía de favor organizar sus reuniones.

Pero la chica tenía razón, debía pensar en contratar a alguien muy pronto.

Entró rápidamente a su oficina buscando la carpeta con la información que le había pedido a Moonbyul. Próximamente tendría una reunión con una agencia de hospedaje que buscaban invertir con ellos y necesitaba al menos saber lo básico acerca de aquélla agencia.

—Esto tiene que ser una broma — dijo al revisar todos los antecedentes de la agencia.

Sacó su celular rápidamente del bolsillo para poder buscar por internet a Sanghwo's Group, todo lo que encontró en internet fueron referencias acerca de la empresa de préstamos, la mayoría calificaba su servicio como uno de los mejores, no había ninguna mala reseña acerca de ellos, lo cual le hizo confirmar sus sospechas.

Tomó el teléfono que se encontraba a su costado marcando directamente a la oficina de San, después de sonar dos veces seguidas su amigo atendió.

—Hola, ¿qué pasó?

—Necesito que nos reunamos después de mi reunión con la agencia de hospedaje.

—Sí, ya me lo había dicho Moonbyul.

—No, no solo tu y yo — repitió —. Trae al grupo.

Después de decir aquello todo lo que escuchó al otro lado de la línea fue un extraño silencio.

—Eh... bueno — respondió su amigo — ¿Es algo malo?

—No lo sé, por eso los necesito aquí.

San tragó en seco.

—Bien, haré las llamadas y estaremos ahí tan rápido como sea posible. — le afirmó.

—Espera — YoonGi habló antes de que el otro pensara en colgar —. Dile a Jungkook que es importante que venga, creo que él tiene mayor conocimiento en los préstamos.

—¿Préstamos? ¿De qué hablas? ¿Te metiste en problemas de dinero o algo así?

YoonGi rió, San a veces era un poco paranoico.

—No, pero es necesario para lo que voy a contarles. Así que traelos a todos.

Colgó rápidamente, se levantó de su asiento acomodando su traje para no verse tan arrugado y caminó fuera de su oficina. Nunca estuvo interesado en la empresas de préstamos, pero desde que había escuchado a JiMin mencionarle el problema que tenían con Sanghwo's Group y la deuda que habían generado, ahora ya no era tan fácil ignorarlos, sobre todo cuando en la información de la agencia de hospedaje circulaba un contrato con Sanghwo's Group hace medio año.

[ ♦️♣️♦️ ]

—¿Para qué nos necesitabas?

YoonGi miró a Jungkook tan pronto como entró de nuevo en su oficina y cerró la puerta detrás de él.

—Que gusto verlos — dijo sonriendo en su dirección —¿Llevan esperando mucho tiempo?

—No realmente — Hyunjin dijo, tirándose de espaldas al sofá, con sus largas piernas sobresaliendo del reposabrazos —. Pero no he comido nada desde la mañana, así que espero que sea rápido.

—Será rápido siempre y cuando me pongan atención.

—¿Por qué me preguntaste sobre los préstamos? — preguntó San, era el único que se mantenía en pie, mirando fijamente a su jefe, quien ahora estaba muy cómodamente sentado en la silla de su escritorio — ¿En qué clase de problemas estas envuelto?

YoonGi chasqueó la lengua inconforme.

—No es un problema en el que me gustaría meterme — dijo con sinceridad —. Digamos que alguien que aprecio mucho se metió con unos prestamistas.

—¿Alguien que aprecias mucho? — Jungkook alzó una ceja en su dirección —. No me digas que nos mandaste a llamar sólo porque estas detrás de un culo.

—Mira quien habla — Hyunjin rió —. El tipo que acosa a la persona que le gusta.

Jungkook le sacó el dedo del medio mientras Hyunjin soltaba una encantadora risita.

—Dejen de pelear — San los regañó — ¿Con que prestamistas? — preguntó de nuevo alzando la mirada hasta YoonGi.

—Con Sanghwo's Group — dijo —. La verdad es que desconozco al grupo, no había escuchado de ellos nunca lo cual se vuelva aún más sospechoso. La agencia de hospedaje con la que estuve en reunión hace un rato me dijo que cuando recién comenzaron en su proyecto, pidieron un préstamo a Sanghwo's Group porque ellos se habían acercado a proponerles sus servicios. Me contaron que en lugar de salir ganando con el préstamo que les dieron, salieron perdiendo todo por completo, la zona donde tenían sus departamentos para rentar es una zona con demasiada demanda económica, estaba en un punto turístico y demasiado atractivo para el ojo público. Después de haber firmado un contrato con ellos, todo se les vino abajo.

