Doppio se encontraba paralizado ante tal situación.

—¿Y ahora qué pasa, eh? —El mayor García caminaba hacia Doppio, al dar unos pasos se dio cuenta que las heridas del zarpazo habían sanado por completo.

—Es increíble —comenzó Doppio—, lo que dijo el Gran Maestro sobre las estrellas era cierto. Pueden transformar a un individuo, pero lo que debo saber ahora es que si este tipo tiene un stand y qué tan peligroso es.

—Acércate, italiano pelirosa —dijo el mayor, con una ceja levantada y los brazos estirados invitando a Doppio a acercarse y atacar.

Doppio observó al mayor por unos segundos más para luego ir hacia adelante. La estrella estaba a unos cinco metros de él por lo que sería la única oportunidad de obtenerla.

—No sé si tengo un stand, pero si lo tuviera, no dudaré en romperte la cara antes que pongas tus garras sobre la estrella.

—¿En serio? Tal vez no digas lo mismo cuando te enfrentes a ellos.

—¿Ellos? —dijo el mayor García, confundido.

El demoníaco Doppio comenzó a regurgitar, su boca se agrandó más de lo humanamente debido y sus fauces se abrieron para dar paso a un hombre que salió envuelto en una pegajosa saliva.

—¡¿Qué demonios pasa?! —exclamó el mayor.

—Ah, ja, ja, ja. Te presento a mi stand, Diabulus —dijo Doppio mientras sus ojos verdes sin pupila brillaban como dos esmeraldas en la oscuridad.

—M-Monstruo.

Doppio volvió a regurgitar y vomitó a otro hombre envuelto en su saliva.

—Ya debes conocerlos muy bien, García —dijo Doppio sonriendo con sus filosos dientes—. ¡Despierten!

Al instante, los dos hombres se levantaron con sus dos ojos iluminados de verde. Eran nada más y nada menos que Sandro y Kuryaki.

—¡El bandido y el criminal! —gritó el mayor.

—¡Así es! ¡Ambos son mis sirvientes ahora! —exclamó Doppio.

Los dos hombres saltaron sobre el mayor García, este solo puso una defensa con sus dos brazos para evitar mayor impacto en su cuerpo. Pero Kuryaki usó a su stand, Coolo, para traspasar el suelo cuando cayó.

—¡Es cierto! ¡Ambos son usuarios de stand! —exclamó el mayor García para sí mismo cuando vio a Kuryaki sumergirse en el suelo. Cuando giró a ver a Sandro, este tenía a su Huevo en su brazo, a pocos metros sobre el mayor García—. ¡Diablos! ¡Estoy dentro de su rango!

Sandro activó a su stand y este comenzó a expulsar un gas verdoso que llegó hasta el mayor. Antes que pudiera retroceder un paso, sus dos fémures fueron agarrados por Kuryaki quien había salido por debajo de él.

—¡Maldito! —exclamó el mayor, mientras era cubierto por el gas. Sandro cayó a un metro de él, viéndolo con un rostro inexpresivo.

Rápidamente, un huevo comenzó a formarse dentro de la boca del mayor. Aunque trataba de moverse, no podía hacerlo ya que Kuryaki lo tenía muy bien agarrado.

«Solo tengo que hacer lo que hizo Cerati hace dos días —pensó el mayor. Al sentir como el gas que había entrado por su nariz empezaba a endurecerse, exhaló todo el aire que tenía en sus pulmones. Pese a ello, el gas seguía presente a su alrededor—. ¡No puede ser! ¡El gas no se desvanece!»

Sandro seguía a su lado, sosteniendo al Huevo que era su stand. Kuryaki se mantenía en su posición, con una mirada sin emoción.

—¡Ja, ja, ja, ja, ja! —empezó Doppio—, se supone que ya los has enfrentado anteriormente, ¿acaso no puedes derrotarlos?

El mayor García trataba de no respirar pero eso también lo afectaba. Por un segundo, pensó que moriría sin saber la verdad tras la muerte de su hijo, si es que Dio fue quien lo asesinó o no y tantas otras interrogantes que cruzaron por su mente de manera fugaz.

—¡No! ¡Aún no! —un aura esmeralda comenzó a aparecer alrededor de su cuerpo. El mayor, irguió su cuerpo e inhaló todo el gas y oxígeno que pudo.

—¿Qué hace? —dijo Doppio entre emocionado y confundido.

El gas de Huevo era aspirado por el mayor hasta que no hubo más gas. Doppio estaba confundido con lo que estaba pasando. Sandro y Kuryaki seguían inertes.

