♤ 10 ♤
— ¡Ahg! —
Estaba volviéndome loco, no podía creer lo que estaba sintiendo, mi pene era completamente deborado por su interior, había probado a miles de omegas, mujeres y hombres, había probado tantos y ninguno se compara a este, es tan caliente y mojado, y eso que aún no ha tenido su celo, no puedo ni pensar en como sería cuando esté en celo, no podía esperar a eso.
— ¡Ahg!, ¡Nhg! —
— ¿Te gusta? — pregunté poniendo sus manos hacía arriba mientras no dejaba de moverme — responde —
— No-no sé — lloriqueó
— ¿Cómo se siente? —
— Se-se siente... ¡Ahg! —
— Se siente increíble, lo sé. Solo tu rey puede hacerte sentir así, solo tu rey puede meterte el pene y hacerte gemir de esta manera —
— Mi-mi señor —
Todo, lo quería absolutamente todo de él, no quería que nadie más pruebe su interior, no quería que nadie más toque esto. Nadie debía, es solo mío, yo lo he hecho un completo omega, yo le estoy enseñando el placer, uno que solo será mostrado ante mí.
— ¡A-ahg! —
— Mierda — gruñí sintiendo que me correría, era tan bueno
— Mi-mi señor, señor... —
— Debes de sentirte afortunado, tu rey te está sacudiento todo adentro, está tocando tu interior de la manera más dulce —
— Mi-mi señor —
— Solo yo — dije cerrando mis ojos, saliendo antes de correrme — mírate — dije viendo su agujero contraerse — eres tan... mío — dije acercándome a su rostro para besarlo — este lugar es mío — dije tocando su ano — todo tu cuerpo me pertenece ahora, y cuando yo lo pida tú me lo darás, ¿Está claro? — pregunté viendo sus ojos brillar por las lágrimas
— Mi señor... — dijo abrazándome — me ha hecho sentir tan bien —
— Así es, solo tu rey puede hacer eso — dije abrazándolo
— Mi-mi interior sigue quemando — dijo restregándose contra mí
— Te lo daré, porque soy tu rey, te daré tan duro — dije hundiéndome de nuevo
— ¡Ahg!, sí-í, mi-mi señor — este afrodisíaco duraría solo dos horas, debería de aprovecharlos bien
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(Una semana después)
— Abre la boca — dijo mi señor poniendo su boca contra la mía
Estábamos en el establo, últimamente veníamos mucho aquí para esto y otras cosas. Desde ese día algo cambió en mí, me sentía raro, con ganas de más.
— Has mejorado — dijo acariciando mi cabeza mientras se alejaba de mí — pero que lindo, tus mejillas están sonrojadas—
— Mi señor... — dije alzando mi mirada
— ¿Pasa algo? —
— Necesito tocarme, me duele aquí — dije tocando mi pene, viendo como sonrío
— Agárrate de la pared —
Lo hice y de inmediato sentí como alzó mi vestido y empezó a tocar mi agujero. Me retorcí, sintiendo los dedos de mi señor tocando mi interior.
— ¡Ahg! —
— Estás húmedo, veo que estás usando bien los aceites que te dí, además tu sabor está que se vuelve más dulce... tu celo pronto se presentará — se chupó los dedos
— Sí-í, mi señor — gemí, agarrándome fuerte de la gruesa madera
— Estás tan húmedo... mierda quiero meterlo —
— M-más, más — gemí sintiendo como metió sus dedos fuerza — ¡Uhg! — me corrí sintiendo como se movía más rápido — mi-mi señor —
— Me dan ganas de comerte —
— Mi-mi... ¡Ahg! —
— Voltéate — dijo saliendo de mí, de inmediato me puse de rodillas, recibiendo todo su semen en mi boca — buen chico — dijo acariciando mi cabeza
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— ¿A dónde vas Seokjin? —
— Le dejaré una carta a mi hermano, necesito comunicarme con él — dije agarrando mi bolsa
— Yo lo llevo, iré ha hablar con Chowoon sobre las cosechas de este mes y me pasaré por ahí —
— No, lo quiero llevar yo — dije acercándome a la puerta
— He dicho que lo llevaré yo — dijo deteniéndome — dame la carta —
— Nam... —
— Harás un escándalo, te conozco, querrás entregarle personalmente la carta a Taehyung y cuando lo veas llorarás para traerlo. Entiende que su vida es el castillo ahora, debe de estar muy ocupado —
— Pero... —
— Yo se lo llevaré, confía en tu esposo — dijo quitándome la carta de las manos
— Si lo ves dile que se cuide —
— Claro mi amor, no te preocupes — dijo acercándose para abrazarme — le diré lo mucho que lo extrañas y también le diré que te mande una carta para que te cuente sus aventuras — dijo sonriendo, me hizo sentir bien
— Gracias, mi amor —
○●○●⊙●○●○
Estaba de nuevo en la cocina, listo para ayudar con el almuerzo, me puse mi mandil y fui por un cuchillo, todos corrían de un lugar a otro, me mareaba un poco pero me estaba acostumbrando.
— Niño, tú ve a prepárate para afuera — dijo Jimin agarrándome del brazo, llevándome a la salida
— ¿Porqué? —
— Han dado la orden de que te encargues de servir la comida con los demás, anda y cámbiate eso — dijo sin expresión en su rostro — lo que a mí me tomó años tú en solo días lo logras... deja de mirarme y ve a cambiarte —
— Sí-í —
Miré mi ropa, estaba algo sucia, fui rápidamente a mi pequeño cuarto, me puse algo más limpio, debía de estar presentable para la princesa y mi rey.