—¿Los estafaron? — preguntó Jungkook concentrado en la historia que su amigo relataba.

—Sí — afirmó —. Sanghwo's Group aumentó su deuda a casi 200 millones de wones, les ofrecieron un plazo estimado para pagar su préstamo, les hacían creer que sus intereses no subían y que no existían, pero en realidad, su deuda se multiplicaba con cada día que pasaba. Los amenazaron muchas veces, golpearon a los dueños e incluso casi los matan, al final, el líder de Sanghwo's Group los dejó en paz a cambio de que les dieran la zona departamental de la que eran dueños. Ellos no pudieron negarse porque tenían miedo de que los asesinaran, básicamente y en resumen, son una bola de ratas estafadoras.

—¿Sabes algo de ellos? — preguntó San a Jungkook, quien se veía muy interesado en aquella información.

—No, bueno. He escuchado del grupo, se está haciendo famoso poco a poco por lo que dijo YoonGi, he visto que pequeños negocios piden préstamos por las condiciones del contrato, pero no sé nada más que lo básico — dijo — ¿Quien es la persona a la que atacaron ahora?

—Esa es la cosa — YoonGi suspiró —.  Han estado firmando contratos con los pequeños negocios en los barrios, no sé porqué razón, necesito saberlo. La madre de JiMin firmó un contrato con ellos y ahora tienen una deuda de 100 millones, hace unos días en la noche fueron a atacar la cafetería de la señora, destrozaron todo el lugar y la golpearon a ella.

—¿Y esto cómo por qué nos incumbe? — preguntó Hyunjin —. Exactamente qué quieres que hagamos.

—Sí, no le encuentro el punto a esto — dijo Jungkook — ¿Quieres quedar bien con JiMin? Entonces paga su deuda y listo.

YoonGi rió lentamente, asustando un poco a sus amigos presentes. Sino conocieran tan bien a YoonGi dirían que es un lunático, aunque en parte es verdad, pero ya estaban acostumbrados.

—Deja de reírte como loco, das miedo. — se quejó San, cruzándose de brazos frente a su amigo.

—Parece que no me conocen — YoonGi resopló —. Por supuesto que voy a pagar la deuda de JiMin, pero también quiero divertirme un rato con esos idiotas.

—¿Vamos a matarlos? — preguntó Hyunjin con cierta pizca de emoción.

—Nadie va a matar a nadie — San reclamó —. La última vez que hicimos algo así casi nos descubren.

—Yo no dije nada sobre matar — YoonGi se levantó de su lugar, estirándose un poco —. Pero me causa un conflicto enorme que una bola de ratas esté haciendo de las suyas y nadie haga nada al respecto, dejaré pasar unas semanas, si vuelven a molestar a JiMin o su madre, tendré motivos perfectos para darles una visita.

—Pero no puedes hacer eso — Jungkook se levantó —. Estas en el ojo público, ellos seguramente te conocen.

—Al igual que todos con los que hemos lidiado anteriormente — respondió YoonGi, alzándose de hombros sin importancia —. No le veo la diferencia.

—La diferencia es que la mayoría de ellos huyeron del país o están muertos — San reclamó —. Pero no podemos volver a hacer lo mismo, lo prometimos.

—Yo no prometí nada —Hyunjin bufó —. Así que cuenta conmigo para lo que desees.

YoonGi le sonrió al menor de todos, miró a sus otros dos amigos quienes se debatían entre lo bueno y lo malo. Conociendo a San, probablemente era el único que pensaba correctamente de todos ellos, era el que más se preocupaba por las consecuencias, Jungkook estaba dispuesto a ayudar siempre y cuando no le obligarán a tomar un arma, pero habían dejado de hacer ese tipo de favores desde hace algunos 6 meses, ya todos habían establecido un camino diferente concentrándose en otras cosas.

Pero si había algo que YoonGi no toleraba en absoluto era que se metieran con lo suyo. Y honestamente, le causaba mucha curiosidad ese famoso grupo de prestamistas.

—Bien, pero sabes mis condiciones —. Aceptó Jungkook.

YoonGi asintió en su dirección.

—¿Y tú?

San respiró profundamente, la verdad es que la cosa no pintaba tan bien, y tenía un poco de miedo de que algo se saliera de control. Pero YoonGi era su amigo.

