Capítulo 2

Nina POV.

Me acerqué a su oído y pude notar como se estremecía cada vez que respiraba.-Escapemos del jardín y vayamos a comer algo en la tienda.-

-Vale.- Se levantó y se sacudió la ropa.-No pense que eras así.- Me sonrió.

-¿Es qué no piensas?.-

-¿¡Qué haz--.-

Le tape la boca.- Shhh.- Lo arrastre hacia al lado de la caja de arena.-Listo.- Le destape la boca.

-Vale... ¿Y cómo planeas que escapemos?.- Se cruzo de brazos y mirandome dudoso.

-Shh, secretos de Nina.- Le dije, empuje un tablón de las vallas y salimos corriendo para que no nos vieran.

-Wow... Oye Nina... ¿Dónde queda la tienda?.-

-Ou... Creí que tú lo sabias...-

-Eh... ¿Y si preguntamos?.-

-No, si preguntamos nos mandaran a el jardín de nuevo.-

-Eso es cierto...-

Nos escondimos dentro de una caja para que pudiéramos pensar estando seguros que no nos verían.

-Okey Cassy, ¿Qué se te ocurre?.-

-Primero, prefiero que me digas Castiel, y segundo... Pues se me ocurre que tal vez salgamos y lo busquemos por nosotros mismos.-

-No, nos vamos a perder.- Lo abrace.-¿Ahora qué vamos a hacer?.- Empecé a temblar con miedo al pensar que las tías llamarían a nuestros padres para decirles lo que hicimos.

-Nina, no temas, todo estará bien... Por ahora.- Correspondió.

-Okey.- Me acurruque en él mientras pensaba.

-¿Qué vamos a hacer?.- Suspiro pesadamente.

-¡Huir de aquí!.- Me separe de él rápidamente emocionada.

-¿¡Eh!?, ¿¡A dónde!?.-

-¡A donde el viento y los sentimientos nos lleven!.-

-Nina, ¿De dónde sacas palabras tan... Tan... Tan tan?.-

-De la televisión.-

-Ah, con razón... Deberías dejar de ver esa cosa, terminarás más estúpida.-

-¡Tú lo harás primero, tú dejarás de ver la televisión!.-

-No voy a seguir tus ordenes.-

-Debes hacerlo.- Le sonreí.

-No, nada me obliga.-

-Sí, yo.- Le mostré la lengua burlandome de él.

-Ya, en serio... ¿Qué haremos?, no quiero que tus padres te vuelvan a castigar.-

Le aprete las mejillas.-Deja de preocuparte por mí y preocupate por ti~.-

-R-Realmente no me estoy preocupando demasiado por ti... Sólo decía que... Que... Oye, ¿Y si mejor volvemos al jardín y así no nos castigan?.-

Suspire.-Bueno, lo que usted ordene, rey.- Intente hacer una reverencia hasta que me caí para atrás al haber chocado con la parte superior de la caja.-Patata.- Me sobe mi retaguardia.

-¿E-Estás bi-bien?.- Intento aguantarse la risa hasta que no pudo más y estalló a carcajadas.

-¡C-Castiel!.- Me queje.-¡No es gracioso!.- Hice un puchero.

-Vale, vale.- Empezó a reírse cada vez más bajo.-¿Vamos?.-

-Claro.-

CONTINUARA...

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top