— Apúrate — dijo desde afuera
— Ya estoy —
— Eres muy delgado — dijo agarrándome del brazo para llevarme de nuevo a la cocina — lleva el té, hazlo bien, no seas un desastre — dijo dándome una bandeja de plata con la tetera de té y las tazas
Con cuidado salí, pesaba un poco pero no tanto para que los dedos me duelan. Llegué viendo a tres personas en la mesa, como siempre, mi señor, la princesa y el amigo del rey, escuché que era el general. Jimin me dijo que el amigo era Jung Hoseok, me dijo que siempre había sido unido al rey y que se encargaba de los soldados del castillo, además de ser su mano derecha en muchas batallas, pero no sé si es el general del castillo.
— El clima pronto será más cálido, me gustaría hacer un cambio, como con el personal — dijo la princesa mirándome — hay muchos incompetentes en el castillo, deberíamos hacer algo —
En silencio me acerqué mi señor y le serví el té, él me miró y sonrío, mi corazón latió con fuerza, sentí como mis mejillas se sonrojaron. Me sentía honrado, mi señor era tan amable conmigo.
— Apúrate niño, todos queremos tomar té — escuché la voz de la princesa que me sobresaltó
— Sí-í... — dije yendo a servirle el té al amigo que estaba en medio de ellos, en medio de la gran mesa
— Es muy delgado y pequeño el nuevo sirviente, parece una muñeca — dijo el señor Jung
— Es un niño, es obvio que debe de ser así — dijo la princesa riéndose — es solo un niño del pueblo, un plebeyo —
Me dirigí a servirle su té a la princesa, estaba nervioso, sentía su mirada en mí, yo solo miraba la tetera, intentando hacer que mis manos dejen de sudar frío.
— Yo creo que está bien, no le veo nada de malo — dijo mi señor
Alcé un poco mi vista viendo como la princesa hacía puños en su vestido, de inmediato me alejé para irme pero sentí como algo abajo mío me hizo tropezar y caer encima de la princesa, haciendo que todo el té se cayera encima suyo, aunque también yo me mojé, pero no como ella.
— ¡AHH! — gritó la princesa empujándome — ¡QUE ESTÚPIDO ERES! —
— Lo-lo lamento — dije intentando secar su vestido con un trapo
— ¡SUÉLTAME!, ¡ERES UN INÚTIL! — gritó mirándome mal, de inmediato en toda la sala se escuchó la risa de mi señor
— Jungkook no es gracioso — dijo el señor Jung acercándose a la princesa
— Lo es, mira su cara — dijo sin dejar de reírse
— Lárgate... — dijo la princesa sin dejar de mirarme — ¡LÁRGATE ANTES DE QUE TE MATE! — gritó alzando su mano para golpearme
— Baja tu mano Nayeon — dijo mi señor
— ¡MIRA MI VESTIDO!, ¡ME TIRÓ EL TÉ CALIENTE! —
— Lo veo, pero no me importa —
— Jungkook... —
— Taehyung también está empapado, a él también le cayó el agua caliente —
— Mi vestido vale más, yo valgo más, ¡NO NOS COMPARES!, ¡YO VALGO MUCHO MÁS QUE ESTE ESTÚPIDO! —
— Taehyung vete — dijo mi señor poniéndose a mi lado
— Lo lamento mucho... — dije en voz baja para salir de ahí
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— No puedo creerlo — dijo Nayeon con los ojos llorosos — ¡Me arde!, ¡Ya déjame idiota! — empujó a Hoseok quien la intentaba ayudar
— No exageres, estás ya grandecita para eso — vi a Soyeon llegar
— ¡ME ESTÁS PONIENDO EN RIDÍCULO! —
— Tú sola haces eso, solo mira a tu alrededor —
— Voy a sacar a ese niño, no me gusta tenerlo aquí, no me gusta, ¡Lo sacaré y mandaré muy lejos de aquí! — bajó su voz cuando Soyeon la agarró del brazo
— Bien, inténtalo — dije sonriendo, esto era divertido
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— Hola, Chowoon — dije entrando a su casa
— Llegaste al fin, te estábamos esperando — sonrío al verme
— Bien, empecemos con el juego — dije sentándome — tengo cuarenta monedas — dije tirando la bolsa de monedas a la mesa
— Empecemos — dijo agarrando la bolsa — ¿Apostarás todas éstas monedas en la primera partida? —
— Esto no es nada, ya te lo dije, el hermano de mi esposo está en el castillo — dije sonriendo
— ¿Y eso qué?, hay muchos jóvenes omegas en el castillo, no es la gran cosa al fin y al cabo — dijo sacando las cartas
— Te equivocas, Taehyung no es como los otros jóvenes, él a cautivado al rey y será la siguiente reina — dije sonriendo en grande — seremos ricos muy pronto — dije sacando la carta de Jin de mi ropa — hacer lo necesario — dije tirándolo al fuego — incluso si eso significa hacer grandes sacrificios, haré lo que sea para salir de esta pobreza —
Hola! ^^
Nos vemos el próximo domingo... o antes 💋
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