Ley de Murphy: si algo puede salir mal, saldrá mal
{Narrador}
La academia Seton.... bueno ustedes ya conocen está parte así que vamos a saltarla por beneficio del guión.
Y nos dirigiremos directamente a ver qué desastre se cocinaba en el club de cocina.
— ¿Segura de que algo así puede funcionar mono de mierda? – Jin, Cómo siempre estaba siendo o un amargado o un Jindere.
— ¡Qué soy una simio, humano imbécil! Pero si, estoy segura de que está maquina para ayudar a Ranka y a Yukari a dejar de cocinar pura mierda va a funcionar... (por el bien de todos en la academia, que a ustedes les toca hacer la comida en la fiesta del próximo mes) – Pan Sunohara estaba intentando terminar la máquina que le habían pedido.
Por dos razones, no quería intoxicarse con la comida y le tenía miedo a Ranka desde lo ocurrido el la carrera, donde por poco había sopa do macaco.
A nada de terminar la labor, las chicas del club entraron acompañadas de algunas más.
— ¡JIIIIIIN! – Un rayo rosado salió de la nada con trayectoria fija cuál misil a Jin.
Aunque lo siguiente que se vió es que Ranka se había estrellado contra una olla grande y tenía salsa de tomate en su estómago, además de que Jin estaba a unos metros de donde estaba antes.
(Acaso es un vampiro metrosexual o que mierda?) – Se cuestionaban Chroe, Mei, Ruka y Yena.
— ¡Ranka! – gritaron preocupadas las demás, pero la tragedia sucedió.
No había nada muy malo que pudiera ocurrir, ¿Cierto? Pues déjenme decirles que Ranka y Mei Mei son la personificación de la ley del caos.
"Si algo puede salir mal, saldrá horrible y de la peor forma posible que puedas o no imaginar"
Y efectivamente, las estrellas y el universo se alinearon con un único propósito, joder lo más posible a Jin Mazama (este universo no lo quiere)
— ¡¿Qué acaba de pasar?! – una voz joven y fácilmente era distingible saber que pertenecía a Hitomi... pero era también era distinta.
Al diciparse el humo, Jin y Pan de encontraban ilesos, únicamente con algo de polvo en sus uniformes y rostros, pero las chicas no habían tenido tanta suerte.....
Cuando Jin se asomó al lugar donde estaban las chicas, algo alarmado por Hitomi... todas estaban ahí, pero había un detalle, uno muy pequeño literalmente.
— ¡¿Pero qué mi*rda?! – Jin estaba completamente en shock.
Todas las chicas habían rejuvenecido hasta verse de unos 7 u 8 años de edad, y para acabarla de joder, Terano-sensei, King y Andou entraron al lugar preocupados por la explosión....
Pero eso solo desató una enorme exploción de llanto por las pequeñas chicas, quién de forma instintiva se fueron detrás de Jin para buscar algo o alguien que las protegieran de lo que ellas veían como enormes monstruos.
Tránqulidad? Ja! Eso es lo último que tendría Jin a partir de ahora
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