Capítulo 4 Fuerte

Bastante trabajo me ha costado cometer mis pecados como para malbaratarlos en arrepentimientos vanos
Joaquín Sabina

Llegué a casa con el corazón en la boca, no lograba introducir la llave, las manos aún me temblaban y sentía que alguien me perseguía..

Veía sombras por todos lados, ojalá pudiera eliminar mis demonios con un jaque mate...tal vez lo haga..

Solo tal vez..

- ¿Cariño..estás ahí?- preguntó mi madre desde el sofá con mi hermano cargado en brazos

- Si ma, acabo de llegar- dejé el móvil encima de la encimera y me preparé un bocadillo, que os puedo decir, tenía hambre..

-Cuentamelo todo- pronunció mi mamá y le dió unas palmaditas al sofá para que me sentara

- Nada del otro mundo..solo una bebida y una buena charla- alcancé a decir con la boca llena

Solo tuve un ataque de locura

Es en serio?

Siempre es en serio

Me acomodé y me quedé hipnotizada viendo la pantalla del televisor, tanto que mi mirada se volvió bizca y tuve que mirar hacia otro lado..

- Recuerda que mañana tienes escuela- me recordó y se fue a dormir..yo...tomé la sabía decisión de hacer lo mismo

Desperté y como siempre..la monotonía comenzaba, hasta mis sueños eran más entretenidos..

Andrea, escuela, almuerzo, otra vez...

Mientras caminaba habían unos chicos que me miraban de manera extraña y susurraban cosas que no lograba escuchar

- Hey....tú..rubia...creo que deberías dar la vuelta y regresar al manicomio del que te escapaste- mis músculos se tensaron y tuve que respirar muy profundo para no perder los estribos

Hey tu tocapelotas, deberías volver a casa con mamá

Really?

No me hables en inglés bonita, soy tu voz interior, no Alexa

Vaaaale.

Simplemente seguí mi camino- no intentes ignorarme bonita, sabemos que estás loca

- Si, todos sabemos que estás loca- le siguió su amigo, su estúpido amigo

Me limité a poner los ojos en blanco y hacer como que no los habías escuchado

Uno se fue acercando y lo vi desde el rabillo del ojo y justo cuando fue a tomar mi cabello, me volteé y le agarré la muñeca

Luego quedé frente a frente con él, le agarré el cuello y lo miré fijamente con el ceño fruncido

- Discúlpate- le pronuncié lentamente y vi su mirada de terror, apreté el agarre- ¡Discúlpate!

- Lo siento..lo siento

Me vengoooo

Solo fue una disculpa

Oh siiiii amo las disculpas

Amas todo lo que tenga que ver con la humillación

Humillación, oooooh me vengo

Exagerada

Psicópata

Lo solté, arreglé mi cabello y seguí como si nada hubiese pasado mientras abucheaban al estúpido chico

Me senté en el patio, mordí mi manzana y miré a mi alrededor, estaba tan harta de ver el mismo lugar diariamente..pero algo cambiaría

Lo presentía

- Hey...¿cómo estás?- dijo Mike mientras se agachaba y se sentaba a mi lado

-..bien....discúlpame...por lo de ayer- no me juzguen, odiaba pedir perdón

- No pasa nada, pero me preocupaste- me dijo con tono miedoso

Mi mente estaba en otro lugar, no es momento para ser promiscua, me recordé a mi misma

- ¿Vienes?

- ¿A dónde?

- Que más da Katlyn..prometo que serás feliz

Feliz..fue lo único que necesité escuchar para aceptar aquello que me llevaría al barranco..

Tomé su mano y me ayudó a levantarme, reí, ya que nunca había hecho peñas y me sujeté el cabello en una cola..

- Listo, vamos hacia eso que dices que me hará feliz..

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