—De acuerdo, pero sólo contéstame una sola cosa — dijo, mirando al pálido con demasiada seriedad, tanta que incluso hizo que los otros dos presentes se quedarán quietos — ¿Quieres hacer esto sólo porque estas obsesionado y quieres acostarte con ese chico, o porque realmente te gusta?

—...

Eran casi las diez de la noche cuando la madre de JiMin se fue a dormir, el menor tuvo que quedarse en la cocina para poder lavar los trastes sucios de la cena. YoonGi le había mandado mensajes en la tarde donde le decía que no podría ir a visitarlos como dijo, disculpandose por no poder llevarles algo de cenar.

A JiMin no le sorprendió pues imaginaba que YoonGi tenía otros asuntos que resolver.

Estaba terminando de lavar los vasos cuando el timbre de la casa sonó, suspiró cansado y se enjuagó las manos para después caminar hasta la entrada de la casa y abrir la puerta.

—¿Qué haces aquí?

—Auch, creí que estarías feliz de verme — YoonGi rió mientras fingía que le había dolido —. Sólo quería pasar a darte una visita rápida, ya que no pude venir antes.

—Oh... — se sintió un poco apenado cuando escuchó la respuesta del mayor, miró al interior de la casa y luego regresó la mirada hasta YoonGi —. Uh... ¿Quieres pasar?

—No, no hace falta — dijo —. Sólo quería hablar contigo... acerca de la deuda de tienes.

El semblante del menor se fue apagando poco a poco al recordar ese pequeño detalle. Aunque habían pasado pocos días desde aquel suceso, no se había detenido a pensar en eso, más que nada porque su propia mente le hacía evitarlo.

—¿Qué con eso? — preguntó, no sabe porque razón le daba un poco de vergüenza tener que hablar de esa estúpida deuda con YoonGi.

—Quiero ayudarte.

El menor le miró rápidamente con los ojos abiertos de sorpresa. ¿Eso que significaba?

—¿Ayudarme? ¿Cómo?

Necesitaba saberlo, si YoonGi se ofrecía a pagar todo así como pagó la cuenta del hospital, no aceptaría. Puede que al mayor no le importe absolutamente nada gastar su dinero, pero a él sí le importa, principalmente porque no es dinero suyo y YoonGi sólo gasta para pagar sus deudas. No iba a permitir que se involucrará en un problema que no era suyo.

—Me gustaría hablar de eso contigo pero en un lugar más cómodo — dijo, dándole una suave sonrisa un poco seductora —. Vamos a desayunar mañana, pasaré por ti temprano.

—Espera... — JiMin lo tomó del brazo cuando este sólo puso un poco de distancia entre ambos — ¿Sólo viniste hasta aquí para decirme eso? Pudiste haberme enviado un mensaje.

El pelinegro lo observó atentamente, JiMin se veía tan lindo incluso cuando estaba listo para ir a dormir, lucía precioso incluso con una camisa tan grande y pantalones de chándal, con el cabello un poco alborotado y esos tiernos labios abultados. Dios, deseaba tanto poder estrujarlo entre sus brazos y acariciar muchas partes de su cuerpo.

—Quería verte.

—¿Qué? — preguntó anonadado.

¿Sólo quería verlo?

—Hoy no pude venir a verte como me hubiera gustado — confesó —. Por eso estoy aquí.

Una vez más, el corazón de JiMin comenzó a latir dentro de su pecho con mucha fuerza y quiso pegarse para que se tranquilizara. ¿Por qué YoonGi actuaba así? Hasta hoy que le había dicho algo así volvió a recordar sus palabras de hace unos días.

" No me agradezcas por lo mínimo que alguien interesado en ti debería hacer "

¿YoonGi sentía algo por él? ¿Estaba interesado en él de la forma romántica? Y si era así, ¿por esa razón estaba tan pegado a él últimamente?

Imposible, ¿cómo podría un hombre tan atractivo y exitoso como YoonGi fijarse en alguien como él? Debía estar alucinando.

[ ♦️♣️♦️ ]

Holaa, aquí les traigo otro nuevo capítulo. Ya ven como si puedo actualizar entre semana ajkskd bueno, bueno, espero que les haya gustado el capítulo, y les recuerdo que les dije que el YoonGi de este fanfic estaba medio loquito.

En fin, nos leemos en el próximo capítulo. Besitos. ❤️✨️