Akashi Takeomi.

"¿Por qué debes ser diferente a nosotros?" 

"Si no fuera por tus ojos ni siquiera pareces nuestro hijo" 

"¿Querido seguro que no nos equivocamos?" 

Creció escuchando constantemente esas palabras por parte, principalmente, de su madre. 

A sus cortos 5 años Takeomi sabía que no era muy querido por sus progenitores a menos que fuera para realizar los quehaceres de la casa. 

Primero estaba el hecho de ser un "accidente", de llegar en el momento menos esperado. 

Después estaba el hecho de su aspecto, primero que su color de cabello era distinto al de sus padres… su madre había hiper jurado que nunca fue infiel así que o era algo de la genética o de verdad su madre era buena mentirosa. Seguido de eso estaba el hecho de la heterocromía en sus ojos, siendo uno verde y el otro celeste azulado (por lo menos si compartía el color de un ojo con su padre). 

Lo único que agradecía era que, a pesar de los insultos o las constantes críticas, no lo golpeaban. 

En todo caso lo castigarian dejándolo sin comer o algo así pero por lo menos no recibía golpes… eso era un consuelo para él. 

Le iba medianamente bien en la escuela ya que muchas veces no tenía tiempo de hacer la tarea o estudiar solo por limpiar la casa o hacer otro tipo de deberes que a su edad no debería de hacer. 

No fue hasta un día… cuándo tenía 7 años y tuvo que cambiarse de escuela que los conoció. 

Primero fue Shinichiro… este le había ofrecido ayuda luego de que él no entendiera un tema que habían visto en clases, enseguida Omi noto que el chico tenía como una especie de imán de buen corazón. 

Se hicieron amigos y los dos se contaron como era su vida. 

Take se sorprendió al escuchar que Shin casi no recordaba el rostro de su padre y el de su madre… estos solo aparecen pocas veces al año. 

Luego conocieron a Wakasa y a Keizo, los dos también eran nuevos en la escuela. 

Takeomi apenas vio a Wakasa…. Tuvo una especie de deja vu, pero decidió ignorarlo. 

Los cuatro se hicieron inseparables, a veces pasaban tiempo en el dojo del abuelo de Shin. 

Sin contar que descubrieron que este último era malísimo para las peleas. 

Otras veces en su propia casa cuando sabía que sus padres no estaban, o bien iban a visitar y a ayudar a Keizo en el orfanato. (Casi nunca iban a la casa de Wakasa, por bueno…. Seguridad). 

Con 8 años fue que conocieron a Kazukuma. 

Los cuatro estaban caminando por la calle cuando escucharon los gritos de una niña pidiendo ayuda, ninguno dudo y siguieron hasta que vieron a unos adultos intentando secuestrar a una niña de la edad de ellos. 

Los cuatro se lanzaron a ayudarla y allí fue cuando hicieron su primera amiga mujer. 

Kuma. 

Cuando los cinco se hicieron amigos fue como si estuviera destinado a ser así. 

Ella complementa lo que le faltaba a cada uno y ellos a ella. 

Luego llegó una sorprendente noticia para él. 

Iba a tener dos hermanos. 

Eso… lo emocionó pero a la vez lo asustó. 

También le dio la leve esperanza de que la llegada de los gemelos hiciera que sus padres decidieron que serían una familia. 

Les contó esto a los demás y luego se enteró que Shinichiro y Kazukuma también iban a tener hermanos. 

Ese mismo día le pidieron consejos a Keizo de cómo tratar con niños pequeños. 

Pasó el tiempo y los gemelos por fin nacieron, pero sus padres siguieron… en sus andanzas así que él debía cuidar a los dos bebés él solo, lo bueno es que los demás le ayudaban a veces. Principalmente Wakasa que pasaba mucho tiempo con ellos, además de animarlo cuando sentía que sus hermanos menores lo odiaban. 

