"Esta historia la escribí hace más de 10 años, cuando estaba estudiando en el colegio. Significa mucho para mi y ahora me he animado por fin a publicarla y espero que tenga todo el cariño, de parte de ustedes, al igual que todas mis otras obras"

Hoy es un día como todos los demás, sin nada en especial. Lo único que cambia en mi vida es el gran amor que siento por él, por Joey Tempest, líder de la banda de rock "Europe".

Desde hace cuatro años que escucho su música y por lo tanto, desde entonces, mi amor por él ha crecido, hasta hoy.

Siempre de alguna forma me entero de algo en especial sobre él, como cuando va a giras, donde está viviendo, etc. Ayer por ejemplo supe por ahí que está viviendo en Inglaterra.

Cuanto desearía fugarme a donde está, para decirle cuanto lo quiero.

A mis 19 años se cuan bello es el amor, pero cuán difícil es tratar de realizarlo si no es con la persona correspondida.

Europe es una de las mejores bandas de la década de los ochenta. En estos últimos días aún se valora su calidad de música.

Por estos días, Agosto 20, están realizando una gira por toda Europa. Joey a sus 30 años no tiene compromiso con nadie y es feliz de ese modo, en cambio, todos los amigos de su banda, o ya tienen algún hijo que otro, o están ligados al matrimonio.

Aunque no lo conozco, sé que Joey es un hombre de muy buenos sentimientos y tengo la esperanza que cualquier día lo conoceré y será el día más feliz de mi vida.

Hace un año que comencé a trabajar como secretaria en una tienda de ropa. Gano muy buen dinero, por lo que cuando tenga cierta cantidad en el banco me iré de la casa y arrendaré un departamento.

Todos estos días he tenido el mismo sueño con Joey; me encanta mucho soñar con él, pero dicen que cuando alguien sueña todas las noches exactamente lo mismo, es porque algo va a ocurrir...

Eran las tres de la madrugada en Inglaterra, como de costumbre, Joey jamás se dormía antes de las diez por distintos motivos, a veces, daba la impresión de que se sentía solo o algo por el estilo.

De pronto cuando se quedó dormido, comenzó a ver una mujer con un vestido blanco, cabello negro y piel blanca. Caminaba por las grandes calles de un lugar, que no tenía nombre ni dirección alguna. Ella se acercó hasta Joey y le dijo que estaba profundamente enamorada de él. Luego le tocó su cara y lo besó, fue cuando Joey reaccionó de su sueño y quedó anonadado.

Llegó el otro día, el tipo de largo cabello y hermosos ojos en lo único que pensaba era en la extraña mujer, que lo había besado y que sin pensarlo, él correspondió a ese beso...

_ John, anoche tuve un extraño sueño

_ Cuéntame hermano, tal vez, pueda entenderlo o algo por el estilo.

_ Soñé con una mujer. Nunca la había visto.

_ ¿Una mujer que no conocías? Tal vez era una fans.

_ No. Nunca la había visto, era diferente. Tenía su cabello largo y negro, de piel blanca con pecas y unos ojos tan cafés, que eran bellos. Lucía un vestido blanco, con tirantes y le llegaba a la mitad de sus piernas.

_ ¿Era bella la mujer?, ¿Sabes cómo se llamaba?

_ Era bellísima y no, no sé cómo se llamaba. Se me acercó, dijo que me amaba y me besó.

_ ¿Te besó?

_ Si, y yo le correspondí. Lo que me parece raro es que la mujer lucía una edad no tan mayor.

_ ¿A qué te refieres?

_ Era menor que yo...

John no supo que decirle a Joey, pero luego de unos minutos olvidaron el tema y se fueron a ensayar con los demás de la banda.

No hay hora que no piense en él. El amarlo me hace tan fuerte ¿Qué ocurriría si lo conociera? Lo único que sé es que le diré de mi gran sentimiento por él.

Mi madre y mi padre no entienden lo que es amar, en lo único que piensan es en su dinero y en todos los negocios que tienen que resolver.

