Fui a mi cuarto por orden de Jimin quien me gritó y regañó, me dijo que me enfermería si seguía así, que nosotros no teníamos tiempo para eso. Sin decir algo corrí a mi cuarto, necesitaba cambiarme rápido, me ardía, el té estaba quemando y mi ropa es muy delgada.

— Espero que la princesa esté bien... — dije sacándome mi ropa

Me cambié y la otra la puse en un pequeño cesto, mañana todos iríamos a lavar así que ahí llevaría mi ropa.

— Este es más delgado — dije saliendo de mi cuarto

Caminé en dirección a la cocina, pero antes de llegar vi salir a Jimin, él me agarró del brazo con fuerza y me llevó a otro lado.

— Eres un desastre, la princesa está muy molesta por tu maldita culpa, has arruinado su vestido preferido — dijo molesto — eres un inútil — me empujó, haciéndome chocar con uno de los muros

— Lo lamento, es que mi pie chocó con algo —

— No me importa, esto es grave. Entiendo que seas torpe en algunas cosas por ser nuevo en esto, pero has dañado a la princesa — dijo bajando la voz

— Lo lamento mucho... — dije bajando mi mirada, no quería hacerle daño

— Eso no arregla nada, ahora ve a limpiar todo el pasadizo en frente del baño, déjalo reluciente y así te tome más de doce horas lo harás tú solo, así te duelan los dedos, ese es tu castigo. La misma princesa me llamó y ordenó algo peor, dijo que limpies el estiércol de los caballos, pero no te dejaré tal cosas, en vez de eso limpia el pasadizo, tú solo —

— Está bien, muchas gracias — dije abrazándolo

— Eres tan estúpido, debes de ver por donde caminas — dijo abrazándome también — ahora ve, si no vas a tardar demasiado — me empujó para irse

Corrí al pozo grande del castillo, saqué dos baldes que fueron muy complicados de llevar, con los dedos adoloridos llegué, mis dedos estaban morados pero no podía quejarme, debía de empezar.

— Limpiemos — dije remangando mis mangas para empezar

Primero barrí, luego agarré un viejo trapo y lo metí en el agua para luego exprimirlo y empezar a limpiar. Me puse de rodillas, limpiando todo con fuerza, debía de estar impecable y me faltaba mucho, los pasillos eran inmenso, solo con barrer me demoré mucho tiempo, ya hasta estaba oscureciendo.

— Taehyung... — escuché la voz de mi señor que rápidamente me hizo alzar la mirada, viéndolo con una bata negra

— Mi señor — dije poniéndome de pie para reverenciar

— ¿Este es tu castigo? — preguntó viéndome fijamente

— Sí, debo de limpiar todo el pasadizo — dije viendo como asintió

— Bien, déjalo todo, acompáñame — dijo abriendo la puerta del baño real

— No puedo dejarlo, debo de dejarlo impecable — dije suspirando

— Taehyung, yo soy el rey y he dicho que me acompañes, es una orden — dijo serio

— Lo que usted desee — dije dejando mi trapo en el balde, se veía molesto

Entré con cuidado, viendo como había un enorme baño termal, el suelo era de madera y era muy resbaloso.

— Báñame — dijo dejando caer su bata, dejándome ver su espalda desnuda — ahí está lo que usarás para lavar mi cuerpo — dijo señalando una canasta pequeña

— Sí-í — dije nervioso

Me acerqué a la canasta y agarré el jabón, agarré un pequeño balde, me acerqué y lo mojé, para luego pasar un suave trozo de tela por su cuerpo.

— ¿Te hiciste daño? — preguntó de la nada, haciéndome saltar del susto — y responde con la verdad —

— Sí... pero no mucho — dije sonriendo al sentir su mano en mi mejilla

— No me gusta que toquen lo mío, mucho menos que lo dañen — dijo acercándose

Pasé mis manos por su cuerpo firme, sintiéndome nervioso de su mirada, cuando llegué a su virilidad me enrojecí mucho, con nervios pasé mi mano, lo había visto antes, pero siempre me ponía nervioso y más si me miraba así, ahora lo estoy tocando mientras mi señor me mira, es vergonzoso. Lo limpié suavemente, sintiendo lo duro y caliente que estaba, sentía, mucho calor, era la vergüenza.

— Lo voy a enjuagar — dije cuando todo su cuerpo estaba cubierto con jabón

Me alejé de él y fui por un balde de agua, lo llevé ante él y con una pequeña cazuela empecé a verter agua sobre su cuerpo, suavemente todo el agua empezó a dejar limpio su cuerpo.

— Listo — dije alejándome un poco de él y reverenciando

— Te has mojado — dijo pasando su mano por mi cintura

— Mi señ-... —

— Dame esto — dijo quitándome la cazuela que aún tenía un poco de agua y tirándomelo encima

— Pero... —

— Échate —

Lo hice, me eché en el piso mojado, sintiendo como tiraba suavemente sobre mi el agua.

