•°🖤Edgar🖤°•

Bea aceptó en ir a comer a casa de Surge conmigo, así que el día de almuerzo con él fui primero por ella en el carro de mi papá, claro que en primer lugar tuve que pedirle permiso a sus padres.

Se sentía como tener que saludar a Satanás solo que en vez de Satanás es la mamá de Bea, es casi lo mismo.
Me sorprende que a pesar de que Bea sea una chica súper dulce y amable, su mamá es bastante estricta con ella, mi papá hasta intentó darle la mayor información posible sobre a dónde íbamos y a qué horas estaríamos regresando aproximadamente para que no se pusiera algo histérica. El papá de Bea es todo lo contrario, bastante tranquilo y educado.

---De acuerdo, pero quiero a mi hija temprano, le dejaré dinero por si requieren pagar gasolina para el camino--- al menos la mamá tiene generosidad, aunque tenga voz arrogante. Tienen apariencia de familia europea de pelinaranjas y pelirrojos viviendo modestamente en alguna zona de Reino Unido tomando té, o bueno, eso son, pero viviendo aquí en California.

Bea venía con un vestido de flores amarillas bastante lindo y un poco largo, se veía preciosa, pero no quería parecer un bobo frente a su mamá.

---Cuidaré de su hija, sue- señora!--- sentí la cara arder, quería que me tragara la tierra, ojalá no haya pensado algo malo!
---Gracias, Edgar--- sonrió levemente, creo que le caí bien.

Mi papá y ella hablaron otro rato, al menos él se encarga de que no quede en ridículo.
Llevé a Bea al auto y Colette nos hizo carita de "uy" al vernos.

---Mira, traigo a Cony!--- saco al conejo bebé de su bolsa, ay, Dios.
---Colette, iremos a comer, no a visitar a Bugs Bunny--- dije en tono molesto pero Bea soltó una risita.
---¡Es muy lindo! Puedo acariciarlo?--- y Colette se lo pasó, yo estaba en medio de ellas así que se lo pasé.

---Amo a los conejos, lástima que mi mamá no disfruta mucho de que yo tenga animales en la casa---
---¿Y tus abejas?--- le pregunté.
---Las debo de dejar ahora en casa de la profesora Rosa, mi mamá se alteró solo porque una se salió y se le acercó sin hacerle nada---
---Ugh, qué mal---

---¡Yo quiero agarrar el gato naranja de Surge!--- exclamó Colette y pensándolo bien, qué mala idea fue traer al conejo.
---Eh...¿Surge tiene gato? ¿Es domesticado?--- pregunta Bea algo asustada.
---Sí, eso creo--- dijo Colette.
---Los gatos son depredadores de los conejos--- mierda.

A lo que fuimos directo a la casa del mencionado, estábamos pensando en que ojalá no pasará lo peor apenas llegáramos, porque ni loco mi papá da doble vuelta para regresar al conejo y Colette seguramente lloraría si lo dejamos en el auto.

Y justo cuando tocamos el timbre de la puerta, la abre Surge.
Sip, siempre que lo tengo frente a mí me siento un hotel con el valor de 1 dólar y él de un millón.

---Buenas tardes--- nos dijo a todos, sinceramente Surge es más ingenuo que nosotros a pesar de que él se enfrenta a los peligros que a veces la ciudad deja ante a la gente. Creo que estoy criticando mucho.

---¡HOLA SURGE, MIRA A CONY!--- Colette se lo mostró en la cara, cosas que le hizo sobresaltarse un poco por ese movimiento tan rápido.
---Oh, am... ¿Hola?--- lo tomó y el animal solo lo miraba fijamente y le empezó a lamer su mano.

A la hora de comer, charlabamos con Surge y mis padres con sus padres.
Él nos lleva solo unos dos o tres años más o menos, no recuerdo, tiene apenas 17 años y ya carga con cosas de un héroe Avenger.

Él nos cuenta de algunas cosas que ha hecho, hasta lo invitaron para ser modelo juvenil en una revista, Dios santo.

De todas formas tiene un físico atractivo... Digo, varios de mis compañeros son así, claro. 1.90 metros, ojos color jade, rubio, cara bonita, cómo no va a ser querido.