A mamá jamás le agradó que yo estudiara la profesión en la que hoy estoy ejerciendo y quiere que me case con el hijo del gerente de la empresa, en la que papá está realizando sus dichosos negocios. Se llama Simón Castillo. Es pésimo en sus obligaciones, normalmente el día lo ocupa solamente en comprarse cosas de mayor dinero e invitar a sus amigos a su mansión. Realmente digo, sí mamá pretende que yo me case con aquel tipo, es solo para su conveniencia.

Los días transcurren y en lo único que pienso es en el hombre que amo con mucho cariño. El amor que siento por él me hace fuerte y valiente contra los que traten de hacerme daño y cuando llegue el momento de encontrarnos, ya no le temeré a nada.

Hacía un frío infernal en Londres, a esas horas los integrantes de la banda ya habían dejado de ensayar, puesto que se sentían un poco estresados por lo de su nuevo disco, el que tal vez dentro de muy poco vería la luz.

A Joey le pareció mejor idea que la banda realizara un nuevo disco, ya que la gira anterior fue todo un éxito en toda Europa.

Empezaron a transcurrir los días y mis padres no hablaban de otra cosa que yo me comprometiera con Simón, así fue como decidí pensar en viajar a Londres, para conocer a Joey Tempest y dejar en el pasado toda aquella jodida falsa.

Mi madre invitó a cenar justamente hoy a Simón. Tenía la certeza de que haría lo posible para que yo me casara con aquel tipo adinerado y así salvarnos de la miseria, en la que estábamos atravesando por culpa de mi padre.

Había llegado la hora de la famosa cena. Todos comíamos sin decir palabra alguna, hasta que mi padre comenzó a hablar con el padre de Simón, que sería una excelente idea que ambas familias se unieran, fue cuando mi madre estuvo de acuerdo y ambos decidieron que desde esa noche Simón y yo quedaríamos oficialmente en noviazgo, y que ya fuéramos pensando en los preparativos para la boda.

Sin pensar en nada ni en nadie, no lo toleré más y me levanté furiosa de la mesa y grité a los cuatro vientos que jamás me casaría con un vago como Simón y me dirigí hacia el gran jardín trasero de nuestra casa.

Simón fue tras de mí...

_ ¡Stephanie! ¡Qué rayos te ocurre!

_ Eso a ti no te incumbe Simón

_ ¡¿Cómo que no?! Dentro de unos meses tú serás mi esposa.

_ Escucha bien esto. Jamás me casaré contigo, ni ahora ni nunca

_ ¿Estás con otro hombre?, porque sí es así, lo mato...

Simón tenía una fría mirada, se afirmaba que era totalmente cierto lo que había salido de sus labios, fue cuando quiso aprovecharse de que nos encontrábamos solos en el jardín y trató de darme un beso a la fuerza. En ese momento en lo único que pensé fue en Joey y resistiéndome, me solté de sus asquerosos brazos y le di una bofetada.

Encerrada en mi cuarto, me sentía asfixiada, no podía sacarme aquel repulsivo beso y llenándoseme los ojos de lágrimas ya no pude más y comencé a planear mi fuga hacia Londres.

Había una gran fiesta en la casa de John Norum, guitarrista de la banda. Todos eran felices, bailaban y tomaban unos que otros en exceso. Joey se veía tan feliz y siempre andaba vestido con alguna chaqueta que lo identificara. Su cabello tan largo y rizado, esos ojos que se demostraban cuando decían la verdad. Tenía una cara tan especial, era como si demostrara menos edad de la que tenía. Realmente era todo un hombre.

Cuando los cuatro tipos de la banda a excepción de Kee Marcello, que estaba un poco pasado de copas, se encontraban bailando con sus mujeres u otras damas algún tema romántico, Joey se encontraba en el patio muy serio. Solamente pensaba en aquel sueño, no podía sacarse aquella mujer, que lo había besado tan apasionadamente.