—Siento que tengo una fuerza que no tenía antes. ¡Mi voluntad me ha hecho renacer! —exclamó el mayor mientras que a su lado, aparecía una figura humanoide de color esmeralda con encajes plateados en sus hombros, codos y rodillas. Sus nudillos estaban decorador con unas ornamentas de metal y sus guantes de cuero negro le daban un aspecto elegante. El rostro del stand del mayor mostraba toda la furia contenida por él por todas las injusticias que tuvo que pasar.

—¡Basta de estupideces! ¡Sandro, expulsa el gas de tu stand! —gritó Doppio.

El bandido del desierto activó su Huevo nuevamente, expulsando el gas tóxico.

—Zzzuuuuraaaaa —comenzó a decir el stand del mayor con una voz sepulcral. Abrió los ojos cuando sintió el gas tocar su piel—. ¡Zura!

Se adelantó hacia Sandro que estaba cerca y lo atacó con una avalancha de golpes tan rápidos y precisos que nadie podía ver los puños impactando a Sandro.

—¡Zura! ¡Zura! ¡Zura! ¡Zura! ¡Zura! ¡Zura! ¡Zura! ¡Zura! ¡Zura! ¡Zura! ¡Zura! ¡Zura! ¡Zura! ¡Zura! ¡Zura! ¡Zura! ¡Zura! ¡Zura! ¡Zura! ¡Zura! ¡Zura! ¡Zura! ¡Zura! ¡Zura! ¡Zura! ¡Zura! ¡Zura!

El mayor veía a su contrincante sin ninguna expresividad, ni lástima y enojo mientras era azotado brutalmente por el stand esmeralda.

— ¡Zura! ¡Zura! ¡Zura! ¡Zura! ¡Zura! ¡Zura! ¡Zura! ¡Zura! ¡Zura! ¡Zura! ¡Zura! ¡Zura!

De todos los golpes del stand, uno impactó en el Huevo, rompiéndolo por completo junto a los huesos del usuario.

—¡No puede ser! —exclamó Doppio.

Pero en un instante, volvió a ver a el mayor con el aura esmeralda a su alrededor, pero su stand no estaba a su lado.

Sandro seguía en su posición agarrando a Huevo y Kuryaki continuaba en el suelo, agarrando los fémures del mayor. Es como si el stand del mayor no hubiera golpeado a Sandro.

—Siento que tengo una fuerza que no tenía antes. ¡Mi voluntad me ha hecho renacer! —exclamó el mayor mientras que a su lado, aparecía una figura humanoide de color esmeralda con encajes plateados en sus hombros, codos y rodillas. Sus nudillos estaban decorador con unas ornamentas de metal y sus guantes de cuero negro le daban un aspecto elegante. El rostro del stand del mayor mostraba toda la furia contenida por él por todas las injusticias que tuvo que pasar.

«Un momento —pensó Doppio—, eso ya lo dijo»

La boca de Doppio empezó a moverse sin que él quiera hacerlo.

—¡Basta de estupideces! ¡Sandro, expulsa el gas de tu stand! —gritó Doppio. Este miró confundido a Sandro. «¡Eso ya lo he dicho! ¡Incluso no quería decirlo! —pensó»

Antes que Sandro activará la habilidad de su stand, su Huevo se partió en mil pedazos junto a los huesos de su usuario.

—¡Zuuuuuraaaaa! —gritó el stand del mayor, rematando con una lluvia de golpes al bandido masacrado—. ¡Zura! ¡Zura! ¡Zura! ¡Zura! ¡Zura! ¡Zura! ¡Zura! ¡Zura! ¡Zura! ¡Zura! ¡Zura! ¡Zura! ¡Zura! ¡Zura! ¡Zura! ¡Zura! ¡Zura! ¡Zura! ¡Zura! ¡Zura! ¡Zura! ¡Zura! ¡Zura! ¡Zura! ¡Zura! ¡Zura! ¡Zura! ¡ZUUUURAAAAA!

Con un brutal golpe en el pecho, el cuerpo de Sandro salió volando hacia los estantes, destruyéndolos hasta impactar con la pared del fondo de la biblioteca.

—Ya entiendo —dijo el mayor con su stand a su lado—. Todo el daño que uno reciba, se le devolverá una vez más, es así como funciona mi stand... Ultraviolento.

—No puedo ser derrotado aquí, debo decírselo al Gran Maestro —pensó Doppio—. ¡Kuryaki! ¡Elimínalo! —exclamó, saltando hacia las oscuras escaleras y desapareciendo entre las sombras.