Bea lo admira mucho, se nota que se llevan bastante bien. Le tomo de la mano a Bea debajo de la mesa con un poco de fuerza sin lastimarla, siento un extraño dolor de pecho pero sigo escuchando la conversación. Ella solo me mira sonriendo mientras yo mastico la comida y sonrió sin mostrar los dientes, solo tenía los cachetes llenos.

Hasta que es mi turno de hablar.

---¿Y cómo te va con la guitarra eléctrica, Edgar?--- me preguntó el mayor de todos y dirigí la mirada torpemente mientras masticaba la carne asada del plato.
---Em...--- terminé de masticar ---Bien, ya no batallo mucho con los acordes---

---¿Te has aprendido alguna canción?--- y asentí, así que le seguí la charla.

En eso sentí algo rosarme por la pierna, era el gato de Surge, anaranjado y un poco esponjoso, solo me maulló y ronroneó.
---Oh, Ginger, ahí estás--- este se asomó a tomarlo y Ginger le puso la pata en su cara.

---Creí que lo llamaron Main Gadget--- dijo Colette.
---Claro que no lo iba a llamar así, 8-bit y sus sueños que tiene donde me llaman así--- y bajó al gato de la mesa luego de que este le tomara un pedazo de carne de su plato de forma envidiosa ---No tengan gatos naranjas, se los pido--- dijo en broma, o quizá no.

Al terminar de comer Surge nos atendió bastante bien y dijo que no era necesario limpiar los trastes.
Luego pasamos al patio donde jugamos un poco entre Colette, Surge y yo.

Nos gusta el basketball, lástima que esta vez no traje mi bufanda, habría sido divertido hacer algo de trampita para jugar más alocadamente.

---¿Bea, no quieres jugar?--- preguntó Colette.
---No gracias, no soy mucho de deportes--- le respondió mientras leía algo.
Y es que sí, Bea no disfruta de eso, yo más o menos, solo cuando me invitan pero que nunca sea en clase de deportes donde apesto y soy la burla para mis imbéciles compañeros.

Luego de como 50 mil intentos fallidos de intentar quitarle el balón a Surge finalmente lo hice aunque, lo hice tropezar a propósito, cosa que le hizo rasparse la pierna... Sí, fue estúpido de mi parte, pensé que solo sería una raspadita pero empezó a sangrar.

---¡Perdón, Surge!--- me acerqué a ayudarle a ir a una silla.
---Está bien, no es tan grave... creo--- se miró y ambos quedamos petrificados.

---Ay, ¿Necesitas que vaya por algo Surge?--- preguntó Bea acercandose.
---em, ¡No! ¡No! Yo voy por algodón y...--- antes de ponerse de pie lo detuvimos, negándole ir a buscar algo ---no es para tanto, he tenido heridas peores--- parece broma pero, sí.

Aún así no quisimos ser groseros y más me sentía culpable por eso, así que le ayudé, o bueno, más Bea lo hizo.

La verdad me sentía raro cada que se notaba muy cerca, pero trataba de ignorar ese sentimiento.

Él le sonrió dándole las gracias por su nobleza y ella le devolvió la linda sonrisa.

Al final del día apenas había llegado su hermana de cariño a la casa, Max, no estuvo disponible hasta apenas que nos íbamos a ir.

---Gracias por ayudarle a curarse Bea, y no te preocupes, Edgar, accidentes pasan--- me dio palmadas en los hombros, y luego nos regaló unos dulces del restaurante de el Primo "el Gallo Giro", eran dulces mexicanos, bastante buenos.

Cuando íbamos regresando a mi casa no podía evitar seguir sintiéndome raro porque Bea se notará tan feliz hablando de Surge, ¿O era yo el tonto inseguro? Sinceramente se sentía extrañamente doloroso de oír.

Y asi durante los días como novios en clases, era tortuoso verla cerca de él, y yo solo me lo guardaba.

Uno de esos días llegó un conocido de hace tiempo, Lou, hijo del señor. P, dueño del hotel Snowtel, siendo alguien de dinero, iba a ser un punto blanco para los agresores de la escuela y aparte por no ser visto "lo suficientemente masculino" no sé por qué, Lou no actúa afeminado, cosa que no estoy en contra si aún así lo fuese, pero es que estos imbéciles les enoja todo lo que no sea "tradicionalmente correcto"...