Mientras que en Santiago se acercaba la noche, en Londres la mitad de la gente estaba en su largo sueño.

Joey andaba merodeando por una extraña playa, esta estaba desierta, por excepción de alguien. Él andaba con su chaqueta rallada, acompañado de un gran frío. De pronto, vio algo que aquel frío se convirtió en curiosidad y amor.

A unos metros de donde él se encontraba, estaba sentada la misma mujer que había conocido la vez anterior. Estaba exactamente igual vestida que antes. Un fuerte viento empezó a correr, el cabello de ambos se movió con fuerza, y Joey se acercó hacia la mujer y se sentó a su lado. Ella le tomó sus manos, las pasó por su cara y luego lo miró con unos ojos llenos de amor.

_ Te estaba esperando Joey

_ ¿A mí?, pero ¿De dónde me conoces?

_ Eso ahora no tiene importancia, lo único que importa, es lo que estoy sintiendo en estos momentos.

_ Lo único que entiendo es que me siento muy bien a tu lado. Es como si te conociese de mucho antes.

_ Yo me llamo Stephanie Ferrada y vivo en Vitacura de Santiago de Chile.

_ Que bello nombre, igual como lo eres tú.

_ Te amo demasiado. Quiero demostrarte cuánto vale lo que siente este corazón por ti...

Luego de unos momentos, Joey y la muchacha se besaron a la luz de la luna, sin nadie alrededor, y de pronto todo se fue colocando de color blanco hasta desaparecer aquel bello momento...

_ ¡Volví a soñar con ella!

_ ¡No puede ser! ¿Y qué ocurrió esta vez?

_ Le di un beso y me dijo su nombre.

_ ¡Rayos! y ¿Cómo se nombra?

_ Stephanie y no sé, pero es muy bella. Tal vez existe en la realidad

_ No digas tonterías Joey. Es solo un sueño y todos saben que los sueños son solamente una imaginación del ser humano.

_ Es que no entiendo, no puedo sacármela de la cabeza y cuando la veo me siento también a su lado.

_ Estás confundido Joey. Ya verás que cuando salgamos a vacacionar te olvidaras de todo este extraño asunto.

_ Mejor vamos a tomar unas copitas al bar de la esquina

_ Ya de acuerdo...

Pasó una semana, mi casa era todo un infierno, si no es por el amor que siento por Joey, tal vez ya hubiese desaparecido. Nadie me entiende, nadie al parecer en mi familia sabe lo que es el amor, pero tengo un presentimiento de hace unos días atrás. Creo que por fin llegara el momento que con tantos anhelos he estado esperando.

Durante una semana Joey no dejó de soñar con la mujer. Cada día que transcurría, él se convencía más y más de que ella existía realmente.

Había llegado el día en que toda la banda se iría de vacaciones para Suecia, pero hubo un ligero cambios de planes, ya que el tipo de largo y crespo cabello, con intensa mirada, cambiaría el rumbo de sus vacaciones. No todos los integrantes estaban de acuerdo con aquella decisión, pero sin duda fue aceptada.

Joey tenía todos los datos sobre aquella dama, ya que en los sueños siempre descubría algo nuevo de ella, fue así como en vez de viajar a Suecia, viajaría ese día al atardecer, a Chile, en busca de aquella jovencita.

Me siento tan inspirada, ese hombre lo amo y haré lo posible para poder al menos decirle cuanto lo adoro. Ya no me basta el verlo en sus videos de música, con esas increíbles chaquetas y sus alocadas travesuras. Lo que quiero es tenerle frente a mis ojos, besar sus labios, sí es posible poder entregarme a sus brazos y olvidarme del mundo en que estoy viviendo.

Ahora ya no tengo que trabajar en la tienda, porque mi madre me obligó a que renunciara. Ya que como me voy a casar con el hijo, del famoso gerente en donde mi padre realiza negocios, creen que una secretaria es muy mediocre para nuestra clase. Aunque me duele decirlo, mis padres solo ven por el bien de ellos y no de su hija.

