Capítulo 31 Con las manos en la masa

Tu no sabías luchar, tu solo sabías sacar las armas
El per-verso libro de las carencias del alma

Me encerré en mi habitación, acostada en mi cama y escuchando música. Estaba cansada de estar alejada cada día más de lo que un día había sido mi familia perfecta

Salí de mi habitación y entré a la de mi hermanito, lo cargué en brazos y el sonrió con esos pequeños y hermosos dientes que tenía, eran solo tres pero eso cuenta

Mi hermanito era precioso, había heredado los ojos marrón de papá, y el cabello rubio de mamá

Es tan curioso, ver como una personita va creciendo poco a poco. Por un momento me sentí algo culpable, por no brindarle el cariño que mi hermano merece

Eso es lo mágico de los niños, ellos jamás guardaran rencor, odio ni mala fé en sus corazones, son la pura imagen de la inocencia

Puedes volver a ellos cuando quieras, jamás te juzgarán o reprochar lo que hiciste mal, solo sonreirán, como lo estaba haciendo Joshi en aquel momento

Besé sus pequeños piecitos y el río por las cosquillas que al parecer le provocaba, me puso sus pequeñas manitos en el rostro y aquello me hizo feliz por un momento

Olvidé todo aquello que me frustraba tanto, lo abracé y coloqué su diminuta cabecita en mi hombro

Al cabo de unos minutos, de haberle tarareado unas cuantas canciones, mi lindo Joshi cayó rendido en el sueño

Le besé su coronilla con un pequeño rastro de cabello rubio y lo acosté con suma delicadeza en su cuna

Ojalá Joshi sea todo aquello que yo jamás he podido ser y cumpla todos y cada uno de sus sueños

Me quedé en la habitación unos minutos hasta comprobar que todo estuviera perfecto

Entonces caminé y dejé la puerta abierta, por si llora o algo así

- Tenemos que hablar- dijo mi madre en cuanto salí de la habitación, dándome un susto de infarto

- Creo que no son necesarias las palabras, es evidente- dije y entrelacé mis dedos

Tan insegura como siempre

- Vamos- me tomó por el antebrazo pero yo me safé del amarre

Me hizo un gesto para que me sentara en el sofá y sin nada de ganas y prácticamente obligada, me senté

- El es Rick- menudo nombre de gay, me tendió la mano y yo la recibí sin rencor

- Es mi nueva pareja, Katlyn- mi expresión se mantuvo neutra, pero por dentro ...

- Es muy obvio- el río ante mi comentario y mi madre se mantuvo sería

- Pensamos casarnos el mes entrante

- ¡¡¡¡QUÉ!!!- no me lo esperaba, apenas podía lidiar con que fueran pareja, también casados, perfecto

- Pensaba decírtelo antes pero has estado muy mal- solo la miré, es lo que único que puedo decir- llevamos juntos casi un año y medio

Estaba en un puto y jodido shock

- ¿Y cuando pensabas decírmelo mamá?- sonreí con frustración- el día de su puta boda

- No hables así

- No estás en condiciones de decirme lo que debo o no debo hacer- Rick intentó tocarme, pero me aparté obviamente

- No tienes el porqué crear una tormenta en un vaso de agua Katlyn- claro, para ella era mucho más fácil

- Calla..

- El hecho de que tenga una nueva pareja no significa que lo haya olvidado, jamás podría olvidarlo...

- Calla mamá...

- Tengo derecho a seguir viviendo mi vida y lo haré, tu padre murió ok, ya no está...

- He dicho que te calles!!!!

Y...me salí de control, comencé a tirar todo lo que estaba encima de la mesa. Creo que rompí dos vasos

Solo sentía la frustración, el dolor y el enojo, solo quería romper, acabar con el mundo, destruir

El dolor era el máximo impulsor del desastre, al menos para mi. Todo iba bastante bien, pero tenía que arruinar todo diciendo que mi padre murió

Como si no lo supiera ya

Salí de la casa, caminé hacia ningún lado, hasta que llegué a orillas de un río, me abracé y me dejé llevar por aquellos sentimientos que tanto me agobiaban

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