— Deberías de lavarte tú también — dijo desatando mi ropa

— Mi señor... — gemí sintiendo sus manos sobre mi cuerpo

— Siente como pasan mis manos sobre tu cuerpo, como tiemblas ante el toque de tu rey — dijo pasando el jabón sobre mí

— N-nhg — gemí sintiendo como sus dedos apretaron mis pezones

— Debemos lavarte — dijo echando agua sobre mi pecho — debemos dejarte limpio —

— Mi-mi señor... — dije estirando mis brazos — por favor sosténgame con fuerza —

— Eso haré, lo haré con mucha fuerza —

— A-ahh — sentí como empezó a hundirse

— Humm —

— Mi señor... — gemí sintiendo como me alzaba

— Sí, esto es realmente bueno — dijo sonriendo — te voy ha hacer gritar como loco —

○●○●⊙●○●○

— Maldito idiota, me las va a pagar — dije mirándome al espejo

— Princesa Nayeon, controle su emociones, es una princesa — regañó Soyeon

— Princesa, ya vine — dijo Jimin entrando

— ¿Ya le dijiste lo que tenía que hacer? —

— Sí, mi princesa —

— Bien, quiero que lo vigiles muy de cerca, si se cruza con mi hermano debes de decirme, si nombra a mi hermano debes de decirme, si hace cualquier cosa y mi hermano tiene que ver debes de decirme —

— Lo entiendo princesa —

— Bien, ve a vigilarlo — dije mirando como asintió — y bota el vestido, está arruinado por completo — lo tiré al piso

— Como ordene —

○●○●⊙●○●○

Esto era estresante, la princesa me mandaba siempre a vigilarlo, no podía hacerlo siempre, tenía muchas cosas que hacer en el castillo, además Taehyung no hace mucho, siempre limpia, no entiendo por qué tanto odio.

— Ojalá termine rápido — dije dirigiéndome al pasadizo que le ordené que limpie

Taehyung era el sirviente más joven que había visto, creo que demasiado joven, además de estar delgado y pálido, si seguía así moriría pronto. Me daba pena, sinceramente lo veo como un hermano menor, yo tengo uno afuera, hace mucho no lo veo, Taehyung me recuerda a él.

— Taeh-... ¿Dónde está? — me pregunté al no verlo

Era raro, el balde con agua seguía en medio del camino, además había limpiado una parte, seguía mojado.

— Seguro fue al baño — dije caminando por los alrededores, deteniéndome en la puerta del baño real — ¿Habrá tenido el atrevimiento de entrar? — pregunté con miedo

Esto era malo, si Taehyung había osado bañarse en este lugar la princesa no tendría piedad, si la princesa lo veía salir de ahí o alguien que no sea yo le decía sería un gran problema para él. Rápidamente me acerqué y abrí la puerta lentamente.

— ¡Ahg! —

Quedé pasmado, viendo a Taehyung y al rey desnudos en el suelo, Taehyung tenía las piernas abiertas mientras que el rey lo alzaba de la pelvis y le daba estocadas. Se me secó la garganta, era impresionante ver como el pene del rey entraba y salía de él con fuerza, Taehyung tenía los ojos cerrados pero su rostro estaba lleno de placer mientras gemía.

— ¡Ahg!, ¡Ahg! —

— Eres mío — dijo el rey agarrándolo con fuerza del cuello para acercar sus bocas

— Mi-mi señor — gimió Taehyung temblando con fuerza

— Eres mío —

Mis ojos no se despegaban de ellos, cada detalle de lo que hacían. El rey tenía un cuerpo bien formado, se veía muy saludable, era hermoso, su rostro, todo, era fuerte y rudo, incluso en el sexo por lo que veo, su grandeza era increíble y el como se movía me dejaba sediento.

— ¡UHG! — gimió Taehyung agarrándose del piso cuando el rey empezó a moverse mucho más rápido, Taehyung se corrió y cuatro estocadas duras dió el rey para parar

— Mío — dijo echando su cabello mojado para atrás

De inmediato retrocedí, estaba sorprendido, mi cara quemaba, salí lo más rápido que pude de ahí, sintiendo como mis piernas temblaban.

Taehyung no era el niño inocente que pensaba, no, era todo lo contrario, era la puta del rey.

— Esto no se va a quedar así... — dije sintiendo aún mi cara caliente, pero ahora algo más estaba sintiendo, rencor, ¿Cómo alguien como él puede estar con el rey?, ¿Cómo alguien tan simple como él puede y yo no? — Taehyung, estás acabado — dije dirigiéndome a la alcoba de la princesa, tocando la puerta suavemente

— Adelante —

— Princesa, le traigo noticias — dije viendo como ella leía un libro, libro que dejó de leer al terminar de escucharme

— Habla —

— Es sobre ese omega —

Continuará...

Nuevo capítulo!!
El domingo nos vemos mis lindos lectores
Los amo 💋