Estaba de lo mejor leyendo un libro, cuando Simón entró sin autorización, a excepción de mis padres, a mi cuarto.

_ Hola querida. - lo miré irritada -

_ ¿Ahora qué es lo que quieres?

Sonrió con ironía y se sentó junto a mí en la cama

_ Jejeje, esas no son formas de saludar a tu futuro marido...

Lo miré detestándolo aún más y Simón trató de besarme a la fuerza. Yo lo empujé y salí corriendo.

Me escapé para el centro de Santiago, sin que nadie se enterara.

Hacía unas pocas horasque Joey había llegado a Santiago. No se le complicó en alojarse, ya que en el centro de Santiago hay miles de hoteles. Ayer por el atardecer se había subido al avión y hoy ya estaba en Chile en busca de aquella mujer.

Luego de que Joey se alojara en el hotel, se dirigió inmediatamente a su búsqueda, pero al ver tantas calles sin conocer, se sintió un poco confundido y no supo por dónde empezar primero y eligió por azar.

Salió a la calle exactamente igual a como se vestía en Londres. Lucía esa llamativa chaqueta blanca, con pantalones de cuero y sus alocados risos rubios.

Pasaban los minutos en Santiago, el tipo de pronto se vio en una extraña calle llamada Rosende. Caminaba sin rumbo alguno, hasta que sin darse cuenta se fue acercando hacia lo que había estado buscando con ansias.

Sus ojos se llenaron de felicidad cuando vieron a la hermosa mujer con la que había soñado en muchas ocasiones. La observó sin que ella se diera cuenta. Estaba tan sorprendido por aquella dama, que deseaba acercársele y hablarle.

Quedé casi sin aliento, pude reconocerlo de inmediato, lo miré y sentí que mi corazón iba a explotar, fue cuando corrí a sus brazos y mencioné su nombre con mucho amor y él sin pensarlo me abrazó fuertemente. Le toqué su cabello, sus hombros y lo miré llena de amor.

_ ¡Joey! Tanto tiempo he soñado con este momento.

_ Stephanie...

_ Pero, ¿Cómo sabes mi nombre? ¿Qué, a caso ya me conocías de algún lado?

_ Se puede decir que sí

_ ¡Qué!, pero, si esta es la primera vez que nos conocemos y estoy feliz por este momento. No sabes cuánto tiempo he estado esperándote.

_ Yo viaje hasta acá para verte solamente a ti y comprobar que existías realmente.

_ No entiendo nada Joey

_ Lo que pasa es que en muchas ocasiones yo tuve sueños en los que tú te me aparecías.

_ ¡Que! ¿Quiere decir que de alguna forma tú ya sabias que yo existía en tu vida?

_ Claro y quería conocerte personalmente. Todo fue tan repentino en aquellos sueños, tú me decías tu nombre, donde vivías, entre otras cosas.

_ ¿Tú sabes mis sentimientos por ti?

_ ¡¿Entonces es verdad?! ¡¿Estás realmente enamorada de mí?!

_ Espere mucho tiempo para que llegara este día, el día en que te diría todo lo que siento, cuanto te amo y ahora ha llegado.

_ ¡Guau! Eres mucho más bonita en persona que en sueños

_ ¿En serio?, para mí tú eres lo más bello que existe. - sonreí con nervios - ¿Cómo va tu banda? ¿Han sacado algún nuevo disco?

_ Si, ya está listo, dentro de poco saldrá a la venta.

_ Sé que será muy bueno, como los anteriores... - titubeé- ¿Por qué no me cantas algo?

_ ¿Qué te parece mejor si te invito a comer un helado? - sonreí -

_ Me encantaría

_ Jejeje, vamos entonces. - volví a sonreírle -

_ Me parece todo un sueño, estar con el vocalista de mi banda preferida, conversar con él.

_ Pero no es un sueño, es la realidad.

_ Te quiero mucho Joey

_ Stephanie...