Llegaron a clases algo atrasados por lo que ya no alcanzaban a entrar a la primera hora. Pero en ese momento era lo que menos les importaba. Iban a desayunar en el patio de comida de allí.

Mientras caminaban tomados de la mano intercambiando sonrisas y miradas cómplices.

Mientras SeungCheol llevaba la mochila de JiHoon en su otra mano.

Y mientras JiHoon llevaba puesta una camisa de SeungCheol lo doble más grande.

Nada podía arruinar ese momento, absolutamente nada.

—Hoy iré a tu casa, bueno a la de tus padres. Después de clases —Dijo SeungCheol mientras tomaba de su café.

—Esta bien, así luego pasamos por la tuya —JiHoon sonrió y tomó la mano de SeungCheol por encima de la mesa.

Un pequeño gesto que le agradaba. Un pequeño gesto que hizo sonreír a SeungCheol. Le gustaba que JiHoon se sintiera lo suficientemente cómodo con el como para hacer esas cosas en público.

—Qué tenemos por aquí, al par de flojos que se saltan las clases —SeungKwan llegó junto a Hansol, miro sus manos, sus dedos entrelazados y no pudo evitar emocionarse —Hansol, aquí hubo reconciliación y quiero detalles.

—¡SeungKwan! —Regañó Hansol para sentarse en la mesa, a lado de SeungCheol —Pero en serio, ¿Las cosas están bien entre ustedes?

—Y luego yo soy el chismoso —Chilló el pelirrojo.

—Sí, estamos bien —Dijo SeungCheol regalándole una sonrisa de enamorado a JiHoon.

—Paren de mirarse así, llegan a salir corazoncitos en el aire —SeungKwan miro a JiHoon —¿Esa camisa no es muy grande para ti? Ese no es tu esti...- Oh Dios, que tipo de reconciliación hubo —Llevó sus manos cubriendo su boca.

—SeungKwan déjalos, vamos —Hansol tomó la mano del pelirrojo llevándoselo de ahí.

—¡Se ven bonitos juntos, tendrán bonitos hijos! —Gritó SeungKwan mientras era arrastrado por Hansol. Ese comentario provocó teñir las mejillas del castaño.

—Tiene razón, serán bonitos por ti —Dijo SeungCheol tomando nuevamente la mano del menor.

—¿Hablas en serio?

—Claro que sí, el que quieras ser mi novio incluye dos hijos. Un niño y una niña —Se encogió de hombros.

JiHoon sonrió negando con su cabeza —Vamos, ya empieza la segunda clase.

Caminaban a paso lento, realmente no se querían separar, mucho menos soltarse de las manos. Los dos habían esperado tanto este momento que no querían desperdiciar las pequeñas manías que podían hacer como novios.

—Te esperaré para irnos donde tus papás —Llegaron a la sala del menor —Me iré a mi clase también.

—Está bien —JiHoon miraba sus manos. No, no quería soltarla.

—JiHoon —Llamó al pequeño.

—¿Mmm?

—¿Puedes soltarme ya?

—No —Sonrió levantando sus talones para dejar un pequeño beso en los labios del mayor.

—Me gusta que seas así.

—¿Cómo así? —JiHoon miraba sus manos juntas balanceándolas.

—Así tierno, adorable. Totalmente comestible —Se acercó mordiendo levemente la mejilla de JiHoon.

—¡Cheol! —Regañó el castaño mirándolo con una sonrisa, sabía a lo que se refería con la última parte.

—Te has pervertido Lee JiHoon, te hemos perdido. Yo no me refería a eso que estas pensando —Negaba con la cabeza haciéndose el ofendido.

—Tú me pervertiste —Dijo golpeando el pecho del mayor.

SeungCheol asintió —Y lo seguiré haciendo —Sus brazos rodearon al menor abrazándolo mientras le hablaba al oído —Muchas veces más... como anoche —Susurro.

JiHoon se estremecía al sentir el aliento de SeungCheol en su oído —N-no puedes estar hablando de eso aquí.

—¿Por qué no? Eres mio, cosito.

Las piernas del menor se derritieron al escuchar aquel apodo junto al beso de SeungCheol en su mejilla, a los segundos reaccionó en dónde estaban; en la universidad, en la puerta de su sala.

—¡Dios SeungCheol! controla tus hormonas —Se alejó del cuerpo del mayor empujándolo un poco —No puedes hacer esto aquí, mira donde estamos.

SeungCheol comenzó a reírse —Deja a mis hormonas en paz, mejor tú controla las tuyas.

JiHoon sonrió —Las mías están tranquilas, aquí tú eres el de las hormonas alborotadas —Se cruzó de brazos mirándolo desafiante.

—¡Ah vaya, no me digas! Ven acá —Tomó a JiHoon del brazo hacia una sala cerca que estuviese vacía, faltaba poco para entrar a clases pero se quería divertir un momento.

Al entrar, acorraló al menor contra la puerta, así evitaba también que alguien los encontrara en una situación incómoda. Tomó las manos de JiHoon subiéndolas por encima de é y acercó su cuerpo frotándose y aplastando un poco al castaño mientras repartía besos en su cuello.

JiHoon al estar en esa posición, incapaz de detenerlo, empezó a removerse bajo el cuerpo del pelinegro.

—Seung-SeungCheol d-detente —Gemía al sentir su miembro siendo rozado constantemente junto a la lengua de SeungCheol que se paseaba descaradamente por su cuello, mordiendo y lamiendo.