—Maldito, aunque no eres mi objetivo principal —dijo el mayor.

Kuryaki retorció su mano sobre los fémures del mayor. Pero este no mostró dolor alguno al ver que los huesos más largos de su cuerpo estaban en poder del bandido en el suelo.

—Ni lo intentes. —El mayor, con ayuda de su stand, dio un salto hasta el candelabro del techo, elevando a Kuryaki en el proceso—. ¡¿Qué sientes ahora que no estás en el suelo?!

La mirada inexpresiva de Kuryaki le daban un aspecto retorcido mientras trataba de fracturar los fémures de su enemigo. El mayor comenzaba a sentir el dolor.

—Mientras que yo estoy sosteniéndome del candelabro, el muy maldito se sostiene de mis huesos —pensó el mayor—. Si sigue así, podría partirme las piernas.

Kuryaki presionaba ambos huesos con sus manos, la fuerza comenzaba a afectar a las piernas del mayor que trataba de quitarse de encima al criminal.

—Debo pensar en algo, ni la fuerza de mi stand podrá hacerle daño, aunque solo hay una fuerza que no puede vencer.

Con ayuda de su stand, comenzó a girar el candelabro. La velocidad aumentaba y el mayor agarraba fuertemente uno de los brazos del objeto.

«Solo debo esperar unos segundos más —pensó el mayor mientras resistía con todas sus fuerzas»

El candelabro giraba rápidamente y tanto el mayor como Kuryaki estaban en sentido horizontal al objeto. Ambos se aferraban al agarre que sostenía para no salir disparados por la velocidad del giro del candelabro.

—¡Ah! ¡El maldito tiene una fuerza incomparable! ¡Un poco más y romperá mis piernas! —exclamó el mayor para sí mismo.

La velocidad ya los hacía verse invisibles por alguien que los esté viendo. El mayor sabía que era el momento de efectuar su plan. Estiró sus piernas para atrás y activó su stand.

—¡Deténlo, Ultraviolento! —exclamó el mayor.

—¡Zura! —gritó el stand, tomando al candelabro con fuerza y frenándolo abruptamente.

En el momento que el candelabro frenó, el mayor tiró sus piernas hacia adelante con todas sus fuerzas, haciendo que Kuryaki no pueda seguir aferrándose a los fémures del mayor y que salga volando hacia los estantes de los libros.

—¡Síííííí! —exclamó el mayor mientras se sostenía del candelabro—. Veo que hacemos un buen equipo, Ultraviolento.

Sonrió a su stand mientras que este soltaba un zura como respuesta.

Dejó el candelabro y cayó al piso en sus dos piernas. Se acomodó los tirantes sobre su torso desnudo y vio hacia donde había dejado a Cars.

—Bien, es hora de ir por mi objetivo principal... Dio Brando.

Nombre del usuario: Charles García

Nombre del Stand: Ultraviolento

Stats

Poder destructivo: B
Durabilidad: C
Velocidad: A
Precisión: B
Rango: D
Potencial de aprendizaje: D

Habilidades

Ultraviolento puede repetir solo una vez un lapso de tiempo. Si ha realizado daños en ese lapso, este daño se mantendrá en la repetición, por lo que al atacar, aumentará el daño realizado.

Nombre del usuario: Vinegar Doppio

Nombre del Stand: Diabulus

Stats

Poder destructivo: E
Durabilidad: A
Velocidad: D
Precisión: C
Rango: C
Potencial de aprendizaje: D

Habilidades

El stand Diabulus es de tipo incorpóreo, capaz de fusionarse con su usuario para mayor efectividad. Su habilidad consiste en devorar algún tejido, ser vivo u objeto inerte para dotarlo de "vida" que obedezca sus órdenes. Al absorber a un ser vivo con consciencia (humanos) puede ver sus recuerdos lejanos como cercanos. En el caso de objetos, el lapso de tiempo en que obedecerán sus órdenes depende del tamaño de los mismos, si el objeto es pequeño, la duración será larga; si es grande, lo contrario.

1. Ultraviolento hace referencia a la popular canción de la banda Los Violadores, llamado originalmente "Uno, dos, ultraviolento".

https://youtu.be/5-yk2el2b8k

2. Diabulus hace referencia a una canción de la banda Mago de Oz, titulada originalmente "Diabulus in música".

https://youtu.be/azTDw3dn7BE

Próximo capítulo: Slipknot