Y a medida que crecían Takeomi noto enseguida que sus hermanos físicamente eran la copia de sus padres… Haruchiyo era casi idéntico a su madre mientras Senju a su padre. Eso y el leve parecido físico de Senju con Wakasa. 

Pero todo se fue a la mierda cuando sus padres se separaron y su padre se llevó a Haruchiyo. 

Nunca más la volvió a ver.

Luego de un tiempo Shinichiro propuso fundar Black Dragons después de que casi incendiaron el edificio del orfanato de Keizo. 

Todos estuvieron de acuerdo, cada uno sabía pelear solo debían mejorar sus técnicas y en cuanto a Shin…. Bueno eso es otra historia. 

Fue el primer año que ocurrió la semana blanca, en uno de esos fatídicos días él y Wakasa se reencontraron con Haruchiyo….. Prefería no recordar lo que pasó luego sólo que recibió su cicatriz en el ojo. Luego de eso Haru o mejor dicho Sanzu comenzó a vivir con él y Senju.

Después cuando se retiró junto a los demás conocieron a Akane Inui, que se ganó un lugar en el dañado corazón de los cuatro…. 

Pero si hay algo que aprendió es que cuando todo va bien siempre se rompe."

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La lluvia caía con fuerza, él ni siquiera llevaba paraguas.

Cualquier persona que lo viera diría que solo era un joven de 27 años caminando sin rumbo fijo, pero no era así.

El estaba camino al santuario pero no el que usaba la Tokyo Manji para reunirse sino otro, uno un poco escondido que usaban los Black Dragons para reunirse pero que se dejó de usar cuando Izana llegó al mando.

Al parecer un poco de racionalidad y respeto seguían en él cuando lideró la pandilla por lo que decidió dejar el santuario como un “Símbolo de respeto” y trasladar el escondite a otro lado (acá Inupi había tenido que ver).

Cuando llegó al viejo edificio entró sin más.

-Llegue- suelta al aire mientras se dirigía a lo más profundo del templo donde había un altar donde se situaban dos fotografías. Una de un chico y otra de una chica.

Takeomi noto que el lugar estaba limpio y las flores de los jarrones habían sido cambiadas, al parecer Wakasa o Benkei habían estado allí antes.

Aprovecho esto y se sentó en el piso frente al altar.

-Me disculpo por no venir la otra semana… Senju quería que la ayude con el diseño del uniforme de Braham- comienza a contar- Al parecer nuestro legado se traspasó a nuestros hermanos ya que en la pandilla de Manjiro esta Haruchiyo…. y al parecer Kazutora ya ha salido de la correccional. Sinceramente tengo miedo de que pueda resultar de eso.

Las lágrimas comenzaban a acumularse en sus ojos, las dos fotografías le sonreían.

-Akane sigue dormida y con los chicos no sabemos cuando va a despertar…. Su hermano menor ahora es parte de la décima generación de Black Dragon aunque sigue corrupta como cuando Izana la tenía o tal vez más.- sigue Takeomi, mientras jugaba con el collar en su cuello-  Es difícil sin ustedes dos….

Apenas dijo eso, dejó que las lágrimas fluyeran por sus ojos con total libertad.

Estuvo un rato así hasta que decidió que era suficiente, se limpió la cara y después realizó una reverencia para despedirse.

Ahora debia de volver a su papel de idiota confiado y obsesioando por la fama, despues de todo de esa manera era que lo conocian sus hermanos menores y si a ellos les resultaba mejor entonces dejaria que lo crean.

“Hasta otro dia, Shinichiro y Kazukuma”

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Vada: Bueno, antes de que digan algo... esto lo habia hecho ya antes de que salga el tema de la cicatriz de Sanzu y eso.
Ademas como es un universo alternativo no todo tiene que ser igual al canon jsjs.

Aclaro que este es MI UNIVERSO por lo tanto no lo tomen como palabra santa y nada.

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