—¿No te gusta? —La voz de SeungCheol era ronca mientras apretaba las manos del menor —¿Por qué no te gusta? Si a mi me encanta.

La mordida que recibió en el lóbulo de su oreja lo hizo perder todo control —S-si me gusta.

—Mmm ¿Te gusta estar así? —Subió sus labios besando el mentón y mejillas del menor —Dime ¿te gusta?

JiHoon a esta alturas solo era un cuerpo que soltaba pequeños gemidos —S-sí.

SeungCheol afirmó ambas manos de JiHoon con una sola de él, bajando su mano libre hacia la pierna del castaño levantándola un poco y posicionarse mejor. Su cadera se fue adelante simulando una embestida.

—¡Ah! SeungCheol —Gimió un poco más alto, no pudo controlarse.

—¿Mmm?

—Po-por favor, te necesito —Eso fue todo, solo eso necesitaba.

Soltó el agarre que tenía en las muñeca de JiHoon, terminó los besos y mordidas, soltó su pierna y se alejó unos metros sonriendo mientras veía que el menor aún seguía con sus ojos cerrados y sus brazos arriba.

—Niño con hormonas alborotadas —Sonrió feliz al ver lo que podía provocar en su pequeño novio.

JiHoon abrió sus ojos mirando la sonrisa satisfactoria que tenía SeungCheol, bajó rápidamente sus brazos y frunció el ceño —Eres un idiota ¿lo sabías? —Se dio la media vuelta abriendo la puerta pero SeungCheol fue rápido en no dejarlo salir deteniéndolo por la cintura.

—No, suéltame. No sabes cuánto te odio en este momento —Intentaba deshacerse del agarre mientras SeungCheol lo volteaba para mirarlo de frente.

—Mentira, tú me amas —Aseguró.

—No.

—Sí, me amas —Insistió.

—Sí —SeungCheol sonrío y se inclinó dejando un beso en sus labios —Pero odio lo que hiciste.

—Pero ¿qué hice? Solo le daba cariño a mi novio.

—Sí bobo —Rodó sus ojos.

—Algún día de estos llegaré a tu departamento y créeme que no te soltaré —JiHoon se ruborizo ante la idea pero sonrío —Sé que te gustaría —Abrazó al menor mirando por la pequeña ventana que estaba en la puerta y vio al profesor de JiHoon llegando —Anda amor, llegó tu profesor.

—Sabes que te amo ¿verdad?

—Sí.

—Y que no me cansaré de decírtelo.

—No me cansaré de escucharlo.

Se despidieron con un beso. Las clases fueron agotadoras aunque ambos tenían ánimo y energía para soportarlas. El amor les estaba haciendo bien.

SeungCheol caminaba hacia la sala de JiHoon, tendrían que ir con sus padres ahora. Dio la vuelta en el pasillo encontrándose con su pequeño conversando un chico de su clase, se acercó a ellos pasando su brazo por los hombros del menor dándole un beso en sus labios.

—Hola bebito —Acercó a JiHoon contra su cuerpo para después sonreír al chico que estaba enfrente a ellos.

—Hola SeungCheol —Saludó —Eso es lo que entra en el examen, hasta el sistema respiratorio —JiHoon habló con el chico.

—¿El sistema digestivo no entra?

—No, ese no.

—Oww, mi bebé tan tierno ayudando a sus compañeros —Dijo SeungCheol apretando una mejilla del castaño.

El chico sonrió mirándolos —Gracias JiHoon, adiós —Se dio la media vuelta alejándose de la pareja.

JiHoon se giró mirando de frente al mayor —Bebito, bebé. SeungCheol es un compañero de clase solamente.

SeungCheol se afirmó en la pared llevándose a JiHoon junto a él, separó un poco sus piernas posicionando al menor entre ellas —Qué parte de que eres mío ahora, no se entendió ¿Ah?—Comenzó a dar pequeños besos en la comisura de los labios del menor —Mi JiHoonie, mi pequeño, mi bebito.

—Tú te comportas como un bebé siendo tan celoso —Murmuró JiHoon con sus ojos cerrados disfrutando de los casi besos de SeungCheol.

—Entonces dilo —Sonrió divertido.

—¿Decir qué? —Abrió los ojos encontrándose a SeungCheol con una sonrisa traviesa.

—Eso, bebé... Cheol bebé, Cheollie bebé, SeungCheol bebé, como quieras tú.

—No, no lo diré.

—Dijiste que me comportaba como uno, dilo quiero escucharlo —Sus manos en la cintura del menor movieron su cuerpo agitándolo suavemente.

JiHoon lo miró a los ojos y olvidó cualquier vergüenza que le pudiera dar hablar de esa manera. SeungCheol era feliz y él también lo era, se acercó rodeando con sus brazos el cuello del mayor, su rostro estaba a centímetros del otro.

—Cheollie bebé —Dijo con una voz tierna que no tenía la mayor idea de dónde había salido.

—¿Tú bebé? —Susurro sonriendo acercándose para rozar su nariz con la de JiHoon.

Era la primera vez que SeungCheol podía comportarse así con un chico y que ese mismo chico fuera así de cariñoso con él haciéndolo enloquecer. Aunque con JiHoon todo era tan natural y esa sensación le encantaba.

—Sí y con mi bebé estamos atrasados para llegar con mis papás —Se alejó golpeando el pecho del mayor.

—¡Cierto! —SeungCheol cogió su mano y se fueron hasta el estacionamiento.