Llego Noviembre en un abrir y cerrar de ojos y Jonathan ya recuperado y con mucha resistencia a base de su entrenamiento físico, se despidió de su nuevo amigo Branko y volvió en búsqueda de más desafíos. Esta vez, en una zona desconocida en Canadá, un lugar en el que ninguno de los que se aventuró allí pudo salir, es más, este lugar contaba con muchos rumores: "Todo aquel que se adentrara en el Bosque del Tiempo, caerá eternamente en el olvido".
Sin importar lo mencionado anteriormente, Jonathan fue hacia allí, ignorando el gran peligro inminente.
El viaje a México duró 2 días, al aterrizar, lo primero que hizo fue conseguir hospedaje. Dentro del hotel Homewood Vaughan conoció a una mujer argentina llamada Micaela Novoa. graduada en la Universidad de La Plata que al terminar sus estudios, se dedicó a la fotografía y que se había venido de visita para un nuevo álbum.
Ellos se hicieron buenos amigos, él le mostró cada recorrido que había realizado hasta el día de hoy. ella, maravillada por lo que vio, se enamoro de él y quiso acompañarlo, pero a pesar de todo, le negó y pronto emprendió al misterioso bosque, el se había preparado mucho para esto, lo que no sabia, era que se aproximaba su destino final.