Y mala suerte para Lou ese día de clases, yo estaba caminando por un pasillo al lado de Colette cuando escuché a uno de los bullies imbéciles molestarlo, inmediatamente fui a su rescate ¿Por qué? Ese imbécil luego anda mintiendo a la perfección ante los profesores y director.

Pero cuando lo iba a salvar, llegó Surge a prenderle leña al fuego, y lo peor es que una de las chicas de la escuela que apoya al bully aportó mentiras cuando nos acusaron de agredirlo.

Pero gracias a 8-bit, primo de este de Surge, quien usa unas gafas que filman cosas pudimos salir de ese hueco.

Notaba a Surge muy pegado a Lou por alguna razón, quizá solo porque apenas estaba volviendo a conocer el lugar, no sé.

Pero con que no lo viera pegado a Bea todo bien.
Volviendo a clases le conté lo ocurrido.

---¿Y te encuentras bien? ¿No te lastimó o algo?---
---No, estoy bien, gracias--- le di un beso en la frente.
---Ojalá a Alex le llegue el karma--- Alex era mi agresor principal, chico blanco de cabello ondulado castaño y cara de mamón, pero de ojos bonitos así que varias le gusta solo por ser guapo y de personalidad extrovertida y agresiva.

Además justo ese día mi papá nos avisó que no iba a estar ese fin de semana y se iba a ir con Piper por unos asuntos de no sé qué, ya ni presté tanta atención a su viaje, pero nos íbamos a quedar en casa de Surge a dormir.

Ya traíamos algo de ropa en nuestras mochilas y cosas necesarias, por lo que no debíamos regresarnos. Colette como siempre, y no sé cómo escondió a su conejo durante todo el día en clases.

Ese día notaba un poco más serio de lo normal a Surge, aunque es común que él se note cansado por sus misiones y encima tomar clases y encima lidiar con tanto imbécil afuera en la ciudad. Pero era divertido que fuese nuestro niñero un fin de semana.

También estaba su primo 8-bit para quedarse a dormir, así que iba a ser más divertida la noche.

La verdad me pusieron a hacer retos muy estúpidos, todo por culpa de Colette.
Pero luego llegaron las preguntas incómodas y ahí una duda sobre Surge que siempre me surgió, acaso le gusta alguien?

Se me vino a la mente de forma estúpida la cara de Bea, pero nah, eso era imposible, él no puede gustarle, o eso espero...

---¿Te gusta Penny?--- preguntó Colette y él lo negó rotundamente.
---¿Pam?--- qué mierda con las respuestas de mi hermana.
---¿!JESSIE!?--- no jodas, Colette.

Hasta que se me vino alguien a la mente pero es que no habíamos pasado con los hombres que conocemos, porque no sé de la puta orientación sexual de él.

Aunque bueno, afortunadamente surgió la duda, le gusta Lou.
Esto me alivió un poco, y ya sabía que era por algo.

Me sorprendió un poco pero era una respuesta obvia.
Ya no me daba tanto sentimiento feito verlo cerca de Bea, pero me mantenía más callado de lo usual.

Y a veces me sentía raro verla charlar con chicos o alguno halagandola. Pero no quería que me consumiera eso.

Y sobre mis bullies, desde entonces ya no me estaban molestando tanto como otros días, incluso ocurrió algo raro unas semanas después, ¿Me invitaron a fiesta de uno de ellos? ¿Qué rayos?

Le hablé a Bea de esto en llamada.
---Esto parece una broma--- dijo ella.
---Lo sé, pero no lo es... Aún así lo pienso pero me da mucha curiosidad ir...--- le dije.
---Pero si te han molestado por años---
---¿Quizá una segunda chance?...--- pregunté inseguro.
---Supongo, pero deberías tener cuidado, es como si el lobo te invitará a meterse a su boca---
---Justo eso, no sé quiénes más irán, pero algunos compañeros de la clase dijeron poder asistir---
---Pues, si quieres, ve, Eddie, de todas formas puede que quieran hacer las pases contigo---

---Eso espero---
---Bueno, tengo que irme a dormir, mañana me avisas si vas o no---
---Claro, Bea---
---Descansa, te quiero---
---También te quiero, adiós--- y colgó.

Me daba un poco de nervios esto pero quizá sería un nuevo comienzo luego de tanto odio, por alguna razón, pero quizá esto funcione.