Capítulo 23


Los de dedos del Alfa Jeon recorrían las la espalda de su omega con tiernas y suaves caricias, descendían hasta la curva de su trasero y luego volvían a subir hasta sus hombros.

Ambos yacían acostados en el sofá totalmente desnudos, Jimin se había quedado dormido sobre Jungkook justo después de hacer el amor, el omega tenía el rostro escondido en el cuello del alfa su cálida respiración le hacía cosquillas.

El Alfa Jeon jamás en su vida se había sentido tan vivo y feliz como en esos días, darle una oportunidad al omega para entrar en su corazón había sido la mejor decisión que pudo tomar.

Jimin era una caja llena de sorpresas por descubrir, sobre todo durante el celo, en ese periodo pudo descubrir que su omega era más que exigente en la cama, era osado, tan atrevido y descarado como ningún otro, y el Alfa estaba más que encantado de suplir todas sus necesidades y complacerlo en todos los sentidos.

Ahora comprendía las palabras de una vez le dijo su padre:

"La mas grande fortuna que puede obtener un alfa es unirse a su omega, porque no importa cuan exitoso, adinerado y poderoso sea, nada se compara con la dicha de crear el anhelado lazo que conecta tu alma a la de la persona que amas"

Jungkook sonrió mientras sus dedos tocaron la marca que había dejado en su omega, y sin duda se sentía dichoso, el lazo entre el y Jimin era muy fuerte y podía sentir la felicidad de Jimin a través de el.

De esto hablaba su padre, de la satisfacción que se sentía al poder percibir lo feliz que haces a tu pareja.

Porqué sin importar cuantos multimillonarios negocios hubiera hecho Jungkook con éxito, ninguno de esos momentos se comparaban con fortuna de tener a Jimin entre sus brazos.

En ese instante Jimin se removió y dejo salir un suspiro antes de levantar su rostro en una sus labios se estaban abultados como si hiciera un pucherito y sus ojos caramelo aún adormilados lo miraban con mucha ternura y timidez.

-Buen día, dormilón - Lo saludó Jungkook acariciándole el cabello.

-Buen día, Jungkookie- Respondió Jimin con una sonrisa recostado su mejilla en el pecho de su Alfa de nuevo.

-¿Vas a seguir durmiendo? -Preguntó Jungkook.

-Um-hu - el omega hizo un sonido de afirmación.

-¿No quieres hacer otra cosa? -

Jimin levantó su rostro de nuevo con una mirada traviesa en sus ojos.

-¿Algo más además de hacer el amor? - Jungkook levantó una ceja, si, su omega parecía estar insaciable incluso ahora que el calor del celo se había aplacado.

-No - afirmó Jimin y arrugó la nariz para volver a dormir pero Jungkook volvió a hablar.

-¿Y si exploramos un poco la montaña? - Propuso.

Esa idea si captó la atención de Jimin - ¿Podemos hacer eso? - Preguntó emocionado.

-Por supuesto es nuestra luna de miel, podemos hacer lo que queramos -Le dijo Jungkook.

Y en menos de dos segundos el omega se había puesto de pie y estaba caminando hacia la puerta casi dando saltitos de emoción.

-¡Cariño espera! - Jungkook se puso debe pie rápidamente - Debemos usar rop...- Para cuando quiso terminar la frase el omega había abierto la puerta y un precioso lobo castaño estaba saliendo por ella.

Para Jimin la mejor manera de hacer una exploración era en su forma de lobo, sus sentidos eran más agudos, además se sentía libre corriendo en sus cuatro patas mientras disfrutaba de la naturaleza.

El pequeño lobo castaño lo miraba con diversión mientras esperaba que lo siguiera.

Jungkook negó con la cabeza antes de invocar su forma animal, un enorme y un poco aterrador lobo negro cayó sobre sus musculosas patas y camino hacia el lobo más pequeño.

El coqueto omega olisqueo al Alfa y se metió entre sus patas frotándose contra él, para el omega que acababa de salir de su celo estar en forma animal y en contacto con su Alfa era como estar en el paraíso.

