Capítulo 11
El beso con SeungCheol no significaba absolutamente nada para JiHoon, al menos se trataba de convencer de ello.
—Ni siquiera le besé los labios —Murmuró bajándose del bus para después acomodarse la mochila en sus hombros —Seguro ya se olvidó cómo yo lo hice.
Llegó a su casillero repitiéndose que todo estaría normal durante el día, no tenía que cambiar algo, ni nadie tenía por qué saber lo que ocurrió en el baño.
"Buenos días Lee JiHoon ♥️
Me alegra que hayas terminado con SeokMin porque no te merecía.
Cada día que te veo quiero decirte lo mucho que te quiero al oído, pero ¿Has visto la película de Shrek? Bueno...
Me identifico con el ogro"
JiHoon sonrió mirando la nota, había un chico por ahí, alguien que lo miraba a escondidas, desde las sombras, un chico bastante sensible y romántico que se encargaba de alegrarle el día de alguna forma.
La idea de buscarlo y averiguar quién era cruzó por su cabeza pero no tenía cómo hacerlo, llegaba bastante temprano a la universidad y la nota siempre ya estaba en su casillero. No conocía a nadie que llegara a las seis de la mañana cuando las clases recién empezaban a las ocho.
Sacó los libros de anatomía y biología para caminar hacia su salón de clases.
Si pudiera haber hecho un hoyo en el suelo para esconderse, sin dudarlo un segundo lo hubiese hecho.
El pasillo de su carrera estaba completamente lleno de papeles con su nombre y el de SeungCheol dentro de corazones grandes y pequeños, ya a esa hora varios alumnos caminaban por ahí, comentando entre ellos, riendo y sacando fotos.
SeungKwan dobló en el pasillo con Hansol y miraron a JiHoon.
El pequeño apretó sus puños cuando entró a su salón de clases y en la pizarra estaba escrito; "¿Qué tal son los labios de SeungCheol?"
—JiHoon ¿Qué es todo esto? —Hansol quitó algunos papeles de las paredes cuando vio la cara de rabia de su primo.
—¿Se han besado? —Preguntó SeungKwan sin poder creerlo.
JiHoon arrancó los papeles y con ellos borró lo que estaba escrito en la pizarra.
—¿Se han besado de nuevo? —Hansol sabía que JiHoon explotaría en cualquier momento.
—¡No! —Respondió enojado, nadie más sabía lo que había ocurrido en el baño, él no se lo había dicho ni siquiera a SeungKwan siendo su mejor amigo porque no era algo para andar alardeando.
Sólo SeungCheol podía haber sido tan estúpido para hacer todo esto pero no tenía sentido por su relación con DoYoon.
—¿Dónde está el idiota de tú mejor amigo? —Preguntó JiHoon mirando a su primo.
—¿SeungCheol?
—¿Tienes otro amigo más idiota?
—MinGy...
—¡SeungCheol!
—Debe estar entrenando... —Apenas dijo esas palabras JiHoon salió del salón de clases —Como todos los días.
—¿Entrenando a esta hora? —SeungKwan arqueó una ceja.
—Todos los días llega a las cinco y media.
—¿Es una broma?
—No, trae la ropa de su casa, llega aquí para entrenar, se ducha y viene a clases —Era algo que había comenzado a hacer ese año —Es bastante ridículo pero gracias a eso ha mejorado en el fútbol.
SeungKwan asintió y comenzó a retirar los papeles de las paredes junto a Hansol antes de que más personas los vieran.
Faltaban veinte minutos para que comenzaran las clases y normalmente JiHoon a esa hora estaba leyendo algún libro, repasando para la clase o hablando con sus amigos.
No caminando por los camerinos de los jugadores de fútbol.
Fue fácil encontrarlo porque escuchó un casillero cerrarse en las últimas filas, SeungCheol estaba listo para irse a clases pero su cabello seguía húmedo por la ducha.
—¡No eres más idiota porque no tienes más tiempo! —Caminó apretando las hojas en sus manos.
—¿Te despertaste con el pie izquierdo hoy? —Guardó el bolso de entrenamiento y sacó su mochila —¿No es muy temprano para molestarme?
—¿Era necesario hacerle saber a mis compañeros que nos besamos? —Hizo chocar las hojas contra el pecho del mayor.
—¿De qué estás hablando? —Miró los papeles sin entender nada —¿Qué es esto?
—¡No te hagas el desentendido ahora! —Gritó JiHoon —¡¿Cuál es el gusto de hacerle saber a todos que no puedo tener novio?!
—¡No me grites, niño de kínder! —Lanzó los papeles al suelo dando un paso hacia JiHoon —¡Sí tú gritas, yo grito el doble!
—¡No me digas así! —Exclamó JiHoon apretando sus puños.
—¡Tranquilízate! —Su expresión se relajó cuando vio a JiHoon más calmado, detestaba que gritara, más cuando los gritos iban hacia él —Si crees que yo hice esto, estás equivocado.
—¿Entonces a quién se lo dijiste?
—¿Decirle qué?
—Que nos besamos, idiota.
SeungCheol cerró el casillero de golpe haciendo saltar a JiHoon —Primero que nada, no me llames idiota tan temprano porque quiero estar relajado, por eso estaba entrenando, para comenzar bien mi día y tú me lo arruinas con tus insultos —Dio un paso hacia JiHoon con su rostro serio —Segundo, no le he dicho a nadie lo qué pasó en el baño —Vio al pequeño retrocediendo hasta que chocó contra un casillero y él colocó ambos brazos a su lado para que no se escapara —Y tercero, ¿Quién te ha dicho que eso fue un beso?
—Idiota —Murmuró con el ceño fruncido.
—Te dije que no me llames así.
—Ogro.
La expresión de SeungCheol cambió en ese momento, JiHoon lo vio más relajado, incluso con un semblante triste, el pelinegro asintió levemente con su cabeza sin despejar sus ojos de los del pequeño.
Se acercó rozando los labios de JiHoon, llenando sus pulmones de ese dulce aroma que solía tener.
—No te atreverías a hacerlo de nuevo —Habló JiHoon con voz suave.
—Esa boca me pertenece hace años —Susurró —Con tu primer beso se firmó el contrato.
—Cállate.
—Bobo, enano y gruñón —Dijo SeungCheol con una sonrisa —Además de ingenuo.
—Idiota, pretensioso y estúpido, además de infiel.
—Niño de kínder.
—Orejón.
—JiGoon.
—SeungYeol —Apretó sus dientes.
SeungCheol lo miró varios segundos sin decirle nada más para atacarlo, se inclinó para besarlo pero una tos falsa hizo eco en los camerinos.
—¿Interrumpo algo? —Preguntó DoYoon.
—No —JiHoon empujó al mayor y salió de los camerinos. Él no había hecho nada y si SeungCheol le decía la verdad, solo podía haber sido el chico que entró al baño interrumpiéndolos.
Durante todo el día trató de evitar a SeungCheol, saber si había tenido problemas con DoYoon no le interesaba, eso decía de los labios hacia afuera, pero en realidad esperaba que SeungKwan le llevara el chisme.
En la cafetería sacó la nota de su bolsillo para volverla a leer.
—SeungKwan quiero pedirte hacer una locura conmigo —Habló mirando a su amigo frente a él.
—Locura es mi segundo nombre.
—Está noche me quiero quedar escondido en la universidad para saber quién deja las notas en mi casillero.
Que tengan un
feliz año. 💕
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top