Yo ya me encontraba en el Twilight High School haciendo los últimos preparativos para la llegada de las nuevas alumnas a la escuela, quería que todo en mi primer año como líder de dormitorio quedara impecable.

—¿Cómo... va...el...dis...curso?— me preguntó Sally.

—Ya lo terminé Sally ¿quieres escucharlo?

—Sí...capi...tana.

Me levanté de mi escritorio y con una voz fuerte y pronunciada dije:

—Saludos mis queridas merluzas, bienvenidas al dormitorio Neverland yo soy su líder Jolly Rogers pero me pueden decir capitana Rogers, espero que estén listas para estudiar con mucha dedicación y entusiasmo en esta escuela de brujas o de lo contrario las haré "caminar por la plancha".

Terminando mi discurso le pregunté a Sally:

—¿Qué te parece?

—Excelente.

Con la luz verde para mi presentación como líder de dormitorio, me preparé para irme a dormir temprano y que no se me hiciera tarde para la ceremonia de bienvenida de las nuevas estudiantes, pero en el fondo me encontraba muy preocupada ¿en qué dormitorio quedará la hermana menor de Narcisa? ¿ella será un problema para nosotras las líderes? eso lo descubriría al día siguiente.

El día de la ceremonia de bienvenida pasó algo muy gracioso, una de las nuevas alumnas estaba corriendo para no perderse la ceremonia, pero la pobre se tropezó con su túnica que le quedaba muy grande, realmente esa escena me dio mucha ternura y a la vez risa.

—Cosita de seguro nunca ha usado una túnica en su vida—pensé— vamos no seas mala ve a ayudarla.

Hice brillar mi garfio mágico, el cuál impidió que la chica se diera un golpe más fuerte del que tuvo; luego le pregunté:

—Esa fue una buena caída ¿te encuentras bien?

La chica quien en ese momento desconocía su verdadera identidad me contestó:

—Sí gracias por ayudarme ¿cuál es su nombre?

—Jolly Joanne Rogers la nueva líder del dormitorio Neverland ¿y el tuyo?

—Rosella Enchantress.

Increíble ¿esta pequeña chica de pelos rosas era la hermana de Narcisa? interesante~

—Oh, ¿la hermana pequeña de Narcisa chan? encantada de conocerte— dije con un tono de voz dulce.

—A mí también, lástima que sea en circunstancias tan vergonzosas.

Ternurita, es una pena que no pude seguir hablando con ella porque la líder del dormitorio Infernam la jueza Claudia Froud nos interrumpió abruptamente.

—Jolly la ceremonia de apertura ya va a comenzar vente.

—Me tengo que ir Rosella sino la jueza me hará "bacalao a la barbacoa", nos vemos después.

—Sí adiós.

Me senté a lado de las demás líderes de dormitorio para esperar que acabara la ceremonia de bienvenida en la que obligatoriamente teníamos que asistir. Por fortuna me había tocado sentarme a un lado de Millicent Mims la líder del dormitorio dedicado a la bruja loca.

La pelimorada era una excelente conversadora y muy amable.

—Hola Jolly.

—Hola Millie ¿qué tal? ¿cómo estás?

—Muy bien ¿y tú?

—Algo nerviosa, es mi primer año como líder y lo quiero hacer bien.

Millie sintiendo compresión por mí me acarició el hombro y me dijo:

—No te agobies, te aseguro que harás un buen trabajo.

—Gracias Millie senpai, oye ¿tú no estás nerviosa? también es tu primer año como líder ¿o me equivoco?

—Sí también es mi primer año como líder ju ju, ya que la anterior pasó al cuarto año pero no me preocupo por esos pequeños detalles sólo daré lo mejor de mí para ser una buena líder y ya.

Ojalá yo tuviera ese mismo optimismo.

—Yo también, espero que seamos muy buenas amigas este año.

—¿Qué no lo éramos ya?— preguntó la pelimorada.

—Sí lo somos, pero no es lo mismo charlar por un espejo mágico que en persona ¿no crees?

—Sí tienes razón.

Después de que varias alumnas habían sido seleccionadas a distintos dormitorios por la estatua del dios oscuro, todas las líderes incluyendo a las demás alumnas de primer año veíamos con atención a la pequeña rosita chan. La pobre se veía demasiado asustada.

—Ojalá le toque conmigo— murmuré en voz baja.

—¿Te imaginas que quede con Claudia san?— me preguntó Millie.

—Sí pobrecita.

La jueza suprema nos mandó callar con su mirada acusatoria esa que usa para decirle a alguien que es culpable.

—Tu alma pertenece a... Neverland.