El enorme lobo negro lamió la carita de su compañero impregnándolo más con su aroma si eso era posible.

Una vez ambos satisfechos de darse cariño, el omega movió su cola hacia el alfa invitándolo a liderar el camino.

Aunque el clima de Noruega era bastante frío sus pelajes los mantuvieron cálidos mientras jugueteaban entre los árboles.

Para el omega ya no era fácil jugar a las escondidas con el alfa, ya que sus aromas estaban tan mezclados que siempre lo atrapaba.

Así transcurrió toda su mañana jugando mientras recorrían los alrededores, dormitaron a la orilla del lago antes de tener una divertida carrera para llegar a casa, la cual ganó el omega que aunque era más pequeño tenía mayor experiencia en su forma animal y era increíblemente ágil.

-¿Cómo es que el alfa Jeon puede dejarse ganar de su omega? - Se burló Jimin una vez que estuvieron en su forma humana.

-Solo te dejé ganar-Afirmó Jungkook riendo.

-¡Eso no es cierto! - Bufó Jimin con puchero dirigiéndose a la escalera.

Jungkook caminó tras él y fácilmente lo levantó cargándolo en sus brazos - Yo perdí contra ti desde el primer momento en que te vi -Susurró dejándolo en el suelo de nuevo cuando estuvieron en la habitación.

Jimin no podía sentirse más feliz y confiado, su lazo le hacía saber que su Alfa no le mentía y lo hacía sentir eufórico, con una sonrisa en rodeó el cuello de Jungkook con sus brazos.

-Gracias Jungkook -

-¿Por qué me agradeces? - Interrogó el alfa.

-Por amarme, a pesar de ser quien soy - Jimin suspiró.

Jungkook pasó su mano por la mejilla de Jimin - Soy yo quien te agradece por no darte por vencido conmigo -Afirmó - Tu eres el mejor omega que la diosa Luna me pudo enviar-
El Alfa unió sus labios a los del omega en un dulce beso lleno de amor y ternura, sus labios se movieron con parsimonia acariciándose.

Cuando se separaron Jungkook le beso la nariz - El helicóptero está programado para venir está tarde por nosotros y visitar Bergen, es conocida como la ciudad más bonita de Noruega, te encantará-

-¡Entonces vamos a ducharnos! - Chilló Jimin.

-¡Con calma, aun tenemos tiempo bebé! - Dijo Jungkook riendo mientras lo seguía.

-¿Cuánto tiempo tenemos? - Preguntó Jimin una vez que estaban en el baño mirando el cuerpo del alfa.

-El suficiente - Dijo Jungkook sonriendo antes de abrir la llave del agua empezando a empapar sus cuerpos - Vamos a lavarnos-

Jimin asintió y tomo el shampoo de la repisa y puso un poco en sus manos y lo llevó al cabello del alfa sus dedos acariciaron suavemente el cuero cabelludo de Jungkook mientras se mordía el labio inferior.

Jungkook simplemente se dejó hacer al antojo de su omega.

Jimin tomó el jabón para lavar el vigoroso cuerpo de Jungkook sus manos resbaladizas se movieron se movieron sobre la piel del alfa haciéndolo estremecerse, y de alguna manera se sentía poderoso teniendo el control de la reacciones del cuerpo de su alfa.

Sus manos bajaron por el pecho de Jungkook tocando los pezones del alfa que siseó, luego lentamente descendieron por el abdomen bien trabajado del alfa hasta la pelvis justo debajo ya se erguía el duro miembro de Jungkook.

El omega miró los ojos de su alfa que tenían un tono violeta, amaba que el cambio de color en los ojos de Jungkook no solo fuera cuando estaba enojado, cuando Jungkook tenía los ojos violetas Jimin sabía que estaba intentando controlarse pero lo que el omega quería era hacerlo perder el control por completo.

Su mano envolvió la gruesa erección de su alfa apretándola un poco, el agua que caía por el cuerpo de Jungkook había quitado el jabón y entonces una maravillosa idea cruzó por su cabeza se puso de rodillas y con su lengua le dio una larga lamida a la extensión de Jungkook.

