- Okay, Diego, dígame cuál es tu plan para mejorar la ciudad - dijo Mateo con un cuaderno en sus manos, listo para escribir las ideas del rubio

-¿Eh, un plan?, ¿Ahora? Es muy pronto

- Yo sé pero es mejor tener un plan antes de todo

Diego suspiró y se sentó en el sofá de su habitación. Miró a Mateo y suspiró aún más

-¿Podemos hablar de otra cosa porfavor?

-Pues...sí. ¿Todo bien? - Mateo se sentó a su lado y lo miró preocupado

- Si pero quero hacer algo. Quero divertirme un poco- dije Diego sonriendo - ¿Quieres venir conmigo a una fiesta que unos de mis amigos organiza?

-No sé Diego. No me parece una buena idea.La cara de Diego se puso triste y Mateo se sentío culpable - Peroooo podemos hacer una fiesta aquí

-¿Invitar gente aquí? ¿En mí casa?

-No. Podemos hacer una pequeña fiesta aquí con los Aristemo y Carlota

Ha pasado mucho tiempo desde que todos pasaron tiempo juntos y Diego extraña esos tiempos

-Ok sí lo hacemos - dije Diego sonriendo. Quería abrazar a Mateo porque estaba muy agradecido de tener un amigo como él. Alguien que no lo hace sentir solo

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-¿Una fiesta? ¿Aquí?. Estáis locos, lo siento

- Cálmate Aristóteles. Es una pequeña fiesta con solo nosotros y Carlota y Thiago si ella lo qiuere - dije Diego y puso su mano sobre el hombro de Aristóteles

Aristóteles suspiró y miró al rubio -Esta bien...- dijo el rizado y Diego sonreí