Justo cuándo escuché el nombre de mi dormitorio sentí un alivio, Rosella chan ahora pasaría a formar parte de mi alumnado la iba a proteger cómo a mi "más grande tesoro" después de todo se lo debía a su hermana.

Sally reunió por mí a todas las nuevas alumnas de Neverland y antes de que comenzáramos nuestro tour por todas las instalaciones de la escuela era el momento oportuno para decir mi discurso.

—Saludos mis queridas merluzas, bienvenidas al dormitorio Neverland yo soy su líder Jolly Rogers pero me pueden decir capitana Rogers, espero que estén listas para estudiar con mucha dedicación y entusiasmo en esta escuela de brujas o de lo contrario las haré "caminar por la plancha".

Vi como algunas de mis merlucitas tenían miedo cuando dije esa última frase y se me hacía algo súper adorable; de todas maneras sí era bueno que me tuvieran miedo soy una chica absolutamente severa con las reglas y sino me obedecían yo no sería la responsable de que terminaran siendo comidas por un cocodrilo después (sí Alchemist sensei me refiero a usted).

—Chicas este es el salón de pociones mágicas, en él aprenderán a envenenar manzanas, pociones curativas con la maestra Shelly Alchemist.

Una de mis alumnas levantó la mano y me preguntó:

—Oiga capitana Rogers ¿también se pueden hacer pociones de amor aquí?

—Lamentablemente no merluza, quedaron prohibidas hace nueve años.

—Pero ¿porqué?—preguntó con curiosidad aquella nueva alumna.

Yo exhalé profundo y le contesté lo siguiente:

—Porque en ese entonces toda una clase de tercero quedaron impregnadas con una poción de amor y por ende ninguna quiso ir al baile de la luna azul con los chicos del Night Raven College.

—A este...aconte...cimien...to, se le lla...mó "la tra...ge...dia ro...sa"— participó Sally con su típica tartamudez.

—Se volvieron lesbianas para que me entiendan ¿a alguien de aquí le gustan las mujeres? no me gustaría incomodarla con este tema.

Todas las pequeñas me negaron con la cabeza.

Sally me reprendió diciendo:

—To...davía son ni...ñas, ni si...quie...ra han te...nido no...vio ¿cómo...les...pregun...tas eso?

—Lo siento Sally, pero tenía que sacar ese tema a la luz bien sigamos con su recorrido.

Después nos dirigimos al campo de vuelo.

—Aquí ustedes aprenderán a volar con escobas y a mantenerse en excelente forma física con la maestra Rafaela Whitecliff, les doy un consejo sino quieren correr 30 vueltas encuentren bolsas de oro que ella enterró en este campo cuándo era estudiante, tal vez así puedan saltárselas ja ja

Otra vez Sally me regañó diciendo:

—Por Disney ¿cómo...se te ocu...rre dar esos cons...ejos a estas pequeñas?

—El lado pirata que hay en mí, bueno sigamos recorriendo la escuela.

Después visitamos el lugar más aburrido del Twilight High School, exactamente la biblioteca.

—Aquí encontrarán los libros que necesiten para investigaciones históricas para sus clases con la maestra Julianne, llévense una bolsa para dormir si es que van a estudiar toda la noche aquí.

Ya era la hora de que mis pequeñas comieran algo así que las llevé a la cafetería principal para que se alimentaran y después pudiera llevarlas a nuestro dormitorio en forma.

—Vayan, aprovechen este almuerzo para conocerse mejor y hacer nuevas amigas.

Todas parecían realmente felices, menos Rosella la cuál ninguna de sus nuevas compañeras querían comer con ella, me imaginaba el porqué de seguro los padres de ellas les prohibieron tener cercanía con una hermana de una supuesta "bruja rebelde" o simplemente no querían desaparecer que absurdo.

—Hey Rosella ¿porqué no vienes a comer tu tarta de fresas con nosotras?

—¿De verdad?

—Sí, siéntate.

La pequeña pelirrosa con una gran sonrisa se fue a comer conmigo y con Sally.

—Gracias por invitarme.

—Cuéntame ¿porqué estás tan solita?

—Es que nadie quiere ser mi amiga después de lo que le ocurrió a Narcisa.

Pobre cosita tierna, yo la tomé del hombro y le dije:

—Nosotras podemos ser tus amigas si quieres.

—¿En serio?

—Por supuesto, si Narcisa fue amiga mía ¿porqué no sería la tuya?

Rosella comenzó a comer su plato de tarta de fresas feliz de la vida, yo me encargaría de hacer el resto de sus días escolares así de felices eso o me dejaré de llamar Jolly  Rogers.