Los ojos del alfa parecían haber sido inyectados con sangre, el color rojo los invadió mientras miraba la sexy imagen de Jimin de rodillas con su miembro en la boca.

El omega tomó el glande entre sus labios chupándolo con diligencia haciendo sonidos obscenos, Jimin no tenía experiencia en esto pero quería mantener esa expresión llena de deseo en el rostro de su alfa, poco a poco ingreso más de la erección en su boca hasta que casi llegó a su garganta, logro soportar las arcadas hasta que se acostumbró.

Lentamente metía y sacaba el miembro del alfa de su boca, jugando con su lengua alrededor de este, Jimin también esta tan jodidamente excitado que podía sentir como su lubricante natural mojaba su interior.

Las respiraciones de Jungkook se hicieron más erráticas y sonoras quería correrse pero no así, su alfa interior quería poseer al omega, sin importa cuántas veces le hiciera el amor a Jimin, nunca tendría suficiente.

En un instante puso de pie a Jimin con el rostro hacia la pared, sus manos apretaron ese hermoso trasero para empujarse dentro de él haciendo que Jimin gritara de placer.

El vapor de la ducha y el aroma a sexo los envolvió haciendo el ambiente malditamente embriagante, Jimin gemía a todo pulmón la cabeza hacia atrás recostada en el hombro de Jungkook disfrutando de las embestidas de su alfa.

Jungkook envolvió una de sus manos en el miembro de Jimin bombeando al ritmo de sus estocadas.

El cuerpo de Jimin era deliciosamente sensual, erótico, perfecto, y disfrutaba cada centímetro de él, estaban completamente perdidos en su apasionado acto.

Las piernas de Jimin temblaban de forma y solo se sostenía debido al agarre de su alfa, su cuerpo entero vibraba de tanto placer que no podía más, se corrió manchando las manos de su alfa y la pared.

Las paredes anales de Jimin apresaron su miembro de una manera deliciosamente dolorosa haciendo que una corriente recorriera cada uno de los poros del cuerpo de Jungkook que de inmediato llegó a un salvaje orgasmo rugiendo de una forma que no sonaba muy humana.

Sus dientes un poco alargados se clavaron de nuevo en la piel de Jimin sobre la marca ya hecha, el placer que ese acto les provoco fue jodidamente abrumador.

El semen de Jungkook llenó por completo a Jimin, sus pechos subían y bajaban de forma irregular mientras intentaban recobrar el aliento.

Jungkook se retiró lentamente haciendo que Jimin se diera vuelta para besarlo, sus labios se unieron en un beso profundo y lleno de pasión.

Cuando por fin sus cerebros fueron liberados de la neblina de lujuria, se sonrieron mutuamente antes de rosar tiernamente sus narices, mientras estaban juntos el resto del mundo a su alrededor desaparecía.

Terminaron de bañarse el uno al otro mientras se robaban besos.

Salieron del baño prácticamente abrazados -Ahora creo que tenemos el tiempo justo para vestirnos antes de que lleguen a buscarnos- dijo Jungkook.

-Está bien, ¿Puedo elegir la ropa? - Preguntó Jimin.

-Claro, cariño- Estuvo de acuerdo Jungkook.

Jimin fue emocionado hacia su maletas y las abrió sacando unos suéteres de rayas y chaquetas de color verde exactamente iguales -Tu mamá me dijo que usar ropa de pareja en la luna de miel es de muy buena suerte, - dijo con una radiante sonrisa.

Jungkook sonrió amplió ¿Cómo podría negarle algo a su omega cuando sonreía de esa manera tan linda?

-Entonces vamos a vestirnos de pareja - Dijo Jungkook tomando su ropa.

Jimin casi salta de felicidad, después de todo su suegra había tenido razón, Jungkook debajo de esa coraza fría y poco empática era un alfa dulce y encantador, y la diosa Luna los había unido para ser muy felices juntos.

Hola ternuras mías de mí, ya casi se les acaba la luna de miel a nuestros tortolitos vamos a disfrutar del tiempo que les queda en Noruega si que sí.

¿Creen que cuando regresen ya tengan cachorro a bordo?
Nos leemos pronto.



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